𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑳𝒊𝒂
Iván, Vicky y Carol salieron detrás de mi, los demás se habían quedado peleándose con Pablo, como no.
Yo fui en dirección al baño, cuando entré me senté aún llorando en el suelo. Me jodía mucho que un tío tan amargado como él hable sin saber.
A los pocos segundos noté como se abría la puerta, así, encontrándome con los chicos.
Vicky se sentó a mi lado izquierdo, Iván en el lado derecho y Carol estaba de cuclillas enfrente mía.
Vicky: ¿Te encuentras bien, Lia? -dijo acariciando mi cabeza-
Levanté la cabeza dejando ver mi rostro, tenía los ojos hinchados y rojos. Cada vez caían más y más lágrimas por mis mejillas con tan solo recordar a mi hermano.
Iván me abrazó con fuerza, haciéndome saber que ellos estarían conmigo en cualquier momento pase lo que pase.
Los tres se miraron entre sí sin saber que hacer o decir, lo que si sabían es que en cuanto vieran a Pablo le darían una bofetada cada uno para que se quedara pegatina en el suelo.
Carol y Vicky me hablaba haciendo que me tranquilizara, después de unos minutos lo consiguieron.
Iván dijo de volver a clase aunque yo no quería, pero debía ir. Antes de salir me lavé la cara, después de unos segundos llegamos a clase.
Sentía las miradas sobre mi, todo el mundo me miraba sin ningún tipo de disimulación.
Al sentarme miré hacia Pablo, el cual me estaba mirando con sonrisa victoriosa.
[.......]
Estaba caminando por los pasillos mientras hablaba con Roque hasta que de repente él se para en una entrada que da para otro pasillo.
Lia: ¿Qué pasa? -dije mirándole sin tener respuesta- Roque, ¿qué pasa?
Roque: Mira -dijo señalando- ¿Por qué se comporta así?
Estaba señalando a un zagal de más o menos su edad, de estatura media y moreno. Me sonaba haberlo visto antes.
De repente el chico se cae al suelo dejando caer todas las cosas que llevaba con él y empieza a tocar la pared con su mano.
Roque se preocupa e inmediatamente va hacia aquel chico, yo iba detrás de él. Al llegar yo me puse a la altura del chico y Roque detrás.
Roque: ¿Estás bien, chaval?
Chico: No veo -dijo tocando la pared-
Lia: ¿Cómo que no ves? -dije preocupada y mirándo a Roque-
Roque se puso a la altura del chico justo detrás suya para ayudarle a todo y preguntarle más cosas.
Chico: No veo nada, está todo negro -dijo alterado y con la respiración acelerada-
Roque: ¿Qué..? Oye, ¿me esperas aquí un momento? Voy a buscar ayuda, te dejo con mi amiga -dijo para finalmente ir a buscar ayuda-
Lia: ¿Qué? ¡Roque! -dije llamándole pero sin tener una respuesta-
Chico: No, no te vayas -diciendole a Roque-
Lia: Ya se ha ido, no te preocupes. Estoy aquí contigo por si necesitas algo.
Pasaron unos segundos y el chico se sentó en el suelo mientras apoyaba su espalda en la pared, le mire a la cara y de repente empezó a salirle sangre de la nariz.
Lia: Te sale sangre de la nariz -dije más preocupada-
El chico se limpia la nariz asustado. Yo me levanté muy alterada y asustada, no sabía que hacer.
Lia: Espera un momento aquí, voy a buscar a mi amigo y ayuda.
Cuando estaba apunto de irme el chico me habló haciendo que yo me diera la vuelta para mirarle.
Chico: No espera, creo que ya estoy bien. Ya veo otra vez
Me acerqué otra vez al chico poniéndome a su altura de rodillas de nuevo.
Lia: Oye, esto es muy raro. Yo creo que deberíamos de ir a la enfermería o ir al despac-.. -dije tartamudeando pero no me dejó terminar-
Chico: No, ya estoy bien. Ya me apaño yo solo, muchas gracias.
De repente apareció el guardabosques del Internado detrás mía, me dió un susto de muerte en cuanto lo vi.
Guardabosques: ¿Estás bien?
Chico: Si, si.. Ya estoy bien.
Guardabosques: ¿Qué pasa? ¿Te ha vuelto a dar? -el asiente-
Lia: He estado todo el rato con él hasta que se le pasara, yo no sabía que hacer..
Guardabosques: Muchas gracias, mi sobrino ha estado teniendo estos ataques desde hace un tiempo, tiene una enfermedad que lo causa. Gracias por estás con él. -dijo para finalmente irse con su sobrino-
Lia: ¿Su sobrino..? -dije hablándole al aire-
De repente recibí un mensaje de Marcos.
𝐁𝐚𝐣𝐚𝐦𝐨𝐬 𝐚 𝐥𝐚 𝐞𝐫𝐦𝐢𝐭𝐚, 𝐭𝐞 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐦𝐨𝐬
Joder, no quería meterme más en esto pero son mis amigos y estamos juntos en esto.
A los pocos minutos llegué a la puerta de la ermita dónde me estaban esperando todos menos Vicky, obviamente.
Carol: Has venido -dijo mirándome-
Lia: Claro que sí, sois mis amigos y quiero estar con vosotros en esto.
Carol me miró con una sonrisa dibujaba en su rostro, para después bajar a la capilla.
Marcos: A ver... KF, vamos a ver.. -dijo buscando- Aquí hay un KF, Karl Fleischer, jefe de la Gestapo en Francia responsable de la tortura de 14.311 combatientes de la resistencia desaparecido desde 1948. Decidme otro.
Carol: Eh.. H.W.
Marcos: Hans Weidel, jefe de la Cancillería. General de las SS, secretario personal de Hitler.
Julia: ¿Pero dónde nos hemos metido?
Roque: ¿Y L.H?
Marcos: Ludwing Henninger, capitán médico en el campo de Dachau, huido en 1945.
Carol: O.U
Marcos: Otto Ulrich, comandante de los ejércitos del Rin y Mariscal de Luftwaffe. Se perdió su rastro al final de la guerra.
Iván: Esta silla es R.W.
Lia: El que se sentaba aquí tenía que ser el que manejaba todo el cotarro.
Marcos: No está. Hay un R.H., Rälg Heim. Pero R.W., no.
Carol: Pues yo no sé quién sería ese, pero todos los demás eran altos oficiales nazis. Y si este presidía las reuniones...
Lia: Tenía que ser un poco menos que Hitler.
Roque: ¿Y por qué vendrían estos criminales aquí?
Marcos: ¿Y qué tiene que ver mi madre con todo esto? ¿Qué querrán de ella?
[.....]
Nos encontrábamos en la habitación de los chicos investigando más acerca de aquellos nazis de la sala.
Marcos: Salen todos los que hemos encontrado pero del puñetero R.W., ni rastro.
Carol: Ya, pero si sus iniciales estaban abajo, tiene que ser un nazi huido.
Iván: Este es Hitler, ¿no? Pincha aquí. -dijo señalando a una foto-
Marcos: Eso es, es Hitler con tres de los tíos que tenemos identificados. Hans Weidel, Otto Ulrich y Karl Fleischer.
Julia: ¿Y el quinto?
Lia: El quinto no sale en la lista.
Marcos: Se llama.. Ritter Wulf.
Iván: Mira, ahí está. R.W.
Marcos: No se ve bien. Voy a imprimirlo en grande.
Lia: Bueno, aquí pone que el tal Ritter Wulf fue jefe de la División Médica de las SS durante el Tercer Reich. Y que fue cirujano del campo de exterminio de Belzec, conocido como el Carnicero de Belzec.
Roque: Ya, pero murió en un bombardeo en 1945 y nunca encontraron su cadáver.
Iván: Por eso no está en la lista de nazis huidos porque está muerto, claro.
Carol: Espero que la bomba le haya caído en la cabeza al muy asqueroso hijo de puta.
Iván: Ojalá.
Noté como Marcos se iba alejando más y más de nosotros así que decidí hablarle.
Lia: Marcos, ¿estás bien?
Marcos: Ritter Wulf no murió en ningún bombardeo. Murió hace un año y media en su casa de un ataque al corazón.
Roque: ¿Cómo sabes tú eso?
Marcos: Porque lo conocía. El Carnicero de Belzec... era mi abuelo.
Todos nos quedamos sorprendidos con los ojos abiertos como platos. Noté que a Marcos se le salían las lágrimas e inmediatamente fui a abrazarlo a lo que él respondió de la misma manera.
De repente se oyó la puerta abrirse, me separé rápido de Marcos y los demás se dieron la vuelta. Al ver de quién se trataba quién estaba en puerta me quedé helada... Era Jacques Noiret.
Noiret: Todos al patio.
Fuera estaba lloviendo con relámpagos y truenos, una cosa que siempre me ha pasado es que si está lloviendo como esta noche no puedo salir afuera. Les tengo mucha fobia a los truenos.
Roque: Está diluviando.
Noiret: Oh.. hasta la naturaleza se pone de mi parte. Vamos.
Todos salimos de la habitación asustados pero no queríamos un castigo superior.
Al salir Noiret nos había hecho estar andando bajo la lluvia sin ningún tipo de paraguas o algo que pudiera taparnos.
Noiret: Vais a estar aquí hasta que se os quiten las ganas de excursiones. Así aprenderéis a no salir del colegio sin pedir permiso.
Noiret se fue y nos dejó ahí solos, pasando un montón de troncos pequeños de un lado hacia otro hasta que él nos dejara pasar.
Julia: ¿Pero ese tío de que va, joder? No tiene derecho a hacernos esto.
Carol: ¡Claro que puede, es el director y puede hacernos lo que le dé la gana!
Marcos: Este lo que quiere es reventarnos y comernos la moral.
Roque: ¡Pues yo prefiero esto a que intente matarnos! Si hay que apilar troncos se hace, si hay que correr, se corre.
De repente se oyó un trueno, como dije antes, les tengo mucha fobia y no solo por el hecho de ser un trueno, es que el sonido me hace daño en los oídos.
El ruido hace que se me clave en el tímpano y me duela durante segundos, que parecen ser largas horas.
Me tiré al suelo por el dolor de oídos, Iván es el único que lo dabe y se acercó corriendo hacía mi.
Iván: ¿Estás bien?
Lia: No.. me duelen mucho los oídos.. -dije tapandomelos mientras estaba casi llorando-
Iván se levantó muy enfadado mientras tiraba los trozos de leña que traía en las manos y empezó a gritar respondiendo a lo que dijo Roque anteriormente.
Iván: ¡Pues no! ¡No! ¡Estoy hasta los cojones!
Roque: ¡No vayas!
Lia: ¡Iván! -dije levantándome para ir detrás suya-
Carol: Joder.. se lo va a cargar..
Al escuchar eso salí corriendo detrás de este, él se metió en el despacho dónde se encontraba Noiret.
Abrió la puerta bruscamente mientras yo estaba en la entrada, cuando el entró me dió tiempo a entrar a mi también y estat ahí a su lado.
Iván: Nos puedes tener toda la noche en la calle, pero tus castigos no te van a servir de nada.
Lia: Iván para.. -dije cogiéndole del brazo-
Noiret: Eh, ya veremos, ¿eh? La noche es joven.
Iván: Que no tenemos tus papeles.
Noiret: Pues yo creo que sí, solo los podéis tener vosotros o la chacha.
Lia: ¡Ni se te ocurra hacerle daño a María!
Noiret: Anda.. si has traído a tu amiguita Lia -dijo mirándome de arriba abajo-
Iván: A ella déjala en paz y a María también.
Iván: Vaya.. Veo que le has acabado cogiendo cariño a la criada. ¿Y eso?
Iván se quedó callado sin saber que hacer o decir.
Noiret: ¿No te habrá contado algo María? -se ríe- Espera, ¿Te ha ido con el cuento de que es tu mamaíta? Va a ser eso.
Iván: Como la toques, te mato.
Lia: Iván, para ya -dije echándole para atrás-
Noiret: Y tú eres tan idiota que te lo has creído todo.
Noiret sacó unos papeles en dónde ponía toda la historia e información de María, pero esa información era falsa.
Ponía que había estado en un psicriatico porque estaba loca, pero eso no era así. Ella estuvo ahí porque se quería vengar de su novio, Noiret hizo que la metieran ahí.
Iván leyó todos los papeles y conforme fui viendo su cara pude ver que se creyó todo lo que decía los papeles.
Me sentía mal por Iván porque era engañado otra vez por su padre y por otra parte mal pot María, ella se había esforzado mucho en volver a encontrar a su hijo.
Iván salió al patio dónde estaban los chicos y yo fui detrás suya. Este les contó a todos casi llorando que María realmente no era su madre y que todo era mentira.
Yo estaba detrás con una lágrima que corría por mi mejilla, me sabía fatal por María. Ella era como una madre pata mi y me sentía mal por su parte.
𝐏𝐫𝐨𝐦𝐞𝐭𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐈𝐯á𝐧 𝐬𝐚𝐛𝐫á 𝐭𝐨𝐝𝐚 𝐥𝐚 𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝, 𝐌𝐚𝐫í𝐚...
Hola mis chiquiss, espero os haya gustado mucho este capítulo. Los diálogos son exactamente los mismos ya que mientras hacía este capítulo estaba viendo en la tablet el primer capítulo de la quinta temporada para saber que decían. También en la parte en la que Lia le duelen los oídos por los truenos la he querido sacar de mi día a día, es decir, a mi me pasa lo mismo que a esta. Por eso quise ponerle mi problema de oídos para darle un poquito de drama.
Muchísimas gracias por las 10.0k lecturas y casi 400 votos, nunca pensé llegar tan lejos. Os quiero muchísimo 💕
Disfrutad mucho de esta semana a todos aquellos que sois murcianos como yo, disfrutad mucho de mañana. Ya que es el día del bando de la huerta, si no sois de aquí os invito a venir algún año por estas fechas aquí o investigar que es este día.
2144 palabras 💕