Louis duerme hasta el amanecer, lo cual no es ni de cerca lo suficiente considerando que debió haberse forzado a sí mismo a quedarse despierto por semanas con únicamente pequeños momentos de descanso. Harry está ahí cuando despierta, sentado en un sillón en un rincón junto a las ventanas, un libro en su regazo al que sólo estaba viendo en lugar de leerlo. Él se estremece cuando Louis, sin una advertencia, de repente se para de la cama, con la sabana en el regazo, brazos levantados a la defensiva y ojos muy abiertos, respiración rápida. Harry piensa que puede ver lo rápido que su corazón está latiendo en su pecho.
Debe haberle tomado un momento a Louis para disminuir la confusión, luego él baja sus brazos otra vez y parpadea, ojos vagando por la habitación hasta que ellos se posan en Harry y se quedan ahí. Un cálido escalofrío corre por la espina dorsal de Harry.
"Hola." Él dice, sintiéndose sin aliento. Louis sujeta las sábanas y teniendo en cuenta que fuera de toda la armadura que tenía luce casi delicado, los músculos en su brazo derecho se contraen de forma impresionante, recordándole a Harry que no debe subestimarlo. Cuando era muy pequeño, su madre le dijo que no debería empujar a los perros callejeros en una esquina o contra una pared, porque los animales acorralados siempre eran los más bravos. Él se pregunta si Louis va a arremeter contra él si Harry se acerca demasiado.
"No estoy armado." Harry continúa y muestra sus manos vacías, pensando que esto tal vez sea un buen comienzo. "Y si quieres, eres libre para irte. Ninguno de nosotros va a detenerte. Pero si quieres respuestas, estoy feliz de dártelas. Estás a salvo aquí, y puedes quedarte tanto como quieras."
Mira a Louis bajar sus ojos hacia sus manos apretándose en su regazo, una de carne y otra de metal, y su mirada se sigue moviendo, nunca encontrando a Harry, pero al menos no se está levantando y corriendo lejos; al menos parece estar considerando la oferta de Harry. Es tranquilo después, por un largo tiempo durante el cual Harry no se atreve a moverse o hablar, asustado de que cualquier movimiento o sonido tal vez espante a Louis. Así que se sienta y espera pacientemente que Louis recolecte sus pensamientos o aclare su mente, la tensión sólo se regala por la estrechez del agarre que tiene en su libro, haciendo las páginas agitarse.
"Ahí decía que estaba muerto." Louis dice de la nada, tan silencioso que Harry fácilmente podría haberlo pasado por alto si no estuviera esperándolo por casi una hora. Él gira sus gélidos ojos azules a Harry. "En la exposición. Decía que yo morí en combate." Hace una pausa, al parecer reflexionando sobre las palabras en su cabeza. "Pero están equivocados."
"Sí," Harry respira, agonizando por caminar hasta él y al menos sentarse en el borde de la cama. "Están equivocados. Pero todo el mundo pensó lo mismo. No teníamos idea de que habías sobrevivido."
"Decía que éramos mejores amigos." Louis continúa imperturbable, aun sosteniendo la mirada de Harry. "¿Están equivocados sobre eso también?"
"No." Él es casi demasiado rápido para negar eso, moviéndose rápidamente hacia el final de la silla. "No, por favor. Tú fuiste mi mejor amigo. Mi único amigo realmente. La persona más importante en mi vida." Harry inhala y exhala. La expresión de Louis está en blanco, firme, y no debería doler tanto como lo hace. Harry debería haber esperado que fuera difícil. "Aún lo eres."
Louis mira de nuevo sus manos. Estira su labio inferior dentro de su boca, lo muerde hasta que la piel pálida alrededor se aclara incluso más. "No recuerdo eso." Él dice. "No recuerdo un montón de cosas."
Harry necesita recordarse a sí mismo mantener la calma y la compostura, porque esto no es sobre él, y Louis no necesita que él sea un lío tembloroso ahora. Zayn tiene razón cuando dice que no están calificados o con la experiencia para lidiar con esto, pero todos ellos son únicos en su tipo, improvisando sobre la marcha, y todo lo que Harry puede hacer es tratar.
"¿Qué sí recuerdas?" Pregunta y espera ansiosamente por la respuesta de Louis.
Louis no responde de inmediato. Los fragmentos en su brazo izquierdo zumban ligeramente, haciendo clic y acomodándose, pero Louis parece estar acostumbrado a ello ahora. "Una silla." Dice eventualmente. "Una silla, y el frío. Siempre hacía frío."
Harry cierra sus ojos, toma aire por su nariz y lo exhala lentamente.
"Y caer." Louis lentamente continúa, estremeciendo a Harry hasta los huesos. "Recuerdo estar cayendo." Él mira hacia arriba otra vez. "¿Me caí? ¿Es así como morí?"
Harry asiente, no puede sacar las palabras al principio, necesita tragarse el nudo atorado en la garganta. "Lo hiciste." Responde. "Estábamos en lo alto de las montañas. En un tren. La mitad del compartimiento había sido arrancado y tú - tú te caíste."
Louis sostiene su mirada, aparentemente no afectado. Harry no puede dejar de mirar las cicatrices adornando su piel y trata de no imaginar quién y qué las puso ahí.
"¿Cómo puedo saber lo que es real?" Louis habla de nuevo después de unos cuantos segundos de silencio entre ellos y el corazón de Harry se aprieta.
"Puedes preguntarme." Responde seriamente. "Sea lo que sea, voy a responder. Y te prometo que nunca te mentiré," porque Harry no tiene nada más excepto esto.
No tiene más que ofrecer a Louis excepto honestidad y seguridad y la promesa de que no va abandonarlo otra vez. El hecho de que ni siquiera una pista de emoción obvia se muestra en el rostro de Louis le rompe el corazón, pero de nuevo, tener a Louis aquí y ser capaz de hablarle y ayudarle a entender es más de lo que Harry pudo haber esperado, y él necesita dejar de ser egoísta. Louis va a mejorar, y tomará tiempo, y será difícil, pero, como dicen, el único camino es hacia arriba.
"¿Tienes hambre?" Pregunta entonces, porqué ser confrontado con el pecho desnudo de Louis, delgado y musculoso, realmente le trae recuerdos. Louis lo mira con los ojos vacíos, no contesta, ni siquiera le da a Harry la más pequeña pista de que haya entendido la pregunta por unos momentos, así que Harry reformula. "¿Quieres algo para comer?"
Louis sólo se le queda viendo por otro minuto antes de que él levante un hombro en lo que sólo puede ser considerado como un encogimiento de hombros. Luego lo entiende. Es el primer testimonio de lo que HYDRA realmente le ha hecho, aparte de los horrores de los que Harry ya tiene consciencia. Puede ser que también acabe por desplomarse y vomite por todo el piso, porque Harry se siente enfermo y de pronto completamente afectado hasta la médula. Louis tiene que estarse muriendo de hambre, especialmente considerando el estrés al que ha sido puesto y su metabolismo más-rápido-de-lo-normal que requiere por lo menos tres veces más nutrientes que los humanos promedio.
Harry se levanta sobre piernas temblorosas, deja el libro caer en el sillón y se limpia las manos en sus jeans. El reloj despertador en su mesita de noche indica que son sólo pasadas las siete. "¿Qué hay de una ducha?" Es consciente que se está pasando ahora, pero está desesperado porque Louis se sienta mejor, que recupere algo, incluso si es sólo un estómago lleno y el sentido básico de limpieza. "Tengo una tina también, si prefieres mejor tomar un baño."
Él se mueve hacia la puerta que da a su baño privado y abre la puerta, se hace a un lado para darle a Louis la opción de entrar al amplio baño y observarlo y por un momento, Harry piensa que su intento de llegar a él ha fallado también, cuando Louis de pronto echa las sábanas a un lado y balancea sus piernas hacia un lado de la cama. Sorpresivamente sus pies son estables cuando se levanta y se mueven silenciosamente por el piso, pausa sólo por un milisegundo cuando pasa a Harry antes de dar un paso dentro del cuarto de baño. Harry ni siquiera tiene el tiempo de preocuparse sobre darle a Louis algo de privacidad, porque él se quita sus pantalones con un movimiento práctico, sin dudar, y los deja caer al suelo, parándose ahí completamente desnudo, con los brazos tensos a sus costados.
La herida que había empezado a sangrar algunas horas antes todavía se ve mal, extendiéndose desde el frente de Louis alrededor de su cadera, oscureciendo los bordes y solo lo suficiente de pegamento quirúrgico para mantener todo junto. Harry quiere apartar sus ojos, en verdad que sí, pero Louis no se mueve, él sólo se queda ahí parado como si estuviera esperando que algo pasara y –
Él muerde sus propios nudillos y se da la vuelta por un minuto para recomponerse y luchar contra la quemazón tras sus párpados. Cuando Harry ha recuperado su compostura – al menos en apariencia – Louis aún no se ha movido. Harry da un paso dentro de la habitación, la alfombra suave y afelpada bajo sus pies, y él deja la puerta ligeramente abierta en caso de que Louis no se sienta cómodo en espacios cerrados.
Louis está viendo la ducha con cautela. Sus puños están temblando.
La tina está en la esquina derecha, una cosa lujosa con chorros, una pantalla táctil e increíblemente espaciosa. Harry piensa que tal vez sería la mejor opción y camina hacia ella, agarra el aspersor y gira hacia Louis a tiempo para verlo retroceder visiblemente, con los ojos amplios y las fosas nasales ensanchadas. Harry permanece inclinado sobre la tina, mira el aspersor en su mano y de nuevo a Louis antes de caer en cuenta.
"Lou." Comienza, voz áspera con emoción hirviendo. "Sólo voy – llenaré la tina para ti, ¿De acuerdo? No voy a –" y no puede continuar, poniendo el aspersor de nuevo en su montura, luego deja correr el agua del grifo, sosteniendo su mano en la regadera y ajustando la temperatura. "Toma un baño, no te preocupes por el agua, aquí hay algo de jabón, y toallas y yo – te dejaré solo si quieres."
Parece relajarse, pero no por mucho. Sin embargo, Louis camina hacia la tina y luego de un momento de indecisión, él se mete a ella, se sienta en aproximadamente cinco pulgadas de agua y lleva sus piernas cerca de su cuerpo, envolviendo sus brazos alrededor de ellas, acurrucándose en sí mismo – tratando de parecer tan pequeño como sea posible.
Harry no sabe qué hacer. Se siente como un pez fuera del agua, andando a ciegas y duda que Louis sea consciente de lo que hace o lo que está mal con eso. Sólo han pasado unas pocas horas y Harry ya está cerca de un total quiebre en medio de su baño, porque Louis claramente ha sido privado incluso del más pequeño sentido de comodidad o decencia humana, desnudándose frente a alguien que él probablemente sigue considerando un extraño como si hubiera sido inculcado en él. Él no se acerca por el jabón mientras la tina se llena lentamente, probablemente no le han permitido el uso de jabón o de asearse a sí mismo en las últimas décadas. Por como se ve, ellos ni siquiera se habían molestado en cortar su cabello en el medio de la suspensión criogénica tampoco.
Louis no había sido exactamente vanidoso, pero había sido consciente de su buena apariencia, lo usaba a su favor y había pasado tanto tiempo frente a espejos que Harry siempre lo molestaba con eso. Nunca dejaba el apartamento sin su cabello meticulosamente peinado, bien afeitado e impecablemente vestido, y es un contraste tan marcado ahora, con aspecto descuidado y apenas vivo, que Harry siente náuseas.
No está seguro de si él está sobrepasando uno de muchos límites que probablemente deberían ser aclarados cuando apaga el grifo y agarra una botella de champú. Louis ha volteado su cara lejos de él, pero cuando Harry pregunta "¿Puedes poner tu cabeza hacia atrás?", él obedece sólo después de un segundo.
Con un nudo en la garganta y en el pecho, Harry se sienta sobre el borde de la bañera y, manteniendo su respiración superficial porque ya puede probar su bilis, toma un momento para pensar acerca de las implicaciones de Louis haciendo lo que le pide cuando sólo unas horas antes, él había estado listo para matarlo, siguiendo ciegamente lo que podría ser clasificado como una orden. Pero Harry lo hace a un lado por ahora, obliga a sus manos a mantenerse calmadas mientras llena sus palmas con agua y comienza a mojar el cabello enmarañado de Louis. Como cuando estaba cubriendo sus heridas, Harry se enfoca en la tarea en cuestión, usando sus dedos para desenredar los cabellos, aplicando champú y lavándolo nuevamente.
Louis se inclina hacia delante de nuevo, curvando su espina dorsal, permitiendo a Harry contar sobresalientes vértebras tras vértebras. Él moja un paño, mira la manera en que Louis tiembla cuando lo frota a través de su espalda, sobre sus hombros y en los lados donde la sangre ha teñido su piel y Harry trabaja hasta que sus ojos están ardiendo, el paño está rojo y el agua está comenzando a ponerse tibia y Louis sólo deja que pase.
Cuando ha terminado, Harry deja caer el paño, el cual es imposible rescatar, en la basura y vuelve a la habitación, agarra una pila de ropas limpias y algunas toallas grandes y suaves, colocándolas sobre el mostrador junto al lavabo. Louis aún mantiene sus brazos envueltos alrededor de sus piernas, mirando fijamente la superficie ondulante del agua.
Harry aclara su garganta. Se siente débil. "Éstas ropas tal vez sean un poco grandes, pero deberían servir hasta que pueda organizar algo que te quede." Él le dice. "Yo um – te dejaré sólo ahora. Pero deberías intentar descansar un poco más."
Luego deja el baño y su habitación y casi salta al pasillo antes de comenzar a llorar.
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Desperté para encontrar como muchas notificaciones, ahora esta historia pasó las dos mil lecturas y no puedo más que decir gracias, aunque no es mi historia, le tengo mucho cariño porque la autora fue increíblemente linda al darme su permiso y es la primera traducción seria que he hecho.
¿30 personas? Realmente no lo sé, pero gracias a todos los que votan los capítulos y comentan, otra vez, es muy lindo como aman esta historia tanto como yo :) y si no quieren sufrir, más vale que abandonen el barco a tiempo, porque luego no hay vuelta.
Tengo que admitir que Harry no me está cayendo del todo bien, está tan desesperado por recuperar a su Louis que no se da cuenta que han pasado setenta años, y ninguno de los dos son las mismas personas que fueron en la segunda guerra, ni siquiera nosotros somos los mismos que fuimos hace un año. Está acorralando a Louis, no está dándole una opción, y, como dijo él, los animales acorralados son los peores.
—Jay ♡