Término Medio ( #1 Saga InfoN...

Bởi darlis_steff

20.3M 1.7M 1.4M

Adelaide Parson se define así misma como una mujer en el término medio: En lo bonita, en la suerte, en virt... Xem Thêm

Prologo
Capítulo Uno: Nuevo Trabajo
Jocker Hans
Capítulo Dos: Té rojo
Capítulo Tres: Prejuicios
Jocker Hans
Capítulo Cuatro: Tesorito
Capítulo Cinco: En vivo
Capítulo Seis: Rara
Capítulo siete: Nudos de corbatas
Capítulo Ocho: Fresa para el postre
Capítulo Nueve: Lujuria
Capítulo Diez: Pequeño Demonio
Capítulo Once: Me gustas. Te gusto. Nos gustamos
Capítulo Doce: Mundo feliz
Capítulo Catorce: De ordinaria a extraordinaria
Capítulo Quince: Antiguo Desastre
Capítulo Dieciséis: Manos traviesas
Capítulo Diecisiete: La mejor cita
Capítulo Dieciocho: El regalo de Adelaide
Capítulo Diecinueve: Summerland
Capítulo veinte: El talento de Brody
Capítulo Veintiuno: El último
Capítulo Veintidós: Preciosa
Capítulo Veintitrés: Conociendo los secretos
Capítulo Veinticuatro: El peor actor, el mejor mentiroso
Capítulo Veinticinco: Bad Boy
Capítulo Veintiséis: Miedo
Capítulo Veintisiete: Ojos fríos
Capítulo Veintiocho: Quebrándose
Capítulo Veintinueve: Aun está aquí
Capítulo Treinta: Pesadilla
Capítulo Treinta y Uno: Avanzar
Capítulo Treinta y Dos: Solo seis meses
Capítulo Treinta y Tres: Soledad y Culpa
Capítulo Treinta y Cuatro: Oscuridad
Capítulo Treinta y Cinco: Frases incompletas
Capítulo Treinta y Seis: Promesa rota
Capítulo Treinta y Siete: Noticias
Capítulo Treinta y Ocho: El recuerdo de una Flor
Capítulo Treinta y Nueve: Promesas
Capítulo Cuarenta: Un respiro
Capítulo Cuarenta y Uno: Nuevos sueños
Capítulo Cuarenta y Dos: Seducción
Capítulo Cuarenta y Tres: El error de Alice
Capítulo Cuarenta y Cuatro: Cerrar el pasado (Penúltimo)
Capítulo Cuarenta y Cinco: La estrella más Brillante (Final)
Epílogo
Agradecimientos
Derechos de autor

Capítulo Trece: Preguntas

426K 37.4K 28.4K
Bởi darlis_steff

Capítulo trece: Preguntas.

29 de abril, 2014.

—Jocker— lo llamo. Él alza la vista, creo que estaba concentrado en deshacer los botones de su camisa. Enarca una de sus cejas.

— ¿Viniste a ayudar a desvestirme?

—No sabía que ibas a desvestirte, mucho menos que requerías ayuda.

— ¿Entonces...?

Sacudo mi cabeza, el programa ha terminado. He terminado con mis horas laborales y de ayudar a Marco con los cables. He visto a Valerie, Derek y Elise irse. Así que he decidido venir a hacer la pregunta que ha estado rondando por mi cabeza al ser que la genera.

—Quiero hacerte una pregunta.

—De acuerdo.

Presiono un dedo en mi barbilla, pacientemente él espera la pregunta. Quizás va con prisa por desvestirse para irse. Momentáneamente por mi cabeza pasa el recuerdo del sábado, es un día que creo no voy a olvidar nunca.

Me ha regalado un bonito recuerdo. Cursi pero cierto.

—Tú pregunta es...— me insta.

—Oh, cierto. La pregunta— aclaro mi garganta— ¿Tienes novia?

Resopla, como si mi pregunta fuera la cosa más obvia del mundo. Creo que es un resoplido de "te has vuelto tan idiota como tu pregunta", creo que la pregunta debió ser hecha antes de besuquearme con él no sólo una vez. Sino muchas veces.

Internet no me dice nada, porque sólo se basan en rumores. Los múltiples rumores más recientes de hace un mes son su nombre junto al de Brittany Colleman. Si, desagradable.

—No me mires como si fuera una idiota— lo señalo con el dedo, eso lo hace sonreír un poco.

—No, no tengo novia ¿Por qué? ¿Quieres serlo?

— ¿Qué pasa si digo que si?

—Entonces comenzaría a llamarte novia— responde encogiéndose de hombros y terminando de desabotonar su camisa. Buena vista para mi— si tuviera una novia no estaría besándote como lo he hecho, ni pensando en ti.

Pensando en mí. Maneras de matar a una mujer, libro escrito por Jocker Hans. Hombres del mundo, tomen consejo y aprendan.

—Tiene sentido, pero...

— ¿Pero?

—Nunca me interesó buscarlos en internet y como tú me dijiste que yo no hice mi tarea. Los busqué...

—Ya veo. Hazme saber cuál de todos los chismes generó tú pregunta. No es que te llame chismosa.

—Claro... entonces leí sobre ti. Ya sabía que estuviste casado con Valerie.

—Ajá— es todo lo que dice, mi señal de que no va a hablar de Jalerie.

—Pero no es de ahí de dónde viene mi duda.

—Que bueno.

— ¿Estás molesto de qué averiguara de ti en internet? Porque amigo suenas un poco cabreado.

—Depende. Estoy creyendo que si vas a hacerme una pregunta de algo que leíste de mi en internet entonces es porque estás afirmando que ellos tienen razón y sólo estás esperando que yo lo confirme ¿Me equivoco?

Este tipo seguro en su otra vida fue psicoanalista, psicólogo o cualquier cosa referente al estudio de la mente, cerebro y comportamiento humano.

—Ahora no sé si preguntar porque no quiero parecer una idiota.

—Me pareces inteligente, vamos dilo.

—Brittany Colleman.

—Conocida.

— ¿Ah?

—Es una conocida. Alguien que conozco del medio.

— ¿Tú y ella?— hago una seña no digna de una señorita con mis manos. Yo no soy una señorita, soy una mujer ¡JA!

—Siento cómo que estás preguntando si nos quitamos la ropa— ríe— esto— imita mis señas con la mano— no pasó.

— ¡Ufs! Que alivio.

—Comparte conmigo el por qué es un alivio.

Mordisqueo mi labio superior mientras me balanceo sobre mis pies ¿Mencioné que Jocker ha dejado la camisa en el cesto de la ropa sucia? Que buena vista.

—Oh, ya recuerdo tus celos. Yo no olvido.

—Presume de tu súper memoria.

—Hay rumores porqué es cierto que salimos algunas veces. Ciertos que nos besamos, cierto que la llevé a algunos eventos importantes. Pero es muy cierto que no fuimos y no somos novios.

>>No digo que he estado soltero desde mi divorcio, pero si digo que estoy soltero. Lo estoy.

—Ahora me siento idiota.

— ¿Quieres ir a comer? Ahora soy yo quien tiene ciertas preguntas sobre ti.

—Uhm... vale.

—Bueno, quiero cambiarme de ropa por si no lo has notado...

—Bueno, por si no lo has notado no me estoy quejando sobre ello.

—Voy a quitarme el pantalón.

—No te estoy deteniendo— bromeo, pero contra todos mis deseos, camino hasta la puerta. No soy del todo hormonal, sigo siendo Adelaide y creo que aun puedo controlarme. El virus hormonal aun no se ha adueñado de mí—te esperaré abajo.

—No, me esperarás afuera. No hay nada extraño si digo que voy a llevarte a tu casa. Es algo normal.

—Muy bien señor inteligente— digo saliendo de su camerino. Prácticamente todos se han ido, excepto Rayan.

Él me observa, luego mira hacia el Camerino de Jocker, entre cierra sus ojos verdes y sacude su cabeza.

—No he visto nada.

—Exacto, Rayan.

***

Amo comer hamburguesa.

Pero la verdad es que yo amo comer. Comer es de mis pasatiempos favoritos. Puedo estar almorzando y mientras tanto pensar en la cena.

—Amo la comida.

—Buen dato para saber— ríe— ¿Más que los libros?

— ¿Qué clase de pregunta es esa? ¿Por qué quieres ponerme en una situación como esa?

Doy otro mordisco a mi hamburguesa, él come de la suya. Que bueno que puede comer algo tan normal como una hamburguesa.

—Adelaide, escuché cuando dijiste la otra noche que no tienes novio y asumo que no me dejarías besarte si lo tuvieras. Mi pregunta es ¿Por qué no tienes novio?

Mastico lentamente para pensar bien como dar mi respuesta. La mejor manera de responder es con la sinceridad.

—Nunca he tenido un novio.

— ¿Uh?— parece desconcertado.

—No he tenido un novio nunca. Eso no quiere decir que nunca he besado o para el caso... más. Sólo que no he tenido un novio, al menos no uno real.

—Ah ya, has tenido novios imaginarios— bromea, río.

—No. He tenido tres chicos que se hacían llamar novios, pero creo que no los veía como novios. Llamarlos novios no lo hace real.

— ¿Qué lo hace real?

—Supongo que el sentirse parte de un todo. De un nosotros. Puedes decir que alguien es tu novio, pero no es real si no lo sientes. Sé que suena cursi y no como yo. Pero es mi loca percepción.

>>Entonces lo siento como que nunca he tenido un novio.

— ¿No los dejas entrar?

Por un momento retorcido creo que me pregunto si no dejo entrar... bueno, creo que se entiende. Río de mi mente desviada.

—Que alguien no te enloquezca y haga tu mundo dar vueltas no significa que no intentas dejarlo entrar.

—Cierto. Pero es que estoy tratando de entender. Tú eres ciertamente muy bonita, tienes esta personalidad peculiar y muchos conocimientos del mundo. Trato de entender porqué se supone estás soltera y admitiendo algo como que no has tenido un novio.

No sé en que momento llegamos a una conversación tan seria.

—No soy tan genial como sueno— respiro hondo— a veces soy una persona horrible.

—Es difícil de creer.

—Mi mamá es joven. Muy joven para tener una hija de mi edad, seguro lo notaste en las fotos. Ella es como la familia más real que tengo y también es la razón por la que siento que crecí muy rápido.

>>La amo, Dios, juro que la amo con locura. Pero a veces pienso que ella no me merece. Que no merece lo que hago por ella y entonces caigo en cuenta que es horrible pensar en eso y más horrible no sentir culpa cuando lo pienso.

—Matar por placer lo hace una persona horrible. Golpear a mujeres hace a una persona horrible. Torturar físicamente por diversión hace a una persona horrible. Abusar sexualmente de una persona te hace una persona horrible— enumera—. Tus pensamientos no te están haciendo una persona horrible, has de tener tus razones para pensar de ese modo.

—Me dio un techo donde vivir, me ha dado su amor a su loca manera. Pero tengo la espinita de sentir que nunca ha cuidado de mí. Siempre he sido yo quien cuida de ella y a veces me siento cansada. Cansada de ser la mamá— miro mi hamburguesa, ya no tengo hambre—nunca me ha dicho gracias.

— ¿Nunca?

—No. Quizás un gracias que deja caer de manera distraída y por obligación. Nunca un gracias sincero. Como "gracias por pagar las cuentas", "gracias por cuidar de mi", "gracias por sacar al pedazo de mierda que quería golpearme". No, yo no obtengo ese tipo de agradecimiento, porque creo que ella asume que yo siempre voy a hacer esas cosas por ella lo cual es cierto. No puedo evitar querer proteger a mi mamá.

>>Ella no lo hace fácil, pero no creo que un día vaya a darle simplemente la espalda. No creo que podría.

Este tipo de momentos de desahogo sólo los tengo con Alexa y lo hago mientras como helado y lloro. No en medio de un local de comida y con Jocker Hans.

—Siempre he sabido que no quiero ser como ella. No quería salir embarazada empezando mi adolescencia por lo que huía en un principio de los chicos. No quería ser irresponsable por lo que asumí más responsabilidades de la esperada.

>>No quería que me vieran como una chica simple y bonita que con eso conseguiría algo. Entonces comencé a leer. Siempre supe que no quería ser... ella. Y suena horrible, pero a veces cuanto te agotas y no quieres resignarte puedes visualizar lo qué no quieres ser. Yo la visualice a ella.

—No pienso que seas una persona horrible.

—Quizás por eso estoy soltera. Paso mi tiempo tratando de arreglar los trozos rotos y estoy predispuesta a evadir situaciones que me lleven a lo que no quiero ser.

—Me gustaría ser psicólogo en este momento para decir algo útil— dice.

—Y ahora estoy cayendo en cuenta de que has de pensar que mi mamá es un monstruo. Pero ella es encantadora, tiene sus momentos buenos y siempre me ha tratado bien. Creo que la cosa es que nunca ha sabido cuidarme o hacerse cargo de mí. No lidia bien con el hecho de tener una hija— río de manera forzada—. Creo que ella piensa que no soy su hija, que soy una especie de hermana menor.

>>Todo el que la conoce cae en sus encantos y la adora. Porque todos obtienen la parte buena de ella, la amble, la dulce y divertida. Yo obtengo a la adolescente encerrada en su cuerpo y ahora creo que es horrible que te este contando esto. Como que he deprimido este almuerzo.

—Para nada. Me gusta conocerte, trato de aprender más sobre ti.

—No soy un tema internacional al que puedes estudiar, Jocker.

—Lo sé. Eres una mujer que me gusta y de la que trato de entender más.

—Este tipo de temas deberían hablarse con una buena taza de té en nuestras manos. Si voy a agobiarte con el lado dramático de mi vida, al menos debería ofrecerte una taza de té.

—De té rojo.

—Ah, que bonito. Como nuestro símbolo— bromeo—, pero como no hay taza de té. Mejor cambiemos de tema. Creo que te he dicho lo suficiente.

—No era publicidad.

— ¿El qué?

—Mi boda con Valerie, por si llegaste a leer esas hipótesis en internet. No me casé por publicidad, no hubiese hecho algo como eso.

— ¿Entonces por qué?— tiento a mi suerte. Hace una mueca viendo su hamburguesa.

—Por inexperto, idiota y errores.

—Profundo.

—Créeme es una historia desastrosa que no parece digna de Valerie y de mi.

— ¿Los casó Elvis? Porque me dijeron que se casaron en Las Vegas.

—Lamento decepcionarte, pero no nos casó Elvis. Nos casó un tipo calvo y muy alto.

— ¿Estabas ebrio?— pregunto sorprendida.

—Lo estaba el día anterior, quizás lo estuve durante el proceso. Pero era consciente de lo que hacía. Valerie era mi novia y cuando la decisión se tomó estábamos muy sobrios y conscientes.

Se siente como parte de la revelación del año. Del siglo, del milenio.

—Llevábamos seis meses saliendo en secreto— deja caer—. Al menos era secreto para personas que no fueran familia o amigos. Nos gustaba de ese modo. Así que no era publicidad como muchos dijeron, sería estúpido casarse por publicidad.

—Sólo un poco más estúpido que casarse en Las Vegas.

—Mujer lista— ríe—. Son las consecuencias de creer que un actor que ha ido más veces de lo que puedes recordar a rehabilitación es tu amigo— aprieta sus labios.

Madre de Dios, más revelaciones.

—Personas que quedan en el pasado— murmura—. A veces no confiamos en las personas correctas.

—Siento que estás confiando mucho en mí.

—Si, una locura. Confiar parte de la historia que sólo muy pocos conocen a la chica que desde enero me lleva deliciosas tazas de té. Del mismo modo que es una locura que ella me confiese como se siente.

>>Eso me hace confiado, estúpido o sabio. Ya veremos. Dudo que esto salga en alguna revista mañana, tú no eres así.

—Ya basta.

— ¿Qué hice?— pregunta desconcertado.

—Deja de ser tan... Jocker. No quieres tenerme enloqueciendo por ti.

—Oh, se nota que no sabes lo que quiero Adelaide. Tranquila, me tomaré mi tiempo para mostrarte que enloquecerte es parte de los planes. Velo como un modo de devolverte el hecho de que estás enloqueciéndome.

***

02 de mayo, 2014.

— ¿La tía Brenda sabe que venimos?

—Brody ¿Eso haría alguna diferencia?— pregunta Alexa pasando sus dedos por su cabello.

—Cállense— digo.

El hombre de seguridad nos da un vistazo, pide mi identificación y luego nos deja entrar. Huele mucho a humo y licor. No sé que estaba esperando, pero todo en el bar luce realmente tranquilo, como personas sumidas en su mundo bebiendo.

Siento la piquiña de culpa ante el hecho de invadir el lugar laboral de mamá, sé que me molestaría si ella apareciese en mi lugar de trabajo sin invitación.

—Me esperaba más desmadre. Algo como en los libros, pero este es un bar bastante aburrido— se queja Alexa— que pérdida de tiempo.

No sé exactamente en que trabaja Brenda, pero lo descubro en el momento en el que la veo en la barra conversando animadamente con una pareja joven y le sirve tragos. Creo que la culpa de haber pensando mal sobre qué hace un su trabajo podría marearme.

Momento para sentirse una perra desgraciada.

—Ella sólo esta trabajando— susurra Alexa, como si fuera mi conciencia reprochándome— no puedes ser tan desconfiada.

—Me siento idiota— señalo.

—Es porque has actuado como una.

—Alexa tu capacidad para demostrar tu amistad hacia mi prima es impresionante— Brody rueda sus ojos— vamos Laide, vamos a tomar asiento sin que nos vea. Vamos a verla en su elemento y ya luego decides si has o no has sido una idiota.

Tomamos asiento, doy unas libras para que nos traigan unos tragos sin necesidad de ir a la barra. No quiero que Brenda nos vea.



Una hora después estoy sintiendo más idiota. Los clientes parecen amar a Brenda, incluso parece que ella es amable con ellos mientras conversa y sirve tragos. Es lo suficientemente bonita para darme cuenta que muchos coquetean con ella, pero no parece nada que vaya para más.

—Necesito irme, la culpa va a asfixiarme— digo poniéndome de pie.

Caminamos hasta la salida y agradezco que Brenda nunca nos note. Tomo un largo respiro y adentro mis manos a los bolsillos de mi chaqueta. Alexa y Brody permanecen en silencio.

—Debo aprender a confiar en ella.

—Eso creo— dice Alexa. Asiento con mi cabeza— ¿Ahora qué?

—Bueno, la noche es joven podríamos ir a una fiesta de este tipo que conozco que...

— ¡Si, si! Es mi noche libre de trabajo, quiero diversión— asegura Alexa dando pequeños brincos.

—Démosle un poco de diversión a la esclava, Brody.

***

Segura como el infierno que esto no es una buena idea. Mi cabeza da vueltas, siento muchas ganas de reír, de hecho no puedo dejar de reír.

Todo es como una nube feliz. Todo me da risa.

Esto tiene que recordarme porqué no soy una drogadicta y porqué después de tres veces yo nunca me metí con la hierba. No es lo mío.

Pero cuando te sientes como una mierda crees que puedes hacer cosas mierda. Entonces ahora la voz de Brody parece como un eco que me causa gracia mientras frunce el ceño y parece que quiere estrangularme.

Irónico, porque él si que se fuma su hierba en ocasiones.

No sé donde esta Alexa, quizás Alexa es la chica nadando desnuda en la piscina, o la chica encima del regazo del chico hippie. Alexa también puede ser la ebria borracha llorando, o sólo la chica que me mira como si no me reconociera.

Creo que Alexa es más como la última.

Pareció una cosa divertida dejar que un viejo chico que estudio en la secundaria conmigo compartiera de su "diversión", por un momento parece que había olvidado cuanto odio las drogas y concepto de ellos. Cuanto odio sentirme desorientada y no poder controlar mis emociones. Cuanto odio estar en la nube de felicidad inducida por falsas motivaciones.

—Odio estar así—arrastro las palabras.

—Si, como que también odio que estés así— señala Brody con las manos en sus caderas— ¡Ni siquiera te fumaste uno sola! Tu no eres de hierbas, donde vuelvas a fumarte una cosa de esta voy a estrangularte.

La doble moral de Brody es impresionante. ¡Hola! él a veces se fuma una en su casa, claro, él parece sobre llevarlo mejor que yo. No vuelvo a hacer esto en mi vida.

Apesta no dejar de reír, no soy del tipo risueña por lo que reír sin parar me provoca querer apuñalarme a mi misma.



Me mantengo riendo en mi puesto durante dos horas más en los que sigo en el efecto, luego el licor en mi estomago me hace vomitar. Paso de estar en una felicidad a sentirme terriblemente mal

—Joder, sácame el estomago Brody, sácamelo.

—Yo te lo puedo sacar de un golpe que te voy a dar—promete Alexa— en la fiesta ha estado Peter y te ha visto fumarte ese porro y luego reír como maniática. De seguro nunca en tu vida volverás a tener sexo.

—Menos información Alexa— pide Brody arrojando agua en mi rostro.

El baño es minúsculo, pero de alguna manera los dos se las arreglan para estar conmigo.

—No sé cómo es que te fumas esto Brody, ni sé como lo ha hecho Brenda. He odiado cada segundo en el que no era dueña de mi cerebro. Nunca lo haré de nuevo. Siento tantas nauseas.

—Los llamados efectos segundarios.

—Quiero irme a casa— pido.

Brody me ayuda a ponerme de pie, mi estomago se retuerce. Al menos puedo caminar por mi misma. Ni siquiera conocí al dueño de la fiesta.

Salimos del baño en busca de la salida, en el camino nos topamos con Peter, él me dice algo que no entiendo por lo que sólo sonrío. Estoy tan más allá de mí que cuando se despide con un beso muy cerca de mi boca no pienso en alegrarme o molestarme. Lo ignoro y continúo.

Brody tiene el auto del tío Bruno, lo que agradezco porque odiaría ir en transporte publico cuando mi estomago quiere salir por mi boca.

***

Cuando llego a casa sin quitarme la ropa y sintiéndome mejor camino hasta la habitación de Brenda. Ella se encuentra durmiendo, según la hora en el celular son las cuatro de la madrugada.

Me dejo caer a su lado en la cama y la abrazo.

Brenda es una mamá irresponsable, parece más como mi hermana pequeña de la que cuido, la hermana que pinta mis uñas, dice que ropa me queda bien y esta pendiente de mi vida amorosa.

Es imposible no amarla no cuando parece que lo intenta pero no es buena en eso. No todas las mujeres nacen para ser madre, Brenda es una de ellas. El problema es que ella es madre y veintiún años parecen no haber sido los suficientes para que ella lo asimile. Necesito que comience a entenderlo, no quiero perder la paciencia y explotar.

— ¿Adelaide?

—Obvio, ningún abrazo puede ser tan bueno como el mío— ella ríe.

— ¿Pesadillas?

—Sólo quiero acurrucarme con mi mamá— permanecemos en silencio— lo lamento. No te he dado mi confianza.

—Bueno, hay razones para ello. Lo sé.

—No soy cursi ni dulce. Pero te amo.

—Y yo a ti Ade. Y lo lamento.

Permanecemos en silencio, creo que vuelve a dormirse. Yo voy por el mismo camino a dormirme.

—Y Adelaide.

— ¿Si?

—Espero y no estés fumando marihuana. Puedo olerla en ti.

—Oh, adolescente pillada— bromeo.

—Hablo muy en serio. Eso no es para ti, eres una chica con un futuro brillante. No quiero que lo hagas... no quiero que seas yo.

Contengo mi respiración. Eso ha sido duro de escuchar.

— ¿De acuerdo?

—Esta bien mamá. Igual odié cada segundo de ello.

—Adelaide.

— ¿Si?

—Hazme el favor de irte a bañar. No puedo dormir a alguien que parece haberse bañado en marihuana.

—Pero tengo sueño...

— ¡Ve a bañarte!

—No te queda lindo ser mandona— bromeo, pero estoy sorprendida de que este actuando como una... madre.

—No te veo yéndote a bañar.

Con todo el peso de mi cuerpo me dirijo a mi destino de bañarse. Brenda ha actuado como una madre. Sorprendente.




Holisssssss estoy feliz porque no tengo que despertarme temprano hasta enero :') eso me hace feliz.

Capítulo dedicado a Ariii hasta ahora una de las lectoras más apasionadas e intensas que he conocido en persona prueba de ello el abrazo de oso en una foto haha. Ti amu pastelito <33

Espero les guste este capítulo sencillo pero MUY necesario, luego verán porqué.

Un beso.




Đọc tiếp

Bạn Cũng Sẽ Thích

497K 57.7K 95
Wei Ying quedó tan traumatizado en su vida con los Jiangs cuando tenía 7 años que decidió huir roto y herido sólo para ser encontrado por Hua Cheng y...
252K 16.8K 33
[SEGUNDO LIBRO] Segundo libro de la Duología [Dominantes] Damon. Él hombre que era frío y calculador. Ese hombre, desapareció. O al menos lo hace cu...
816K 41.8K 35
Melody Roberts es una chica muy sencilla, no es muy sociable y solo tiene una mejor amiga. Vive sola en un pequeño departamento, el cual debe de paga...
3.1K 79 5
Donde la nerd es la novia del hombre más codiciado por las mujeres de la escuela, lo sé, una historia muy cliché, pero totalmente diferente a las dem...