Cuando termine de ducharme y ponerme la ropa que dejó Eva preparada, baje donde se encontraba Luke sentado en la sala.
—Ya estoy lista...
— Entonces vayamos a destino — Dijo Luke abriendo la puerta y dándome paso.
El viaje duró media hora. Me bajo en un sendero y me dio una nota. Luego que tome la nota, Luke se fue y me apresure a abrir la nota.
Sigue el sendero, ahí te espera tu principe.
Seguí el sendero y terminó en un lugar muy bello, un monton de arboles, la luz de la luna y las estrellas iluminaban cada parte de este lugar y al final había una bella laguna Azul. Esto era muy lindo. Me giré y encontré a Mattew vestido de traje con un ramo de flores en su manos. Fue acercándose cada vez a mi
— Estas muy bonita Paula...— Dijo acariciando mi pelo.
—Gracias, tu tambien...
Caminamos mucho por todo el bosque, hasta que llegamos a la laguna que tanto me gusto.
—Paula, te hice una carta — dijo sacando de su bolsillo un sobre con corazones— Voy a buscar el resto de la sorpresa, léela—dijo y se fue. Me apresure a abrir la carta.
Nunca pensé que me iba a enamorar tan perdidamente de alguien.
Tengo que admitir que siempre fui un mujeriego, no me importaba otra cosa, no tenía sentimientos hacia ninguna chica, solo estaba por diversión
Entonces llegaste tú Paula, Me diste ese sentimiento que tanto me faltaba, Amor.
Me enamore perdidamente de tu sonrisa, que muestras hasta en los momentos más difíciles.
Me enamore de tu valentía, haces lo que muchas personas adultas temen y sin miedo.
Me enamore de tu belleza, eres muy perfecta en todos los sentidos
Me enamore de Personalidad, de tu forma de expresarte y mostrarle al mundo que siempre hay que ser valiente.
Solo quiero que sepas que te agradezco infinitamente, porque fuiste la unica que me vio a través de las máscaras.
Eres muy especial, eres la chica que me enseñó a Amar.
Posdata: Gira hacia atrás y di que si...
Sentía las lágrimas caer una tras otra por mi mejilla, estaba muy emocionada. Ahora solo sentía la necesidad de ir y besarlo y que desaparezca el resto del mundo.
Me giré y estaba arrodillado frente a mi.
— ¿Quieres ser mi novia?
¿Se podía?
— ¡Claro que si quiero!— Dije y me lancé sobre él y le di un beso.
Nos sentamos en la arena, cerca de la laguna.
— Mattew...prometeme algo— dije tomando su mano — Prométeme que nada ni nadie nos va a separar.
—Lo prometo.