Una parte de Mi (Libro 1)

By AnbellG

2.9K 831 2.7K

Sophia Williams era una mujer que se sentía completa y feliz con su trabajo, familia y amigos; los cuales era... More

Prólogo
Capítulo I: Fiesta
Capítulo II: Bailando
Capítulo III: La fiesta continúa
Capítulo IV: Unas copas de más
Capítulo V: No volverá a suceder
Capítulo VI: Jordania
Capítulo VII: Jordania (segunda parte)
Capítulo VIII: Rio de janeiro
Capítulo IX: Amigos con derechos
Capítulo XI: Conversaciones
Capítulo XII: Preguntas
Capítulo XIII: Mamá
Capítulo XIV: Como Hermanas
Capítulo XV: Primera cita
Capítulo XVI: Segunda Cita
Capítulo XVII: Plan Cupido Parte I
capitulo XVIII: Plan Cupido (Parte II)
Capítulo XIX: Masajes
Capítulo XX: Me gusta todo de ti
Capítulo XXI: Karaoke
Capítulo XXII: Mensajes
Capítulo XXIII: Cumpleaños (parte I)
Capítulo XXIV: Cumpleaños (parte II)
Capítulo XXV: Nosotros
Capítulo XXVI: Demasiado Alcohol
Capitulo XXVII: Carreras
Capítulo XXVIII: Amelia
Capítulo XXIX: Dudas
Capítulo XXX: Amigas
Capítulo XXXI: Desconocido
Capitulo XXXII : No puede ser
Capítulo XXXIII: Dolor
Capítulo XXXIV: Tiempo
Capítulo XXXV: Familia
Capitulo XXXVI: Amistad
Capitulo XXXVII: Felices
Capitulo XXXVIII: Una parte de mí
capitulo XXXIX: Seguir Adelante
Capitulo XL: Punto y coma
Epílogo

Capítulo X: Un placer conocerte

81 29 66
By AnbellG


Marzo

Me mantuve los últimos días enfocada en realizar el informe sobre nuestro trabajo en Jordania, no había salido de la casa, tampoco había vuelto a hablar con Thomas y Sanem desde aquella mañana cuando nos despertamos sin saber qué mierda había sucedido. Y luego de la fuerte discusión que tuvimos decidí volverme a casa, no sin antes decirles unas cuantas verdades en su cara.

Realmente me habían sacado de quicio ambos. Definitivamente eran unos completos idiotas.  Los amaba, claro que lo hacía, eran mis mejores amigos y sabía que en algún momento, tarde o temprano me lo iban a agradecer.

Por lo tanto, había decidido darles espacio para que pensaran o recapaciten y luego les hablaría.

Estaba muy concentrada escribiendo el informe cuando el sonido de mi móvil anunciando una llamada me sacó de mi concentración como siempre, quizá debería dejarlo en silencio para siempre.

Sonreí al ver el nombre en la pantalla y respondí.

—¿Hola?

—¿Hola? Esa no es forma de hablarme así que colgaré y te daré otra oportunidad —expresó Miranda, una de mis mejores amigas.

Terminó la llamada y comencé a reír, esa mujer estaba absolutamente loca. Mi móvil volvió a sonar y atendí nuevamente.

—¡Hola mi amor! ¿cómo has estado? ¡Te he extrañado tanto! —expresé mientras reía. 

—¡Hola amor mio! ¿ves que puedes hacerlo mucho mejor si te incentivo? —habló mientras reía—, ¿qué haces?

—Mmm, en este momento realizo un informe de trabajo. 

—¡Que aburridaaaa! salgamos de fiesta y tomemos unas copas.

—Lo siento —suspiré—. No voy a salir de casa, necesito adelantar esto.

—Okey, si tu no puedes salir de casa, Iré yo a ti.

—No lo sé...

—¡Por favor! ¡Hace tiempo que no veo tu cara!

Suspiré y pensé mi respuesta, viendo la pantalla de mi ordenador. En realidad necesitaba un descanso, ya había estado frente a ese ordenador por demasiadas horas...

—Okey te espero aquí.

Soltó un grito de emoción y tuve que alejar el móvil para no quedarme sorda.

—Iré con una amiga que quiero presentarte, es genial, te va a agradar. 

—De acuerdo, hasta luego.

Coloqué mi móvil en la mesa de noche, cerré mi ordenador y me dirigí al cuarto de baño a ducharme. Me vestí y bajé a la sala a esperar a Miranda.

Cristopher se encontraba en el sofá mirando televisión y me senté a su lado.

—¿Esperas a alguien? —interrogó.

—Si. Miranda vendrá con una amiga a pasar el rato.

—Ah, bueno tendré que quedarme con ustedes. 

—Lo dices como si tuvieras otros planes más interesantes. 

—Siempre tengo planes interesantes hermanita —expresó sonriendo. 

—Sí claro.

❀❀❀

Adoraba a Miranda, pero tenía un talento especial, siempre llega tarde a donde sea que fuera. Estaba a punto de enviarle un mensaje cuando sonó el timbre de la casa, por lo tanto me levanté del sofá para abrir.

Abrí la puerta y me encontré con la sonrisa enorme de Miranda. Se acercó a mí y me dió un pequeño abrazo y rápido, ella no era una persona muy cariñosa que digamos, igual la amaba.
Hice una señal con mi mano para que entrara y ella se giró hacia la mujer a su lado.

—Lo siento que despistada soy. Ella es Renata Moore —señaló a la chica que se encontraba junto a ella.

Observé a la chica y sonreí. Era alta, casi igual que Miranda, cabello rubio, ojos color avellana y dueña de una linda sonrisa. Extendí mi mano hacia ella para saludarla.

—Sophia Williams, un placer conocerte.

—Lo mismo digo Sophia —respondió. 

—Pasen, adelante —expresé—. Chris está en la sala.

—Hace tiempo que no veo a ese idiota —expresó Miranda entrando a la casa. 

—Chris es mi hermano —expliqué a Renata, que por su expresión de notaba que no entendía de quien rayos hablaba Miranda. 

—Ah genial —expresó.

Entramos a la casa y nos dirigimos a la sala. Chris aún continuaba mirando la serie, cuando nos escuchó llegar se puso de pie.

—¡Hola Chris! —gritó eufórica Miranda corriendo hacia mi hermano lanzándose a sus brazos.
Chris la tomó como pudo mientras reía por la euforia de mi amiga y mientras ellos seguían abrazados, Renata observaba la situación divertida.

—¡Te extrañe idiota! —expresó Miranda.

—Y yo a ti demente.

—No me llames así —reprochó ella golpeando a Chris—. Te presento a mi amiga, Renata Moore.

Automáticamente Chris cambió su sonrisa amable a una seductora, típica de él. Miranda y yo rodamos los ojos por el idiota, no podía mantener su pene guardado un solo día en sus pantalones.

—Christopher Williams, un placer señorita —pronunció con una sonrisa en su rostro, mientras dejaba un suave beso en la mano de Renata.

Realmente no sabía como lo hacía pero Chris tenía una talento para enloquecer a cualquier mujer, sin importar la edad que esta tuviera, con una simple sonrisa. Renata siguió su coqueteo regalando su mejor sonrisa. Ambos se sostuvieron la mirada por unos minutos hasta que llamé su atención hablando.

—De acuerdo, ¿les apetece algo de beber?

—¿Tienes cerveza? —preguntó Miranda. 

—Por supuesto que sí —respondí.

—¿Tú que deseas linda? —preguntó Chris a Renata.

—Muchas cosas pero por el momento estoy bien con una cerveza. 

—Sus deseos son órdenes lady —expresó Chris guiñando un ojo—. Voy por ello, no se molesten.

Mi hermano fue en busca de lo que pedimos y mientras esperábamos nos sentamos en el sofá a conversar.

—¿Qué tal un poco de música? —habló Miranda.

—Claro lo que quieras, es tu casa—respondí.

Miranda colocó música en los altavoces, para luego comenzar a bailar y cantar alegre como siempre. Renata y yo solo la observábamos y reímos de su baile, mi amiga estaba realmente loca.

Unos segundos después, Chris regresó con las bebidas y se sentó junto a Renata. Ya me estaba imaginando como acabaría esa situación. 

❀❀❀

Las horas pasaron y nosotros aun seguíamos bebiendo, bailando y cantando como idiotas mientras reíamos a carcajadas, ya nos encontrábamos bastante ebrios. 

—¡Amo esta canción! —gritó emocionada Miranda—. ¡Bailen conmigo! —comenzó a cantar—, mira lo que se avecina a la vuelta de la esquina, viene Diego rumbeando...

Ella comenzó a bailar y todos la seguimos, creo que todo el mundo conoce esta canción tan popular. Ver a Chris copiar los pasos de Miranda e intentar seguir la letra de la canción era demasiado gracioso.

No era que Chris no supiera bailar, sino que está tan borracho que sus piernas no iban al mismo ritmo que sus brazos. Por ello tomé mi móvil y comencé a grabar o al menos eso intenté, ya que no lograba dejar de reír.

Cuando ya estábamos agotados por bailar y reír nos sentamos en el sofá. Aunque solo unos minutos después Miranda se puso de pie para atender una llamada en su móvil.

<<Deberías dejar de beber tanto>> expresó mi conciencia.

Me preguntaba dónde había estado mi conciencia, ya que a veces no la oía.

Debía dejar de hablar sola...

—Bueno —habló Miranda llamando mi atención—. Es una noche increíble pero tendré que irme, tengo una cita interesante. Tu ¿qué harás? —se dirigió a Renata.

—Oye, puedes quedarte si quieres, puedes dormir en la habitación de invitados —expresé.

—O en mi habitación si quieres cariño —agregó Chris. 

—Es una oferta que no puedo rechazar —respondió Renata con una sonrisa en su rostro.

—Bien, me retiro entonces... hasta luego —expresó Miranda.

—Te acompaño a la puerta —me puse de pie y la acompañé.

Me despedí de Miranda y me dirigí a mi habitación, no pensaba quedarme en la sala viendo como esos dos coqueteaban.

Ingresé a mi habitación, fui directo al cuarto de baño caminando cómo podía porque estaba algo mareada. Luego de hacer mis necesidades me metí a mi cama, aún con la ropa que tenía puesta y solo me tomé el trabajo de quitarme las zapatillas.

Tomé mi móvil para entrar en instagram y busqué su nombre,  era algo que recordaba desde el momento en que Sanem y Thomas lo investigaron. Ingresé en su perfil y comencé a escribir un mensaje. No estaba segura si escribía bien, pero al menos lo intentaba. 

Sophia Williams: Hola, ya perdí la cuenta de cuanto he bebido ja. Quizás noo recuerds mi nombre, siy esa chica que stando un poco, solo un pco borracha se metió en tu habitación en una fiesta. Por si acaso mi nombre es Sophia.

Pulsé el botón de enviar. Cerré la aplicación, luego apagué mi móvil, lo coloqué debajo de mi almohada y mis ojos comenzaron a cerrarse, listos para dormir. 

Continue Reading

You'll Also Like

15K 2K 53
Libro III Saga Atanea. -Borrador-. Bajo la tierra, donde la lava palpita, saluda un nuevo reino. Una tierra desconocida. Un lugar inexplorado. Un gob...
1.4M 45.1K 11
Peyton Raksy jamás imaginó que vengaría la muerte de su hermana pequeña. Estaba dispuesta a meterse en la cama del millonario Aleksander Bogdánov par...
5.7K 748 33
Elizabeth Woods, es una mujer que esta cansada de esperar a su hombre ideal y decide entrar a bodas a escondidas para conocer chicos. En el mismo di...
104K 13.4K 163
Entra para obtener más información de la historia 💗