Era una noche cálida y fresca, perfecta para acabar con demonios come gente.
Eso hacía nuestro trio de cazadores novatos.
Los tres habían salido a una misión que se les fue encargada, no tardaron en acabar con el demonio que había atormentado a la pequeña aldea.
Ahora solo se aseguraban que todos estuvieran bien, pero en eso llegó el más loco del grupo, un chico con cabeza de jabalí.
-- ¡Hey! ¡Miren lo que me encontré ahí! -- grito con euforia.
Sus dos amigos le prestaron atención y este les enseño lo que tenía agarrado con una mano.
-- ¡Pero Inosuke! ¿Cómo se te ocurre? ¿Dónde la encontraste? -- pregunto alarmado el más tranquilo, Tanjiro.
-- ¿Acaso te volviste loco, cerdo? -- cuestionó el de amarillo, Zenitsu.
Pues este tal Inosuke, lo que traía en mano era nada más y nada menos que una niña de aproximadamente unos cinco o seis años.
La tomaba en puño de la parte trasera de su ropa, estaba como si nada, tratando de analizar su situación.
-- La encontré sola en una de las casas abandonadas
-- Eso no significa que puedes agarrarla así como así
En cuanto Tanjiro trato de quitarle la nena de las manos del jabalí, este la apartó de el.
-- ¡No! ¡Yo la encontré, así que es mía!
-- ¡No es un objeto es una niña! ¡Dámela!
-- ¡No!
-- ¡Inosuke!
El de cabellos burdeos comenzó a perseguir al jabalí con la intención de quitarle a la menor, quien solo escuchaba como discutían aún estando en las manos de Inosuke.
La menor solo escuchaba como los dos pelaban, no sabía quiénes eran ellos.
Después de tanto perseguir a Hashibira, logro alcanzarlo y le quitó con delicadeza a la nena.
-- Bien, ¿Cómo te llamas pequeña?
-- Uh, no se -- respondió con duda.
-- ¿No sabes? ¿Dónde están tus padres?
"Suelta un aroma a tranquilidad" pensó el chico de agudo olfato.
-- La gente aveces me dice niña
Los tres miraron con algo de preocupación a la nena.
-- ¿Estás sola?
-- Supongo que si
Tanjiro le dejo a la nena en brazos de Agatsuma y se acercó a Inosuke.
-- Inosuke, llévame a dónde la encontraste
-- ¡Si!
Los tres comenzaron a caminar en dirección hacia donde el de cabeza de jabalí había hallado a la menor.
Mientras que Inosuke dirigía y Tanjiro buscaba algún olor diferente, el de cabello rubio miraba a la menor con atención, caminaba con cuidado de no tropezar y caer con todo y niña.
Hasta que llegaron a una casita algo vieja pero en buen estado.
-- ¿Es aquí?
-- ¡Si! ¡Estaba ahí dentro!
"No huele a demonio, ni a sangre" pensaba Tanjiro mirando a su alrededor.
Cuando entraron Zenitsu bajo a la menor al suelo y está se quedó parada en su sitio sin moverse.
-- Parece que lleva abandonado por mucho tiempo -- comentó Zenitsu.
-- Tienes razón, pero tampoco huelo a ningún demonio
-- ¡Por eso la adopte! ¡Porque estaba sola pero ahora es mía!
-- ¡Inosuke no puedes quedarte con los niños que encuentres abandonados! -- le reclamo Tanjiro.
-- ¿Y porque no?
-- Porque no
-- ¿Entonces que haremos con la niña? -- cuestionó el de amarillo.
-- Por ahora es mejor que nos la llevemos -- dijo el de cabello burdeos, y miro a la nena -- Ven pequeña, acompáñanos
-- Sipi, está bien
Los tres comenzaron a caminar saliendo de la casita, pero se detuvieron en cuanto escucharon un golpe seco.
El trio se extraño ante eso, así que voltearon hacia donde había sonado el golpe.
-- ¿Y la niña? -- pregunto Zenitsu al no verla atrás de ellos.
Tanjiro entro nuevamente a la casa y miro hacia un costado notando a la menor sentada en el suelo sobándose su frente.
-- ¿Estás bien? -- preguntó el chico de haori cuadriculado acercándose e inclinándose a su altura -- ¿Qué te paso?
La nena no dijo nada, el muchacho le sobo su frente notando que estaba un poco roja.
Analizó bien la escena dándose cuenta que la menor había chocado con la pared.
-- ¿Te duele?
-- Un poco
-- Ven, levantate
Tanjiro se levantó y le extendió su mano pero ella lo ignoro y se levantó por su cuenta.
La menor estaba a punto de volver a chocar con la misma pared si no fuera por el Kamado tendría otro golpe.
Eso ya le parecía extraño al cazador ¿Chocar dos veces seguidas con la misma pared?
Se arrodilló frente a ella a la vez que los otros dos se acercaban a ellos.
-- Oye ¿Qué sucede Tanjiro? -- le preguntó Agatsuma.
-- ¡¿Qué le haces a mi cosa Gompanchiro?! -- le gritó Inosuke al ver la frente roja de la nena.
Tanjiro comenzaba a tener una idea de lo que le pasaba a la niña.
Alzó su mano frente a la menor.
-- Dime, ¿cuántos dedos ves?
La nena tomo la mano de Tanjiro y respondió.
-- Son cuato
-- Si, es correcto, intentamos otra vez -- esta vez no dejo que ella tocará su mano -- ¿Cuántos dedos ves?
-- Uh... son tes
El trío de cazadores se quedó en silencio, pues Tanjiro ni siquiera levantó su mano.
-- ¿No puede ver? -- cuestionó Zenitsu.
-- Al parecer no
-- ¡Eso no importa! ¡aún así me la quedo!
Inosuke quitó su máscara y se la coloco a la pequeña para luego alzarla con ambas manos y salir corriendo con ella.
-- ¡Inosuke! -- gritaron ambos y comenzaron a perseguirlos.
¿Qué será de esa niña cuando atrapen a su raptor?
Puede que inicie una nueva historia en la vida de aquella pequeña criatura.
Hola, bienvenid@ nuevamente a otra historia!
¿Vienes de las otras historias, o eres alguien nuevo?
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→ Antes de leer recuerda:
• No habrá relación amorosa con la protagonista
• La apariencia y gustos son elegidos por ti
• Será una niña de cuatro años que no sabe hablar correctamente, (estás advertido)
• Si no te gustan los niños o no te agrada la protagonista, evita comentar cosas desagradables, simplemente retirate
• Respeta a los demás que leen la historia, no quiero ver discusiones
• Por favor, deja tu voto, me agrada complacerlos escribiendo las historias, complaceme dejando una estrella
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Mejor pongo de una vez las advertencias para evitarme pasar malos ratos
Vamos, que comienza una nueva aventura
¿Será que el capítulo llegué a 100 votos?
Bueno, eso sería todo por ahora
Nos vemos !
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