Elsa's POV
Mis patines rozan una y otra vez contra el hielo de la pista.
Solo me concentro en una cosa... Ganar.
Un giro mas y terminaba.
El ultimo giro...
como siempre, impecable.
Me dirigí a las graderías vacías y me saque los patines.
-¡Elsa!- Jane salta a mi lado.
-¿De donde saliste?- la miro sobresaltada.
-Hili, Jini, ¿cimi istis?- agudizó con ironía, su sarcasmo... Mi pan diario.
-Ya, ya, ¿que haces?, no se supone que debas estar aquí.
-Hoy hay fiesta- Chilló ignorándo olímpicamente mi pregunta anterior.
-¿En donde?- pregunté con cierto interés, a decir verdad, una fiesta no me vendría mal, había dejado de asistir a fiestas hace como uno o dos años, todo debido a los entrenamientos y demás cosas que el patinaje artístico implica. ¿Que más podía hacer?, era lo que me apasionaba.
-En casa de Mitchell- contestó, yo únicamente asentí repasando mis dientes con la lengua.
*
Luego de tantas prendas esparcidas por el suelo y muebles de mi cuarto, se podría decir que ya estabamos listas para salir, solo restaba bajar tomar las llaves del auto y salir. Eso hicimos.
Al llegar a la colonia, se podía reconocer Do I wanna know de Artic Monkeys a 5 cuadras de distancia del recinto donde dicha fiesta se gestaba.
En la entrada principal había lo normal, fogatas, y borrachos hasta la inconciencia.
La combinación perfecta, pensé.
Sin cruzar palabras, Jane y yo entramos a la vivienda, ganándonos un casi instantáneo dolor de cabeza.
-¡Chicas! ¡Gustosos los ojos que las ven!- Mitchell nos tendió un par de vasos rojos con algo que parecía ser Coca cola y vodka -Tiene un ingrediente especial- nos guiñó un ojo, este chico era guapísimo.
-¿Que? ¿Mucho amor?- inquirió Jane con sorna.
Mitchell rió.
-Ya quisieras...
*
Hay mucha luz, demasiada para ser sincera, cuando me logro acostumbrar veo donde estoy... En... ¿Mi casa?
Murmullos se escuchan a lo lejos. La cabeza me duele un montón.
Maldigo en bajo la resaca que se me presenta y como puedo me levanto del mullido sillón, logro identificar que los murmullos son provenientes de la cocina.
-¿Mamá?... ¿Papá?- me apoyo perezosamente en el umbral de la puerta.
-¡Cielo!- Exclama de repente mi Mamá, y corre a abrazarme.
-¿¡Se puede saber que es esto señorita?!- Me reclamo mi papá poniéndome en la cara un teléfono donde se puede apreciar una foto mía, un tanto comprometedora que involucra una botella de Jack Daniel's.
-Amm... Bueno... Yo- Traté de excusarme.
-¡Suficiente!- Exclamo colérico- ¡Empaca tus cosas!
-¿Que?- Pregunte desconcertada.
-Veras cariño... tu padre y yo hemos estado pensando, en mandarte un tiempo con la abuela Ori- Dijo mamá.
-Buscas muchos problemas Elsa, te amamos y creemos que es lo mejor para ti, que te alejes de las malas influencias y de todo esto- argumentó mi padre.
-¿Pero que?- Pregunte atonita tratando de procesar todo esto.
-Te vas en 2 dias.
-No, no puedo irme.
-Elsa... Suficiente...
-¡No me puedes alejar de mis amigos y de todo!- repliqué furibunda.
-¡Dije suficiente! ¡ve a tu cuarto!!- Ahogue un grito y subí las escaleras a pisotones.
*
-¿En serio pasó todo eso?- Pregunto mi amiga acariciando mi cabeza, la cual reposaba en su regazo.
-Si- Me limite a decir.
-¿Cuando te vas?- Pregunto.
-En 2 dias- me incorporé.
-Uy- Dijo con una mueca.
-Mowller hills... Así se llama...
-¿Ese es el nombre del pueblo?- Preguntó Jane.
-Sip- Dije haciendo explotar la "P".
-Bueno, vamos a tu casa a empacar- Dijo levantándose y tendiéndome su mano.
Desganada la tomé.
*
-Pasajeros del vuelo número 34 con destino a Mowller hills, por favor ir a la puerta numero 5- Dijo la mujer del parlante con voz neutra.
-Bueno... Ese es mi vuelo- anuncié ajustando mi mochila sobre los hombros.
-Cuidate mucho, cariño- Dijo mamá besando mi frente.
-Te amamos- Dijo papá abrazándome- Verás que es por tu bien- Dijo antes de soltarme.
Cuando abordé busqué mi puesto y me ubiqué desenredando mis audífonos y fue cuando los conecte a mi reproductor de mp3, que una chica, de cabello negro, ojos color azul y piel blanca, se sentó al lado mio. Yo solo la ignoré pulsando play.
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Editado.