Tocaron el suelo vestidos de negro, Rachel con el pelo recogido, un poco acalorada, la gente de TH salió de las calles para no levantar sospechas
—Mantente alerta—Susurro Tom
Se ajustaba el arma entre algunas balas. En efecto el nuevo edificio de Davidwache estaba mucho más asegurado, para ser de noche aún había gente, las luces estaban encendidas
—Aborta la misión si algo sale mal y corres a la camioneta, yo me encargaré de traer la pólvora—
—¿Crees que no soy capaz de poder traer la pólvora por mi cuenta?—
—Tengo más experiencia que tú muñeca, así que sé cómo funciona esto. Es nuestra única oportunidad, tenemos que salir con la pólvora si o si, no hay segundas oportunidades—
—Lo mismo digo. No hay segundas oportunidades—
Rachel se colocó el gorro negro, tomó su rumbo para empezar con el plan. Tenía su navaja debajo de la manga, una navaja era mucho menos ruidosa que una pistola. Retrocedió cuando un conserje estaba sacando la basura, antes de que la puerta de emergencia se cerrará ella entró en silencio. El nuevo edificio era mucho más amplio, no contaba que aún había gente trabajando a esta hora, seguramente estaban doblando el turno, se preguntaba si en una parte del edificio se encontraba Koen. Al ver que aún había movimiento bajó al cuarto de tecnología, decidió darle un apagón al lugar y darle ventaja a Tom de entrar.
Tom apagó su cigarrillo al ver cómo Davidwache sufría de un apagón suponía que era cosa de Rachel, por lo que tomó su arma y entró sigilosamente, podía escuchar a los guardas dando órdenes hacia la gente que aún se encontraba laborando, a pesar de que ahora había mucho más movimiento no le fue difícil evadirla. Entre la oscuridad intentaba llegar al cuarto de armamento, ansioso por chulear las armas. Mientras que Rachel intentaba hacer lo mismo, llegar primero que Tom y sacar más pólvora de los acordado para el plan que tenía contra ellos, para su suerte al dar vuelta en el pasillo se encontró con Koen, quien tenía una linterna y no dudo en enfocar la luz al rostro de Rachel
—Rach...—
Un silencio ansioso se inundó en el pasillo, ambos se quedaron mirando entre sí sin mover un músculo. Rachel al darse cuenta que Koen portaba con un arma dormilona se dió la vuelta para correr e irse entre otros pasillos
—¡RACHEL VEN ACÁ!—
Koen tomó su arma dispuesto a usarla contra Rachel, tomó su radio y rápidamente ordenó que las puertas se cerraran. Por otro lado, cuando Tom escuchó las órdenes por la radio de un guardia supo que Koen ya se había percatado de Rachel pero no de él, por lo que entonces no perdió el tiempo para seguir con el plan. Se apresuró y cuando llegó a la habitación de armamentos, mató al guardia de un navajazo, rechino los dientes cuando noto que la puerta estaba cerrada con doblé llave, empezó a buscar ante el guardia que había matado pero este no tenía nada, no podía disparar la cerradura porque era una con demasiado protección, de echo si lo hacía estaba seguro de que la bala no le haría nada, y solamente sería un desperdicio. Bufo con coraje. Se pasó la lengua por la boca y sin importarle se paró frente al cristal polarizado, apuntó hacia ella, sabía que tener silenciador no serviría de mucho ya que el cristal haría un estallo de ruido cuando la bala atravesará.
—¡No intentes escapar!—
La bala dormilona salió de la boquilla logrando encarnarse directamente al pie derecho de Rachel. Ella se quejo y cayó al suelo, el pie empezó a sentirlo entumecido
—Carajo, carajo—
Se golpeaba la pierna para intentar hacerlo reaccionar pero al contrario dejo de sentirla como si aquella bala fuese un medicamento de anestesia
—Mira lo que has logrado—Koen se paró frente a ella
Ella rápidamente sacó su arma y apuntó hacia Koen
—Estoy seguro que no te atreverías, tú no eres igual que ellos Rachel—
—Te dije que lo haría si me estorbabas—Decía mientras se arrastraba hacia atrás—No me obligues hacerlo Koen—
—¿Has venido sola?—
—¿Ves a alguien más aquí?—
Y de repente se dejó oír el sonido de los cristales rotos, una fuerte alarma y una luz roja empezaron a ser presentes en todo el edificio
—¿Con quién has venido?¿Qué haces aquí Rachel?¿Porque haces esto?—
—¿Estás cuestionandome?—
Koen se quedó en silencio y a su misma vez sacaba las esposas, Rachel lo miró con seriedad, por suerte solo tenía una pierna dormida, tenía ventaja de correr con una sola, no lo había hecho pero siempre hay una primera vez
—No voy a ir a la cárcel Koen, al menos no ahora—
—Tu obsesión con la venganza te ha cegado. Acaso no ves la realidad de las ¿Cosas? Entre más homicidios cometas más años de cárcel tendrás—
—Ese es mi problema—
—No voy a dejar que te pudras más la vida. Reacciona Rachel—
—Estás echando todo a perder Koen—
Antes de que Rachel pudiera meterle un tiro en la cabeza, Koen cayó al suelo por un golpe, el oficial cayó en el suelo desmayado dejando ver el culpable
—¿Te echo una mano?—
Rachel sonrió cuando pudo ver con claridad el rostro de Marlon vestido de un oficial
—¿Estás loco? Hay gente de TH rodeando la zona pudieron haberte visto—
—Tengo mis propios trucos—.—¿Puedes levantarte?—
—Si, pero no correr, no siento la pierna, creo que me anestesio o algo asi—
Marlon se acoplo a ella, la tomó de la cintura para ayudarla a ponerse de pie
—¿Este era tu plan para conseguir que el local arda?—
—Tom viene conmigo, es un plan de ellos, pero creí que podía robarme un poco también—
—Hagamos esto—Dijo Marlon—Los refuerzos no tardan en llegar, en cuanto me enfrente con Tom tomas la pólvora y escapas con ella—
—Es peligroso que te enfrentes con el, Marlon—
—Y lo que has planeado también, así que hazme caso—
Ella asintió. Marlon tomó rumbo mientras Rachel intentaba recuperar la movilidad de la pierna. Cuando Marlon llegó a la habitación de armamento apenas pudo alcanzar a Tom, estaba cargado por cuatro maletines, dos de pólvora y las otras dos de armas. Tom no lo reconoció pues Marlon se había cubierto el rostro, pero lo que si sabía es que este no era un guardia de Davidwache más bien era alguien que se había metido a joder el plan
—¿Tu quien eres?—Preguntó Tom al verlo en medio de la puerta
Marlon no contestó, para evitar alguna sospecha. El castaño camino a él obligando a Tom a dejar las maletas a un lado. Tom sonrió juguetón cuando su oponente sacó una navaja
—Al menos harás las cosas más divertidas—
Tom también sacó su propia navaja, hacía tiempo que no sé enfrentaba con alguien a navajazos, era como un enfrentamiento a la antigua, recordaba que estos enfrentamientos los practicaba la comarca. Al primer movimiento que su oponente dió sospechoso de quién se trataba, el enfrentamiento empezó en cuestión de segundos, el desorden que estaban causando en la habitación era catastrófico. Cada oficial que intentaba llegar a la habitaciones caía en manos de Rachel, quien se había quedado cuidando a que la mayoría de los oficiales bajarán y darle un navajazo y no echarán a perder el plan, pero no contaba con que Koen volvería a despertar tras ese golpe en la nunca. Cuando esté apareció pudo esquivar el navajazo de Rachel, la hizo retroceder dejando caer la navaja al suelo
—Mueves un músculo, te juro Rachel que esto termina aquí—
—No puedes matarme, eres un oficial no un asesino—
—¿Quien dice que voy a matarte?—
Levantó nuevamente el arma dormilona, antes de que Koen pudiera jalar el gatillo Rachel lo enfrentó, lo golpeó mientras Koen intentaba esquivarlos, y a su vez lograr esposar a Rachel, no podía matarla después de todo Koen se había enamorado de ella. Mientras ella estaba siendo acorralada por Koen. Tom y Marlon se enfrentaban a navajazos
—¡Te dije que no voy a ir ala cárcel—Estaba apunto de rendirse cuando Koen había logrado esposar una de sus manos—¡Suéltame!¡No puedo ir a la cárcel Koen!¡No aún!¡Ellos necesitan pagar!—
—Basta Rachel, deja que Davidwache se encargue, de lo que sea que estés buscando nosotros vamos a detener a todos, te lo prometo Rach, ¡estás arruinando tu vida!—
Cuando Koen estaba estaba por esposar las dos manos, ella tomó la decisión de terminar con esto, tomó su pistola y atravesó una bala en el abdomen de Koen, este se quedó inmóvil al recibirla, sus pupilas se enfocaron en la mirada enfermiza de Rachel, y cayó con lentitud junto a Rachel al suelo, ella se llenó las manos de sangre, y en un par de segundos entró a la habitación de armamento agitada en dónde Tom la vio con las manos llenas de sangre, una distracción que Marlon tomó como ventaja, le enterró la navaja en el abdomen y Rachel se sorprendió por ello
—¡Rachel!—Grito Tom—Vete, toma las maletas y vete. ¡¡¡VETE RACHEL!!!—
No hizo caso, se quedó paralizada al ver cómo Marlon se había atrevido, aún más cuando parecía que para Tom solo había sido un simple rasguño, pudo ver con sus propios ojos como Tom se quitaba la cuchilla de un tirón y aún parecía estar con fuerzas
—¡¡¡VETEEEEEE!!!—
Ella tomó las maletas con el pie aún dormido empezó a correr a duras penas, cuando Rachel desapareció del lugar Tom volvió a mantenerse firme para matar a su oponente, con el abdomen apuñalado tuvo fuerzas para tener otra revancha, está vez logró descubrirle el rostro
—¿Marlon?—
No dijo nada, retrocedió, se echó a atrás y corrió
—¡¡¡Marlon!!!—Llamo Tom
Intento correr a él pero la herida empezó a empeorar, su cuerpo cayó al suelo sin saber más
｡｡｡
Cuando despertó al día siguiente pudo reconocer a sus amigos en la habitación, esperando a que terminara de abrir los ojos. Cuando lo hizo Rachel no tardó en llegar, frunció el ceño al verle el rostro dañado, y con un vendaje sobre su brazos
—¿Ati que te paso?—
—Parece que estás bien para empezar a Refunfuñar—Dijo Rachel
—Rachel se enfrentó contra Marlon cuando fue por ti, te encontró inconsciente, gracias a nuestra gente pudieron sacarte de ese lugar—
—¿Y la pólvora?—
—Las tres maletas llegaron a salvo—
—¿Tres?—
—Si, hicieron un buen trabajo juntos, el doctor ha dicho que la navaja no llegó a ningún órgano así que no te preocupes por el reposo, disfrútalo que mañana estarás de nuevo—
—Ya...—Musito—¿Quien te hizo eso?—Indago Tom
—En la pelea con Marlon—
—¿Pueden dejarme con Rachel?—
Gustav, Georg y Bill se miraron entre si, asintieron en silencio y salieron de la habitación, mientras que Rachel se quedó frente a Tom
—¿Cómo sabías que era Marlon?—
—Ya te lo dijo Bill, fui por ti, él estaba allí—
—El se fue cuando le vi el rostro—
—Me lo encontré cuando regresaba por ti—
—¿Qué hay de la otra maleta?—
—¿Que maleta?—
—Eran cuatro Rachel—
—¿De verdad? Porque yo solo cargue con tres—
—Estoy seguro, yo mismo las equipe—
—Solo tome tres Tom, no sabía que había otra más—Mintió
Ambos se quedaron en silencio
—¿Ha muerto?—
—No, el cabrón me vio el rostro—
—¡¿Que?!—
—Lo jodi, lo se. ¿Cuál es el plan?—
—Golpéame—
—¡¿Que?!—Soltó Marlon—¿Estás de joda?—
—Llévate está maleta, está llena de pólvora, pero necesito que me golpees, finge que somos enemigos, no pueden descubrirnos. Voy a decirles que me he enfrentado contra ati—
Marlon no estaba contento con ese plan, pero Rachel tenía razón, así que cerró los ojos y empezó a golpearla, ella no metió manos ni se quejo
—Marlon sabe qué maté a Jadel, me odia y era de suponerse—Añadió Rachel ante el silencio
—Te dije que debías matarlo—.—¿Estás bien? Parecen golpes duros—
—Solo fue en el instante, estoy bien. En fin, recupérate—
Tom asintió, algo estaba mal, lo sentía, intentaba recordar y estaba seguro de que Rachel había salido con cuatro maletas. Pero por otro lado no entendía los golpes que tenía ella, era como si de verdad hubiese estado en un enfrentamiento de por vida.
Bill estaba en por salir de su oficina, se detuvo cuando Rachel cruzó por la sala y la veía salir una vez más de la mansión, también podía ver cómo uno de sus hombres salía detrás de ella cumpliendo sus órdenes. Ella no parecía darse cuenta, ya que Bill solía elegir a quien mandar precisamente para esas cosas. Más tarde subió a la habitación de Tom cuando uno de sus hombres le dijo que lo había visto cambiarse para salir
—¿Tu que haces?—
—Me marchó—
—¿A dónde?¿No has entendido que te apuñalaron ayer?—
—Si, y también entendí que no tocó ningún órgano, tranquilo solo es la piel—
Antes de responder el móvil de Bill empezó a sonar, el descolgó y se llevo el móvil tras la oreja
—¿Que?, Verifica bien, no puedes darme información falsa, toma una fotografía o yo que se —
Tom se quedó inmóvil ante la expresión de su gemelo, espero a que este colgará y cuando fue así, insistió por saber
—¿Que pasa?—
—He mandado a vigilar a Rachel—
—¿Y que?—
—No lose, han dicho que la vieron con Marlon pero eso es imposible—
—No estoy seguro—Añadió Tom
—¿Por qué?—
—Ayer empaque cuatro maletas pero solo han llegado tres—
—¿Que estás tratando de decir?—
—Que están juntos, pero los golpes que tiene Rachel me hacen dudar, justo iba averiguar algo, no se Bill esto me huele algo mal—
—Solo hay una forma de averiguarlo—
｡｡｡
—¿Te he golpeado duro?—Preguntó Marlon mientras entraba a la sala con un vaso de agua
—Estoy bien—
—¿Se lo han creído?—
—Si—
—¡Puf!—.—¿Cuál es el siguiente paso?—
—Que hagas explosivos, no quiero que la pólvora se desperdicie—
—¿Qué intentas hacer?—
—Erupción—
—¿No crees que te estás arriesgando?—
—Voy a quemar su puta mansión, voy a destruir todo lo que tienen. Bill va a suplicar no haberme conocido. Voy a empezar por dónde más le duele, voy a verlo llorar—
—¿Debería preocuparme por la forma en que lo dices?—Ella se quedó en silencio—Has sufrido tanto pequeña Rachhoe—Marlon se acercó y atrapó sus labios con suavidad
Ella evitó profundizar el beso, se levantó de inmediato, se terminó el vaso de agua y entonces se despidió de Marlon. La gente de TH ya no fue tras ella si no que esperaron hasta que desapareciera y de esta forma tomar a Marlon de bajada. Entraron por los escalones, tocaron el timbre y Marlon sin esperarselo abrió la puerta, uno de ellos rápidamente le metió un guarro por el abdomen, le cubrieron el rostro y entre dos hombres lo obligaron a subirse al auto, para cuando llegaron a la mansión lo acorralaron hasta ponerlo de rodillas frente a Bill, Tom, Gustav y Georg
—Marloncito—Añadió Tom
—¡Que te jodan!—Refunfuño cuando le descubrieron el rostro—¿Cuatro contra uno?.... Tenía que suponerlo. ¿Qué es lo que quieren?—
—La Comarca ya no existe y tú insistes en reconstruirla—Hablo Bill—¿Dónde está la maleta?
—¿De que mierda me están hablando?—
—Deja de hacerte el loco— Añadió Gustav
—Señor... La señorita Rachel ha llegado—
Bill asintió, se dió la vuelta con una sonrisa juguetona, mientras que Gustav, Georg y Tom se quedaron frente a él
—No puedes tener esa boquita todo el tiempo cerrada, en algún momento vas hablar—
—¡No sé de qué me hablas!—
—Creme Marlon, no querrás conocer a Tom molesto—Añadió Georg
Se dió la vuelta para seguir el paso de sus amigos, Marlon nuevamente fue cubierto, lo arrastraron hasta esperar nuevas órdenes. Mientras que Rachel salía de la cocina con un vaso de agua en los labios, se quedó en medio de la sala cuando Bill, Gustav, Georg y Tom la miraron sin disimulo esperando que hiciera o dijera algo
—¿No hay otra forma de joder?—Refunfuño Ella
—¿Te he dado el permiso de hablar?—Se quejó Bill—Dame tu arma—
—¿A qué viene esto?—
—¿Dónde estabas?—
—¿Ahora tengo que pedir permiso para salir?—
—Aquí las preguntas las hago yo—Refunfuñó Bill—¿Dónde estabas?—
—¿Te has levantado con el pie izquierdo?¿O porque tienes ganas de joder?—
Rachel le hizo frente, ni siquiera podía sentir miedo, al contrario sentía que está era la oportunidad para mandar todo a la mierda, la paciencia no era algo que solía cargar y en cualquier momento podía hacer erupción
—¿No bajas la mirada?¿Quien te ha dado el derecho de poder mirarme así?—
—¿Por qué no vas al grano ¿He? Y te dejas de tanto rollo—
—¿Que estabas haciendo con Marlon?—Soltó a Tom, poniéndose frente a Rachel—¿Intentan engañarnos?—
—No sé de qué me hablas—Mintió
—¿No sabes?—
—No—
Bastó con un leve movimiento para que uno de los polluelos entrará arrastrando a Marlon, ella supo de quién se trataba sin necesidad de que le descubrieran el rostro. Sintió el corazón acelerado al verlo, tenía una una pequeña esperanza de que no fuese él, pero en efecto era Marlon, Rachel lo disimuló muy bien, se mantuvo quieta, sin hacer un gesto
—Matalo—Tom le extendió la pistola a Rachel
—¿Que?—
—Matalo si no estás de su lado—
—¿De dónde coño estás sacando que yo estoy de su lado?¿La puñalada te hizo daño o que?—
—Si no estás de su lado entonces no tendrás problema en matarlo ¿O si?—
—Por supuesto que no—Fingió—¡No estoy de su lado!¡Cómo pueden pensar eso!¡Después de todo lo que echo por ustedes!—
—Te han visto con el—Soltó Bill con la expresión llena de seriedad—Matalo Rachel, hazme saber que puedo seguir confiando en ti—
—He echo todo para demostrar que estoy de tu lado—
—No es suficiente—
—Bill...—
Tenía la emociones acorraladas, no sabía si esto terminaría bien, la respuesta era clara, si no se atrevía a matar seguramente saldría muerta
—¿Por qué no quieres matarlo?—
—Ella está con Marlon—Añadió Georg
—¡No!. Ayer me arriesgue el cuello por sus porquerías. ¿No me has visto llegar a la mansión moribunda?. He salvado el culo de tus amigos y todavía piensas que ¿No estoy de tu lado?
—Haz lo que te digo Rachel—
—Después de esto se pueden ir al coño los cuatro—Dijo tomando la pistola
Con rabia la sujeto, se puso frente a Marlon, quien no había dicho ni una sola palabras gracias a la cinta que tenía en los labios, ni siquiera pretendía suplicar su vida, le dedicó una mirada tranquilizadora a Rachel, antes de que ella pudiera dar marcha atrás y enfrentarlos Marlon cerró los ojos esperando que la muerte llegara a tomar su mano, como si con aquello le susurrara que lo hiciera
—¿No vas hacerlo?—Musito Bill
—Por supuesto que no va hacerlo—Añadió Tom—Está de su lado—
Lo siento.... Marlon
Jalo el gatillo, el castaño cayó tras segundos, ningún dijo nada, de hecho estaban satisfechos, era una prueba suficiente para creerle, mientras que Rachel se mantuvo firme sin derramar una sola lágrima, pero sí una mirada de enfado, declarando una guerra contra ellos, soltó el arma al suelo, estaba por salir de la sala y subir los escalones, apenas dió unos cuantos pasos hasta que Bill le ordenó que no podía hacerlo todavía, algunos de los hombres se pusieron en medio de la escalera prohibiendole el paso
—No puedes subirte enojada Rachel—
—¿Y que?¿Ahora que?¿Quieres que te suplique para que confíes en mí? No seas estúpido que no lo voy hacer—
—Tenía que comprobar si podía seguir confiando en ti—
—¿Así?¿Y yo Bill?—Se acercó a ellos—¿Puedo confiar en ti?¿Puedo confiar en ustedes?—
Nadie parecía tener una respuesta, todos se quedaron en silencio. Al menos no tuvieron el descaro de mentir frente a ella, porque tal vez Rachel no aguantaría tanta hipocresía.