<<abril 24, 9:15 am>>
Ciel
"Mi querido niño: Te he escrito por que necesito de tu ayuda, he recibido un par de cartas informándome sobre los secuestros y asesinatos que han ocurrido con nuestras delicadas jóvenes de escasos recursos en Londres, creo que esta de mas decirte que necesito que encuentres al culpable y lo traigas ante mi. Esta noche se celebrará un " baile", es mas bien un evento popular en el que se acostumbra que los hombres lleven un antifaz o una mascara, es realizado por y para la gente de escasos recursos, a el están invitadas personas de alcurnia como nosotros con la condición de que al asistir traten a todos como iguales, así que no tendrás problemas al entrar. Estoy segura que podrás encontrar alguna pista. Cuidate mucho mi pequeño, sufriría de sobremanera si perdiese a mi adorado perro guardián.
Saludame a Sebastian y espero tener noticias de ustedes pronto.
...........
-¿Un baile? - pregunto con apatía cuando mi mayordomo termina de leer la carta - no tenemos por que ir, ya sabemos quien es el culpable
- Es cierto - comienza - pero también es cierto que no tenemos idea de donde esté nuestro criminal, además puede que la reina mande a alguien a verificar que nos presentemos en el lugar
- tienes razón, pero notarán nuestra presencia en un par de segundos, nos conocen bien
- Pues en la carta dice que podemos usar antifaz o mascara
- Buen punto, busca un par de mascaras Sebastian y alista nuestros trajes para hoy
- Mmmm... - ¿esta dudando? El jamas duda antes de seguir una orden mía
-¿Que sucede?
- ¿No cree usted que sería muy obvio quienes somos si vamos juntos?
-¿a caso quieres ir solo? - pregunto con evidente molestia
- No. Mas bien, tenía en mente llevar a una linda señorita
¿Esta bromeando?
-Es un chiste ¿verdad? ¿¡A quien quieres llevar maldito demonio!?
Sebastian ríe muy bajo lo cuál me molesta más, la rabia me nubla la razón hasta que él saca de su bolsillo un par de guantes largos color negro
- My Lady, ¿le gustaría asistir a un baile conmigo esta noche?
-¡No! - respondo al instante - ¡ni sueñes que voy a usar ese estúpido vestido de nuevo!
- Oh vamos Ciel, es sólo una noche
-ya te dije que no
-Por favor, será divertido
-No
-Podremos bailar y...
-No
-
Comer bocadillos...
-No
- Tomarnos de las manos sin que alguien nos moleste...
-¡Que no! Solo iremos para cumplir con nuestro trabajo
- Por favor
-No
- Por favor
-¡No!
-Por favor
-¡NO!
.............
-No tengo idea de como diablos me convenciste de esto - le reprocho a Sebastian mientras acomodo el vestido sobre el asiento del carruaje
- Vamos my lady, no se ponga rejega, esa no es una actitud digna de una señorita
- Es fácil para ti decirlo por que no eres tú a quien esta asfixiando el corset, siento que se van a salir todos mis órganos
Sebastian ríe por lo bajo y me mira con cierto brillo malicioso en los ojos
- ¿Que? - digo de mala gana
- Luces exquisito - susurra, mis mejillas arden casi al instante y solo atino a girar mi rostro hacia la ventana - cuando regresemos te haré mio de nuevo
- Callate... - contesto con fingida molestia
-Como si no disfrutaras de ello
Después de una larga hora entre discusiones nada importantes o coherentes, llegamos al lugar, podría decirse que la fiesta estaba comenzando. Sebastian me ayudó a bajar del carruaje para evitarme la vergüenza de caerme frente a todos, el evento es al aire libre, nos encontramos en el parque donde el árbol casi cae sobre mi prima y yo, hay gente de todas clases. Algunos están comiendo, otros mas bailando, también hay uno que otro niño corriendo por el lugar y el ambiente apesta a alcohol.
Sebastian y yo comenzamos a caminar entre la gente cuando escucho a un grupo de muchachas cuchichear
-¿Y ese? Jamas lo había visto por aquí, es muy guapo
- De seguro es extranjero
-¿pero ya vieron? Viene acompañado
- debe ser su padre, esa mocosa ni de chiste podría enamorar a semejante hombre
¡Es suficiente! Giro completamente hacia donde están las mujeres y justo antes de gritarles recuerdo el por que no puedo hacerlo, así que me limito a saludarlas con una sonrisa y tomando a Sebastian de la mano me alejo.
-¿Que pasa Ciel? - pregunta mayordomo - No me digas que te han molestado sus comentarios
- ¿Y qué si así fuera? - contesto molesto, el azabache me toma por la cintura obligándome a detener mi andar y mirarlo -En serio que a veces eres muy tierno
-¿Tierno? ¿Como te atreves a decir que el perro guardián de la reina es tier... - los labios de Sebastian me impiden continuar, cuando se aleja lo único que hace es mirarme y decir en un susurro - Querida pero ¿que estas diciendo?
-¿Queri..?
-¡Buenas noches Sebastian! - esa voz ¿Grell?
- Buenas noches señor Grell - responde mi mayordomo con seriedad
- Veo que has venido a divertirte, oh pero vaya que eres malo, teniéndome a mí decidiste traer a esta chica, mmmm eres mal-va-do, siempre te fijas en las que no tienen chiste ¿pero quien es ella...? - El pelirrojo se queda mudo al verme, parece que le sorprendió de sobremanera
- ¿¡Tú!? Pero...
- Es solo trabajo - digo malhumorado
- ¿Trabajo? Pero si los vi besarse
- He dicho que solo es trabajo - alzo la voz
- Querida, no debes gritar, recuerda que eres una dama
- Vete al carajo con tu "dama" y a ti shinigami de naturaleza distraída mas te vale no decir ni una palabra de esto a nadie
- Vaya pero que grosero, en fin, solo he venido por que necesito hablar contigo Sebastian - dice el shinigami entre una especie de gemidos que me resultan un tanto repugnantes
- My Lady... - dice mi acompañante pidiéndome permiso de ir con la mirada
- Ve, no importa, te espero cerca de los bocadillos - digo al observar un pastel se chocolate en la mesa
- Entendido, señor Grell demos un paseo
- Oh... Sebastian, no sabes cuanto tiempo he soñado con escucharte decir eso, mi corazón late tan fuerte que parece salir se su lugar
- Deje los dramas por favor, estamos rodeados se gente
- Mmm... De acuerdo
Es lo ultimo que escucho de ese par antes de dirigirme a la mesa donde me espera ese manjar.
Estiro el brazo para tomar el plato cuando una mano me toma por la muñeca
- Buenas noches bella dama, es un verdadero placer verla aquí
Mi cuerpo se tensa, mi respiración se detiene y mi piel se enchina al ver al hombre frente a mí, lleva el antifaz puesto, como todos los demas, pero ese cabello castaño es inconfundible
- André
- El mismo que viste y calza - dice a gritos y carcajadas, apesta a alcohol y su mano sostiene con bastante fuerza la mía - bailemos - dice justo antes de llevarme casi a rastras al centro del lugar. Sebastian... ¿Donde estas?
.............
Sebastian
El pelirrojo y yo nos dirigimos a la acera pata conversar, lleva todo el camino haciendo dramas y diciendo estupideces, la única razón por la cual aun no lo he golpeado es por la gente que nos rodea, aunque pensándolo bien tal ves le haría un favor a todos.
-Digame señor Grell ¿De que desea hablar conmigo?
-Veras sebastian, últimamente han habido problemas en nuestros registros debido a que alguien esta jugando con dos almas
- ¿Y eso por que debería afectarme? Y por cierto ¿como es que solo dos almas están afectando sus registros?
-Oh pero por supuesto que te afecta querido, por que la persona que esta jugando con esas dos almas eres tú, las almas de las que te hablo son las de el conde Phantomhive y su prometida
- ¿El alma de Ciel sigue entre sus registros? No debería, él me pertenece.
- Tienes razón y es lo que nos esta causando problemas, el alma del mocoso reapareció en nuestros registros justo después de que se fijara la fecha de muerte de su prometida
- ¿¡Elizabeth ya tiene fecha de muerte!? ¿Cuando..?
- Lo siento querido, pero tengo prohibido darte esa información. El problema aquí es que no podremos recoger su alma por tu culpa, y si no resolvemos eso pronto no podremos llevarnos el alma del mocoso, ni tú podrás devorarlo, y ambas almas estarán condenadas a una especie de limbo por-siem-pre.
-Como sea, ustedes no pueden llevarse el alma de Ciel
-Por eso necesitamos que libres la segunda alma, rompe su juramento, probablemente así tu "niño" salga de nuestros libros.
-¿Probablemente? ¿Y que pasa si no?
- Tendremos que cumplir con nuestro trabajo.
-No liberare a Elizabeth de su juramento, ella es mi sirviente ahora, claro la mas inutil pero lo es
- Entonces tampoco podrás tomar el alma de Ciel cuando muera. Piensalo querido, nos vemos pronto.
...................
-¡Sueltame!
- Tranquilo, no te haré daño, solo concedeme esta pieza ¿sabes? después de todo ese demonio no tiene malos gustos
-¿Que diablos haces aquí?
-¿No es obvio? Es una fiesta, vine a divertirme
Un brillo carmesí pasa por sus ojos cuando dice la ultima palabra, si hay algo que detesto sentir es miedo, pero este hombre no me inspira otra cosa, damos algunos giros en un intento de bailar como las demás personas pero mi torpeza y su velocidad nos hacen sobresaltar pronto. La gente se aparta dejándonos un enorme espacio en el centro de todo, la mayoría nos observa y André ríe casi frenéticamente
-Se... Sebas
-Shhh... No lo llames linda, arruinará toda la diversión - dice tapando mi boca con sus asquerosos dedos
- ¡No me toques! Das asco...
Estoy mareandome por tanta vuelta y no consigo ver bien todo lo que me rodea
- ¿A que has venido André? No tienes nada que hacer aquí
- Ya te lo dije, he venido para divertirme, si viviré eternamente ¿por que no disfrutar de ello?
Al terminar su frase detiene su "baile" dejándole completamente desubicado gracias al mareo, lo ultimo que siento antes de que el caos haga acto de presencia son los brazos de André presionando los mios con demasiada fuerza y sus labios impactar con los mios.
.............
No puedo encontrar una solución a lo que él estupido shinigami ha dicho, no quiero que se lleven a Ciel y tampoco quiero comerme su alma. No es posible que incluso con lo inútil que es esa niña cause tantos problemas...
- Pero que apuesto luces hoy
Hoy no me tomaras por sorpresa querida, doy media vuelta y la encuentro de frente a la pelirroja, lleva un vestido negro con un escote prominente y el cabello recogido en una especie de coleta
-lastima que no pueda decir lo mismo de ti ¿Que quieres? ¿Vienes a que te adorne la otra mejilla?
-¿Ya eres comediante también?
Vine a hablar contigo, quiero apelar a tu lado bueno, por irónico que suene
-No estoy para escuchar tus idioteces compermiso
- Él no te quiere
-¿Es ese tu gran intento de alejarme de Ciel?
Irina se acerca se acerca a paso lento y provocativo, enreda sus brazos en mi cuello y susurra en mi oído - olvidate de él, es un simple humano y por ende débil
-Tú no lo conoces, el no es cualquier humano
-Bueno, admito que tiene un alma peculiar, fuera de eso no le veo nada digno de admirar
-es así por que la simple eres tú, te has quedado estancada en ese mundo de podredumbre y hambre infinitas - dicho esto la tomo por la cintura y comienzo un ligero movimiento de cadera al ritmo de la musica
- la cosa es que no hablamos de mí. Estamos hablando de lo tonto que es que arriesgues tu vida por un humano que no te ama, lo que siente por ti es pasajero. Si tuviese la oportunidad se revolcaría con otro
- Ciel no es así
-Bueno... Si no me crees, velo por ti mismo
La "mujer" se hace un lado y como si todos a nuestro alrededor estuvieran esperando su señal se mueven en distintas direcciones dejando el espacio justo para que yo logre observar el peor de espectaculos.
....................
Todo pasa muy rápido, por el rabillo del ojos puedo ver a Sebastian empujar a algunos de los presentes y correr en mi dirección , al llegar toma a André por un brazo obligándolo así a soltarme. Una, dos, tres son las veces que impacta el puño de Sebastian en la mejilla del otro hombre, este cae al suelo tocándose el rostro y dejando tras de si un largo camino de sangre. Algunas mujeres y niños gritan ante tan brutal escena, una pequeña parte de los invitados comienza a retirarse pero los demás se quedan, como siempre sólo por morbo. Miro de nuevo al par de demonios frente a mi, el castaño sigue en suelo mientras que Sebastian esta listo para propinarle una buena patada. Ya es suficiente.
- ¡Sebastian detente! ¡Es una orden!
El azabache detiene su ataque en seguida, parece que se hubiera congelado ya que tarda varios segundos en volver a su posición normal, no habla, no se mueve, nada.
- ¿Sebastian?
Después de decir su nombre gira su rostro en mi dirección, sus ojos brillan intensamente y destila rabia por todos los poros de su piel
- tú... - susurra y el miedo me invade, le toma solo unos cuantos pasos llegar a donde estoy, al tenerme en frente me toma de la muñeca y me lleva casi a rastras al carruaje
-Sebas.. tian para... me lastimas
-No mas de lo que tu a mi Ciel
- Pero no ha sido culpa mía, él me ha besado a mí
-¿ Y como esperas que te crea despues de que te negaste a pasar la eternidad conmigo? Juro que creí cada palabra tuya en ese momento "debo pensarlo" dijiste, "no es una decisión facil", debí saber que no amabas como decías
-No, Sebastian, no digas eso, yo te amo con cada parte de mi ser, eres tú quien ha devuelto la felicidad a mi vida
- Deja de mentir
- escuchame... Piensalo sólo un segundo, ellos no quieren que estemos juntos, dejaron sus intenciones claras desde el principio ¿no?
Sebastian clava la vista en el piso, hace rato que dejamos de caminar y ahora nos encontramos en la acera lejos de los asistentes, la musica vuelve a sonar y las parejas bailan de nuevo, resulta bastante contradictorio el paisaje, del otro lado todo es musica, risas y diversión, aquí, solo hay silencio, tristeza y enojo.
Tanaka llega con el carruaje y negándole a recibir ayuda de mi mayordomo subo y tomo asiento del lado izquierdo, el demonio sube tras de mi cierra la puerta y el carruaje comienza su trayecto.
Durante los siguientes treinta minutos nadie dice una palabra, incluso el cansancio esta venciendome y estoy a punto de quedarme dormido cuando por fin Sebastian rompe el hielo
- Caí en su juego
- ¿De verdad? No lo había notado - quisiera no ser tan sarcástico a veces
- Sí, ya sé que soy un estúpido
- No lo eres, tu probleema son los enormes celos que tienes, en fin. lo unico que no logro entender del todo es como creíste que yo bese a ese idiota por voluntad propia
- Yo...
- ¿Que pasaba por tu cabeza? Yo jamas besaría a otra persona que no fueras tú...
- Ciel...
- ¡Y menos a esa escoria!
- ¿Y que mas querías que pensara si te negaste a estar conmigo?
- Nunca dije que no, solo te pedí tiempo para pensarlo
- ¿Pensar que? Me amas y yo a ti, no hay nadar pensar
- No es tan fácil
- ¿ah no? ¿Por que? ¿A caso no soy suficiente para ti?
- ¡Tengo miedo! ¿De acuerdo? ¡Estoy aterrado Sebastian!
- ¿miedo? ¿A que le temes?
- a que te aburras de mi, la palabra eternidad no significa cualquier cosa, estamos hablando de un " para siempre" muy literal y ahora, que has descubierto que puedes tener sentimientos de nuevo me aterra que puedas enamorarte de alguien mas y me olvides
El silencio entre nosotros reina por varios segundos haciendo que la tensión vaya en aumento, no tengo idea de que decir y puedo estar seguro de que el tampoco, seguro que esta pensando que soy patético, mal que faltan solo unos quince minutos para llegar a la mansión, miro por la ventana hasta que escucho a Sebastian aclarar su garganta, lo miro y el se levanta de su lugar hinca frente a mi
- Ciel escuchame bien, entiendo que tengas miedo, después de todo es una respuesta natural en los humanos antes de tomar cualquier decisión, pero creeme cuando te digo que nontienes nada que temer, yo te amo y si te he propuesto esto es por que estoy seguro de jamas me aburrire de estar contigo, ¿Me crees? - fue entonces cuando lo entendí, el miedo no nos lleva a ninguna parte, lo verdaderamente importante esta siempre frente a nuestras narices, el miedo es esa venda que no nos deja ser libres, que no nos deja verlo, yo no seré así, no dejare que el miedo me venza otra vez.
- te creo
- Entonces te haré una sola pregunta: Ciel Phantomhive ¿Quisieras estar conmigo por toda la eternidad?
- Sebastian Miachaelis, sí, por siempre y para siempre.