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HUÉSPED O PROPIETARIA
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CARLOS FAVRE
Nikolas analiza la hoja de la cronica de Nara escrita en lengua de brujos, alza una ceja, confundido. Miré a Cyprian, y le doy la razón: No tiene ni la menor idea que dice.
—Es nieto de Nara. ¿Cómo es que no sabes su lenguaje secreto?—Pregunté, incrédulo.
Él deja la hoja en la mesa.
—Disculpa, pero mi abue solo era eso, tu no aprendes lenguas antiguas con tu abuela, cocinas galletas con chocolate caliente—Se defiende.
Eso me indigna, ya que yo no pude conocer a mi abuela, así que no tengo la menor idea de que es tener una.
—Era la mejor bruja de todos los tiempos, debió darte alguna herencia de ese poder—Exclamé.
—Tú sabes muy bien que ella no me veía como un sucesor, sino como su nieto consentido—Me ataca.
—Eras su único nieto, imbécil.
Él comienza a mover sus manos en el aire con suavidad, como si bailaran, hasta terminar levantando el dedo del medio. Fruncí mi ceño, ofendido. Cyprian rueda los ojos y suelta un gruñido de exasperación.
—Esto es inutil, hay que ir con el profesor Logan— Espetó.—Él es el único que puede traducir lo que dice.
Me levanta del sillón, cruzandome de brazos.
—Jessica lo perdonó solo si no volvía a la Alianza, no querrá meterse en más problemas. — Apretó sus labios, indeciso. — ¿Qué podemos hacer? ¿Obligarlo?
Comparten miradas con Nik, y Cy se encoge de hombros. Se lo que están pensando y rápidamente me opongo.
—No, no, no somos matones—dije molesto. —¡No!
Se dirigen al estacionamiento subterraneo, conmigo quejandose detras de ellos. Al estar frente a mi auto, niego con la cabeza, apretando las llaves fuertemente en mis manos.
—Vamos—Pidió Cy. —Yo no sé conducir, pero si quieres Nik lo hace.
Miré al brujo, que esbozó una media sonrisa.
—Y hasta el día de hoy sigo pagando el mercedes de Jessica que destruí, saliendo del estacionamiento—Recuerda él. Solté un quejido. — ¡Carlos! ¿Mataste a un demonio y ahora tienes miedo?
—No es eso, es que no sirvo para extorsionar.
—¡Yo conduzco!—Salta una cuarta voz.
Damian, el nuevo entrenador de Cy, se acerca a mí y siento como me pongo rojo de la rabia
—El grupo está completo, gracias—Mascullo entre dientes.
—Arriesgue mi vida por esas hojas, tengo derecho a saber lo que dicen—Mira a Cyprian —Le dire a Luna Ravena que tu entrenamiento está completo.
Él no tuvo que pensarlo dos veces.
—Bienvenido al club—Dijo.
Se sube a los asientos traseros junto Nik. Damian se pone frente a mi con una sonrisa burlona y extiende su mano.
—Vamos, lobito—Susurra.
Le entrego la llave bruscamente. Y nos subimos.
—Este auto vale más de lo que ganarás en toda tu vida, así que cuídalo, animal— Suelto, con condescendencia.
Rueda los ojos.
—¿Y a dónde vamos?—Nos pregunta.
—A Lyon, cerca del bosque Luna Negra—Respondió Cyprian.
—Uy, el bosque de los demonios—enciende el auto.
El viaje se volvía más incómodo a medida que nos acercabamos a ese pueblo. Todo lo sucedido a finales del verano viene a mi mente, creo que a la mente de los tres. Se que el profesor Logan no eligió este lugar por coincidencia, quería estudiar lo que más le apasiona: demonios.
Volteé a ver a Cyprian, y él tardó en despegar su vista perdida entre la carretera, me mira y comprende el brillo en mis ojos. "Estoy bien" modula sin hacer ruido. Al cruzar por el centro, en el callejón de una bar había un tumulto de gente y patrullas.
—Diosa ¿Qué habrá pasado?—Cuestione, con un fuerte escalofrío.
Fruncí el ceño al ver un cuerpo tendido en el suelo, pero algo peor pasa, de él salían pequeños hilos negros. Los tres nos miramos, haciéndonos la misma pregunta.
¿Fue Eckvan?
Llegamos a su pequeña cabaña a pocos metros del bosque. Damian se estaciono como el bruto que es, levantando un poco de polvo. Nos bajamos, y Cyprian sube al porche primero para tocar. Damian a pasos lentos, va hacia la ventana para fisgonear. Cyprian toca nuevamente, pero nadie atiende.
—¿Profesor Logan?— pregunta Cyprian alzando la voz.
—No está—Dice Damian.
Suspire.
—Entonces vamon...—Me callo cuando Cyprian revienta la perrilla de la puerta con un hechizo.
Su casa era un verdadero desastre, muebles destrozados, papeles esparramados por todo el piso de madera.
—Creo que alguien se nos adelantó—Dice Nik.
—Él siempre traía una libreta de apuntes—Explica Cy.— Hay que buscarla.
Entramos a la cabaña, Cyprian va directamente a su escritorio. Nik busca entre los escombros de un mueble y yo en los papeles tirados.
—¿En serio nadie va a preguntar dónde está o qué le pasó?—Exclama Damian, se lanza al sofá y ojea el vaso de licor en la mesa de centro, llena de hojas de papel en blanco.
—Por los destrozos y la clara violencia es obvio de quién se trata, e intentar rescatarlo es una misión suicida.—Dice Cyprian, hurgando en un cajón.
Damian me mira con el ceño fruncido.
—Amina Belanger—Respondí, con intenciones de asustarlo y funcionó.
Palidece un poco, y se limita a hacer una mueca rara con sus labios tratando de disimularlo. Se lleva el vaso de whisky a la boca. Niego con la cabeza y puse los ojos en blanco, cansado de su presencia.
—Carajo ¡No está! —Cyprian golpea el escritorio con rabia.
Nik y yo fuimos rápidamente hasta él.
—Calmate, hermano—Nik acariciaba su hombro.
—Tal vez no deberíamos saber lo que dice— Dije.
—Esta es la única esperanza que tengo de recuperar a mamá, Carlos, no voy perderla...
Fue interrumpido cuando Damian expulsa todo el whisky de su boca como si fuera un puto aspersor sobre la mesa de centro. Contraigo mi cara de asco, él se levanta con urgencía, llendo a lavaplatos.
—¿Qué rayos te suceda, imbécil?— Cuestiono, enojado.
Enciende el agua fría y comienza a hacer gárgaras con ella. Trata de hablar con la boca llena, y al escupir, sale una gran cantidad de sangre. Suelto un chillido de impresión.
—Esa mierda tiene estramonio—Dice a duras penas.
—¿Qué?
—Es una planta venenosa, en los humanos provoca alucinaciones, en los brujos puede ser mortal—Indica Cyprian —Además de bloquear la magia. Es una de las formas preferidas que tiene Amina para torturar a los brujos.
Observo la mesa. Me acerque lentamente, queriendo saber si no me estoy volviendo loco, porque de apoco de las hojas de papel que antes parecían vacias comienzan a aparecer escritos en tinta roja y negra. Y debajo de ellas, se asoma la punta de una libreta de cuero negro.
—Chicos—Los llame.
Ambos se acercan a mí.
—Clásico del profesor Logan—Asegura Nik. —Así le mandaba mis calificaciones a mi abuela, malnacido.
—Bien. —Cyprian saca de su chaqueta un pañuelo de tela y toma con cuidado la libreta. —A traducir.
Casi mágicamente Damian se recupera, y se sienta a su lado. Pasó más de dos horas, y creo que esto será largo, porque discuten por el significado de una palabra cada tres minutos. Me muevo de un lado a otro, hasta que mis pensamientos y sentimientos me sobrepasan.
—Nik, podemos hablar— Le pedí.
Él asiente. Vamos a la habitación.
—¿Qué sucede?—Pregunta.
—¿Cuidarías a Cyprian una hora?
—Claro, pero ¿A dónde vas?
Volteo a ver si Cy está mirando, pero habla con Damian o más discuten sobre el significado de un símbolo. Miró nuevamente a Nik, y carreaspeé.
—Voy a buscar a Abel. —Susurre. —Es obvio que ellos tres esten aquí, buscando como devolver a Diana Ayleen a la vida. Seguro que en un departamento, vi unos de lujo a viente minutos de aquí.
Él se tensa.
—Te pueden hacer daño, Carlos.—Refuta con rapidez— Ya nos les importa la alianza, y eso lo demostraron en la fiesta de Jessica.
Alzo mi mentón, pronto mi corazón latía con intranquilidad, preguntandose si fue buena idea decirle a dónde iba.
—Abel jamás me haría daño, y no dejaría que Atlas o Amina lo hicieran.—Asegure. Intento cambiar el ambiente tenso con una broma. —Si lo encuentro, te envió un mensaje si necesitare una hora mas, ya sabes.
Solté una risita, pero él mantiene su seriedad. Eso no era común en Nikolas, en ninguna circunstancia. Enderezo mi postura, y copio su expresión rígida.
—Para mí, él no es un traidor y me vale mierda si quieren matarme por amarlo.
Nik relamió sus labios, y veo como sus ojos se tornan de un leve rojo.
—Carlos... júrame que no le dirás a nadie que te dije esto, sobre todo a Cyprian, él ha estado muy unido a Jessica y no quiero arruinar eso—Susurra. — Ella mataría si sabe que te lo dije.
Un malestar extraño se instaló en mi pecho al escuchar su tono lugubre, aprieto mis puños porque el dolor se intensificó cuando sus ojos azules se cristalizaron. ¿Qué es lo que pasa, Diosa?
—Lo juro, pero ¿De qué hablas?—Murmuró con dificultad.
—Alexa...ella.
—¡Tenemos la primera página! —Celebra Cyprian. —Es una carta. ¡Una cartaa!
Observo cómo está de feliz, y eso me emociona porque hace meses no le había visto una sonrisa. Olvidé todo por completo y corrí hacia él, dejando a Nik atrás.
—Dime, Cy— Digo.
Él relamió sus labios, y comenzó a leer en voz alta:
Querido Tio Nikolas:
A pesar de estar en pleno calor de la guerra espero que te llegue esta carta con la urgencia requerida. A estas alturas sabes qué bando elegí, pero espero que no hagas caso a las calamidades que dicen de mí y leas esto.
Yris Eckvan ha caído hoy en batalla por escoger el bando equivocado ¿Como no temer si es capaz de asesinar cruelmente hasta su propia sangre?
Todos quienes apoyan a Rhea morirán, Nara. Me dijo ella. Eso fue un ultimátum y no quiero arriesgarte a ti ni a la abuela.
Sin duda, la rivalidad entre ambas hermanas trae siempre consigo un mar de sangre y milenios de pena.
Te escribo para advertirte sobre su ya posicionado Orbe Negro: Ella esta reclutando mas propietarios para sus huespedes del otro mundo.
El orbe negro no es mas que una alianza de demonios, tio, algo que el bastardo de John Magnois y sus amigos no entienden, porque apesar de que el huesped no puede controlar los sentimientos de quienes poseen, ya que ellos en su naturaleza no sienten nada, esa anomalía no sucede cuando los propietarios sean convertido en sus brujos sanguinarios.
Por favor, cuídate de ellos y de este pentagrama en su muñeca, porque entonces, ya no se trata de tus queridos alumnos y el hambre los vuelve locos.
Mi sonrisa se borra y debo de tomar asiento en el sofá porque mis piernas comienzan a fallarme. Levante una mirada brillosa de miedo hacia Cy.
—¿Me estas diciendo que Eckvan puede estar creando ahora mismo un ejercito de Adams?—Pregunté, con un nudo en la garganta.
Cyprian aprieta sus labios y asiente. Nik se pasa las manos por la cara negando con la cabeza, tratando de controlar sus nervios.
—¿Adams? ¿Qué es eso?— Damián alza una ceja.
El corazón me comienza a palpitar desenfrenado. Si un solo demonio creó todo ese caos en tan poco tiempo, no me imagino lo que nos espera.
—Definitivamente necesitamos que vuelva Diana Ayleen—Dije.
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JESSICA FAVRE
Apago la celular apenas entra una llamada de Vicente y lo dejo en la barra, junto a mi vaso de whisky. Vuelvo la mirada a su anillo de compromiso, que lo sostengo en mis dedos y solo lo observo, algo que se está convirtiendo en un ritual.
Estoy segura que ante tan patetica escena, Liayh como fiel creyente del Karma, me diría algo como: Te lo mereces por romperle el corazón a cuanta jovencita pudiste, idiota. Por tu culpa, nos quedamos sin pan ni pedazo.
Tomé un largo trago de la bebida, dejando el vaso casi vacío. Esta mierda no causa efecto en mi, no si es mi segundo vaso. Iba a ordenar otro cuando un olor a ser sobrenatural impregna mi nariz y mis instintos se enloquecen.
No es normal, estoy en un bar de humanos, lejos de la alianza.
Sus pisadas van directo hacia mi dirección, y lo agradezco. Sonreí. Tengo unas ganas inmensas de sacarle el corazón a alguien en este momento. El olor se hace más fuerte cuando se sienta a mi lado, y sin mirar, noto algo.
Es una hibrida.
—¿Le sirvo otro, señora Favre?—El barman se posiciona frente a mí.
Asiento, y llena mi vaso.
—Mejor que sean dos—Dice ella, la miro. —Yo invito.
El barman asiente.
Tengo identificados a los pocos híbridos que existen fuera del límite, todos en la zona sur de Francia, por eso esto es inusual, porque jamás la había visto. No puedo evitar notar ese cabello rojo corto amarrado en una pequeña coleta.
—Gracias, pero me gustan las castañas— Dije a secas, volviendo la mirada al anillo.
Escucho su risa.
—Y a mí pelinegras—Responde, con una sonrisa.
El barman llega con su trago, y noto algo extraño en él, trata de no acercarse a la híbrida, estira su brazo y deja el vaso para largarse con rapidez. Bebe un sorbo y arruga su nariz con desagrado, eso me hace fruncir el ceño, teniendo un espeluznante deja vu.
—¿La dueña de ese anillo es a la que intentas olvidar con esta mierda?—Pregunta.
La miro de frente por primera vez, y noto que somos del mismo tamaño, es una híbrida alfa. Vestida completamente de negro y un collar con un dije oculto en su abrigo.
¿Quién demonios es?
Me sonríe.
—¿Cómo te llamas?— Cuestiona.
La curiosidad me invade, y decido seguirle el juego. Dije el primer nombre que se me viene a la mente.
—Jessica.
Asiente.
—Escuchame, Jessica. Yo he estado en tu situación. No dudo que tu chica y la mía hubieran sido grandes amigas —Dice. — Pero no hay algo que me baje el celo tanto como la puta deslealtad. Y lo que me ayudó fue darme cuenta que ella era una maldita traidora.
—¿Por qué crees que tu chica es igual a la mía?
Me apunta con el vaso en la mano, con sus ojos de diferente color mirándome fijamente, y antes de beber todo su contenido, dice.
—Tienes cara de que te gustan las maniacas.
Asentí, reconociéndolo. Ella suelta a reír.
—Esta basura no te sirve para olvidarla—Se refiere al whisky. —Necesitas algo mas.
Saca de su abrigo una licorera plateada, y nos sirve a ambas un poco de ese liquido de un amarillo potente. Me extiende mi vaso, un olor fuerte a algo que no conozco me hace ponerme en alerta.
Me incita a tomarlo junto a ella, alzando el vaso en el aire. Lo observé unos segundos, tratando de descifrar si era creación humana o de otra especie.
El rostro se me tensa bruscamente, y salen mis colmillos queriendo atacar.
—Es obvio que no sabes con quien estas hablando—Mascullo enojada. — No tolero a los traficantes en mi territorio.
La pelirroja niega con la cabeza con una media sonrisa y bebe el trago sin hacer una mueca esta vez. Me levanto y ella me copia para quedar frente a frente.
—No creo que haya un ser en la faz de la tierra que no sepa quien es Jessica Favre y de lo que es capaz.
—¿Y tú? ¿Quién carajos eres?—Pregunte.
—Alguien que no quiere problemas—Respondió. —Solo quería entablar una conversación pero creo que no te encontré en tu mejor momento.
Deja un billete en la barra, y me vuelve a mirar.
—Le sugiero que tenga cuidado con los lugares que frecuenta, alfa suprema. — Murmura, se inclina ligeramente hacia mi— Hay ojos en todas partes, monstruos ansiosos de ganarse la aprobación de su reina.
Da media vuelta y camina a la salida. Sin embargo, mis instintos no se calman. Y observe a los humanos a mi alrededor, grupos en cada mesa siendo atendidos por meseras. En ese instante un hombre desvió mi mirada hacia mí fugazmente, para luego seguir hablando con sus amigos al darse cuenta que yo lo observaba.
Una camarera copió la acción. Luego una mujer desde una mesa, y lo siguió otra y otra persona hasta hacerme sentir rodeada.
Apreté los puños, y doy un paso adelante. Y comenzaron los gritos. Al menos una persona de cada grupo se trasforma en ese humo negro y huyen reventando el vidrio de las ventanas. Sus acompañantes no entendían qué pasaba y pronto se convirtió en un caos.
Mientras se desata el pánico entre los humanos, enciendo mi celular y le marco a Cyprian. Miro la licorera en la barra, dudo un poco, pero la guardo en mi saco.
—¿Dónde estás?—Le pregunto.
—De camino al castillo ¿Pasó algo?— Me responde.
—Espérame en mi estudio—Comienzo a caminar a la salida.
—Bien, tengo algo que contarte—Dice.
—Si, yo igual—Murmuro. — Llego en una hora.
—Okey.
Me detengo al salir al estacionamiento, y suelto un suspiro.
—Niño… Cuida que nadie te esté siguiendo, por favor, no quiero intrusos en mi castillo por tu culpa.
—Tu también cuídate mucho.
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Holisss. ¿Que les pareció el capitulo? Quiero que sepan que tuve que salir a la terraza mientras llueve como loco para encontrar una rayita de señal, solo para actualizar, aprecienlo jajaajsj. *Llora en campesina*
Todos aqui sabemos que a mi Jess le cuesta expresar cariño pero se esfuerza mi bebe.
De verdad no pense que tendría que hacer esto de nuevo pero, señoras, abel esta muerto, estiro la garra, esta tomando tecito con la Diosa Luna y Liayh. 😭😭😭
Gracias x leerme.
Byeeee.