Durante esta nueva etapa de mi vida pasaron cosas qué me han marcado.
Muchos viajes y muchas personas nuevas aparecieron en mi vida.
También maduré mucho y me gradué.
Nunca me imaginé llegar a conseguir algo, por muy pequeño qué fuera.
No he tenido mejor recuerdo qué ver llorar a mi madre al graduarme o volver a pasar momentos junto a ella.
Estoy orgullosa de ser su hija ( te quiero).
Una ciudad qué me enamoró fue Madrid, qué ciudad tan bonita.Yo era una chica de pueblo y ver a tantas personas era algo fascinante.
Nunca olvidaré el cielo de Madrid.Un cielo azul repleto de nubes y yo las miraba desde abajo.Por un momento quise subirme a las nubes de algodón e ir a buscar a la persona por la cuál me daría igual caerme ( te amo).
Mis padres paseaban agarrados de la mano por las calles de Madrid; era envidiable, tal vez un día yo volvería a Madrid ( de su mano).
Amaba los trenes y hoy en día los sigo amando.Pueden llevarte muy lejos o pueden llevarte a personas cerca, pero en mi caso ningún tren me llevaría a mi destino ( a él).
Pedí volver un día.
Y de algo estaba segura.
Pasara lo qué pasara, yo volvería a Madrid, sola seguramente.Pero hay algo que tenía claro, sólo por él perdería el último tren a casa.
Porque él era mi hogar.
Él y nadie más.