Kaoru, alarmado por la situación, observó con horror cómo el entorno a su alrededor comenzaba a distorsionarse y desintegrarse. Grietas en el tejido del tiempo se abrían ante sus ojos, emitiendo destellos de energía caótica que amenazaban con arrastrarlo hacia su interior.
Kaoru: (Alarmado), ¡Esto es malo! ¡Ryuu ha desatado todo el poder del grimorio del tiempo!
Ryuu, con una sonrisa siniestra en el rostro, continuaba presionando su ventaja, aprovechando la desorientación de Kaoru causada por el caos temporal que se desataba a su alrededor.
Ryuu: ¿Qué pasa, Kaoru? ¿Te sientes abrumado por el poder del tiempo? Es comprensible, después de todo, no todos pueden lidiar con algo así.
Kaoru, luchando por mantener su compostura frente al abrumador poder de Ryuu, buscaba desesperadamente una solución para contrarrestar el caos temporal que lo rodeaba.
Kaoru: No puedo permitirme rendirme ahora. Tengo que encontrar una manera de detener esto antes de que sea demasiado tarde.
Con cada vez más esfuerzo, Kaoru intentaba controlar el poder de Aetheria y Luminaë para contrarrestar la devastación causada por el grimorio del tiempo. La batalla se intensificaba, con el destino de Kaoru y el equilibrio del tiempo en juego.
Kaoru, exhausto y al borde de la rendición, se encontraba tambaleándose frente a la abrumadora fuerza desatada por Ryuu y su grimorio del tiempo. Cada fibra de su ser clamaba por descanso, mientras luchaba por mantenerse en pie frente al caos temporal que lo rodeaba.
Kaoru: (Jadeante), No puedo... no puedo seguir así. Este poder... es demasiado...
En ese momento, una voz suave y reconfortante resonó en la mente de Kaoru, sacándolo momentáneamente de su desesperación.
Aetheria: (Con determinación), Kaoru, no es momento de rendirse. Aún no hemos agotado todas nuestras opciones.
Kaoru, sorprendido por la intervención de Aetheria, levantó la mirada con renovada determinación, inspirado por las palabras de su compañera de Grimorio.
Kaoru: (Con renovada determinación), ¿Qué quieres decir, Aetheria? ¿Qué más podemos hacer?
Aetheria: (Con firmeza), Recuerda la posesión, Kaoru. Es nuestra última esperanza. Podemos llevar tu poder al límite máximo y alcanzar el estado de Limit Break. Es hora de demostrar el verdadero poder que tienes.
Kaoru asintió, comprendiendo la sugerencia de Aetheria. Con un último esfuerzo, se preparó mentalmente para desatar todo su poder y alcanzar un nuevo nivel de fuerza.
Kaoru activó la posesión, desatando todo su poder y llevando su ser al límite máximo. Un aura brillante lo envolvió, mientras el poder de Aetheria fluía a través de él.
Con el poder de la posesión en su interior, Kaoru escuchó atentamente el plan propuesto por Aetheria. Con una determinación renovada y una clara comprensión de lo que debía hacer, se preparó para desatar su último ataque contra Ryuu.
Kaoru: Entiendo, Aetheria. Una vez libere el Limit Break, crearé una lanza con la materia primordial y la energía primordial. ¡Iré con todo hasta Ryuu y lo derrotaré!
Aetheria: (Con confianza), Eso es, Kaoru. Confío en ti. Ahora, desata todo tu poder.
Kaoru asintió con determinación y se concentró en liberar todo su poder, permitiendo que la energía de la posesión lo envolviera completamente. Con un destello de luz, su forma se transformó, adquiriendo un brillo dorado que irradiaba poder.
Kaoru: ¡Es hora de terminar con esto!
Kaoru extendió la mano y canalizó su energía en la creación de una lanza de materia primordial imbuida con la energía primordial. La lanza tomó forma rápidamente, brillando con una intensidad deslumbrante mientras Kaoru la sostenía firmemente en sus manos.
Kaoru: (Con firmeza), ¡Voy por ti, Ryuu!
Con el poder del Limit Break liberado, Kaoru se lanzó hacia adelante con la lanza en alto, preparado para enfrentarse a Ryuu. Sin embargo, algo extraordinario comenzó a suceder mientras avanzaba hacia su objetivo.
Aetheria observó con asombro cómo una energía adicional se liberaba junto con el poder del Grimorio de la Creación. Reconoció de inmediato esa energía como parte de la Luna Azul, una fuerza misteriosa que había estado presente durante el entrenamiento de Kaoru.
Con una comprensión repentina, Aetheria recordó cómo esa energía había afectado a Kaoru durante el entrenamiento, potenciando su habilidad y aumentando su poder. Ahora, esa misma energía estaba fusionándose con la energía primordial de la lanza que Kaoru había creado, transformándola en algo completamente nuevo y poderoso.
La lanza brillaba con una luz intensa y celestial, emanando una energía que parecía resonar con el poder de la Luna Azul. Aetheria se dio cuenta de que Kaoru había creado algo más que una simple arma; había forjado la Lanza de la Luna Celestial, una herramienta imbuida con el poder de los seres primordiales y destinada a ser la clave de su victoria.
Kaoru avanzó con la Lanza de la Luna Celestial en mano, listo para desatar todo su poder sobre Ryuu y poner fin a la batalla de una vez por todas.
La lanza de la Luna Celestial atravesó el cuerpo de Ryuu con una precisión mortal, y en el momento en que el arma lo tocó, una explosión de energía se desató repentinamente. El poder del Grimorio del Tiempo contenido en el cuerpo de Ryuu fue liberado de golpe, desgarrando el tejido del tiempo y el espacio a su alrededor.
Una onda expansiva de energía temporal arrasó todo a su paso, distorsionando y destrozando la realidad misma. El tiempo se retorció y se deshizo en fragmentos caóticos, envolviendo a todos los presentes en una vorágine de caos y destrucción.
Kaoru, Aetheria, Luminaë, Ayumi, Elysia y todo lo que existía en ese lugar fueron consumidos por la devastadora fuerza de la explosión temporal. La ciudad, el mundo entero y todo lo que alguna vez fue, se desvaneció en la oscuridad de la nada, borrado de la existencia por el cataclismo desencadenado por el poder del Grimorio del Tiempo.
En un instante, todo quedó reducido a la nada, sin pasado, sin presente, sin futuro. El tiempo mismo había sido destruido, dejando solo un vacío infinito y sin forma en su lugar.
Después de todo lo sucedido, Kaoru se encontraba en un lugar desconocido, rodeado por un paisaje blanco y sin límites visibles. A pesar de su confusión y desorientación, se aferraba a los Grimorios de la Creación y de la Ilusión que tenía consigo.
Kaoru: (desorientado), ¿Dónde estoy? ¡Aetheria! ¡Luminaë!
Kaoru comenzó a gritar continuamente los nombres de ambas, pero su voz solo resonaba en el vacío infinito que lo rodeaba.
Cada palabra que gritaba Kaoru se perdía en el silencio, sin recibir respuesta alguna. Solo el eco de su propia voz le devolvía el sonido en ese extraño y desolado lugar.
Kaoru se sentía perdido y solo, sin saber qué camino tomar ni qué destino le esperaba en ese extraño mundo blanco.
De repente, una figura con una presencia que irradiaba serenidad y poder se materializó frente a Kaoru.
Lunaria: (con voz tranquila pero firme), Kaoru.
Kaoru, sorprendido por la aparición repentina de la chica, la miró con cautela, pero también con un destello de esperanza en sus ojos.
Kaoru: (con incredulidad), ¿Quién eres tú?
Lunaria: (con una suave sonrisa), Soy Lunaria, el Grimorio Eterno del Tiempo.
Kaoru: (asombrado), ¿Lunaria... el Grimorio Eterno del Tiempo?
Lunaria: Así es.
Kaoru: Eso significa que eres una de las hermanas de Aetheria, ¿Cierto?
Lunaria: (asintiendo), Gracias a ti y Aetheria fui liberada de mi pacto forzado.
Kaoru: (con una mezcla de desconcierto y curiosidad), ¿Dónde estamos? ¿Qué es este lugar?
Lunaria: (con calma), Este es el "Fin", Kaoru. Un espacio más allá de los límites del tiempo y el espacio como los conoces. Es el resultado de la corrupción del tiempo causada por tu batalla con Ryuu.
Las palabras de Lunaria resonaron en la mente de Kaoru, quien luchaba por comprender la magnitud de lo que había sucedido.
Kaoru: (con incredulidad), ¿El Fin? ¿Significa que el tiempo se perdió?
Lunaria: (asintiendo), Sí, el tiempo se ha corrompido aquí, atrapándonos en este lugar entre mundos. Fue el resultado del poder liberado durante tu batalla con Ryuu.
Kaoru asimiló lentamente la información, sintiendo el peso del destino sobre sus hombros. Se dio cuenta de que estaba en medio de una situación más grande de lo que jamás hubiera imaginado.
Lunaria: pero no te preocupes Kaoru, aún hay una forma de recuperar todo.
Kaoru: ¿lo dices enserio?
Lunaria: así es.
Kaoru escuchó atentamente las palabras de Lunaria, sintiendo una mezcla de esperanza y preocupación ante la sugerencia de retroceder en el tiempo para corregir lo que había salido mal.
Kaoru: (con determinación), ¿Regresar en el tiempo? ¿Es posible hacer eso?
Lunaria: (asintiendo), Sí, es posible, aunque debemos hacer un pacto para ello, Kaoru.
Kaoru: Ay, no...
Lunaria: (mirando confundida a Kaoru), ¿Qué sucede?
Kaoru: Supongo que si no hay otra opción.
Lunaria: Espera, ¿Cómo crees que es el pacto? ¿No habías hecho ya uno antes con Aetheria?
Kaoru: Así es, al momento de realizar el pacto con ella y Luminaë, ambas me dieron un beso y con ello sellaron el pacto conmigo.
Lunaria, al escuchar aquello, se sonroja.
Lunaria: (nerviosa), Beso...
Kaoru: (Asintiendo).
Lunaria: Entiendo. Entonces, ¿te parece si realizamos el pacto?
Kaoru: Está bien.
Lunaria se acercó a Kaoru, y con delicadeza, sellaron su pacto con un beso. En ese momento, una energía poderosa los envolvió, dejando en claro que el pacto entre ambos se habia completado.
Kaoru sintió una conexión profunda con Lunaria, como si sus almas se hubieran fusionado en un solo propósito.
Lunaria: Bien, con eso el pacto queda completo.
Kaoru: Entonces, ¿ahora qué debemos hacer para arreglar todo esto?
Lunaria: Ahora regresaré a mi forma de grimorio y deberás usar la materia primordial para crear la Daga del Tiempo. Con ella, crearemos una grieta temporal y entraremos en ella. Una vez dentro, esa grieta nos llevará a un momento antes de que ocurra esa corrupción.
Kaoru: Entiendo.
Lunaria: Eso sí, una vez que regresemos, debes tener en cuenta que en ese mundo habrá otro tú y otra Aetheria. Así que debes evitar el contacto contigo mismo, de lo contrario, podríamos corromper aún más ese tiempo.
Kaoru: Comprendo. Pero eso significa que también estará aquel chico y otra tú, ¿no?
Lunaria: Así es, pero no te preocupes por ello. Tu objetivo es encontrar el momento adecuado y detenerlo. Para ser más clara, deberás esperar al momento en que te enfrentas a él por primera vez, ya que en ese momento él aún no puede controlar completamente mi poder.
Lunaria explicó con claridad los pasos que debían seguir para restaurar el flujo del tiempo y evitar el desastre que los había llevado a aquel lugar desolado.
Kaoru asintió, asimilando cada palabra con determinación en sus ojos mientras se preparaba para la tarea que les esperaba.
Kaoru: Entendido, crearé la Daga del Tiempo y nos adentraremos en la grieta temporal para corregir lo que sea necesario.
Kaoru se concentró en su objetivo mientras creaba la Daga del Tiempo utilizando la materia primordial e imbuirla con el poder del Grimorio del Tiempo. Con un destello de luz, la daga tomó forma en sus manos, lista para abrir una grieta temporal hacia el pasado.
Una vez que la daga estuvo lista, Kaoru la sostuvo firmemente y se preparó para su tarea. Con un movimiento decidido, trazó un arco en el aire, abriendo una grieta dimensional que los llevaría al pasado.
Kaoru: (mirando la grieta dimensional), bien, ya está todo listo.
Lunaria: confió en ti Kaoru, es nuestro deber arreglar esto.
La grieta centelleaba con una energía mientras se expandía, revelando destellos de momentos pasados y futuros. Sin dudarlo, Kaoru se adentró en la grieta, mientras Lunaria se encontraba en su forma original con él.
El paisaje a su alrededor se distorsionaba mientras viajaban a través del tiempo, cada segundo que pasaba acercándolos más al momento crucial en el que debían intervenir. A medida que avanzaban, el pasado se desplegaba ante ellos, listo para ser arreglado.