#4 Capítulo 4 Nick Furia
A altas horas de la noche, Washington, DC seguía siendo un centro de actividad con sus luces vibrantes.
Tras la evacuación de la Casa Blanca, la zona quedó bajo el control de los estados vecinos y de varias organizaciones criminales. Quizás todos querían experimentar lo bien que se sentía estar donde alguna vez residió el presidente. Decenas de pandillas establecieron su presencia y todos los días estallaban conflictos en las calles.
En esta tierra sin ley, todo orden había sido destrozado. Era un paraíso para los criminales y la cuna del mal. Innumerables adictos e inadaptados se reunieron aquí, lo que hizo que incluso Gotham City pareciera relativamente agradable.
Originalmente, el Presidente X tenía la intención de ejercer control sobre Washington, pero los Vengadores ocuparon constantemente su atención, impidiéndole enviar tropas para reprimir el caos. Cuando se dio cuenta, el área se había convertido en una zona negra inmanejable.
Austin condujo por aquí, sujetando el volante con una mano y con fuerza una pistola en la otra.
Para ser honesto, vivir en dos vidas puede haberle dado a Austin una gran confianza en sí mismo y haberle impedido tener tanto miedo como en su vida anterior. Sin embargo, el miedo y la tensión generados por el caos descontrolado eran algo que nunca disminuiría.
Al entrar a la ciudad, había cada vez más peatones en la calle, pero de un vistazo, Austin se sintió como si estuviera en el infierno. Algunas personas eran delgadas, otras estaban apoyadas contra la pared con los ojos en blanco y se podía ver basura y vómito por todas partes en la calle, lo que hizo que Austin frunciera profundamente el ceño.
Si no fuera por el hecho de que había demasiada gente aquí, Austin ni siquiera querría reducir la velocidad y simplemente pisaría el acelerador y se apresuraría.
La llegada de Austin llamó la atención de algunas personas, pero nadie hizo nada fuera de lo común. Esta no fue una buena noticia para Austin. Después de mirar a su alrededor, Austin giró el auto hacia un pequeño callejón.
Al abrir la puerta del auto, Austin rápidamente se puso el bolso en la espalda, luego abrió el maletero y dejó salir a Pietro.
"Vístete, este es un lugar que se come a la gente pero no escupe sus huesos. Necesito hacer algo y tú debes garantizar mi seguridad".
"No te preocupes, te protegeré". Pietro, que llevaba un sombrero de pescador para cubrir su cabello plateado y se cubrió con un abrigo largo, asintió seriamente hacia Austin y prometió.
"Hay muchos mutantes aquí. Con su cobertura, puedes usar tus habilidades sin atraer la atención del Presidente X. Pero aún así, ten cuidado y recuerda, tu velocidad no es invencible". Austin avisó a Quicksilver y luego los dos salieron del callejón.
Texas limita con México y es un lugar muy caótico. Además, está lejos de Nueva York, por lo que Austin debe preparar todo rápidamente. En esta ruta, no hay lugar más fácil que Washington, DC para conseguir petróleo y armas.
Después de abandonar el callejón y mezclarse con la multitud, Austin sintió el caos aquí de manera más intuitiva. El olor desagradable seguía entrando por su nariz, lo que hizo que Austin sintiera náuseas.
Al pasar por un bar, la multitud de repente empezó a agitarse. Se vio a dos hombres fuertes cargando a un hombre flaco y arrojándolo fuera del bar.
El hombre fue arrojado a la basura, pero rápidamente se levantó, tropezó hacia los dos hombres fuertes y oró con voz ronca. "Dame más, por favor. Conseguiré el dinero. Por favor".
Uno de los hombres fuertes se burló y dio un paso atrás como si estuviera disgustado con la suciedad en el cuerpo de la otra persona. Luego sacó una pistola y apuntó directamente a la frente del hombre.
"Wade, esta no es la primera vez. No deberías, absolutamente no deberías haberle robado a mi maestro".
"No, no fue mi intención. Te lo ruego." El hombre llamado Wade tembló y tartamudeó durante mucho tiempo, incapaz de decir una palabra.
"Hablar no funcionará, ¿eh? Jaja". El hombre corpulento, que ya no estaba interesado en jugar con él, casualmente apretó el gatillo, matando a Wade. Luego, como si recordara algo desagradable, le disparó a Wade unas cuantas veces más.
Desde el principio hasta el final, nadie de la multitud circundante se acercó a hablar, como si no tuvieran nada que ver con ellos, como si estuvieran viendo una película, lo que le recordó a Austin la escena de ejecución anterior de Hawkeye.
"¿Qué ocurre?" Pietro no pudo evitar preguntar.
"Nada." Austin sacudió la cabeza y caminó hacia la barra.
En un lugar como este, los bares son sin duda la mejor forma de recopilar inteligencia y, en comparación con el exterior, los bares son más seguros por dentro. Hay pandillas que los apoyan y nadie se atreverá a causar problemas en los bares.
Austin levantó los pasos y pasó por encima del cuerpo de Wade y caminó directamente hacia la barra. Dos hombres fuertes charlaban y reían en la puerta. No le prestaron mucha atención a Austin. Quizás para ellos, discutir qué mujeres en la calle son más sexys, sea más importante.
El interior del bar estaba oscuro y ruidoso, pero el ambiente era mucho más limpio que las calles exteriores. Al menos Austin no olió ningún olor desagradable.
"Una cara nueva, ¿qué puedo regalarte?" Justo cuando Austin estaba a punto de encontrar un asiento, una chica afroamericana se acercó con una brillante sonrisa en su rostro.
La niña tenía el pelo blanco y buena figura, pero el olor a perfume en su cuerpo hizo que Austin frunciera el ceño. "Busca un asiento tranquilo y trae dos copas de vino".
"Como quieras, querida, ven conmigo". La chica les lanzó un beso y luego llevó a Austin y Pietro a un rincón del bar. De hecho, este es uno de los pocos lugares tranquilos en el bar, pero al lado de la mesa de vino, todavía había un hombre tirado en el suelo cerca de la mesa, inseguro sobre la vida o la muerte.
"Las bebidas estarán aquí pronto. Por favor, tome asiento. ¿Necesita algún servicio especial adicional? Sólo 20 dólares". La niña se inclinó, mostrando su atractiva figura.
Austin no reaccionó ante las acciones de la niña, pero hizo una pregunta aparentemente irrelevante.
"¿Puedo darme tu nombre?"
La niña se quedó atónita por un momento, y luego pensó que era el pasatiempo de Austin y dijo con una sonrisa. "Puedes llamarme Ororo, por supuesto, también puedes darme un nombre."
"Olvídalo." Austin hizo un gesto con la mano. "Te llamaré si es necesario".
Al escuchar esto la niña se sintió un poco insatisfecha, pero no dijo nada más y se dio la vuelta y se fue sin decir una palabra.
En ese momento, Pietro a un lado no pudo evitar preguntar. "¿Conoces a esa chica?"
"La conozco hasta cierto punto, pero no es la persona que recuerdo. Al contrario, ha fortalecido mi determinación para nuestra misión". Austin tomó el vino que le sirvieron, vaciló un momento y lo volvió a dejar sobre la mesa.
Aunque Austin tiene mucha sed, después de pensar en el medio ambiente aquí, Austin no se atreve a beber ni comer lo que quiera. Nadie sabe si aquí se le agrega algo extraño al vino.
"Mencionaste preparar algunas cosas aquí. ¿Cómo vamos a hacerlo y a quién debemos buscar?" Pietro se mostró algo reacio al medio ambiente aquí. Miró a su alrededor y habló.
"No es necesario que miremos; alguien vendrá a nosotros", dijo Austin con calma.
De hecho, después de rechazar a varias mujeres que vinieron a solicitarlos, se acercó un hombre blanco tuerto.
Se sentó directamente frente a Austin y con rudeza tomó la copa de vino intacta frente a Austin y se la bebió de un trago.
"¿Qué pasa? ¿Estás aquí para ofrecerme servicios también?" Austin miró al hombre y dijo.
"Je, simplemente no quiero desperdiciar estas dos copas de vino". El tuerto sonrió. "Lo sé, estás aquí por negocios, dímelo, tal vez pueda ayudarte".
"¿Cómo estás seguro de que estoy aquí por negocios?"
"Muy simple. Venir aquí, no para entretenerse, sino estar sentado aquí tranquilamente, sin siquiera beber. Estoy seguro de que ustedes deben ser algunos peces gordos. Aunque he perdido un ojo, soy bastante bueno leyendo a la gente".
"Interesante, tienes razón, busquemos un lugar para charlar". Parecía que esta vez se había logrado la mitad del objetivo, Austin se levantó y siguió al hombre hasta la puerta trasera del bar.
En el camino, Austin también se enteró del nombre de este hombre, Nick Fury. Parecía que no tenía intención de mantener nada en secreto.
A diferencia del Nick Fury negro que era muy conocido por el público en su vida anterior, este Nick Fury es un hombre blanco. Asimismo, también es miembro de los Howling Commandos* establecidos por el Capitán América.
Sin embargo, lo desconcertante es que este tipo se vea reducido a tal situación.
(Fin del capítulo)...Continuará.
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(N/T: Comandos Aulladores del Capitán América: Los Comandos Aulladores son una unidad de combate de élite liderada por el Capitán América durante la Segunda Guerra Mundial. La unidad se formó en la Segunda Guerra Mundial bajo el mando del Capitán Samuel "Happy Sam" Sawyer. El Primer Ministro Winston Churchill le otorgó el rango. de comandos en las fuerzas armadas británicas).