Después de ayudar en la escena, ya era tarde cuando regresaron al escuadrón.
Ren Yi llevó a Miaomiao a su habitación, le abrió una lata de comida, le llenó un cuenco de agua y se fue a bañar.
Era finales de otoño, pero no abrió el agua caliente, dejando que el agua fría del baño cayera sobre su cabeza y rostro, enfriando la depresión en su corazón.
Impulsivo, pensó. No deberías perder los estribos, después de todo, Gong Yingxian solo quería ayudar.
Sin embargo, la obediencia absoluta a las órdenes al enviar agentes de policía era un principio grabado en sus huesos. La escena de un incendio era como un campo de batalla. Era un lugar tan peligroso, nadie podía estar exento. El comportamiento de Gong Yingxian en ese momento realmente lo preocupó mucho.
¿Qué pasaría si el tanque de almacenamiento en el camión todavía tuviera fugas? ¿Qué pasaría si los productos químicos que se filtraron reaccionaban con los óxidos? ¿Qué pasaría si se producía un incendio justo al lado de Gong Yingxian...?
Estos "qué pasaría si" en los que ni siquiera se atrevía a pensar eran la razón principal de su ira. Gong Yingxian tenía tanto miedo al fuego, ¿cómo podía poner a las personas en riesgo de incendiarse?
Por supuesto, después de calmarse, sintió que había ido demasiado lejos. Gong Yingxian tenía miedo al fuego, pero fue a ayudarlos sin dudarlo. Al menos debería darle las gracias.
Ren Yi suspiró profundamente, lleno de remordimiento, se golpeó la cabeza contra los azulejos del baño varias veces.
Un suave maullido vino desde atrás.
Ren Yi se dió la vuelta y vió que Miaomiao había abierto la puerta del baño que no estaba bien cerrada, una pequeña cabeza negra se asomó, mirándolo fijamente.
—¿Por qué me miras mientras me ducho? —Ren Yi mostró sus bíceps—. ¿Papá está en buena forma?
Miaomiao ladeó la cabeza.
Ren Yi bajó los brazos aburrido y suspiró:
—¿Crees que debería disculparme o algo así?
Los ojos dorados de Miaomiao miraron a Ren Yi sin parpadear.
—Fui un poco impulsivo, pero algo andaba mal con él. Soy el comandante, ¿cómo puede tomar sus propias decisiones? Es muy peligroso.
—Pero es imposible que se disculpe conmigo. ¿Sabes lo que dijo cuando le pedí que se disculpara conmigo? —Ren Yi frunció los labios y fingió imitar a Gong Yingxian—. Sé que te malinterpreté, pero no quiero disculparme contigo. Bah, ¿son palabras humanas?
—Pero... él no se disculpará, y si no lo busco, ¿entonces nadie hablará con nadie a partir de ahora? —Ren Yi se frotó el cabello con champú con irritación—. Para un hombre tan mayor, ¿es interesante jugar una guerra fría entre nosotros? Todavía tenemos que trabajar juntos.
Mientras hablaba consigo mismo, Ren Yi terminó de ducharse, se puso el pijama, tomó a Miaomiao y la puso en la cama. Apoyó la cabeza en sus brazos y miró fijamente el techo blanco. Lo que le vino a la mente no fue la pelea que provocó que los dos se separaran, sino el hermoso rostro de Gong Yingxian inclinado hacia él mientras llevaba la máscara antigás.
Se sobresaltó y de repente se despertó.
¿Qué pasaba con él? ¿Confundido por la apariencia de Gong Yingxian? Sería mentira decir que no tenía idea cuando miraba una cara y una figura como esa, pero ya había pasado la edad de juzgar a las personas por su apariencia. No debería tener pensamientos innecesarios entre dos personas que tenían casi nada en común de la cabeza a los pies.
Además, la forma en que Gong Yingxian miraba a Qiu Yan ya había dicho mucho y no buscaría problemas.
Debió ser su culpa que hoy tuviera pensamientos aleatorios. Será mejor que vaya a disculparse. Era absolutamente imposible esperar que Gong Yingxian acudiera a él por iniciativa propia. Tenía que ser más maduro y generoso, y no había necesidad de competir con el joven maestro mimado.
••••••••••
Cuando estaba haciendo ejercicios a la mañana siguiente, Ren Yi estaba un poco distraído. Sostenía su teléfono y dudaba si enviar un mensaje. ¿Debería enviar un mensaje primero para aliviar y calmar la atmósfera, o debería ir directamente a buscar alguien para resolver el problema cara a cara?
Ninguno de ellos era muy bueno, si su palacio de información no responde y no le da un paso, ¿tendrá que saltar alto y hacer las paces? Que embarazoso. Pero si corriera directamente hacia Gong Yingxian y pusiera una cara fría, sería aún más vergonzoso y no habría margen de mejora.
Ren Yi luchó durante mucho tiempo y estuvo un poco molesto, ¿cuándo se convirtió en una suegra?
—¡Capitán Ren, capitán Ren! —gritó Liu Hui sin aliento—. Hemos terminado de correr, ¿podemos descansar?
Ren Yi dijo superficialmente:
—Bueno, descansen.
Todos vitorearon y se dispersaron en el acto.
Cuando Li Sa pasó junto a Ren Yi, se detuvo y dijo sonriendo:
—Capitán Ren, ¿qué le preocupa? Ha estado loco toda la mañana.
Ren Yi la miró y le dió unas palmaditas en el costado abatido:
—¿Me acompañas? —estaba sentado en los escalones de la entrada del edificio del escuadrón. Esa posición era el "trono" donde solía ver el entrenamiento en el patio de recreo.
Li Sa estaba cubierta de sudor por el entrenamiento. Mientras se secaba el sudor, se sentó junto a Ren Yi.
—¿Qué pasa? —después de decir eso, bebió media botella de agua.
—¿Qué crees que me preocupa? —Ren Yi no tenía la intención de discutirlo con nadie, solo quería conversar un rato porque se sentía molesto. Abrió su propia botella de agua y tomó un sorbo.
Li Sa echó su cuerpo hacia atrás un poco, entrecerró los ojos y miró a Ren Yi de arriba abajo:
—Parece que hizo enojar a su novia y no sabe cómo persuadirla.
Ren Yi escupió todo el agua que tenía en la boca.
Li Sa se rió.
Ren Yi se limpió la cara:
—¿Qué demonios, cómo hiciste este juicio?
—Has estado mirando tu teléfono toda la mañana, tomándolo y dejándolo una y otra vez, pareciendo preocupado —Li Sa sonrió y dijo—. Acabo de hacer una suposición descabellada. ¿Qué? ¿Lo adiviné bien?
—Qué tontería —Ren Yi se sintió un poco culpable. Aunque Gong Yingxian no era ni una mujer ni su novia, ese sentimiento seguía siendo muy similar. La intuición de una mujer era demasiado aterradora.
—Entonces, ¿qué te preocupa? —preguntó Li Sa.
Ren Yi miró a Li Sa y tosió levemente:
—En primer lugar, dejame decirte que no tengo novia, pero solo por curiosidad, pura curiosidad. Generalmente... si haces enojar a tu novia, ¿cómo la convences?
—Ohh —Li Sa lo dijo de una manera significativa y sonrió en tono de broma—. Puedo enseñarte una serie de tres trucos, garantizados para funcionar.
—¿Qué trucos?
—Disculparse, comprar regalos y hablar dulcemente. Estas tres tácticas deben usarse juntas para garantizar la reconciliación.
Ren Yi parpadeó:
—Oh, ustedes, chicas, son bastante fáciles de convencer.
¿Podrán estas cosas funcionar para Gong Yingxian?
Li Sa le dió una palmada en el hombro a Ren Yi:
—Lo más importante es la sinceridad.
Ren Yi dijo:
—Tsk, deja de adivinar, estoy preocupado por el trabajo.
••••••••••
Al final, Ren Yi decidió enviar un mensaje para disculparse primero. Después de enviarlo, esperó mucho tiempo con ansiedad. Como era de esperar, no hubo respuesta del otro lado. Aunque lo esperaba, todavía estaba un poco deprimido.
Incluso realmente consideró si comprarle un regalo a Gong Yingxian o algo así, pero Gong Yingxian parecía tenerlo todo, y para una persona tan exigente, si no le daba el regalo correcto, sería contraproducente.
Después de pensarlo, Ren Yi sintió que sería mejor ir directamente a Gong Yingxian, pero no ahora. Calmémonos durante dos días, ya que tenía que lidiar con el papeleo que se había acumulado hace algún tiempo.
Esa tarde, mientras escribía un informe, Qu Yangbo le informó que Gong Feilan estaba allí.
Bajó las escaleras y vió a varios bomberos ayudando a Gong Feilan a cargar varias bolsas de papel, parecía que les estaba trayendo algunos bocadillos nuevamente.
—¿Feilan? ¿No vas a ir a la escuela hoy?
—Pedí permiso —dijo Gong Feilan con orgullo—. Tengo un resfriado y no quise ir a la escuela.
Ren Yi la reprendió levemente:
—¿No te irá mal si faltas a la escuela?
—No, realmente me resfrié hace unos días, pero ahora estoy bien. Iré a la escuela mañana —Gong Feilan corrió hacia Ren Yi con una sonrisa—. Acabo de venir de la casa de mi primo, el tío Sheng ha preparado mucha comida deliciosa para que yo la traiga.
—Acabas de venir de la casa de tu hermano? —Ren Yi fingió ser casual y dijo—. ¿Está en casa?
—Pasé a su casa a buscar algo y me encontré con él.
—¿Cómo está él?
Gong Feilan preguntó confundida:
—¿Cómo está?
Los bomberos que habían presenciado la pelea entre los dos hombres mostraron expresiones medio sonrientes pero sin sonreír.
Ren Yi los fulminó con la mirada:
—Oh, solo pregunto, debe estar bastante ocupado.
—Sí, pero cuando se enteró que vendría al escuadrón, le pidió al tío Sheng que preparara más cosas —dijo Gong Feilan, atribuyéndose el mérito—. Así que esta vez traje mucho, incluido dim sum cantonés y postres. Seguro hay muchos que te gustarán —dijo y comenzó a desempacar las cajas de bocadillos.
Ren Yi se sintió feliz. ¿Gong Yingxian tomó la iniciativa de pedirle al tío Sheng que le preparara más comida? Parece que Gong Yingxian se ha calmado y simplemente lo ignoró, siempre y cuando él tome la iniciativa...
—¡Ah! —gritó de repente Gong Feilan, sorprendiendo a todos.
—¿Qué, qué pasa?
—Mi mousse de mango —Gong Feilan miró el postre torcido en la caja y pisoteó con enojo—. Este era tan hermoso, ¿cómo sucedió que cayó así?
—Oh, esta caja también se cayó —Ding Qing abrió una caja y miró los pasteles de rábano que estaban hechos una bola en el interior, y dijo con pesar.
—Esta caja también...
La expresión de Gong Feilan cambió, y comenzó a revisar una por una. Descubrió que al menos la mitad de los exquisitos manjares habían experimentado una pequeña tormenta en la caja. Dijo enojada:
—¿Cómo puede ser esto? ¡Tuve mucho cuidado cuando las tomé y no se me cayó ninguna en absoluto!
—¿Podría ser que alguien más no las tomó bien?
Ding Qing y los demás rápidamente levantaron la mano:
—No fui yo. Tuve cuidado al tomarla. La caja ni siquiera se inclinó.
Sun Dingyi sonrió y dijo:
—Oh, qué gran problema, no te preocupes, nos comeremos todo.
Otros también hicieron eco y consolaron a Gong Feilan.
Gong Feilan todavía estaba confundida y dijo con tristeza:
—El tío Sheng y mi primo me ayudaron a subirlas al auto cuando estuvieron listas. El auto condujo sin problemas por el camino y tuve mucho cuidado al recogerlas en este momento. ¿Cómo pudo suceder esto?
Al escuchar esto, Ren Yi frunció el ceño:
—¿Tu primo te ayudó a moverlas?
—Sí, es raro que mi primo haga cosas tan triviales —Gong Feilan, molesta, fue a la cocina a buscar la vajilla.
Ren Yi quedó atónito durante mucho tiempo antes de darse cuenta de lo que estaba pasando. Estaba tan feliz. Apretó los dientes y dijo:
—Realmente eres una maldita jovencita.
—Capitán Ren, ¿está hablando de Gong Feilan? —susurró Liu Hui—. Creo que es bastante linda y no tiene el temperamento de una jovencita.
—Dije Gong Yingxian.
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Nos vemos en el siguiente🥰✨