Kakuhidan~Me enamoré de mi he...

بواسطة NadiaGuevara048

5.5K 606 303

Hola de nuevo mis queridos lectores, como ya notaron hay una nueva historia y que la publicaré aqui, para los... المزيد

Capítulo 1
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
¡Feliz cumpleaños!
Capítulo 53
Capítulo 54
Capítulo 55
Capítulo 56
Capítulo 57
Capítulo 58
Capítulo 59

Capítulo 49

82 9 11
بواسطة NadiaGuevara048

Narra Obito

Me encontraba recién saliendo de mi casa, la ayuda va en camino, yeah, hubiera deseado que aquella mujer se la tratará la tierra desde el momento en que nació, de lo contrario, nada de esto estaría pasando. Suspiré pesado y marqué al número de Kisame, aun no me había explicado lo que sucedió la última vez en el hospital, supongo que no querra salir de su casa después de aquello.

---¿Si?---Escuché del otro lado de la línea como Kisame me contestaba, a juzgar por su tono de voz se podría decir que estaba esperando a que le llamará---

---Kakuzu necesita nuestra ayuda---Le respondí un poco cortado, en serio me molestó que el padre de kakuzu fuera tan terco como para no aceptar una verdad tan obvia---

---¿Qué sucedió esta vez?---Me volvió a preguntar con curiosidad, espero que pueda venir, si no es así tendré que comunicarme con Itachi y decirle que no se aparezca por el hospital---

---El señor Raul despertó, pero se niega a creer que su esposa sea una completa lunática zorra y psicopata---Le dije aguantando mis ganas de querer lanzar mi celular y romperlo en la pared---Kakuzu nos necesita para que le expliquemos mejor las cosas---

---¿Crees que funcione? Sabes perfectamente que aquella mujer deja locos a los hombres, recuerda las caras que pusieron cuando la encontraban siéndoles infieles, la verdad que sentí lastima por ellos---

Es verdad, cómo olvidarlo, era una completa tortura escuchar las súplicas de los hombres por exigir una respuesta en qué era lo que habían hecho mal, por qué ella les hacia eso, tan solo recordar como aquellos pobres hombres se arrodillaban entre llanto en frente de ella y esta los terminaba humillando dándoles una patada o tirarles toda su comida en la cara, fue tan lamentable para todos los que se encontrarán en el lugar, desde ese entonces no se volvió a saber más de ellos, solo espero que no hayan cometido una locura con quitarse la vida.

---Esperemos que sí, ojalá que a nosotros nos crea---Le dije, pidiéndole al señor que así sea---

---¿"Nosotros"? ¿Quién dijo que voy a ir?---Como me lo imaginaba, no quiere ir otra vez---

---Esta vez me aseguraré de que Itachi no ponga ni un solo pie en el hospital---Le avise mientras tocaba el puente de mi nariz, ¿Hasta cuando seguirá comportándose así por él---

---¡¿Me lo juras?!---Alzo su voz casi dejándome sordo de un oido, ¿acaso me estaba advirtiendo de algo si no llegaba a cumplirlo?---

---Siiiii---Respondió alargando la palabra fastidiado, ¿por qué a mi?---

---Más te vale, estaré allá lo más rápido que pueda---Y con eso me termino colgando el teléfono---

Bien, uno menos, falta otro. Esta vez le marqué a Itachi, tenía que cumplir lo que había prometido. Esperé unos segundos hasta que por fin respondió.

---¿Necesitas algo?---Me preguntó ya contestando la llamada---

---Escucha, por ningún motivo vallas al hospital ahora, ¿Entiendes? Hasta que yo te diga---Le respondí directo al grano, no tenía mucho tiempo para explicarle el porqué---

---¿Por qué? ¿Qué pasó?---Me Cuestionó con un tono confundido, no lo culpaba, era la primera vez que le ordenaba y le negaba algo al mismo tiempo---

---No tengo mucho tiempo para explicartelo, te lo diré en pocas palabras, aquel chico de pelo azul que encontraste sentado en las gradas del hospital te tiene miedo, hoy iremos a visitar al padre de Kakuzu, ni se te ocurra ir, de lo contrario se irá corriendo como la otra vez---Hasta ahí terminé la llamada, no le di oportunidad de responderme, bueno, no hacía falta, creo. Espero que me obedezca y sin más, pedí un taxi para que me llevará a donde estaba kakuzu---

El camino era un poco lento para mi, tal vez debería pensar de una vez cómo empezaría a relatar todo lo que sabía sobre aquella mujer, ¿Debería empezar por sus ex o debería decirle primero como es su verdadera personalidad? Bueno, ya todo eso será revelado hoy mismo, sera cuestión del señor Raúl si nos cree o no.

Al llegar vi a kakuzu sentado en las gradas del hospital, parecía frustrado por la forma en que apretaba su cabello. Me bajé del vehículo y le hable para que me notará.

---Kakuzu, ya estoy aquí---Le avise mientras tocaba su hombro---

Él solo alzo su mirada de golpe y agarró mi brazo jalandolo hacia adentro del lugar, lo hacia con mucha fuerza, ni siquiera me dio tiempo para quejarme o reclamarle, antes de que me diera cuenta ya estaba dentro de la habitación del señor Raúl, mirándome confundido por mi presencia.

---Padre, él es Obito, un amigo mio del restaurante, esta aquí para que escuches todo lo que no sabes de mi madrastra---Cierto, aun no nos presentábamos, por lo cual empezar con eso era lo correcto---

---Mucho gusto señor Raul, encantado de conocerlo---Me presenté lo más amable y educado que podía, mientras extendía mi mano en forma de saludo---

---El gusto es mio muchacho---Habló él correspondiendo a mi gesto---Me alegro que mi hijo haya hecho amigos en el trabajo, espero que las cosas vallan bien---

Eeeh...... yo diría que no van del todo bien, faltan pocos días para que regresemos al trabajo, no voy a negar que han habido días pacíficos gracias a que la mujer salvaje no se ha aparecido por el lugar.

---Señor Raúl, quiero hacerle una pregunta, si me permite, claro---Me comporte amable frente a mi mayor mientras él me sonreía y decía que si---Bien, ¿Usted que sabe de su esposa?---

---Llevo más de 5 meses desde que la conozco, la conocí en un bar que está cerca de mi casa, cuando me enteré de la muerte de mi esposa lo primero que hice fue irme a tomar, también porque había perdido mi trabajo el mismo día que regrese a mi casa---Me empezó a relatar, dio una pequeña pausa para recuperar algo de aire---

---Lamento mucho escuchar eso, señor Raul---Le dije con voz quebrada, me recordaba a mi mamá, ella también había fallecido después de que me diera a luz, no pude evitar sentirme afectado por eso---

---Ya no importa, muchacho---Le miré por un momento, su rostro reflejaba tristeza y dolor, no me extrañaría si aquella mujer logro aprovecharse de eso para poder engañarlo---Siguiendo con la historia, la vi por primera vez sentada en la barra mientras bebía un licor muy fuerte, fue ahí cuando me acerqué a tomar también, bebí todo lo que podía, fue entonces donde ella me hablo y yo en ese momento estaba muy decaído y solo quería liberar todo lo que estaba estaba guardando, cuando termine de contarle mis problemas ella me contó los suyos---

Eso último me llamo la atención, miré a kakuzu por un segundo, escuchaba con atención todo lo que su padre decía, era como si fuera la primera vez que lo escuchaba, ¿acaso no lo sabia?

---¿Como cuáles problemas?---Preguntó él con una mirada fija en su padre, era como si quisiera sacarle las palabras con la mente para así saberlo de volada---

---Me contó que su antiguo esposo la engaño y que se fue a vivir con su amante, que nunca la trato bien, ni ella ni a su hijo, me explico que fue por eso que Hidan siempre era grosero y reservado, yo lo entendí y no pregunté más, sabía que ese tipo de cosas eran dolorosas y que no quería ser dichas de nuevo---

Escuchaba cada palabra, todo eso lo que dijo era falso, ¿verdad? Yo sabía perfectamente que la señora July se juntaba con cualquier hombre que se cruzaba, pero nunca antes había oído sobre el padre del hermanastro de kakuzu.

---Padre, me temo que todo eso es falso, un amigo de Hidan me contó que su padre había sido asesinado, que él nunca le fue infiel a su esposa a pesar de que era ella quien provocaba los problemas entre la familia y que su relación con su hijo Hidan era inseparable---Habló de pronto kakuzu tratando de sonar lo más tranquilo que podía, aunque sus ojos reflejaban inquietud por dichas palabras---

---¿Qué?.... ¿Qué cosas estas diciendo? Eso no puede ser posible, ella me dijo que....---No quisiera ser grosero, pero tenía que ir directo al grano, así que me tome la molestia de interrumpirlo con sus palabras---

---Señor Raúl, la señora July iba a menudo al restaurante, algunas veces venía sola, otras veces venía en compañía de un hombre distinto cada vez que se presentaba---Vi como el padre de kakuzu abrió sus ojos muy exageradamente, después empezó a respirar fuertemente---

En eso se comenzó a escuchar un BIT BIT BIT, eso anunciaba que su corazón se estaba acelerando cada vez que le contábamos más detalles, Kakuzu al notarlo salió rápidamente de la habitación en busca del doctor, mientras yo me quedaba con el señor Raul, escuchando como susurraba la misma palabra.

---Mentira.... mentira.... mentira....---Agite mi mano en frente de sus ojos, él estaba en shock y yo estaba asustado por su estado, debí de ser un poco más suave con mis palabras---

Escuché como la puerta se abría de golpe otra vez, de ella entraron dos enfermeras junto a kakuzu, una de ellas nos dijo que teníamos que salir por un momento, eso fue lo que hicimos a pesar de que kakuzu no estaba de acuerdo.

---Lo siento mucho Kakuzu, no quería que tú padre se pusiera así---Me disculpe juntando mis manos en forma de suplica, si a su padre le llegará a dar un infarto provocando su muerte, sin duda nunca me lo perdonaría---

---Descuida, tarde o temprano tenía que enterarse, mi padre tiene que entender que las cosas no son como él piensa, mi madrastra lo tiene muy manipulado por ella---Vi como Kakuzu se sentaba en una de las sillas de espera mientras encogía su cuerpo en forma de una bola---

---¿Crees que nos creerá esta vez?---Le pregunté, sentandome a su lado---

---Espero, de lo contrario tendre que llamar a más personas para que me ayuden con esto, por cierto, ¿dónde está kisame?---Preguntó de pronto kakuzu, haciendo que me diera cuenta que él aún no había llegado---

Alce mi mirada sorprendido, era cierto que kisame aún no estaba aquí, espero que no tardé demasiado.

---No tardará en llegar, le dije que también viniera---Le respondí mientras me recargaba en la silla y cruzaba mis brazos por atrás de mi nuca---Por cierto Kakuzu, ¿Cómo fue que te hiciste las cicatrices de tu cara?---

No se porqué, pero mi pregunta hizo que él se levantará de golpe asustado, le miré confundido y kakuzu solo me miraba con horror en sus ojos, eso daba la impresión de que no quería que supiera de eso.

---Tú.... ¿Cómo lo....---Lo interrumpí para aclararle las cosas---

---Todo esta en internet, esa loca intento salirse de las suyas otra vez, pero gracias a dios no pudo ganarte en esta ocasión, no tienes que estar tan alterado, ya se confirmó que tú eres inocente y no te tienes que preocupar con mostrarme tu cara, no te juzgaré---Le dije con una sonrisa suave, él parecía aún intranquilo, supongo que tiene algún tipo de trauma que vivió antes---Te diré algo, yo también tenía una gran cicatriz en la parte derecha de mi cara---

Vi como eso llamo la atención de kakuzu, su rostro se tranquilizó un poco, seguí continuando explicando lo que me sucedió unos años atras.

---Era muy joven cuando paso, tenía como unos 12 años quizas, recuerdo como me encantaba subirme a los árboles, a pesar de que mi padre me decía que no lo hiciera siempre me las arreglaba para hacerlo a sus espaldas, pero hubo un día en el que había llovido toda la noche y a la mañana siguiente intente subirme de nuevo, pero como ya sabrás, las ramas estaban húmedas y termine resbalando---

Observe a kakuzu por un momento, ya no parecía estar asustado, ahora su rostro reflejaba curiosidad, como si quiera saber que paso después.

---Al resbalarme mi cara chocó por el tronco grueso y duro, haciendo que mi piel se desgarrara poco a poco mientras llegaba hasta el suelo, lo último que recuerdo es ver sangre por el pasto y por mi mano, ya de ahí me había quedado dormido. Cuando desperté, tenía la mitad de mi cara tapada, aun sentía dolor pero no tanto como había sentido antes, mi padre se encontraba aún lado de mi, mirándome con una mirada de enojo y a la vez una que me decía "te lo dije"---

---¿Y por qué no la tienes ahora?---Me pregunto de pronto kakuzu, volviéndose a sentar en su asiento---

---Cuando me quitaron las vendas y me vi por primera vez me asuste mucho, no quería verme así, como en ese entonces aún era un adolescente era muy probable que hubieran burlas hacia mi, por eso le rogué a mi padre que me hicieran cirugías para que mi rostro volviera a ser como antes, pero él se nego, me dijo que eso me iba ayudar a madurar rápidamente, además de que no teníamos mucho dinero para pagar algo tan costoso, desde ese día empecé a trabajar muy duro y ahorrar lo suficiente para volver a tener mi rostro normal, después de unos 3 largos años por fin había tenido el dinero suficiente y aquí me vez, funcionó ¿no?---Sonreí orgulloso de mi mismo mientras me señalaba la parte derecha de la cara---

---¿Y todo ese tiempo estuviste ocultando tu rostro?---Obviamente esa pregunta no era de faltar---

---Sí, era claro que iba a llamar la atención en las personas por eso, pero preferible eso a que vieran la otra mitad de mi rostro---Dirigí mi mano hacia la parte derecha de mi rostro, recordando las risas que me daban mis compañeros de clase por ser tan raro---

---Yo.... de verdad lo siento---Solté una pequeña risa ante esa respuesta, eso ya había quedado atrás, hasta incluso casi lo olvidaba, sino fuera por las marcas de kakuzu jamás hubiera recordado aquellos momentos de mi adolescencia---

---No importa, ya olvidé aquello---Esta vez me había cruzado los brazos sobre mi pecho, mientras mantenía mi mirada hacia bajo, no creí que algún día revelaría mi secreto más guardado. Kakuzu y yo nos mantuvimos en silencio por un momento, sin saber que más decir---

---¿Y tú por que no me lo dijiste?---

En eso Kakuzu y yo saltamos de nuestros asientos provocando nuestras caídas, al volver la vista hacia atrás descubrimos a kisame recargado en la pared, cerca de las sillas de espera en donde habíamos estado sentados.

---¡¿Y tú en que momento llegaste?!---Gritamos exaltados Kakuzu y yo, levantandonos del suelo---

---Desde que rato, cuando empezaste a contar lo de tu cicatriz, ¿acaso no me notaron?---Preguntó él confundido---

Kakuzu y yo nos miramos por un momento, no nos habíamos dado cuenta de la llegada de kisame, estábamos tan concentrados en nuestra conversación que no notamos su presencia.

---Perdon kisame---Hablamos de nuevo Kakuzu y yo, avergonzados por la ignorancia hacia nuestro amigo---

---No hay problema---Dijo él con una enorme sonrisa, agradezco que kisame no sea una persona que guarda rencor a sus amigos, estoy feliz de haberlo conocido---

Narra Deidara

Mierda mierda y más mierda, como duele, no puedo mover mi cuerpo, ni siquiera una sola uña, cada vez que trato de moverme un poco siento un gran ardor por todas partes.

---Hi......---Trato de alcanzarlo con mi mano, pero a pesar de estar cerca de mi no puedo llegar a tomarlo ni con la punta de mi dedo---

Él estaba igual que yo, la única diferencia que había era que él estaba inconsciente, por un milagro yo estoy despierto, aun con todo el cuerpo bofeteado con fuertes golpes y patadas.

Ese imbecil se salió con la suya, sabía perfectamente que no seríamos capaz de movermos, lo sabia bien, por eso no le preocupaba dejarnos libres de los amarres y cadenas, sin mencionar que ahora estábamos cerca el uno con el otro en medio de estas 4 paredes, tirados en el suelo, sin el más mínimo cuidado.

En eso escuche como la puerta se abría otra vez, me llené de precaución y trate de voltear mi cabeza para averiguar que haría ese desgraciado esta vez, pero no hubo caso, mi cuerpo estaba dormido y se negaba a escucharme.

---Valla valla, estas despierto pequeño rubio, eso no se hace, necesitas descansar para que puedas jugar mañana---Decía él con esa voz tan mediocre que me hacía querer vomitar, ya estaba muy viejo para que utilizará ese tono de bebé---

Quería insultarlo, quería decirle "pudrete", pero si lo hacia de seguro me volvería a golpear y esta vez no seré capaz de despertar por quien sabe cuanto tiempo, era mejor quedarme callado y no provocarlo por ahora.

---~~Pequeño muñeco, mañana te vas a divertir mushisimo, te lo aseguro, duerme ¿si?~~---Esté imbecil quiere matarme con esa voz tan infantil, actuaba como si fuera un buen padre, ya que trajo dos sabanas y nos tapo a mi y a Hidan con ellas, para después darnos un asqueroso y repugnante beso en la cabeza---Buenas noches, descansen mis niños---Y con eso apagó la luz, cerrando la puerta con candado de nuevo, lo sabia porque se podía escuchar claramente como el hierro rozaba la puerta y se oía el golpecito de haberse cerrado---

¡Maldición, Itachi! ¡Apresurate a venir a buscarnos! Lo que dijo ese tipo me da mala espina, ¿a que se refería con "jugar" o a "divertirme"? Eso no me gusta mucho, ahora que ya no está tengo que aprovechar que estoy libre y descubrir una salida, ¡rápido!

Empecé a moverme poco a poco, mis heridas comenzaban a sangrar más y el dolor no ayudaba en nada, ni siquiera podía ponerme en pie, tengo las piernas llenos de moretones por las patadas que recibí de ese perro idiota, lo que más me asusta fueron las palabras que me dijo cuando me golpeba, "será peor para la proxima", después me señaló afuera de la puerta, lo que vi me lleno de escalofríos, afuera de este cuarto habían varios utensilios de tortura, como un latigo, de varios tipos, uno incluso tenía puntas filosas como decoración, había otra arma pero era de fierro, esa me asustaba aún más, parecía que con eso marcaban al ganado, no sabía que marca tenía, pero lo que si sabía era que si me daban con eso lo tendría por el resto de mi vida.

Todo lo que tenga que hacer tengo que hacerlo a escondidas de ese idiota, no quiero arriesgarme a hacerlo para recibir otro golpe más.

Por más que deseara seguir avanzando hacia Hidan ya no podía, mi heridas ya habían sangrado mucho y si seguían así sería muy malo para mi, ni siquiera aquel imbecil se tomó la molestia de curarnos, me vengaré de él cuando tenga la oportunidad.

Narra Kimeto

Por fin ya habíamos llegado, ya faltaba poco para encontrarnos de nuevo con esa mujer y lo más importante, Hidan.

---¿A dónde vamos ahora?---Preguntó con un tono de fastidio mi compañero, si lo entiendo, yo también estoy harto de ella, llevábamos años soportandola, pero no está vez, ya no más---

---A la comandancia, ahí la tienen---Le respondí cortante, mientras le hacía señas a un taxi para que nos llevará al lugar---

Yoneko y yo nos subimos, le dije al conductor a donde queríamos ir y él con gusto asintió. Mientras íbamos en camino no dejaba de masticar mis dedos, admito que tenerme que encontrar con ella me está volviendo loco, pero todo esto es por una buena causa, todo lo hacemos por Hidan, se lo prometimos a su padre, no estaría más con esa perra loca.

Miré de reojo a mi compañero y note que él estaba lo más tranquilo del mundo, excepto por la cara aburrida que tenía, no entiendo como puede estar así en estas circunstancias, mientras que yo me encuentro que los nervios me devoran por dentro, siento como el estomago se me revuelve, me hace querer vomitar, abrí por completo la ventana para que me diera mejor el aire. Todo esto bajo la mirada confundida Yoneko.

---No entiendo porque te pones asi, no es para tanto---Me dijo como si nada, mientras se volvía a recargar con su codo y mirar a la ventana---

---Sí claro, lo que tu digas---Le respondí en modo sarcástico aún teniendo mi rostro de frustración, ¿quien se cree? El jefe aquí soy yo, hablandome de esa manera desde hace ya varios meses---

Después de un largo tiempo para mi por fin habíamos llegado a nuestro destino, le pague al conductor y entramos a toda prisa en busca del comandante.

---Disculpe, buscamos al oficial Fugaku Uchiha, es urgente hablar con él---Le dije a una mujer que estaba sentada en su escritorio---

---Lo siento mucho señor, el agente Fugaku se encuentra ocupado en estos momentos, ¿Le importaría esperar un tiempo hasta que se desocupe?---Me dijo ella con amabilidad---

---Lo sentimos, pero no, es importante, sabemos que tiene aquí a la señora July, necesitamos hablar seriamente con ella y con el comandante Fugaku---Vi como la mujer abría sus ojos sorprendida, repentinamente tomo su teléfono y comenzó a hacer una llamada, al parecer su jefe estará gustoso de vernos---

---¿No que no?---Preguntó con burla Yoneko, dirigí mi mirada hacia él en forma de regaño, pero sólo recibí su ignorancia mientras se cruzaba de piernas estando sentado en una de las sillas de espera---

---Por aquí, por favor---Habló de nuevo la mujer dirigiéndonos hacia una oficina, vi en el escritorio el nombre del agente Fugaku, estábamos en su oficina---Tomen asiento y esperen a que el jefe venga---Terminando de decir eso la señorita salió dejándonos a mi y a Yoneko solos---

---¿Qué pasará si aquella mujer se niega a decir la verdad? ¿Crees que Hidan nos recuerde?---Preguntó de pronto mi compañero rompiendo el silencio que llenaba por completo el lugar---

---En primera, tenemos a Hidan de testigo, las personas tienen que entender que no es la mujer más perfecta del planeta y en segunda, eso ya lo veremos cuando nos encontramos con él---Le respondí con seriedad, aun esperando a la llegada de Fugaku Uchiha---

---No te quedes callado, hazme algo de platica, me aburre mucho el silencio---Yoneko se quejo como un niño pequeño, ¿Hasta cuando iba a comportarse de esa manera cuando tenemos asuntos serios? Nunca seré capaz de entenderlo---

---No venimos aquí a divertirnos, tenemos cosas serias que hablar, deja ya esa actitud---Le reproche con fastidio, vi como eso en vez de hacerlo razonar solo lo hizo empeorar más, conociendolo, juraría que estaba apunto de patalear como un bebe, antes de que me abalanzará contra él escuche como la puerta se abría a nuestras espaldas---

---Buenas tardes, escuche que querían hablar contigo---Voltee mi mirada hacia atras, encontrandome con la sería expresión de nuestro mayor, se acerco hacia nosotros pasandonos de lado y sentandose en su escritorio---Hablen de una vez---

---..........---


*************************************
20/07/2023

¡Maldita tablet! Como te odio, ¿por qué tenías que hacerme esto a mi? T-T bueno, hasta aquí termina el capítulo mis queridos lectores, si en serio ya llego la hora de borrar las demás historias pues lo haré, total ya están publicadas en YouTube.

Los quiero mucho, chaoooo. ^^
🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋🙋

3923 palabras (muy poco, lo se TnT)

واصل القراءة

ستعجبك أيضاً

6.7M 250K 62
Molly Johnson es una mesera y necesita juntar mucho dinero para salvar a su hermana. Axel Cavelli es un exitoso empresario y necesita una novia por t...
24K 1.7K 11
Luca fue aceptado en la escuela, el aprendió tantas cosas, cada vez la escuela se volvía muy difícil para el, eso pensaban los demás, pero en realida...
74.2K 3.8K 17
Para lenna el solo era el mejor amigo de su hermano aún si ella quería que fueran más. Para alessandro ella era más que que la hermana de su mejor a...
Why? بواسطة Confused ✨

قصص الهواة

102K 5.1K 21
¿Por qué me tienes que hacer esto?