Estaba sentada en el porche de la casa esperando que a Luke se le ocurriera salir del baño para llevarnos a la escuela, no veía la hora de poder tener mi carnet de conducir y poder ir sola a la escuela.
-¿¡Te puedes apurar!?.-Grita Cody saliendo de la casa.-Melliza.-me saluda.
-Mellizo.-asiento.-Parece una mujer tu hermano.-digo levantándome de las escaleras.
-Nuestro.
-Ya pueden dejar de rogar por mi presencia ya se que soy hermoso y que me quieren ver, pero paren.-Sale Luke de la casa.
-Uf hermoso.-camino hacía el auto.
Al llegar a la escuela Luke estaciona el auto donde siempre, osea donde estacionan los de último año solo que esta vez no estaba Tayron estacionado si no que Connor, con un mini cooper.
-¿Y este?, ¿que demonios hace estacionado en el lugar de mi amigo?.-Dice Luke estacionando el auto. Yo y Cody nos quedamos callados.
Cuando bajamos del auto, Luke para evitar problemas o eso creo solo cerro el auto y salio casi corriendo hacía la escuela Cody lo siguió yo camine despacio.
-Princesa.-dice cuando paso por su lado.
-Idiota.-sigo caminando.
-Eh espera.-me sigue al darse cuenta que comienzo a caminar más rápido.-¿Me estas queriendo evitar?.-me agarra suave del brazo y me da vuelta.
-¿Para que te lo voy a negar?, si gracias a ti tengo esto.-señalo mi ojo derecho, aunque gracias a la base y algunos polvos casi no se notaba lo morado.
-Vamos, no tienes nada.-pone los ojos en blanco, me suelto de su agarre lo miro de arriba a bajo y vuelvo a caminar, hasta que me vuelve a alcanzar.-Oh no, no te puedes enojar por eso.-me doy vuelta lo miro y le enseño mi dedo del medio.-Está bien señorita enojona, tu y yo hoy seis de la tarde en los juegos de Alf.-se pone delante mio y me señala.-No falles.-se da vuelta y camina hacia la escuela.
-No sabía que gente como él van a lo del viejo Alf.-suspiro.
-Te escuche.-grita.
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Estaba en clase de Historia y como había dicho Cody, se sentó conmigo, odiaba sentarme con Cody tenía que explicarle todo lo que decía el profesor, yo no era tan inteligente pero él me ganaba en burro.
-Ya Chloe.-mueve su mano frente mi cara.-Cody llama a Chloe.
-¡Hay ya te escuche idiota!.-intento no gritar.-No interrumpas mi momento de pensar que casi nunca sucede.-Lo golpeo en el hombro.
-Is it too late to say i'm sorry now?.-tatarea.
-No te hagas él Justin Bieber por qué no te sale.-empiezo a copiar lo que estaba copiando en la pizarra Mario Bros .
La hora de Historia ya había terminado era la última hora gimnasia otra clase más con Cody, ugh odiaba gimnasia y más con Cody, porque creen que al tener un mellizo atlético yo tenia que ser igual que él, no, no soy atlética y tampoco tengo pensado en convertirme en una chica fitness.
-O'connor, !vamos corre son solo ocho minutos!.-me apura el profesor.
-Si quisiera ser corredora profesional no estaría aquí.-digo volviendo a correr.
La clase de gimnasia al fin había terminado, me estaba cambiando en los vestidores cuando escucho que me gritan.
-¡Chloe!.-no reconocía la voz y era la única que quedaba en los vestidores y eso me dio un poco de miedo, me vestí rápido.-¿Puedes salir?.-insistía la voz ¿de?... ¿Connor?.
-¿Connor?.-pregunto.
-¿Quien te invito a salir hoy?, ¿acaso tienes más citas el día de hoy?.-me voy acercando a la puerta, él estaba allí con el mini cooper de hoy a la mañana.
-No.-sonrió.-Pero como hiciste que eso.-señalo al auto.-Entrara aquí.-señalo el pasillo.
-Magia chiquilla.-hace una sonrisa picara.
-Primero no son las seis.-saco mi iphone y me fijo la hora.-Recién son las cuatro.-me cruzo de brazos.
-Se adelantaron los horarios princesa... ¿subes o no?.-Lo miro y pienso, no tenía nada que hacer para la escuela y en casa no había nada interesante, tenía que aceptar.-Por tu mirada dices que si, vamos sube así llegamos a tiempo donde tenemos que ir.
-¿No íbamos a ir a lo de Alf?.-lo miro confundida.
-Cambios de planes.-niega con la cabeza y sonríe.
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Ya eran las siete de la tarde estábamos en un barrio pobre de New York, estuvimos ayudando a la abuela de Connor, era raro que su familia por parte de madre eran de esa zona ya que por lo que había visto desde la ventana de la habitación de Eithan no parecían para nada que tenían familia de bajos recursos, Connor no me quiso contar de por qué estábamos en aquella urbanización.
Ayudamos a los niños a hacer sus tareas y también estábamos preparando la cena para que se pudieran llevar a sus casas una vez que terminaran de hacer sus tareas. La abuela de Connor se llamaba Heilen era una señora de unos cincuenta y pico, su casa funcionaba como hogar de apoyo para niños que fueran a la escuela ya que esta era maestra de primaria.
-¿Ahora me vas a decir por qué me trajiste aquí?.-pregunto entrando a su auto.
-Ya lo sabia.-se soba el pelo.-No todas las personas nacemos en cunas de oro sabías?.-dice de forma prepotente.
-Oye, oye nadie te esta diciendo nada.-lo miro.-En ningún momento insinué que no me haya encantado venir a este lugar, y sí lo se, te contaría una anécdota... es más te la voy a contar para que veas que yo no nací en cuna de "oro".-hago comillas.
-No quise...
-Cuando mis padres se conocieron mi abuelo estaba comenzando la empresa, la empresa se hizo famosa hasta que hubo una crisis y mi abuelo no vio otra salida que suicidarse, mi padre termino la facultad cunado mi madre estaba embarazada de Luke, después de unos años mi padre volvió a retomar la empresa mi madre quedo embarazada de nosotros y los primeros años de mi vida no tuve lujos, si no hasta que tuve tres y pudimos comprar nuestra casa y el resto es historia.
-Yo no quise incomodarte, perdona.-me mira.
-No hay problema, ahora sí cuéntame, ¿porqué tu abuela vive en esta urbanización?.-pregunto mientras que él encendía el motor del auto.
-Eh.. mi padre es... bueno no mi padre si no la familia de mi padre, osea mi abuelo es el millonario, cuando mi padre se enamoro de mi madre mi abuelo lo hecho de la casa porqué mi madre era pobre, bueno eh.. él se mudo a la casa de mi abuela y a los cuatro meses quedaron embarazados de mi.-sonríe amargo.-Cuando mi abuelo se entero de eso hizo que mi padre vuelva a la casa y hizo que nos deje.-para en un semáforo, veía que en sus ojos había tristeza.
-Si quieres no me cuentes..-pongo mi mano en su hombro.
-Si te lo tengo que contar.-vuelve a sonreír desabrido.-Mi padre muy astuto.-ríe.-Empezó a trabajar con su padre y cuando junto algo de dinero renuncio y justo llego cuando faltaban días para que yo naciera, y cuando mi abuelo se entero que yo era un Foster y no un Arlati hizo todo lo posible para que mi padre vuelva a la empresa y que me ponga su apellido.
-Perdón pero tu abuelo es un bipolar.
-Era un bipolar...
-Perdón
-¿Puedes dejar de pedir perdón?.-ríe.
Resulta que cuando su padre acepta volver a trabajar con su abuelo y ponerle su apellido él viejo se muere, si era muy viejo, bueno tenía setenta y pico, le dejo sus viñedos a nombre de su único nieto varón osea Connor y por eso él y su familia son "millonarios" aunque él prefiere decir que son solo gente con un buen pasar económico.
-Lo que no entiendo es porqué usas Foster en vez de Arlati.-estábamos jugando al billar, le tocaba jugar, se acomoda sobre la mesa y apunta a la bola y la tira.
-Porqué soy él único varón de parte de la familia de mi madre y porqué... espera no conoces los vinos Arlati?.-bebe un poco de su cerveza.
-No... bueno si me suena mi padre en la casa que tenemos en Tampa tiene un mini viñedo y una colección de vinos, de allí más que seguro me suena.-me acomodo en la mesa y tiro.
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Eran las once de la noche, se me habían pasado volando las horas, estábamos en lo de Alf casi cerraba el lugar.
-¿Me llevas a casa?
-Claro.-sonríe.
Y en menos de veinte minutos estaba en la esquina de casa, le había dicho que me dejase allí para que no hubiera problemas con mis hermanos.
-La verdad que derrote los mitos que hay sobre ti.-sonrío.
-¿Que mitos?
-Los de... bueno ya sabes... que eres un chico malo y eso.-sonrió nerviosa.
-La gente habla porqué es gratis, ve que yo tengo que cuidar de tu querido amigo y de sus hermanas.-deposita un beso en mi mejilla.-O'Connor... eres la primera O'Connor que me cae de mil.-ríe.-Es raro.
-La vida es rara mi querido amigo Connor.-rió.-Es raro tu nombre es Connor y mi apellido O'Connor ya por ese simple hecho te mereces ser mi amigo.-golpeo su hombro.
-¿Coincidencia? o ¿el destino?
-No lo se.-sonrió y abro la puerta del auto.-Adiós.
-Adiós.
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Eran las cinco de la mañana, gracias al castigo que Luke y Cody acordaron ponerme por desaparecer casi todo el día (según ellos) me tenía que levantar a esa hora para prepararles el desayuno hasta que vuelvan mis padres, si no estuviera bajo amenaza no lo haría pero me amenazaron con no comprar más comida Argentina por todo un año sumado que llamarían a la abuela y a mis queridos padres, no iba a poder estar un año sin los asados, milanesas, empanadas, tortafritas etc, eso era inaceptable.
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Hola!, como están, se que me atrase un día pero aquí el capítulo número 7? si creo que lo es jajaj, espero que les guste y que se hayan vuelto a enganchar con la nove, los quiero :D, comenten los que les pareció el cap. Besos :** .-Mai.
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