WHEN SHE WAS A VIRGIN

By angel1810

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[ PUBLICADO POR NOVA CASA EDITORIAL] "Se tomó el puente de la nariz y pude notar cómo contenía su rabia. -Mal... More

ANTES DE LEER
Prólogo
"Bruja Franca" # 1 (Nuevo)
"Salsa de ajo" # 2
"Esto no es maravilloso desastre" # 3
"No puede ser cierto" #4
"¿Qué pasa, tienes miedo?" # 5 (Parte I)
"¿Qué pasa, tienes miedo?"#6 Parte II
"Annie estás..."#7
"¿Lista?" #8
"¡¿Tienes 19?!" #9
"Los famosos celos" #10
"Autocontrol" #11 (Parte I)
"Autocontrol" # 12 (Parte II)
"No seas cobarde" #13
"No seré el causante de que pierdas tu autocontrol" #14 (Nuevo)
"ME GUSTAS MUCHO" (BONUS)
"Chica difícil" #15
"¿Qué?" #16
"No eres capaz" #17
"Caracolito" #18
"¿Fallarte?" # 19
"Debo alejarme de ti" # 20
"Tranquila Annie" #21
"Carly" #22
"Te amo" #23
"Positivo" #24
"Compañeros de trabajo"#25
"Orgullo" #26
"Me amas" #28
"Verdades" #29 (Parte I)
"Verdades" #30 (parte II)
"No es "tú", es nuestro..." #31
"Miradas nuevas con sabor a segundas oportunidades" #32
"En problemas" #33
LLEGAMOS AL "MILLÓN"
"Hogar, dulce hogar" #34
Bonus "Jamás la olvidaré"
"No volverá" #35
"Respira profundo, Landon" #36
"Annie cabezota" #37
"Mi chico está aquí" #38
"Conejo bebé" #39 (Parte I)
"Conejo bebé" #40 (Parte II)
"Estoy enamorada de Landon" #41
"¡Es fin de ciclo!" #42
Extra "Un chico jamás nos separará".
"Denle la bienvenida" #43
"Confío en ti" #44
"Sebastián" #45
"No me gusta la Nutella" #46
"Completamente feliz" #47
"No ha sido malo" #48 - FINAL
Epílogo (Parte I)
Epílogo (Parte II)
¿Secuela?
¡NOTICIA MUY NOTICIOSA QUE NO SE ESPERABAN!
Comunicado: Corran y muevan los ojos
1 DE AGOSTO (FECHA DE PUBLICACIÓN) + DIRECTO EN INSTAGRAM.
LISTA DE LIBRERÍA ASOCIADAS.
¡FIL LIMA - PERÚ! - INCABOOKS

"Inconsciente" #27

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By angel1810

¡Basta de llorar Annie!

¡No has parado de hacerlo desde que saliste de la pizzería!

Mis ojos han conspirado contra mí. Se han confabulado contra mi fortaleza y mi hostil carácter. Ahora... ahora estoy en la fría habitación que renté; sola, con el rostro humedecido y recostada en mi cama. ¿Y por qué lloro? Pues por muchas cosas en realidad, una de ellas es porque mi madre llamó hace dos horas preguntando dónde estaba y aunque tuve inmensas ganas de regresar a casa, porque evidentemente este lugar apestaba, no lo hice. Me limité a decir que necesitaba un tiempo sola. Y la otra, es por un tipo de cabello castaño, ojos avellana y tatuajes en el brazo derecho (ahora con un "look renovado") llamado Landon Cooper. ¿Cómo pude creer que cambiaría por mí? Las personas nunca cambian, solo tratan de mejorar por el bien de los demás; pero Landon ni siquiera hace el intento, él solo espera que trate de ver cosas que son invisibles para mí. Las palabras por ejemplo, esas no me sirven yo necesito hechos y él no me los da.

Carly, Megan y la estúpida rubia de la pizzería solo eran una muestra de todas las chicas que conformaban su lista. No estaba dispuesta a seguir aguantando más desilusiones, quizás mi orgullo era una barrera inmensa como él decía pero... me ayudaba a cuidar mi corazón y por ese simple hecho mi defecto-virtud ya era algo bueno.

Al menos yo lo consideraba así.

Abracé mi vientre sintiendo algo de compañía, mi bebé en cierta manera significaba una fortaleza. Irónico, porque parte de él (o ella) son de la persona que más detesto en estos momentos.

Me preguntaba qué pensaría Landon si se enterara de que tendríamos un hijo. No pude evitar que mi corazón se acelerara ante esa idea. Quizás, solo quizás, él cambiaría y dejaría esa arrogancia de lado.

Dijimos que íbamos a dejar las ilusiones de lado Annie.

Bien, debo dormir. Y aunque suene loco, porque son las dos de la mañana, debo ir a la universidad en cuatro horas como la responsable chica que soy.

El deber me llama pero el sueño me domina, el peor dilema estudiantil. Iugh.

...

Las clases en la universidad me habían pasado desapercibidas. Mi poder concentación estaba debilitado. Lo único que rondaba en mi mente cuando veía a los profesores mover la boca, era número uno comida, porque casi siempre moría de hambre; y número dos, Landon besando a la rubia. 

Primera nota mental: Debo parar de pensar en Landon.

Me encontraba haciendo la fila para pedir un emparedado de queso. No era pizza pero al menos significaba una simulación de esta y con eso me bastaba.

Divisé a Mark en el inicio de la fila, al instante captó mi mirada. Sonreí sin ganas, porque él se estaba comportando demasiado atento conmigo y yo simplemente no podía tratarlo de la misma manera. Es decir, algunas veces pensaba que si era muy amable con él confundiría nuestra amistad con algo más.

 —¡Hey Ann!  —me llamó, alzando una mano para que caminara hacia él.

—Perderé mi turno  —hable sobre la gente.

Mark siguió insistiendo.

No tenía otra opción, así que avancé hacia él, notando como su sonrisa se ampliaba en cada paso que daba.

 —¿Qué deseas comer? Yo invito —habló.

Negué con la cabeza  —No te preocupes. Solo comeré algo ligero, tengo clase en veinte minutos.

 —Veinte minutos son suficientes para mí. Vamos, yo invito  —inclino la cabeza hacia un lado— Di que sí, por favor.

Lo pensé por unos segundos.

Bueno, un simple emparedado no significa compromiso de por vida.

¿O sí?

 —De acuerdo  —respondí.

Mark convirtió su mano en un puño e hizo una seña simulando haber ganado un trofeo. Sonreí para mis adentros, porque yo tenía muy en claro mis sentimientos.

 —Dos pizzas por favor  —lo oí pedir. Dirigió su mirada hacia mí—  ¿Qué quieres de tomar?.

Abrí los ojos como platos.

 —¿Cómo supiste que quería una pizza?  —porque en definitiva Mark y yo no teníamos una comunicación telepática.

—Diana me comentó que te encantaban las pizzas —pronunció nervioso, mientras rascaba su nuca.

Achiqué los ojos. Diana nunca cambiaría y eso era algo con lo que debía aprender a vivir.

 —¿Estás molesta? —me preguntó, al notar que mi rostro se había tornado serio— No culpes a Diana por hablarme bien de ti, ella solo quiere ayudar.

 —¿Ayudar a qué? 

Bueno, tal vez estaba siendo cruel. Pero... ¿Qué sería peor? ¿Ilusionarlo falsamente o mostrarle mi desinterés?

 —Annie, tal vez no he sido muy claro pero estoy tratando de ser tu amigo. Hay algo en ti que me atrae.

Alerta Annie. Él quiere confesarte su amor.

 —Tranquilo  —hablé, tratando de cambiarle la dirección al tema —yo también quiero tu amistad. No estoy enfadada con Diana ni mucho menos contigo. Solo es que ... me molesta que las personas hablen a mis espaldas.

Mark asintió, luego su mirada se clavó en el suelo. El sentimiento de culpa me embargó, no deseaba lastimarlo, pero un romance era imposible. A menos que... sea  con la persona que mis ojos están captando en estos momentos.

Landon se acercaba con su típica pose de chico popular  hacia la sección de comida. No lo había visto en todo el día, así que no pude evitar sentirme bien con su presencia. Se detuvo en el área de postres mientras ojeaba con verdadera concentración cada uno de estos. Me pregunté cuál sería su favorito y me topé con la terrible idea de que seguía sin conocer absolutamente nada de él.

Hoy lucía más atractivo de lo normal. Aunque, cada día su atractivo iba en aumento, y eso era algo que me molestaba demasiado. Yo iba a cargar con una enorme barriga; y a eso le sumaba que pronto usaría ropa holgada, en cambio él seguiría manteniendo su cuerpo atlético. Es injusto.

—Parece que tienes mucha hambre  —comentó Mark, desactivando mis pensamientos.

Me di cuenta que su comentario se debía a que estaba mordiendo mi labio inferior de una manera brusca.

Eres una gran pervertida Annie Vega.

—E-eh pues sí. Diana no mintió, la pizza es mi preferida  —sonreí con las mejillas encendidas.

Mark y yo nos dirigimos a las mesas, al llegar me di con la terrible sorpresa de que Michi y Diana no se encontraban en esta. Tenía muy en claro que era un plan maquiavélico de mi rubia amiga. Dirigí los ojos hacia Landon mientras me sentaba en una de las sillas, este se encontraba cerca de la caja registradora. Cuando giró, su mirada se cruzó con la mía. Por el rabillo del ojo noté el rostro asustado de Mark, pero no me importó, ya que seguí manteniendo la  mirada firme en Landon quien imitó mi acción. Sus ojos vagaron desde mi acompañante hacia mí repetidas veces. Al principio creí que se abalanzaría contra Mark para dejarle un ojo morado pero, como siempre, me equivoqué. Finalmente Landon tomó un gran respiro y luego salió de la cafetería.

 —Eso fue...  —Mark agitó el cuello de su camisa— intimidante. Landon está loco, por un momento creí que volvería a golpearme.

Me enderecé en el asiento con una sensación de vació en mi pecho.

 —Ya no lo volverá a hacer  —dije mirando mi provocadora pizza (que ahora ya no se hacía tan apetitosa como antes).

 —Eso es algo bueno. Parece que ya está perdiendo la obsesión contigo, debes sentirte libre Annie.

Mark no me resultó agradable en estos momentos.

Acabo de percatarme que soy una completa contradicción. Cuando yo me alejo, todo está bien; pero cuando él se aleja, todo está mal. ¿Quién me entiende? Ni siquiera yo lo hago.

...

 —¡Annie espera!  —gritó Michi a mis espaldas.

Al culminar mi ultima clase había decidido salir rápidamente del salón. Justo ahora me dirigía a casa (si se le podía llamar así) ya que mi tiempo era reducido en las tardes.

 —¿Olvidé algo?  —pregunté angustiada.

—No, no. Solo quería acompañarte a casa  —sus ojos me examinaron esperando mi respuesta.

—E-Eh. En realidad debo ir a otro lado —contesté nerviosa— no es necesario Michi.

Ella cruzó los brazos con un gesto severo. Toda su actitud me gritaba que estaba a punto de reñirme.

 —¿Me estás mintiendo Annie? – iba a negarlo todo, pero ella me detuvo- sé que estás ocultando algo. No puedo ayudarte si sigues con las mentiras.

 —Sabes que no soy buena en eso.

 —Y porque lo sé, necesito que me digas la verdad. Ayer fui a tu casa y encontré a tu madre con los ojos enrojecidos. Ella trató de ocultarlo pero yo sé que ha ocurrido algo malo. Me confesó que ya no vives con ellos. ¿Por qué Annie? ¿Qué ocurre?

Me congelé.

No me esperaba esto y menos hoy.

 —Es complicado- me limité a decir- no puedo hablar ahora.

 —Somos amigas desde hace muchos años. Puedes confiar en mí, sabes que no soy de las personas que juzgan a los demás. Tienes mi apoyo incondicional en todo Annie.

Oh no. Las lágrimas estaban a punto de regresar.

A este paso moriría deshidratada.

 —Necesito un abrazo justo ahora —pronuncié con la voz quebrada. Michi se acercó un paso y me estrechó con sus delgados brazos. Debo decir que se sintió reconfortarle sentir que alguien se preocupaba por mí . Tal vez exageraba, pero el abrazo de Michi llegó caído del cielo.

Sollocé fuerte sobre su hombro.

 —No cargues todos los problemas sobre ti Annie. Algunas veces es bueno que las personas que te quieren ayuden un poco a sostenerlos.

Seguí sollozando por un largo momento. Estaba arruinando el suéter de mi amiga, pero a ella no parecía importarle.

 —Michi yo... - hablé, casi como un susurro.

Tragué saliva y sorbí mi nariz. Mi amiga iba a ser la primera persona que escuchara la noticia por mis propios labios.

 —Tranquila, si no deseas hacerlo ...

Me separé de ella para luego limpiar mis lágrimas  —¡No! – Chillé- necesito hablar, ya no soporto más. Yo... —tomé una gran bocanada de aire sintiendo como mi corazón palpitaba muy fuerte—  estoy embarazada.

El rostro de Michi se desencajó completamente. Estaba segura que de todas las cosas que se imaginó en ninguna aparecía la palabra embarazo.

 —¡¿Qué?! Espera... ¡¿Qué?! – Llevó una mano a su pecho para luego dar miles de vueltas sobre su lugar, siempre lo hacía cuando estaba preocupada  —¿Estás bromeando? No puedes estar embrazada porque tú eres ...

Se detuvo en seco y me observó fijamente.

 —No, no lo soy – pronuncié.

 —¡¿Cómo?! ¡¿Cuándo?! Y sobre todo ¡¿Con quién?!

 —Dijiste que no me juzgarías.

—No lo haré  —respondió de inmediato— pero cómo quieres que reaccione si la más inocente de mis amigas confiesa que está embarazada. Es decir, tú y yo hicimos una promesa Annie.

—Lo sé – chillé-  últimamente nada de lo que planeo está funcionando.

 —Bien  —respiró profundo. Noté que trababa de tranquilizarse para mantenerse a raya y no reñirme —¿Quién es el padre? ... espera  —levantó una mano —no me digas que Emilio, porque tú y él eran buenos amigos...

 —No- la detuve.

Su boca se transformó en una gran O  —¡Oh mi Dios! ¡Oh mi Dios! – la oí gritar. Por un momento creí que había descubierto el nombre—  ¡No me digas que Mark!

—¡No! – Grité- comprendo que no lo tengas en tu lista, en realidad tampoco estaba en la mía.

—La verdad no tengo muchos – ella hablaba muy rápido, lucía nerviosa— consideraría a ...- cortó la oración- olvídalo es imposible.

 —¿A quién? – pregunté, con el corazón acelerado.

 —A Landon – soltó una risa burlona —Estoy segura que el padre de tu bebé es un chico que conociste en algún taller o en biblioteca. ¿Verdad?

Incorrecto.

No respondí y mi silencio hablaba más que mil palabras.

 —¡SANTO CIELO! – Michi buscó un lugar en donde sentarse y al no encontrarlo se desplomó en el suelo —¡¿LANDON COOPER?! ¿ESTÁS HABLANDO DEL MISMO LANDON QUE YO?!

 —¡Podrías publicarlo en todas tus redes sociales! – gruñí.

 —¡NO ME LO CREO! ¡POR TODOS LOS CIELOS! ¡¿LANDON?!

Fruncí el ceño.

Después de un largo tiempo ya había perdido la cuenta de las veces en que Michi había repetido el mismo nombre. Al parecer su cerebro no podía procesar que Landon y yo tendríamos un hijo. No la culpo, estoy en la misma situación.

Finalmente respiró profundo y se levantó del suelo.  —Ya recobré la compostura —dijo sacudiendo su trasero— Te daré las primeras palabras de aliento para tu situación —aclaró la garganta como si estuviera a punto de decirme el mejor discurso del año— ¡Tu bebé tiene unos magníficos genes!

Rodé los ojos.

...

 —¡Pizza con doble queso! —oí gritar a Landon, mientras yo me mantenía en mi tediosa situación detrás del mostrador.

—La cuenta para la mesa número tres —reaccioné después de unos segundos (con un rostro que no hubiera deseado tener) cuando me percaté que sus palabras iban hacia mí.

Asentí.

Me dirigí hacia mesa y al instante capté la imagen de la rubia teñida que besó a Landon ayer.

Suripanta y mil veces suripanta. ¿Es que acaso pretendía vivir aquí?

Landon atendía otra mesa conformada por una pareja de esposos, así que se encontraba desconectado de la situación. Traté de darle la mejor de mis sonrisas al acércame, ya que mi trabajo estaba en juego.

 —Buenas tardes. Aquí está su cuenta  —dejé el trozo de papel sobre la mesa.

La rubia me miró de pies a cabeza.

 —Sí, sí. Obstruyes mi vista – hizo una seña para que me moviera.

Una sonrisa malévola se formó en mi rostro.

 —Veo que está interesada en nuestro camarero  —comenté.

Ella subió una ceja y luego acomodó su cabello.

 —Sí, y no sé qué  hace un chico como él en un lugar como este. Supongo que es una estrategia de la pizzería el ser atendida por chicos sexys. Y en definitiva funciona, pienso venir siempre hasta que ese bombón caiga rendido a mis pies.

No sé porqué no le había arrancado las extensiones a estas alturas.

Porque tú eres una chica civilizada Annie.

 —No está disponible – hablé.

La rubia juntó las cejas y luego torció la boca  —Querida, esa es tu condición. Pero es obvio que yo sí puedo conquistarlo.

¡Al diablo la civilización! Mataré a esta suripanta.

Contrólate. Contrólate.

 —Querida clienta se le informa que ese camarero no está disponible porque es gay.

La tipa abrió la boca en una gran O. Al instante noté como todas sus viles intensiones se iban desinflando como un globo.

 —Oh, ahora todo tiene sentido- habló con un toque de tristeza – no estaba perdiendo mis encantos, después de todo, nadie rechazaría una invitación mía. Era obvio, tenía que ser gay.

La rubia me dio una sonrisa forzada, pagó su cuenta y salió rápidamente del local.

En todo el transcurso de la jornada mi menté manipuló la idea de Landon rechazando su invitación . Eso significaba que él estaba cambiando ¿Verdad? Porque en definitiva el Landon que yo conocía habría aceptado sin dudar una salida con una mujer como esa.

Lo observé atender los pedidos con una mirada esperanzada. Quizás era verdad y no me había engañado con Carly. Aunque... la imagen en mi mente seguía repitiéndose. Era imposible creer en su inocencia, yo misma lo había visto sobre esa cama .

Cuando noté que aún no me necesitaban, me dirigí hacia el baño. Tomé mi bolso y me encerré por un momento. Saqué el delicado collar de la cajita rosada y lo sostuve entre mis dedos. Contemplé  por uno segundos la joya que Landon me había regalado unos días atrás y me permití recordar la última vez que lo había besado. Ese era un recuerdo que me iba a acompañar siempre, aunque tratara de bloquearlo.

De repente escuché unos gritos. Diferencié la voz de Landon pero también una voz femenina. Al principio creí que podía ser la rubia insistiendo otra vez, pero cuando me decidí a salir, mis ojos se chocaron con una cabellera rubia que reconocí al instante. Era Carly.

 —¡Te dije que aquí no!  —gritó Landon.

 —Me llamaste ayer y creí que necesitabas verme – habló, tomando el cuello de su camisa de manera coqueta.

Esta situación me parecía repugnante. Pero como era masoquista continué mirándolos.

 —Sí, pero Annie está aquí. Este no es un buen lugar para que hablemos. ¿Cómo supiste dónde trabajaba?

 —Te seguí – soltó una sonrisa chillona.

 —Muy graciosa. Debes irte Carly, no es bueno que estés en la pizzería.

 —¿Podrías ir a mi departamento? A Emilio no le molestará que estemos un rato, él casi no está en casa. Me deja sola todo el tiempo.

Por la forma en cómo hablaban podía notar que se seguían comunicando.

Landon bajó la voz. No pude escuchar lo que decían, así que tomé las pocas fuerzas que me quedaban y regresé a mi puesto en el mostrador. Ambos me miraron con gestos de sorpresa.

 —¡Hey Landon! – Habló Peter- este no es momento para que hables con tu novia. Regresa a tu trabajo.

—Lo siento Pet, ella ya se iba. Y no es mi novia – me dedicó una mirada.

Carly tenía la misma sonrisa de aquel día. Su mirada destellaba superioridad, como si acabara de ganarme el primer puesto en un concurso. Como si Landon fuera un trofeo.

 —¿Nos vemos esta noche? – preguntó.

 —Dije que luego hablamos Carly, estoy trabajando.

Pasó los dedos por la barbilla de Landon, este tomó su mano y la quitó al instante. Pero... no lo hizo con el desdén que necesitaba ver, al contrario, parecía que trataba de ser amable con ella y eso era algo que me estaba consumiendo de ira por dentro.

 —Tomaré eso como un sí – pronunció para luego llevar dos dedos a sus labios y mandar un beso en el aire.

Debo resaltar que me pasé contando los minutos para largarme e irme a casa. Pero algo dentro de mí necesitaba desfogar mi ira.

Necesitaba lastimar a Landon.

Cómo pudo haber permitido que Carly se le acercara cuando él mismo repetía a cada instante que ella le había tendido una trampa. ¿Es que acaso era idiota? ¿O simplemente era un vil mentiroso?

Cuando el local se encontraba cerrado y Landon se dirigía a su jeep no pude evitar sentirme enferma. Él no había intentado ni una sola vez explicarme las cosas.

 —¿Vas a ignorarme siempre? – pregunté.

Giró y caminó unos pasos hacia mí. Esta vez no corté la distancia porque lo que haría necesitaba cercanía.

 —Jamás te ignoro Annie. Todo el tiempo tengo los ojos puestos en ti. El problema es que nuestras miradas no coinciden.

 —En realidad no coincidimos en nada.

Se acercó otro paso más.

 —Porque tú buscas alguien similar a ti. Y déjame decirte que jamás encontrarás alguien que se asemeje a tu personalidad, gustos o sueños ¿Y sabes por qué? ¡Todos somos diferentes Vega! No todos buscamos ser perfectos como tú, algunos estamos conformes con la imperfección, como yo.

 —¡No busco alguien perfecto! ¡Busco alguien real! ¡Y por real me refiero a sincero! Tú estás muy lejos de eso.

Levantó las manos hacia arriba como diciendo "Aquí vamos otra vez".

 —Parece que tengo todos los defectos del mundo – rió, con un toque de ironía.

 —No, el problema es que tus defectos se hacen más presentes por las estupideces que haces día a día. Por ejemplo ...  —me atreví a decirlo— ¡Carly! ¡No sabes lo incómodo que fue para mí tener que verla en el trabajo! Ya es suficiente contigo ¿Por qué me haces la vida imposible?

Me tomó de los hombros y el contacto con su piel me hizo estremecer  al instante.

 —Annie no sabes la cantidad de momentos que nos estamos perdiendo por tu terquedad y por no confiar en mí –  susurró.

— Y tú no sabes lo fácil que harías mi vida si te alejaras por completo de mí —mentirosa y mil veces mentirosa.

Quitó sus manos de mis hombros bruscamente y alborotó su castaño cabello.

 —¡De acuerdo! ¡Tú me reclamas por Carly! ¡Yo puedo reclamarte por ese imbécil de Mark! Hoy te vi en la cafetería con él.

 —Mark y yo somos amigos. Carly y tú son amantes.

 —¡No somos amantes maldita sea! ¡Ella me drogó!– gritó, haciendo que los transeúntes nos miraran como bichos raros.

 —Toma esto – saqué del bolso la caja rosada y extendí mi mano hacia él para entregársela—  no necesito nada que me recuerde a ti. Está visto que eres un idiota  —él tomó el collar como si acabara de recibir un acta de divorcio.

El rostro desencajado de Landon pasó de tristeza a furia en cuestión de segundos.

 —¡Bien Annie! ¡¿Quieres que me aleje de ti para siempre?! ¡Lo haré! ¡Trato de hacer bien las cosas, pero tal parece que tú solo gustas hablarme para hacer que me sienta más miserable!

Caminó a paso firme hasta su jeep, subió en el asiento y cerró la puerta abruptamente. Lo vi manejar de una forma brusca  y luego desaparecerse entre los demás automóviles.

Me quedé inmóvil por unos momentos procesando que este era un final para nuestra historia, probablemente Landon no regresaría a la pizzería y yo continuaría mi vida con mi bebé. 

Ni siquiera tuve tiempo de soltar unas cuantas lágrimas porque el rechine de unas llantas y luego el sonido de un fuerte impacto se escuchó en toda la calle. Tragué saliva ante el repentino susto; de repente vi como algunas personas salían de sus casas con gestos de preocupación y curiosidad. Mi corazón se detuvo ante la terrible de idea que cruzó mi mente.

Sin pensarlo dos veces corrí calles abajo, sintiendo como la respiración me faltaba en cada movimiento. Choqué con varias personas que se dirigían en la misma dirección abriéndome paso entre los curiosos. Me detuve en seco cuando vi un carro de color blanco con un pronunciado hundimiento en la parte delantera, pero esa no era la peor parte...

El jeep negro estaba ahí, colocado de una forma lateral. Corrí nuevamente sintiendo mis piernas pesadas por los nervios. Tenía que verlo, tenía que saber que estaba bien.

"¡Muévanse!" vociferé, olvidando todos mis modales.

Lo primero que capté fue que la luna del parabrisas tenía una enorme rajadura en el centro. Me acerqué un poco más empujando a las personas que se habían reunido en medio de este. Un hombre se encontraba llamando a la ambulancia y otros solo dedicaban a fisgonear . No dudé en seguir avanzando y cuando por fin estuve cerca la imagen era desgarradora.

Landon tenía la frente ensangrentada y se encontraba inconsciente.

*******************************

Hola chicas son exactamente las 1:11 am xD Es lo lindo de los viernes que puedes acostarte super tarde ** #SleepLover o cómo sea pero YO AMO DORMIR T.T.

MENCIONES DE HOY : SAMISA0402 MUCHAS GRACIAS por leerme, comentar y todo eso que hace feliz a un escritor en Wattpad **

Y aunque no me lo pidieron mencionaré a Vidriana07torres Iloveyoufoiall curledkingharry porque han tenido comentarios y mensajes que me han gustado mucho. Graciaaaaaas :D

TODAVÍA PUEDEN SEGUIR HACIENDO LAS PREGUNTAS, YA PRONTO PUBLICARÉ LAS QUE ME HICIERON HACE UN TIEMPO. PERO NO LAS HAGAN AQUÍ SINO EN EL TEMA  ENTREVISTA #WSWAV (está en esta cuenta).

Multimedia: Annie Vega.

Blss 



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