Mi querida Lia o Lucy como prefieres que ahora te llame. Estoy sentado en mi escritorio lo definiría como mi lecho de muerte, las manos me transpiran, mi ritmo cardiaco se acelera y mi mente esta con constantes contradicciones. Nunca pensé en escribir un libro y menos de mi vida, ponerme a mí como el protagonista de una historia es tan solo una burla contra la humanidad. Con un lápiz en la mano decido escribir una historia que contara como nació el más puro amor entre dos personas que nunca debieron enamorarse, aquella historia que la tienes olvidada. Tal vez el destino decidió que olvidaras aquello porque fueron momentos de demasiado desconcierto, lo admito mi carácter, mis emociones y las sensaciones que vivimos en ese tiempo fueron excesivas. El amor que en esa época sentíamos no era apto para nuestra edad, admito que nunca fui él mejor, hubieron mejores que yo en tu vida pero creo que por algo me escogiste, asumo que nunca creí ser digno de ti un simple hombre con tanto peso en la espalda desde el momento de nacer, no era apto de irrumpir tu vida como un huracán que arraso con todo dejando pedazos de lo que estaba completo, pero yo lo hice mi ángel de los ojos azules.
Decido contarte mi punto de vista acorde a lo que vivimos, aseguro que no será igual a la tuya, cuanto quisiera que recordaras o contártelo desde tu perspectiva, sé que te empeñas en ello pero el destino actúa de otro modo, como siempre yo jugando con él, tratare de hacer que vivas de nuevo en el pasado. Prometo no mentirte, esta vez contarte cada echo y no ocultarte secretos. Te sorprenderán muchas cosas, ya que no fui aquel hombre que cambio por ti, tenerte lejos aquellos cinco años que prefiero verlos como un largo viaje que tomaste, me hicieron reflexionar y decidí tratar de ser aquel hombre que fuera digno de ti, admito que luchar conmigo mismo es difícil.
No contare la historia desde el momento en el cual tú entraste en mi vida de nuevo donde prometí que nunca más te dejaría ir, ya que esta parte la vivimos los dos juntos y es como un nuevo comienzo.
Yo reviviré contigo aquel tiempo donde tan solo eras una niña con tan solo dieciséis me enamoraste, caí rendido a tus pies, nunca imaginaria que cambiarias mi vida de aquella forma, me darías la fuerza para luchar contra el mundo, mostrándome que las cosas no eran tan malas y dándome la mano para lograr levantarme.
Ahora estoy decidido a comenzar, prendo un cigarrillo haciendo que mis nervios se dispares, tomo la pluma con firmeza y respiro hondo.
Bienvenida de nuevo querida Lia.
���Lķ