Capítulo XX: Me gusta todo de ti

55 14 55
                                    


No sabía como debía colocarme la blusa, ya que no era mía, sino de Renata. Me la dió prestada porque según mi amiga me quedaba bien.

Mientras intentaba colocarme la blusa Jerónimo me observaba divertido.

—¿Qué sucede? —preguntó sonriendo.

—No se cómo debo ponerme esto—respondí observando la prenda.

—A ver... ¿quieres que te ayude? —preguntó amable. 

—De acuerdo —bufé y le entregué la blusa.

Comenzó a dar vuelta la prenda mientras la observaba y yo esperaba paciente frente a él, pero en un rápido movimiento arrojó mi blusa hacía la otra parte de la habitación.

—¿Qué haces? —pregunté observando mi ropa en el suelo.

—No la necesitas. Así te ves bien, realmente bien —sonrió.

Me tomó de la mano y en un rápido movimiento, me acercó a él.

—Deberíamos bajar quizás ya esté lista la cena —murmuré. 

No entendía porque lograba ponerme nerviosa aquel hombre si ya había sucedido demasiadas cosas entre nosotros.
 
—No lo creo, además estoy cómodo aquí conversando contigo—habló mirando mis pechos.

—Oye... mi cara se encuentra más al norte —expresé sonriendo.

—Claro preciosa pero déjame apreciar la vista un poco más — respondió.

—Idiota —murmuré—. Cuéntame mas sobre tu viaje —agregué.

—Claro —respondió sin prestar atención a lo que decía.

Su mente en ese momento solo estaba concentrada en una sola cosa, mis tetas.

—Vi la carrera en Internet —volví a hablar.

—¿Y qué te pareció? —levantó su mirada hacia mi rostro.

—La verdad es que no entendí nada solo que quedaste en primer lugar.

—Juro que amo mi trabajo pero justo en estos instante tengo ganas de hacer algo más interesante preciosa.

—Que co...

Me calló besándome, al principio fue tierno y calmado pero luego de unos segundos se puso intenso. Me tomó de la cintura y me colocó a horcajadas sobre él. Luego comenzó a subir lentamente su mano sobre mi estómago llegando a los bordes de mis pechos.

Aunque para él, eso no fue suficiente y subió aún más para bajar una tira de mi sostén liberando uno de mis pechos. Dejó de besarme y comenzó a dejar besos sobre mi mentón, luego pasando por mi cuello, bajando a mi clavícula y acercándose poco a poco a mis seno; lo tomó con una mano y lo llevó su boca, gemí suavemente en respuesta mientras buscaba el borde de su camiseta para luego quitársela, comencé a moverme sobre él haciendo fricción entre nuestros sexos, provocando un jadeo en el.

Desabroché el botón de su jeans luego baje lentamente el cierre del mismo para meter mi mano dentro de él, dí un suave apretón a su entrepierna y jadeó en respuesta besándome al mismo tiempo.

<<Mierda no recordaba que era tan grande>>.

Pero claro, si estaba borracha en ese momento, por supuesto no lo recordaría.

Comencé a mover mi mano sobre él lentamente mansturbandolo, para ese momento, la ropa estaba molestándome. Me bajé de su regazo, tomé su pantalón con mis manos para bajarlo rápidamente, me arrodillé entre sus piernas y volví a besarlo, dejando besos desde su boca, bajando por su torso trabajado hasta llegar a su sexo bien despierto para mi.

Una parte de Mi (Libro 1)Where stories live. Discover now