JUNGKOOK:
Lo miro con las cejas fruncidas y con los brazos cruzados mientras él sigue usando su celular para limpiar la mugre.
Porque eso son. Mugre.
- Te ves tan hermoso hasta celoso.- Ríe entre dientes a lo que bufé fastidiado. Segundos después me señala la pantalla de su celular.- Listo. Bloquee a todos los que me mandaron mensajes subidos de tono.
Mi actitud con él se relaja un poco pero aun sentía celos.
- No entiendo como consiguen tu número para ofrecerse de esa forma.
Jimin se encoge de hombros.- Los cazafortunas y sus mañas. Estoy acostumbrado.
- No te acostumbres a eso mi amor. No me gusta que tengas a todos esos mandandote fotos de sus cuerpos en busca de algo de ti.
- Esta bien. Voy a tomar medidas drásticas. Tu tranquilo.- Me toma de las manos para acercarme a él y con el amor brotando por todo mi cuerpo, en un rápido movimiento lo tengo debajo de mi en la cama.
- Todo esto debe seguir siendo solo mio, eh...- Acaricio de arriba a abajo su hermosa figura haciéndole gemir de inmediato.
Y tengo a mis pies a Park Jimin.
Su expresion al estar debajo y siendo acariciado por mi es un poema lujurioso y romántico. Lo tengo completamente loco por mi. Ya es un hecho. Es solo mío. He trabajado bastante cada dia y sin darnos cuenta pasó un mes desde que decidimos darnos la oportunidad. Quite a su viejo amor y yo ocupo su mente. Estoy casi seguro que también su corazón pero él aún no se da cuenta de sus sentimientos y yo puedo esperar. Aunque sea larga la espera voy a esperar que diga lo mucho que me ama. Lo enamorado que esta de mi.
Por otro lado, a pesar de tenerlo a mis pies.
Aun me siento inseguro.
Hay quienes van a intentar arrebatarmelo ahora que lo tengo solo para mi, como aquellos ofrecidos que consiguieron su número privado u otros que lo tengan en la mira para conquistarlo. Incluso hasta del mismo Namjoon, su ex amor, tengo inseguridad porque aunque no sea importante como antes para Jimin puede ocasionarme celos su cercanía con él.
Eso no.
Tengo que trabajar en mi seguridad también. Jimin es solamente mio. No puedo echarme la sal yo mismo.
- ¿En que tanto piensas bebé? - Pregunta acariciando mis cabellos mientras sigue apresado debajo de mi.
Arqueo una ceja.- ¿Bebé?
Sonríe coqueto.
- Tu tienes miles de apodos para mi así que también quiero tener muchos para ti.
- Me gusta eso.- Complacido por más avance en nuestra relación lo beso.
Y ese beso nos sumergió a darnos placer.
Le quito la ropa y él hace lo mismo conmigo. Nuestras pieles entran rápidamente en calor y me dedico a atenderlo como se merece. Que disfrute y se enamore más de mi.
- Llévame al paraíso.- Y de nuevo tengo a ese Jimin ido por el placer.
- Claro que lo haré. Solo yo puedo llevarte al paraíso.
Me agacho a la altura de su entrepierna dando una probada a su miembro. A Jimin le encanta las mamadas y trato de hacer lo mejor que puedo aunque no sea un experto con eso. Se que no lo hago mal porque se descontrola cuando tengo su pene en mi boca. Empuja sus caderas buscando más contacto, así que sigo complaciendolo más y más. Esta a punto de correrse tan rápido pero no lo permito y abro más sus piernas pese a su queja por la interrupción de un casi orgasmo pero se tranquiliza cuando siente que ahora devoro su agujero. Hundiendo una y otra vez mi lengua, dejando también besos y mordidas alrededor de sus nalgas.
Con los ojos brillosos y los labios mordidos por el mismo me habla apenas.- Eres lo mejor que me ha pasado.
Sus palabras solo inflan mi pecho de orgullo.
Y continuo.
Devorandolo.
- ¡Jungkook! ¡Si! ¡Sigue! - Sus uñas peñizcan mi nuca y duele pero en ese momento es lo de menos ante lo que ambos sentimos.- ¡Rápido te quiero dentro de mi!
Reí ante su ruego.- Me encanta verte tan apasionado.
Me coloco entre sus piernas para darle lo que tanto pide. Tenerme dentro de él.
Jimin lo quiere rápido y eso hago, embistiendolo de un solo movimiento. Sonrió complacido y se dejó llevar abrazándome la espalda mientras sus uñas se clavan con fuerza en esta.
- ¡Me encanta!
Y mi miembro empezó a entrar y salir con rudeza de su interior logrando que todo en él se arqueara cuando tocaba aquel punto débil que lo llevaba al delirio. El delicioso vaivén de caderas aumenta de ritmo y ocasiona un obsceno y húmedo sonido de pelvis en cada encuentro de piel. Bajo mis labios a esos pezones que están cerca de mi al tener a Jimin con la espalda arqueada. Succiono. Al instante siendo recompensado por más gemidos de su parte. Gemidos que yo seré el último en escuchar. Nadie más lo hará porque no pienso dejarlo ahora que lo tengo así tan dispuesto para mi.
He conseguido lo que deseaba.
Tener a Park Jimin.
- ¡No pares, ya casi...! - Chilla en mi oído.
- Aguanta un poco más precioso.
Me separo de él y lo giro poniéndolo en cuatro. En esa posición lo embisto de nuevo sacandole hasta el aire tanto que tuvo que agarrarse de la cabecera de la cama pero también con descaro meneó sus caderas buscando más contacto así que continuo con movimientos rudos y fuertes como le gusta. Como nos gusta.
Un estruendoso gemido sale de Jimin cuando choque con brusquedad en su interior y terminó corriendose en las sábanas. Yo aún sigo buscando mi orgasmo. Lo embisto estimulando su próstata y con tres embestidas más termino llenando su interior.
- Jimin.- Jadeo intensamente y pego mi rostro a su espalda sudada donde dejo delicados besos.
- Fue increíble como siempre.
Lo giro poniendolo boca arriba y lo beso también en los labios.- Increíble porque esto es más que sexo. Es unirnos en mente y corazón.
- Tienes razón y vaya que somos adictos a esto. En el día, en la noche, en la madrugada, a cualquier hora.
- Tu me provocas con tu sensual cuerpo.- Le guiño el ojo.
- Y tu a mi también. Con ese rostro bonito como no vas a provocarme para tener ganas de estar contigo en la cama.
Unimos otra vez nuestros labios.
- ¿Otra ronda? - Propongo coqueto.
- Uhm...- Y no llega a responderme porque su celular suena.
¡Qué manía!
Siempre su celular interrumpe los mejores momentos.
- Entiendo, gracias.- La conversación que tuvo Jimin fue corta de apenas un minuto.
Curioso pregunto.- ¿Quién era?
No quería ser un intenso pero ya lo estoy siendo.
- Mi asistente. Le encargue algo para ti y lo ha traido.
- ¿Para mi? - Quedo sorprendido.
- Si, así que vamos a arreglarnos para salir afuera.
Con curiosidad y nervios lo acompaño al baño donde nos aseamos un poco para posteriormente vestirnos. Jimin toma mi mano y me guía hacia la salida a pasos rápidos.
- ¿Pasa algo? - En el camino nos topamos con mi madre.
- Es una sorpresa para Jungkook pero puedes presenciarlo también Mya.
Me pone más nervioso cuando cubre mis ojos con sus manos y abre la puerta de la salida principal. Escucho los pasos de mi madre también siguiendonos.
- ¿Ya puedo ver? - Pregunto impaciente.
- Si...- Saca sus manos para que pueda ver. Lentamente enfoco la mirada en la sorpresa y mi mandíbula casi cae al suelo.- Espero te guste. Es necesario para ti.
¿Cómo no gustarme?
Es tremenda belleza de coche. Es elegante y...
No puedo ni describirlo bien. No. Definitivamente no. No puedo aceptarlo. Y como si Jimin leyera mi mente se adelanta.
- Tienes que aceptarlo cariño. Yo te lo regalo.- Insiste Jimin y me deja sin palabras. - ¿Qué opina suegrita?
Ella sale de su trance y mira preocupada a Jimin.- Opino que esta hermoso y seguro debe ser costoso. Es mucho de tu parte.
- Mi chico precioso se merece esto y más.- Acaricia mi rostro con delicadeza que fue imposible no derretirme ahí mismo.
Lo amo tanto.
Es difícil recibir sus regalos costosos pero he aprendido que él se expresa así para demostrarme su afecto. Eso es algo que poco a poco pienso cambiar un poco. No puedo prohibirle que me regale cosas pero persuadirlo para que no se salga de los límites que tengo.
- Gracias amor.- Dije sonriendo y le recibo las llaves del coche.
- Todo tuyo.
Mi madre aplaude cuando nos fundimos en un fuerte abrazo con él acariciándome la espalda.
Que momento más sublime.
Y tuvo que arruinarse.
Por ellos.
- ¡Jimin!
Tanto él como yo giramos para ver como Namjoon y Seokjin con maletas en mano aparecieron en escena.
- Hola... ¡Después de tiempo nos vemos! - Saluda Jimin sin soltarme el cuerpo.
Causando una buena señal positiva para mi.
- ¿Y esto? ¿Otro más para la colección?- Seokjin señala el coche nuevo.
- Es para Jungkook.
El rostro de Seokjin fue de sorpresa. El de Namjoon no mostraba reacción alguna.
- Eso es nuevo viniendo de ti y parece que aun no piensas cambiarlo por...- No termina de hablar porque Jimin se abalanza sobre él cubriendo su boca.
- ¡Amigos! Necesitamos ponernos al corriente de todo.- Tomándolos de los brazos Jimin se los lleva dentro de la casa.
- Son sus amigos, no se veían hace tiempo.- Disimulo con mi madre que presenció la escena.
Mierda.
Eso estuvo cerca.
Seokjin casi menciona algo indebido delante de mi madre, no quiero que ella se entere.
No es culpa del todo de Seokjin.
Ellos no sabían que lo nuestro dejó de ser solo un contrato. No sabían de mi madre viviendo con nosotros. No sabían tantas cosas y confío en que Jimin pedirá total discreción y les ponga limites. No quiero comentarios suyos.
No quiero que arruinen lo que me costo conseguir.