-Jessica, tranquila. Ya, para, no llores de esta forma -veía como el señor Wu trataba de tranquilizar a la madre de Sehun.
-¡N-no me pidas eso, no lo hagas, por favor! -pidió con voz desgarradoramente triste.
-Sehun estará bien. Él podrá salir de esto, ya lo veras. Nuestro niño será normal como todos los demás -decía el padre de mi mejor amigo.
-Sabes que eso no es cierto, Yifan. Lo sabes muy bien. Mi bebé será eso por toda su vida, un niño, un bebé. Me duele mucho. ¿Qué será de él cuando crezca y nosotros no estemos para él? ¡No quiero ni imaginarlo! -los sollozos de la señora Wu eran cada vez más fuertes y lamentables-. Mi pequeño niño jamás podrá tener una familia. Jamás podrá ser "Madre" u padre. Jamás podrá llevar vida en su vientre o poder encontrar una linda chica. ¡Jamás!
-Lu hyung, ¿Qué ves? -me pregunto un juguetón y risueño Sehun.
Su sonrisa era muy linda, siempre que yo estaba triste o molesto, con solo ver esa bonita y resplandeciente sonrisa, todo se iba por el desagüe.
-Nada, solo, yo, ¿Quieres salir a jugar? -le pregunte.
Sehun era un niño de 10 años, pero actuaba de una forma tan adorable y linda que podrían decirle que tenía 6 u 8 años.
-¡Siiii! ¡Vamos! -chillo.
Sonreí enternecido. Él jalo de mi mano con tanta energía que casi caía.
Aun no podía comprender el porqué del llanto de la señora Wu. Aun no podía comprender sus palaras, pero años después lo logre y me callo como un balde de agua fría.
Mi Sehun, mi niño, mi mejor amigo, ese pequeño que siempre lograba sacar una sonrisa en mí, nunca salió de su mentalidad de 6-7 años.
Odiaba cuando iba a la escuela media, era tratado como un tonto y él como el niño que era, siempre bajaba la cabeza y lloraba en silencio. Lo intimidaban, se aprovechaban de él, de su inocencia pura como el agua, de su ingenuidad, de su humildad, de su deseo por ser aceptado. Mi Sehun era fuerte, siempre caía hasta el fondo, pero de inmediato se levantaba hasta la cima. Algo que yo admiraba de él.
El día que descubrí que mi Sehun tenía Discapacidad intelectual y del desarrollo (retraso mental), no hui, me quede, con él, más que nunca.
Sehun ahora con sus 18 años, siempre cargando su peluche rilakkuma llamado Pinku Pinku, llora desconsolado sobre la caja de su madre. Pidiendo a gritos que regrese, que no se quede dormida, que debe contarle más cuentos por la noche para que él pueda soñar y viajar a su maravilloso mundo de fantasías, que debe despertar para que siempre le de besos consoladores, que debe quedarse para cuidar de él.
No saben el dolor que estoy sintiendo en mi pecho en este instante. Me desgarra hasta el alma verle de esta forma. Su padre, que está a su costado, llora en silencio tratando detener el llano incontrolable de Sehun. La gente mira con lastima a ese niño que está más perdido que nunca. Todos, e inclusive yo, miran a mi niño.
-¡Mami! ¡Despierta! ¡Me portare bien, juro que comeré todas las verduras que me pongas en mi plato, pero despierta! -solloza.
Yo no puedo soportarlo. Giro mi cabeza hacia un lado. No puedo verle.
-¡Mamita! -otro sollozo más y otro trozo de mi alma cayendo al vacío.
-Sehun, hijo, por favor, detente -pide el señor Wu.
-¡NO! ¡QUIERO A MI MAMI! -chilla.
No, no puedo soportarlo. Me doy la vuelta y camino hasta el exterior de la funeraria. No puedo ver a mi niño en ese estado. No puedo.
Yo, Xiao Luhan de 22 años, tengo mi debilidad ahí dentro, en la funeraria, con su corazón puro, inocente e ingenuo, roto. Mi Sehun está destrozado.
Estoy vistiendo mi camisa negra hasta los antebrazos y los jeans del mismo color que él me eligió en mi cumpleaños número 22.
Alboroto mi cabello exasperado. Golpeo la pared con mi puño y grito con fuerza. Como desearía que todo el dolor que él está sintiendo ahora mismo, pasara a ser mío para dejarlo libre a él.
-Puta vida de mierda. Siempre te las cobras primero con los más débiles, los que sabes que no te harán nada. ¡Menuda cabrona! - espeto furioso.
Debería decir que de todo esto que esta sucediente, hay algo que me consuela, pero no lo hago. Hubiera preferido mil veces esperar mi años más para que mi niño fuera mío y la promesa fuese cumplida.
Pero no, la jodida vida es así de mierda.
Jessica se fue mucho antes de lo previsto. Esa mujer que me concedió lo más preciado para ella y para mí, a Sehun.
Ese día lo llevo marcado como si fuera uno de mis tatuajes preferidos.
-Luhan, ven cariño. Necesito hablar contigo -me dijo una vez que entre al patio trasero en busca de Sehun, pero él no estaba porque yacía en su hora de siesta.
Ella, tan bella como su hijo, estaba sentada sobre una de las bonitas sillas a un costado de la alberca.
-Buenas tardes, Señora Wu -salude-. Llegue muy tarde ¿no es así? -sonreí apenado.
Se me había hecho tarde llegar a casa de los Wu para ver cómo se encontraba mi niño. Había sido culpa de las pruebas finales de la prepa.
-No hay problema. Tienes muy chiflado y mimado a mi Sehun -rio juguetona y yo volví a sonríele apenado. Tenía toda la razón.
-Lo lamento, pero no puedo tratarle de tora forma -dije.
Ella negó aun con esa sonrisa cansina.
-Siéntate cariño. Hablemos un poco -me pidió y yo asentí confundido-. Sabes muy bien lo que mi Sehun tiene ¿no? -asentí. Claro que sabía porque él era diferente-. Él es diferente de los demás. No piensa como tú o yo. Él no puede ver el peligro y la maldad como tú y yo si lo hacemos. Sehun es aún un niño. Puede ser herido al instante con una palabra, pero así como es herido de inmediato, cree en cualquier persona -volví a asentir.
Entonces recordé aquel día en que lo vi muy entusiasmado por haber hecho un amigo, brillaba más de lo normal, era hermoso, pero de alguna forma, yo estaba muy celoso por eso, sin embargo, eso se terminó en cuanto corrió hacia mí y sollozo todo lo que pudo en mis brazos. Una vez más fue utilizado.
» También tienes entendido que un día de estos me iré. Me queda muy poco tiempo de vida y Sehun se quedara desprotegido -asentí otra vez. Un nudo se había formado en mi garganta-. Yo he temido esto desde que supe el diagnostico de Sehun. Lo temí como no te lo imaginas Luhan. También me dolió enormemente el saber que él jamás podría tener una vida normal como yo, su padre o como tú. Jamás podría formar su propia familia -una lagrima resbalo por su mejilla pálida y yo la mire como se deslizaba-. Sehun jamás podrá ser amado más allá que de un amor maternal, fraternal... -confeso, pero yo sabía muy dentro de mí que ella estaba muy equivocada.
Ahí fue cuando hable por primera vez desde que comenzó a hablar ella:
-¡Yo lo amo! -confesé con seguridad.
Ella rio y asintió.
-Lo sé. Ambos se adoran como hermanos. Y eso, te lo agradeceré enormemente Luhan. Es por ello que quería pedirte, que el día que yo me marche, siempre estés para él -dijo.
-No señora Wu -ella abrió los ojos desmesuradamente. Estaba muy sorprendida por mis palabras, claro que había entendió mal, por ello continúe-, yo no le amo de esa forma. Mi amor por Sehun no es fraternal, yo quiero a su hijo. El día que yo sea un profesionista, planeaba pedirle su mano a usted y al señor Wu -ella se quedó boquiabierta-. Yo quiero darle todo lo que usted cree imposible para su hijo. Yo quiero ser la semilla para que una familia para Sehun crezca. Yo quiero cuidar de él hasta que la muerte nos separe. Él siempre tendrá la mentalidad de un niño, sin embrago, sé que él podría ser tan maternal como lo es usted.
-¿Q-Que has dicho? -pregunto incrédula.
-Que me deje cuidar de Sehun por toda la vida hasta que la vejez nos separe -pedí con anhelación mientras me bajaba de la silla y me hincaba en el suelo haciendo una gran reverencia-. Déjeme ser la guía de Sehun en esta vida. ¡Por favor!
-Luhan... -musito y lágrimas comenzaron a bañar su rostro.
-Por favor, por favor, se lo pido. Deje que Sehun pase a ser mío -insistí.
Un sollozo ahogado salió de su garganta.
-¡Dios, hijo, muchas gracias! -ella se hincó junto a mí y me envolvió en un abrazo en agradecimiento, pero el agradecido era yo. Me había dejado tener su reliquia más preciada-. El día que yo ya no esté aquí, Sehun pasa a ser tuyo. Tú serás su completo tutor, su luz, su guía en la vida. Yifan es su padre, pero mi niño de alguna u otra forma, debe desligarse de nosotros, sino, nunca crecerá, aunque sea un poco. Debes amarle mucho, incluso más que ahora. Debes adorarlo, tenerle paciencia, debes enseñarle que es la vida, porque en eso falle yo, yo fui una cobarde que no quiso dejarlo seguir. Debes darle anhelaciones, debes hacerlo mucho muy feliz -pidió y sin duda, lo cumpliría al pie de la letra.
Y hoy, ese día había llegado. Ahora yo era la luz de Sehun. Sé que se siente perdido y confundido en estos momentos, pero como su luz, iré a salvarle de esa pronfudidad abrumadora.
Pare de llorar en silencio. Saque el celular de mi bolsillo y llame a la mansión Wu.
-Transfieran todas las cosas del Joven Wu hasta mi departamento. El día ha llegado -su nana solo ahogo un sollozo y me musito un leve "Ahora lo hago joven Xiao".
Ella sabía de antemano que esto sucedería, por ello no había asistido al funeral de su patrona.
Ahora solo debía ser fuerte por ambos. Ayudaría a mi niño a salir de esta.
*
-¿A dónde me llevas Lu hyung? -me pregunta mi niño.
Sus piernas están sobre el sillón de mi auto, pegadas a su pecho mientras se abraza a ellas y a su Pinku Pinku.
Su rostro se ve tan pálido y tan tiste con falta de su brillo habitual.
-A casa, mi niño. Vamos a casa -le sonrió mientras que con mi mano, que no toma riendas del volante, le paso un mechón de su cabello castaño por detrás de su oreja.
-¿Dónde está mi papi? ¿Sabes si mi mami ya despertó? -inquiere con su completa inocencia.
-Tu papá esta con tu madre de vacaciones. A tu mami le encanta viajar, ¿recuerdas? -entonces no me arrepiento de mentir en cuanto veo su sonrisa resplandeciente en su bonito rostro.
Esta emocionado por saber que su madre no está durmiendo.
-Lu hyung, ¿Podemos jugar cuando lleguemos a casa?
-Claro. Tus deseos son ordenes mi niño.
-Yeiiiii.
Creo que fracasare como Jessica. Soy cobarde. No creo poder enseñarle la realidad a mi Sehun. No podre. Su inocencia en matadora. No lo lograre. Pero eso, de alguna forma seria egoísta de mi parte, Sehun tiene derecho a saber y sentir que es amado de otra manera. Tiene derecho a saber cuánto lo amo y quiero.
No puedo echarme para atrás. Se lo prometí a Jessica, Sehun vería la vida de otra forma fuera de sus fantasías.
*****
N/A:
¡Holaaaaa donitas!
Como ya sabrán, ese Two Shot no fue planeado. De hecho, ninguno lo es.
Solo he visto poco para que mi mente comenzara a crear una y mil cosas para esto.
Creo que es un tema delicado, pero a al vez, muy lindo.
Siento que este Two Shot, puede dejar un pequeño mensaje.
¡Todo ser humano tiene derecho a ser feliz por mas diferente que la sociedad lo crea!
¡Todos tenemos derecho a vivir fuera y dentro de las burbujas que nosotros mismo creamos o, nos crean!
Pero...
También tenemos derecho a vivir la vida real.
*
No investigue mucho sobre el tema, pero si lo necesario.
Ya tengo la otra parte, que originalmente era una sola, pero como esta fue muy larga, no la quise pegar y decidí dividirla logrando que naciera un Two shot.
¡Espero que les haya gustado!
Mmmmh
¿Quieren la otra parte?
¿Debería subirla ya?
*
¡¡MUCHAS GRACIAS POR LEER!!
**Disculpen mis faltas ortográficas**