Título: DANZA DE HIELO
Autora: Clumsykitty
Fandom: Universo Marvel entre Avengers y Thor principalmente.
Parejas: las que lleguen, pero sin duda habrá Thorki.
Disclaimer: Nada me pertenece aunque muera por ellos, todo es de Marvel y Mr. Lee entre otros, lo único mío es esta idea mía convertida en historia. Dicho está.
Warnings: Habrá mucho de todo y algunas cosas serán desagradables. No es un cuento de hadas. Me tomo licencias con ciertas tramas, personajes y contextos para mi beneplácito. Hace milenios que no escribía nada, pido clemencia a mis lectores por mis fallas, vuelvo a escribir como un ejercicio personal en busca de algo perdido.
Gracias por leerme.
CAPÍTULO 3. Allegro.
Release your curse,
'Cause I know my worth.
Those wounds you made are gone.
You ain't seen nothing yet,
Your love wore thin
And I never win,
You want the best,
So sorry that's clearly not me.
This is all I can be.
Good enough, Evanescence.
La doctora Cho había aprendido más de genética en las últimas semanas que en todos sus años como investigadora profesional. SHIELD había conseguido un banco de datos sobre los Asgardianos y eso le había ayudado para tratar a sus nuevos pacientes con el Arca pero había tenido que aprender más de los Jotun ante las problemáticas que aparecieron después del despertar de la pequeña Lucky. En primer lugar estaban las temperaturas dispares de la niña, había partes de su cuerpo que mostraban niveles iguales a los seres humanos y otras inferiores cercanas al cero como era el caso de sus marcas en el rostro, hombros, manos, pecho y tobillos. Luego las reacciones bioquímicas que rechazaban los medicamentos, abriendo heridas que había cerrado o provocando síntomas adversos. Sin mencionar que su lectura genética era extraordinaria, mientras que Loki podía tener un patrón de aminoácidos perfectamente claro, el de Lucky era un caso distinto, como si fuese una inteligencia artificial se modificaba aproximadamente cada 72 horas, le daba la sensación que mostraba signos de irritabilidad evolutiva.
Cuando el Capitán América comenzó a usar el traductor las cosas se hicieron más relajadas, la pequeña entendía a la perfección el Jotun pero no el Asgardiano. Aún no podía hablar a causa del tubo de oxígeno pero era cosa de días para que lo hiciera, mientras tanto había adoptado con pasmosa facilidad el lenguaje de señas para responderle a Steve cuando las férulas fueron retiradas gracias al trabajo del Arca y tanto ella como el doctor Banner estuvieron de acuerdo en permitirle estar sentada por breves momentos que eran compartidos con Rogers.
-Está esperándole, capitán –saludó ella a éste cuando el vio entrar a la sala.
-¿Ya está despierta?
-Cada vez duerme menos. Es sumamente curiosa, debo comentar. Le ha dado por preguntarme sobre sus alrededores.
-Hemos dejado atrás el miedo a los monitores y todo el equipo médico –asintió Steve recordando sus ataques de pánico al notar el instrumental médico a su alrededor o caras desconocidas, motivo por el cual las visitas eran escasas y con un horario determinado por sus períodos de lucidez.
-Es algo de lo cual me alegro, capitán. Le dejo.
-Adelante.
Ella se volvió en la puerta observando a Lucky que esperaba sentada con la espalda recostada sobre almohadones a que Rogers tomara asiento a su lado. Tenía confianza en que con el paso del tiempo esos ojos verdes se llenarían de alegría y dejarían la tristeza que los embargaba. Parte de ello estaba relacionado con el estado de Loki, por eso trabajaba día y noche con el fin de hacerle despertar. La imagen de éste como psicópata era cada vez más lejana en su mente, le veía más como la figura que la niña necesitaba para salir adelante, comprobado cuando intentaron ponerles en salas separadas con resultados nefastos en la salud de ambos. Debían mantenerse lo más cerca posible aunque el ojiverde estuviera inconsciente dentro del Arca.
Lucky vio salir a la mujer que se había presentado días atrás como la doctora Cho, y se volvió hacia el Capitán América que sonrió pronunciando lentamente el idioma Jotun por la dificultad del mismo.
-¿Cómo te sientes hoy?
-/Quiero saber/
-¿Qué es?
-/Sobre qué habla ahí/
Señaló hacia la pizarra donde estaba su nombre con una estrella que Tony había pintado hacía poco, siempre haciendo "mejoras" en aquel espacio de terapia intensiva. Steve rió mirándole.
-Es tu nombre, Lucky, es como te llamamos.
-/No es mi nombre real/
-Lo sabemos, pero nos gustó para ti –el capitán aprovechó la ocasión para preguntarle por su nombre, las conversaciones con la pequeña era como aquel refrán de "dos pasos adelante, uno hacia atrás", avanzaban con lentitud- ¿Cuál es tu nombre real?
Ella le miró fijamente antes de responder. -/Idunn/
Rogers sonrió satisfecho, apenas nada sabían de ella y Loki, el doctor Banner ya le había advertido que no podían presionarle con preguntas, ni tampoco esperar a que la niña de pronto narrara los horrores que la habían puesto en aquel estado. Lo único que habían aprendido todo ese tiempo era que se expresaba con muy pocas palabras, a veces cortante cuando se agotaba ya fuese su paciencia o sus energías, que no se le podía preguntar nada personal como su edad ni mucho menos algo sobre Loki con quien mostraba una tendencia sobreprotectora. Solía cuestionar sobre los nombres de las cosas, o de los dibujos que veía en los cuentos que el capitán le traía para que aprendiera el idioma, en ello habían pasado todo ese tiempo.
-Idunn es un buen nombre.
-/¿Cuándo nos matarán?/
La pregunta hizo que Steve abriera sus ojos en horror, volviéndose a las cámaras que vigilaban bajo el mando de Viernes como si con ello los demás que estaban observando desde fuera pudieran ayudarle en esos momentos. Lucky había soltado la pregunta con espantosa frialdad, como si ya esperara que así ocurriese en cualquier momento.
-Nadie va a hacerles daño.
En respuesta, la niña se tumbó de costado dándole la espalda, cerrando sus ojos para dormir. No le creía. El Capitán América se retiró con aire desganado hacia el comedor donde se permitió un aperitivo para animarse. Ahí le encontró Natasha que se sirvió un café para acompañarlo.
-¿Difícil, eh?
-Deberías hablar con ella.
-Claro, y que le dé un paro cardíaco como cuando Hill entró.
-¿Qué piensas de Luck... Idunn?
-Lucky, le gusta el nombre. Idunn parece estar reservado para otras ocasiones –informó la Viuda Negra que podía leer lo que otros no- Mamá seguramente le dijo que somos capaces de asesinarlos, lo tiene claro. Cree que de un momento a otro tu bondad se tornará en crueldad, por eso es tan hostil. Wanda ya lo dijo, no tienen esperanza de vivir por mucho tiempo.
-¿Aún después de todos nuestros esfuerzos por demostrarles lo contrario?
-Esa clase de conducta solamente se logra a través de los años, te lo aseguro. Para conseguir que en una mente se fije tal idea requieres de un lavado de cerebro continuo acompañado de tortura, temo decir.
-La doctora Cho ya nos había dicho que tiene rastros de heridas más antiguas.
Natasha miró los monitores de vigilancia de la sala. Ella sabía de ello, lo había experimentado de manera similar durante su entrenamiento en el Cuarto Rojo. Se preguntó si acaso Lucky había recibido el mismo tratamiento, si le habían enseñado a matar.
-¿Loki estará en la misma situación?
-Probablemente –Natasha palmeó la muñeca de Steve- No desistas, quiere creerte pero ha sido lastimada tanto que le tomará su tiempo volver a creer en un extraño.
-¿Noticias de Asgard?
-El silencio total. Estamos pensando que no tienen idea de ellos en la Tierra o que no les importa en lo absoluto. Me inclino por la primera.
-Ya no me parece tan buena idea comunicarles al respecto. Lucky seguramente morirá de terror si ve a Thor, pensará que siendo el enemigo de Loki no dudará en matarla como venganza por sus anteriores conflictos.
-Y no les diremos nada –sonrió la rusa.
-¿Lo dices en serio? –Steve arqueó una ceja.
-Por supuesto, camarada. Fury ya ha hecho la documentación necesaria, oficialmente son prisioneros de los Vengadores.
-Mucho mejor.
-"Lamento interrumpir, pero hay un evento en la sala de terapia intensiva" –habló Viernes.
-¡Loki! –exclamaron ambos poniéndose de pie corriendo hacia allá.
La doctora trasladaba a la camilla contigua a Lucky el cuerpo del ojiverde que al fin había salido de la regeneración dentro del Arca. Igual que su hija, lucía un estado lamentable a pesar de todo el poder de aquella tecnología pero ya no estaba en peligro de muerte. Ya fuese por pantallas o por estar detrás de los vidrios de contención, los demás atestiguaron la mirada angustiada de la pequeña quien apretó sus puños siguiendo con recelo como Cho se encargaba de acomodar a Loki arreglando los monitores y demás dispositivos. Aún tenían sus dudas respecto a su conducta una vez que se vieran fuera de peligro, confiando en que el trabajo del Capitán América sobre Lucky tendría una influencia en las decisiones del Embustero. Pero era una apuesta a ciegas. Tendrían que esperar varios días antes de presenciar algo, la mayor parte del tiempo la pequeña solo observaba a su madre en esa camilla, alcanzando un par de dedos de su mano que tomaba entre los suyos para quedarse dormida. Las charlas con Steve se redujeron drásticamente, prefiriendo esos momentos en silencio al lado de Loki. Quien tuviera la primicia sería nada menos que el doctor Banner quien una buena mañana mientras revisaba los signos vitales del semidios escuchó la voz débil de Lucky tras él.
-Quiero vivir.
Bruce casi tiró sus instrumentos al escucharle, girándose para verle y tallando su mentón buscando aprisa que responderle. Había hablado en su idioma, no en Jotun. Las lecciones de Rogers habían funcionado después de todo con una sentencia rotunda que resumía lo que la pequeña había sentido durante ese tiempo. Recordó ese día en la playa, los dos cuerpos ensangrentados abrazándose ante la muerte que pensaba llegaba a ellos. La desesperanza, la resignación. ¿Acaso él no se había sentido así? Con la mirada de Natasha implorándole que no se fuera, brillando al verle rescatarle, riendo para él. ¿Acaso no había creído que todo eso se había desvanecido al apagar el monitor del Quinjet? La pérdida de lo más amado. Pero Hulk no se había resignado, y pronunció las palabras que cambiaron la vida de los tres. Vivir.
-Vive –repitió, para ella y para sí mismo.
Lucky pareció salir de una pesadilla, abriendo sus ojos que lloraron de nuevo, bajando su vista hacia Loki estirando una mano para tocar la orilla de su camilla, acariciando con la yema de sus dedos el rostro de su madre.
-Steve prometió.
Parpadeando, Banner miró alrededor. Justo ese día, todos habían salido a misiones cortas a diferentes puntos. Natasha no tenía misión pero no quiso quedarse a su lado. No podía preguntar a qué se refería la niña con eso, debiendo recurrir a su propia memoria, estaba prohibido que Viernes hablara en esa sala; ya habían aprendido a la mala esa lección. Sonrió al recordarlo a tiempo, mirando con cariño a la pequeña.
-Y yo también lo prometo.
Nadie iba a lastimarlos, nadie iba a hacerles daño de nuevo. Esa era la promesa que el Capitán América había hecho a Lucky cuando la sacaran del Arca y ella lo recordaba perfectamente. Los ojos llorosos y verdes de la niña se posaron en su figura.
-¿Aunque seamos monstruos?
Eso le partió el corazón, Bruce se mordió un labio para no llorar frente a ella y mantenerse ecuánime aunque sus ojos se humedecieron. Tenía la respuesta correcta.
-A pesar de todo, nena.
Nick Fury vio llegar a todos sus Vengadores en un tiempo récord cuando María Hill les informó lo que había ocurrido con la niña y el doctor Banner. Una vez más Tony Stark hizo un espectáculo lleno de desaires por no haber sido partícipe en aquel evento singular antes de callar a sus amigos para repetir la grabación del momento. Vision sonrió luego de las cinco veces que tuvieron que verlo a insistencia caprichosa del Hombre de Hierro.
-Puedo apostar mi Gema a que Loki despertará en cualquier día.
-¿Por qué estás tan seguro? –Fury le miró incrédulo. El ojiverde llevaba meses en estado de coma.
-Porque su hija lo está llamando a la vida –respondió Wanda en su lugar.
-¿Aún seguimos pensando que son un peligro? –preguntó Steve.
-Nah –respondió al unísono un coro.
Las preguntas seguían sin respuesta, pero al menos había ya un rayo de luz en medio de tantas tinieblas. El tiempo les daría lo que esperaban, no tenían duda, ahora restaba sacar adelante aquel par demostrándoles por qué los Vengadores eran lo que eran. Y habían aprendido que el ancla principal sin duda alguna era Lucky, si ella estaba bien Loki mejoraba. Por cada vez que la niña tenía un momento agradable aparecía un signo de mejora en el exiliado. Quizá aún no sonriera ni mostraba expresiones de felicidad, más estaban confiados en su capacidad para que lo consiguiera. Sería su mejor victoria, además de trabajar en la redención del propio Loki. Se felicitaron unos a otros evidentemente alegres, comenzando a hacer planes entre bromas donde el director Nick Fury era la víctima principal hasta que uno de ellos volvió su vista a las pantallas.
-Tony, Tony –llamó Clint.
-¿Qué sucede, Legolas?
El arquero ignoró el sobrenombre señalando al monitor. Todos siguieron su dedo acercándose de inmediato buscando el mejor sitio que Stark ganó pidiendo a Viernes que hiciera múltiples copias pues Lucky había tomado la mano de su madre llevándola a su mejilla recostada en su almohada comenzando a entonar una canción. Cantaba. Estaba cantando, con una voz dulce que sacó la sonrisa de sus espectadores.
Ask veit ek standa,
heitir Yggdrasill
hár baðmr, ausinn
hvíta auri;
þaðan koma döggvar
þærs í dala falla;
stendr æ yfir grœnn
Urðar brunni.
-No sé qué demonios dice pero suena genial –murmuró el coronel Rhodes.
-Chit –le calló Stark.
Ask veit ek standa,
heitir Yggdrasill
hár baðmr, ausinn
hvíta auri;
þaðan koma döggvar
þærs í dala falla;
stendr æ yfir grœnn
Urðar brunni.
De esa manera ella se quedó dormida, con un rostro tranquilo sin soltar la mano de Loki cuyo ritmo cardíaco y presión subió a un nivel más estable. Todos se quedaron callados por largo tiempo luego de que la niña se hubiera dormido, sin moverse por miedo a romper con el encanto del momento.
-Viernes, ¿tienes las copias?
-"Señor"
-¿Qué dice la canción? –Steve pidió a la IA.
-"Mostrando traducción"
En una pantalla holográfica que apareció al lado del grupo leyeron lo que Lucky había cantado tan dulcemente a Loki.
Sé de la ceniza que permanece
Su nombre es Yggdrasill
Árbol alto, salpicado
Con barro blanco
Ha venido con el rocío
El otoño en el valle
Siempre está verde, sobre
La fuente de Urdhr.
-Wow –dijo la Viuda Negra.
-Creí que Lucky no sabía nada de Asgard –Tony arqueó una ceja mirando acusador a Steve.
-Yo también. Pero una canción no asegura que lo sepa.
-¿Vision? ¿Wanda? –pidió Stark.
-Sólo es una canción –respondió la bruja escarlata sonriendo al percibir la memoria claramente, un recuerdo vibrante y lleno de cariño- Loki se la cantaba desde bebé.
-Voy a llorar.
-Stark...
-Es Toooony, Stevie.
-Vengadores, aún es muy pronto para celebrar, recordemos que tenemos a un Jotun en coma por despertar.
-Siempre tan realista, director –reclamó Bruce.
-Es mi trabajo. Lo que me recuerda que ninguno de ustedes no tiene el reporte de su misión en mi escritorio.
-¡Pero mamá....!
-El tuyo lo quiero primero, Stark.
Éste se llevó las copias del video a casa, donde ordenó a Viernes que no le pasara ninguna llamada ni mensaje por muy urgente que fuera. Quería escuchar una vez más a la niña cantarle así a su madre, le había fascinado su voz infantil, limpia con un timbre que le recordó a un ruiseñor, de no ser porque ya le había dado su nombre le hubiera puesto Piaf. Detuvo ciertos momentos de la grabación haciendo acercamientos a las imágenes congeladas para observar detalles. Cada vez que ella había acariciado la mano de Loki, el pulso de éste había subido, lo que confirmaba ese lazo del cual Wanda les mencionara tiempo atrás.
Tal grado de unión podía ser contraproducente para ellos si Fury llegaba a tener la razón y recibían una paliza de parte de ambos. Tony había descartado esa opción, para él, quien siempre analizaba los videos diarios de Lucky en busca de pistas, el comportamiento de la pequeña era de mansa sumisión, no existían gestos considerados pasivos agresivos. De ser un peligro latente Vision, Wanda o Viernes ya lo hubieran percibido. Lo más rebelde que la niña había hecho era pedir malteada en lugar de leche simple. Stark pasó el audio con aquella infantil voz a su traje, para acompañarle en los viajes que hizo con los Vengadores. Fue durante una de esas tantas misiones fugaces donde Tony se encontró mirando el aparador de una tienda de muñecos de peluche de todas formas y colores pero sus ojos únicamente vieron una figura en particular que le hizo sonreír antes de entrar con todo y traje para comprarlo. Un oso Teddy para Lucky. No cabía duda que alguien más se había colado en aquel corazón de hierro.