- "Quítate"
- "Su padre ha permitido que se tome el día libre, señorita"
- "Apártate"
La voz de la mujer fue dura contra aquel hombre que impedía su salida, sin embargo, fue ignorada.
Dio un paso adelante pero antes de realizar alguna acción la puerta se abrió dejando pasar al único que podía ingresar sin ser anunciado.
El guardaespaldas que se encontraba allí desapareció dejándolos a los dos solos como todas las tardes desde que su padre había prohibido su salida.
Habían pasado seis semanas desde aquel día.
- "¿Cómo te sientes?" - dijo dejando en el suelo aquellas bolsas que traía con él para arrastrarla a sus brazos y dejar un ligero beso en sus labios- "He conseguido los bocadillos que más te gustan"
La mujer simplemente observo como el hombre abrió aquellas bolsas para mostrarle una variedad de postres y otros artilugios, lo cual solo podía significar una cosa.
- "¿Cuánto tiempo más?"
Ella vio como Gabriel titubeó por unos instantes antes de seguir sacando cosas de aquella bolsa ignorando su pregunta.
- "Puede obtener aquellos dulces de coco pero los de fresa no pude encontrarlos..."
El hombre dejó de hablar en el instante en que ella arrojó cada alimento al suelo.
Estar atrapada sin escapatoria solo esperando que su padre diera la orden de dejarla ir, era algo que no podía manejar con facilidad.
¡Ella nunca lo había traicionado!
¿¡Por qué su padre creía en las palabra de aquel bastardo que le informo que ella planeaba quitarle todo!?
Eso nunca sucedería.
Ni siquiera quería seguir aquí, solo lo hacía por él.
Entonces...
- "El Señor no ha especificado el tiempo"- respondió suavemente Gabriel tomando los recipientes del suelo- "Quiere que estés completamente recuperada antes de volver"
- "Mentiroso"
Gabriel le dedicó una mirada de suplica.
- "Joven ama..."
- "¿Estela?"
La indecisión del hombre provocó que su irritación aumentará, pero por sus expresiones sabía que pronto se rendirá.
- "La señorita fue con su padre a la reunión en Ruanda"
Un dolor punzante atravesó su nuca.
Esa reunión.. Esa reunión era donde ella iba ser anunciada oficialmente como la sucesora.
Y ahí fue cuando lo entendí.
Su padre había tomado una decisión.
Y ella debía elegir la suya.
- "Entiendo"- respondió
Sintió los ojos de Gabriel sobre ella.
Él la conocía más que nadie y agradeció cuando no intentó indagar más en sus pensamientos, al contrario, Gabriel se acercó a ella y la tomó de la cintura atrayéndola a su cuerpo.
Cálido.
La mujer enterró su rostro en la cobertura del cuello del hombre y dejó que él la guiará hacia la cama.
La tarde pasó velozmente y cuando ella comprobó que el hombre se había dormido se levantó suavemente de la cama.
Muchas veces había escapado de su habitación por lo cual no fue difícil salir por la ventana eludiendo a los guardaespaldas.
El aire de la madrugada golpeó sus mejillas pero eso no detuvo la caminata hacia su auto.
Por lo menos su padre no había puesto a gente cerca de él.
¿Casualidad?
Abrió la cajuela de su auto lanzando en ella la única maleta de ropa que llevaba y luego cerrándola para acercarse a la puerta del piloto.
Verlo allí no lo sorprendió por completo.
Una parte de ella esperaba que él la alcanzará.
- "¿Esta es la mejor solución?"- dijo el hombre dándole una calada a su cigarrillo y observándola con intensidad
La mujer no respondió solo se acercó a él e hizo un ademán de apartarlo para entrar en el auto.
Desde hace mucho conocía que Gabriel era mucho más fuerte físicamente que ella por lo cual solo dio un paso atrás cuando él no le permitió entrar.
Tenía una pistola reposando en su cadera pero conociendo los reflejos del hombre que ella mismo entrenó el resultado podría ser impredecible.
Después de todo, hace mucho que ella se había relajado a su alrededor y no había entrenado con él para medir su capacidad.
-" No me detendrás"
Declaró.
El rostro de Gabriel no refleja emociones simplemente su mirada lucio perdida.
La mujer volvió a acercarse y esta vez el hombre la tomó de la muñeca, arrojando el cigarrillo al suelo y alzando su rostro para darle un beso desesperado.
Tabaco y canela.
Su sabor.
Sin decir una palabra se apartó de ella e ingresó al auto.
A la mujer le tomó unos segundos rodear el auto y subir al asiento del copiloto.
- "Serás un traidor"
Mencionó casualmente mientras escucho el arranque del motor.
- "Siempre me ha gustado la idea de ver el atardecer en el mar" - el hombre fingió no escuchar por completo las palabras que dijo mientras se alejaban de la mansión- "¿Qué opina? ¿Quieres visitarlo?"
El silencio inundó el lugar mientras el auto iba a toda velocidad por la carretera.
- "Si" - respondió tardíamente a la pregunta con satisfacción
Al fin y al cabo, ella sabía que las cosas no durarán así por siempre cuando su padre fuese informado que había escapado de casa, no dudaría en buscarla, pero hasta ese momento, disfrutaría de la libertad la cual estaba ansiando desde hace mucho.
Lastima que todo se derrumbara más rápido de lo esperado.
******** POV NOAH*****
- "¿Qué demonios ha sucedido?"
La voz del Duque Bausteros suena furiosa mientras exige una explicación a La Vizcondesa.
Ella no se inmuta por la agresividad del hombre.
- "La señorita Meredith abrió sus ojos a los pocos minutos en los que ingrese a atenderla"- responde- "Cuando se despertó demostró síntomas de desorientación pero consideré que eran normales hasta que la presencia de la señorita Enma, el joven Yixing y la mía pareció alterarla hasta el punto de querer saltar por la ventana para alejarse alegando que nuestros rostros no eran conocidos"
- "Pero ¿Cuál es la razón de esto?"- exige ahora Philip
- "He revisado a la Señorita y se encuentra en perfecto estado de físico"- contesta con negativa- "Hay algo más que debe estar ejecutándose. Esperemos que el Sumo Sacerdote tenga una mejor respuesta"
- "¿Y cuánto más tardará esto?"- la voz de Eret es un ruido atroz en mis oídos pero no puedo evitar preguntarme lo mismo
Hace dos horas que Lord Frederick entró en esa habitación junto con Enma.
El sonido del reloj qué pasa cada segundo hace que pierda la cabeza, necesito estar con ella.
- "No pierda la calma, majestad"
Regreso a ver a Izan al escuchar su voz, desde que Meredith se desmayó en sus brazos se ha mantenido apartado en una de las esquinas de la habitación.
Le doy una mirada pero realmente no sé cómo sentirme al respecto. Es cierto que Izan se parece al niño que Meredith conoció de pequeña pero...
- "Todo saldrá bien, Lord Noah"- esta vez es Yixing quien se dirige a mí con un rostro lleno de seguridad- "La princesa superará esto con facilidad"
Lionel no dice nada pero por su mirada se que piensa lo mismo que Lord Yixing.
En el instante en que la puerta se abre y Lord Frederick la atraviesa mi atención se posa en él, sin embargo hay algo en mi pecho que comienza a oprimirse cuando soy consciente de su semblante.
- "¿Meredith?"
El primero en hablar es Lord Cristian que se separa de Neithan y se acerca con urgencia a Frederick.
- "Ella sigue inconsciente pero despertará en cualquier momento"- anuncia sin dirigirse a nadie en específico- "La señorita Enma está cuidándola en estos momentos"
- "¿Y su condición?"- joven Duque Philip es quien habla ahora
Su rostro luce pálido y muestra signos de preocupación.
- "Tal y como la Vizcondesa nos informó la salud de la señorita Meredith es excepcional, por lo cual fue otra situación lo que provocó que sus recuerdos fueran afectados"
- "¿Situación?"
Esta vez Eret y Scar hablan al mismo tiempo.
- "La he examinado con mi poder divino"- sigue- "Hay algo que ha bloqueado sus recuerdos"
La habitación se queda en silencio mientras esas palabras me atraviesan el cráneo.
-" ¿Qué quieres decir?"- esta vez Lord Neithan intervienen con una mirada seria
- "Algo debió haberle sucedido a la señorita Meredith mientras se encontraba con aquel demonio"- informa Lord Frederick- "Su memorias se encuentran distorsionados en algunos casos y en otros simplemente es como si fueron borrados"
- "¿La cura? Lord Frederick"
La voz del Duque Bausteros es profunda y su mirada se encuentra seria y más cuando pronuncia con veneno las dos últimas palabras.
Lo odio.
El semblante de Fredrick se oscurece y eso solo significa una cosa.
- "El poder a la cual está sometida la señorita es más fuerte que el que alguna vez tendré"- agacha su cabeza con resignación e impotencia- "No puedo realizar nada al respecto por el momento, solo esperar a que los efectos pasen. Mis más sinceras disculpas"
- "¿La princesa nunca recordará a ninguno de nosotros?"- pregunta Lord Yixing horrorizado
Lord Frederick suspira.
- "No puedo afirmarlo"- contesta- "Es necesario que realice una investigación a fondo pero eso conlleva tiempo y visto la actitud hostil de la señorita cuando despertó hace poco, mantenerla estable será difícil. Además que hasta no tener más detalle sugiero que Lord Izan permanezca fuera de la vista de la señorita
Izan hace una profunda reverencia apoyando a lo dicho y se despide de mí antes de salir de la oficina,
Meredith...
Ella ¿Se olvidará de mí?
NO.
En ese momento se escuchan gritos provenientes del pasillo y la voz de Meredith se escucha por lo alto.
Salgo rápidamente de la habitación para encontrar a la señorita Enma impidiendo el paso de Meredith.
- "¡Es necesario que un médico revise su condición antes de que pueda moverse! Entiendo que quiere una explicación sobre este lugar pero su salud es primero..."- insiste la señorita Enma con gran fuerza en su voz. Hay varios caballeros encerrando a Meredith para impedirle el paso, sin embargo, Evan se coloca en la delantera con una mano es su espada
Meredith posa sus ojos en la señorita Enma con tal fuerza que logra que esta retroceda un paso.
- "Calla, niña"
Anuncia Meredith con una voz profunda mientras reanuda su caminata y dejando a los caballeros paralizados a tal grado que no pueden detenerla.
- "Meredith vuelve a tu habitaci..."
El Duque se interpone en el camino de Meredith, hay algo en la nota de su voz que me ocasiona escalofríos.
Sin embargo, Meredith, lo ignora, y comienza directamente hacia mi y cuando llega a mi altura siento como mi respiración se detiene.
- "Tu, ven ahora"- demanda
No era a mí a quien buscaba.
Lord Yixing que están a mis espaldas se sorprende por el repentino llamado.
- "¿Cómo est...?"
Lord Neithan comienza en el instante en que Meredith hace el ademán de alejarse pero solo unos segundos más tarde soy consciente que mi cuerpo se ha movido por sí solo y ha tomado su muñeca impidiendo que continúe.
Necesito...
Necesito...
Alejo mi mano rápidamente cuando los ojos de Meredith se colocan en los míos.
Fríos.
Meredith nunca me había dado una mirada tan helada y disgustada.
Ni siquiera cuando estuvimos los primeros días en la academia.
- "Yo..."- trato de explicarme pero Meredith ya se ha apartado con Lord Yixing para entrar a una habitación lateral y cerrar la puerta con llave
Todo ha pasado tan rápido.
- "¿Qué pasó, señorita Enma?"
Lord Eret se acerca a la hermana menor de Meredith y eso parece romper el estado en el cual Meredith nos dejó.
- "Despertó poco después de que Lord Frederick se retirara, esta vez no hubo un comportamiento agresivo, pero exigió ver de inmediato a Lord Yixing y cuando le comunique que primero debe ser revisada por el médico simplemente salió de la habitación con la ayuda de su caballero"
Evan se ha quedado detrás de la puerta donde Meredith está conversando.
- "¿Entonces que...?"- comienza Philip antes de ser interrumpido por el mayordomo del Ducado que viene con prisa
- "Mi señor"- comienza dirigiéndose al Duque- "El Emperador ha enviado un carruaje para llevarlo al palacio"
El Duque no dice nada pero su expresión indica la su falta de entusiasmo.
- "Iré en este momento"- dice partiendo- "Cuando vuelva hablaremos de lo sucedido con Meredith"
No hay mucho que decir, solo falta esperar que Meredith salga de la habitación. Así que dejo caer mi espalda en la pared y cierro los ojos.
Tres horas después la habitación finalmente se abre.
Meredith sale con una expresión severa en su rostro y por los gestos de su acompañante no fue una plática agradable.
No he dejado mi lugar y los otros tampoco.
Hasta el Duque ha regresado del Palacio con una expresión grave y se ha encerrado en su oficina pidiendo no ser molestado después de todo este tiempo.
- "¿Tu padre?"
Las palabras salen hacia Cristian que se ha congelado por el repentino contacto.
- "Está en su oficina"- es Philip quien responde al final- "Si requiere hablar con alguien puede hacerlo conmigo..."
Meredith no tiene interés en él y rápidamente se abre paso a la oficina del Duque sin ser anunciada dejando la puerta cerrada a su espalda.
Escucho que los demás empiezan hablar entre ellos y yo solo quiero apartarme.
- "Ve con Izan"
Lionel asiente y yo me alejo de la oficina del Duque para salir de la mansión.
Hay varios diviertes que me saludan al verme pasar pero los ignoro, necesito estar solo.
Desde que salimos de aquella cueva, todo se ha vuelto caótico.
Esperaba solo volver a este lugar, dejar que Meredith descansará y abrazarla en el instante en que despertará. Lo que se nos mostró en aquella cueva hizo que enloqueciera, solo quiero que todos los que se atrevieron a tocarla se arrepienten hasta su último suspiro.
Pero ahora que no recuerda quién soy yo y me muestra esos ojos de indiferencia siento que me están carcomiendo por dentro. Fue lo mismo que sentí al ver como se arrojaba a los brazos de Izan y lo besaba.
Nunca había visto esa mirada en el rostro de ella.
Para nadie.
Llena afecto y confianza absoluta.
- "Este lugar me trae paz"- La voz de la señorita Enma penetra mi pensamientos y solo ahí me percato que me encuentro en la mitad del bosque del ducado junto al lago- "Suelo venir aquí cuando quiero despejar mi mente"
La tarde está cayendo pero aún hay suficiente luz.
El lago se encuentra calmo.
No la escuche llegar.
- "Deseo estar solo, señorita"- respondo sin apartar mi vista de las aguas
- "Me preocupe al verlo marcharse de esa manera"- continua sentándose en el pasto y tocando el agua con la punta de sus dedos- "Se lo mucho que aprecia a mi hermana"
- "Es mucho más que eso"- corrijo
Mi declaración hace que sus ojos se abran en asombro pero al final una sonrisa pequeña se posa en sus labios.
- "Mi hermana es afortunada"- sigue- "Estoy segura que cuando su memoria regrese ella estará feliz de escucharlo"
- "¿A dónde quiere llegar con esto?"
- "En el instante en que entendí que mi hermana perdió sus recuerdos por un pequeño segundo me sentí aliviada"
- "¿Disculpe?"
Una pequeña brisa corre haciendo que el cabello dorado de la señorita Enma se mueva ligeramente.
- "Lo sé"- dice sin quitar su sonrisa- "Se como suena y cuando me di cuenta de mis pensamientos me sentí avergonzada, sin embargo, por ese segundo consideré que tal vez si mi hermana perdió sus recuerdos las cosas podrían cambiar"
- "¿A que se refiere?"
¿Acaso quiere hacer daño a Meredith?
- "Una familia"- finaliza colocando un mechón de su cabellos por detrás de su oreja- "Pensé, si mi hermana ha perdido sus recuerdos es posible que podamos cambiar nuestra relación. Ir todos en familia a cada domingo de primavera, salir a pasear y de compras en el centro de la ciudad, disfrutar juntas la academia mientras nos apoyamos una a la otra"
- "Hacerla tu marioneta personal"
- "Y sobre todo, la pérdida de los recuerdos de esos días de niños"
Me quedo en silencio mientras analizo lo que la señorita me dice.
Si Meredith no recuerda aquello
¿No sería una ventaja?
- "No digas estupideces"
Mi voz es más dura de lo que pretendía pero no puedo evitarlo.
No importa lo que haya pasado, todo lo que ha sucedido hace que Meredith sea quien sea hoy.
La persona a la cual amo.
- "Lo sé, majestad"- dice la señorita Enma levantándose del suelo para fijar su mirada en mí- "No quiero volver a perder a mi hermana. Por eso necesito su ayuda para traerla de vuelta"
No puedo evitar tener sospechas de lo que ha dicho.
Pero si hay una oportunidad...
- "¿Qué es lo que sabes?"
- "Cuando estuvimos encontré esto"- dice mostrándome un viejo cuaderno
- "¿Dónde diablos conseguiste esto?- me acerco a ella y la tomó duramente de los hombros
Es el mismo cuaderno que Meredith llevaba consigo a todos lados en la academia. Aquel que nunca se despegaba, ni siquiera permitía que Lord Yixing lo tocará.
- "Ese libro es un escrito de la Santa"- dice sin contestar mi pregunta y tampoco sin apartarse de mí- "No es nada certero pero en el podría haber la solución. He hablado con los demás y están de acuerdo que esta es la mejor posibilidad de traerla de vuelta"
Quiero lastimarla, hasta que ninguna palabra salga de sus labios.
¿Por qué mierda ella está ofreciendo una respuesta cuando es su culpa que todo esto pasará?
Meredith nunca hizo nada pero todo fue culpa de la persona que está en mis manos en este momento.
Si solo no existiera...
- "¿Quieres que me una a ustedes?"
La señorita Enma no dice nada por un momento pero al final escucho un pequeño suspiro salir de sus labios.
La brisa se balancea lentamente a nuestro alrededor envolviéndonos.
Escucho las palabras que salen de ella y bajo lentamente mi mano. Y cuando al fin termina de hablar solo puedo pronunciar una palabra 'Está bien'
Si es para traer a Meredith de vuelta trabajaré con su hermana.
********
- "Una vez más"
- "Pero, majestad..."
- "¡Una vez más!"
Lionel solo asiente y vuelve a alzar su espada en el instante en que finjo que no veo su mirada de preocupación.
He perdido la cuenta de cuánto tiempo hemos estado aquí pero es la única manera en la que puedo despejarme.
Después de todo, estos días han sido más ajetreados de lo que considero.
Especialmente con la señorita Enma y su plan a mi lado.
Ella dijo que debíamos esperar hasta tener un nuevo avance con la posición que está realizando según ese cuaderno.
Retrocedo justo en el momento en que Lionel se acerca peligrosamente a mi costado. Estoy consciente que de que su fuerza se ha reducido considerablemente pero no me interesa.
Cuando la espada de Lionel vuelve a caer no puedo evitar sentirme frustrado.
Me siento encerrado.
- "¡Alza tu espada otra vez!"
Estoy seguro que Lionel está considerando golpearme pero no lo hace alzando su espada una vez más.
- "Ya basta"- su voz se filtra por todo el campo de entrenamiento haciendo que baje mi espada- "Lionel por favor, retírate"
Limpio el sudor que cae de mi rostro con mi brazo y no puedo evitar lanzar una mueca de disgusto a Izan cuando pronuncia esas palabras y es peor al percatarme que Lionel las obedece.
Escucho el murmullo de los caballeros del Ducado junto con el de los otros invitados pero no podría interesarme menos.
- "¿Qué crees que estás haciendo?"
- "Evitando que se auto lastima"
- "Vete"- gruñó alzando mi espada
Veo a Izan suspirar del cansancio.
- "Lo que pasó esta mañana no ha sido mi culpa, majestad"- dice con una voz tranquila
Solo recordarlo hace que mi sangre hierva.
Soy veloz cuando deslizo mi espada hacia Izan, sin embargo tal y como esperaba de mi mano derecha, él lo descarta con facilidad.
- "Majestad..."
Vuelvo alzar mi espada de una manera rápida lo que obliga a Izan a sacar su propia espada para defenderse.
He visto a Meredith desde lejos estos días.
El Duque anunció que nadie podía acercarla, solo él mismo, la Vizcondesa y Lord Frederick pueden verla.
Nadie mas, aun Evan tiene prohibida la entrada. Solo puede custodiarla desde lejos.
El Duque Bausteros dijo que era lo mejor para no alterarla.
Se la ha pasado junto con Lord Frederick y la Vizcondesa en busca de tratamientos para su memoria, pero no parece ver progresos, es más, cada día sus pensamientos se vuelven cada vez más confusos.
Hasta el punto en que no reconoce a las personas que están junto a ella.
Como lo que sucedió esta mañana.
La Vizcondesa estaba atendiendo a Meredith en el momento en que ella perdió el juicio y trató de atacar.
Un ataque de pánico mezclado con agresividad.
Por suerte nos encontrábamos cerca de ellas, sin embargo, a pesar de que Lord Eret, Lord Neithan, la señorita Enma y yo tratamos de detenerla fue imposible hacer que se calmará.
Hasta que Lord Yixing llamó a Izan.
En el instante en que Meredith lo vio algo en mi se rompió una vez más.
Se alejó de la Vizcondesa para arrojarse a sus brazos pidiendo que no la dejará y a pesar de la confusión en el rostro de Izan, este la atrajo a su pecho con fuerza y la alejó de aquel lugar para llevarla a su habitación.
Se necesitó una hora para que finalmente se durmiera.
Lord Frederick aseguro que eran secuelas de la magia aplicada aquellos cambios de humor y que sería más graves si no se encontraba una solución con brevedad.
- "Solo la escolte a su habitación"- dice Izan logrando que mi atención vuelva a él- "Solo quise ayudarla"
La fuerza de mi espada es tal que hace que Izan tenga que usar su magia para evitar que lo lastime.
- "Lo se"- digo guardando mi espada
Me alejo de él y caminó lo más lejos que pude.
Entiendo su posición...
Pero yo...
- "¿Lo hará? ¿Qué pasa con Enma?"
- "Yo no..."
- "¡Me aleje de ella por ti! ¿¡Y ahora habla semejantes palabras!? ¿¡Que ocurre con lo demás!?
- "¡Yo tampoco lo sé! Mi padre junto con el Duque me lo han pedido y yo..."
- "¿Acaso seguirá siendo controlado? ¿No cumplir lo que más deseas? ¡Me rogaste que dejara mis intenciones con Enma! ¿Y ahora... y ahora.. vas a dejarla? ¡Dijiste que la amabas! ¡Yo me aleje de ella porque era la mujer que mi mejor amigo amaba! ¿Qué son aquellas atrocidades que acabo de escuchar entonces?"
La voz de Lord Frederick tiembla de rabia mientras su voz sube cada vez más en contra de Lord Eret que solo tiene su cabeza gacha.
¿Al mago le gusta la señorita Enma?
Como sea no es de mi interés, doy un paso para revelar mi presencia en los establos en el instante en que la voz de Lord Eret me detiene.
- "No se como me siento"- habla finalmente- "Solo se que en estos momentos no quiero cancelar mi compromiso con la señorita Meredith"
- "¿Qué?"
- "Antes de volver a la academia este periodo, estaba completamente seguro que la señorita Enma era la indicada para mi pero poco después la señorita Meredith cambió y se mostró diferente. Algo hipnótico"
El puño de Lord Frederick es sonoro cuando golpea el rostro de Lord Eret que cae al suelo sin poner resistencia.
- "¡Por ti me rendí con Enma! ¡La aleje por ti! Y ahora que la señorita Meredith ha demostrado su negatividad hacia ti ¿La quieres ahora? ¿¡Estás enfermo!?"
- "¡Es por eso que el plan del Duque y mi padre es perfecto!"
La risa sin nada de alegría de Frederick se escucha por todo el lugar.
- "¿En serio crees que puedes obligar a la señorita Meredith a casarse contigo ahora que ha perdido sus recuerdos?"
Un escalofrío recorre mi cuerpo.
- "Mi padre se enteró de lo sucedido en las ruinas, él fue quien convocó al Duque para discutirlo. La esperanza de volver a lo que era antes de que la señorita Meredith no se mostrará receptora de mi afecto. Nos casaremos y gobernaremos juntos. Ella es mi prometida y esto ya se planteó con anterioridad, la boda será la próxima temporada"
- "¿¡Acaso estás loco!? ¡Por la Santa! ¡La señorita te odia!"
- "¡Es mi oportunidad! Si le demuestro que he cambiado y que soy digno de ella puedo hacer que se vuelva a enamorar de mi mientras consumamos el matrimonio. Es por ello ¿Podrías evitar que recupere sus recuerdos para siempre?"
¿Qué demonios?...
- "¿Y qué hay de Enma? Ella quiere a su hermana a su lado"
El silencio se apodera de la conversación solo por unos segundos.
- "Ella siempre es mi primer amor, pero Meredith... "
Un nuevo puñetazo se escucha.
- "Fui un tonto al pensar en dejarte a Enma"- dice Lord Frederick con frialdad- "¿La dejas ahora que piensas que tienes una esperanza con la señorita Meredith? Ella nunca regresará a verte
-" Puedo empezar de nuevo"- susurra Eret como si estuviera convenciendo a sí mismo- "Una nuevo camino"
- "Maldito loco"- finaliza Lord Frederick- "¿Quizás crees que terminarás como tus padres? ¿Qué crees que sucederá cuando tu madre se entere de la verdad acerca de tu padre? ¿En realidad quieres vivir con ese temor al igual que tu padre, si logras acercarte a la señorita Meredith así?"
- "Ellos son felices"- su voz se quiebra
- "Hasta el momento en que tu madre se enteré ¿Qué crees que sucederá si la señorita Meredith recupera sus recuerdos y te ve a su lado? ¡Entiende, no la puedes...!"
- "Soy el futuro Emperador"- dice hablando para sí mismo
- "¿Qué quieres decir?"
- "Ella me lo dijo... Puedo obtener lo que quiero... Tengo poder, autoridad y yo... Ella fue entregada a mi desde el primer momento ¿Por qué no reclamar lo que me pertenece?"
Logró visualizar solo un poco el rostro de Frederick pero hay una expresión clara en su rostro.
Terror.
Está petrificado por las palabras de Eret.
Y no es el único.
El rostro de Eret se encuentra desenfocado, como si no fuera él.
¿Qué diablos?
- ¡Lo hemos encontrado!
El grito de la señorita Enma es quien interrumpe el momento.
Ella ingresa al establo seguido de Lord Neithan y Scar los cuales miran extrañamente a Lord Frederick y Eret, este último se coloca en pie.
-¿Qué encontraste?
Decido mostrar mi presencia.
Parece que la emoción de las palabras de la señorita Enma hizo que tanto Lord Frederick y Eret vuelvan a sus sentidos y que nadie preguntará de porqué me muestro ahora.
- ¿De qué está hablando, señorita?- pregunta Eret con cierto tono en su voz
- Al fin encontré algo útil en el cuaderno de la Santa finaliza- La manera de traer a mi hermana de vuelta. Ella volverá
Finaliza con una sonrisa.
*********
Buenas Buenas...
¿Cómo están? ☺️
Y perdón que me he desaparecido y por el capitulo cortito.
Pero he aquí de vuelta. 😝
¡Adivinen quien se va a comprar un álbum de su grupo favorito porque ya hacen comeback?
👑👑EXO IS BACK 👑👑
Estoy tan emocionada... aunque me estoy quedando sin sueldo jaja
¿Ustedes tienen algun grupo favorito? 🎤
Pero bueno, muchas gracias por su paciencia.
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