Capítulo 2:
Al día siguiente, _____ tuvo que hacer un esfuerzo descomunal para levantarse y llegar puntual a su primer día de trabajo. La noche pasada, no había podido dormir bien, pues no podía sacarse de la cabeza a aquel hombre de ojos azules y penetrante mirada. Su forma de ser, por lo que pudo concluir ____, era la de un hombre reservado y culto, con buenos modales, determinado y autoritario.
Aún no olvidaba la propuesta de sueldo que le había hecho, era demasiado dinero para su gusto, y sólo por cuidar a una sola pequeña. Había algo muy raro ante tal situación, no podía dejar de preguntarse porque le ofrecía semejante cantidad de paga, ¿era así de importante su hija para él, o era que realmente la niña era demasiado revoltosa, y trataba de compensarlo con su sueldo? De pronto, se sintió insegura sobre su desempeño, trataría de dar lo mejor de sí misma, pero temía no hacerlo lo suficientemente bien y que la despidieran, y ella no podía darse ese lujo, pues ya no debía perder más valioso tiempo, quería y tenía la obligación de terminar sus estudios lo antes posible.
Saliendo de la cama y tenderla, _____ se metió al baño a darse un rápido baño, se vistió lo más decente y presentable que pudo, bajo y se preparó un par de tostadas con cajeta y tomó un vaso con jugo de naranja de cartón. Cepilló sus dientes en un tiempo récord, se puso algo de color en los labios y colocó rímel en sus ya enchinadas y largas pestañas, tomo su bolso con un poco de dinero y llaves. Salió disparada de su casa, y para su fortuna no pasó ni un minuto para que tomara transporte.
Media hora después, llamó al timbre que había tocado el día anterior, recordando, a su vez, el primer encuentro que tuvo con su, ahora jefe.
- Leonor: ¿Si que se le ofrece?
- ____: Buenos días, soy ____ la niñera de Lily.- contestó educadamente y un poco más segura de sí misma que el día anterior.
- Leonor: Oh, señorita, ya está aquí. Permítame.
- ____: Claro- a los segundos, se escuchó un extraño sonido proveniente de la puerta y ésta se abrió para darle paso.
Caminó recordando el trayecto hacía la puerta principal, golpeó dos veces seguidas, y al instante la mujer de avanzada edad, la recibió con una cálida y maternal sonrisa.
- Leo: Pase señorita.
- _____: Gracias...
- Leo: Oh por favor, llámame Leo.- ____ correspondió con una sonrisa.- El Señor Ian fue a su trabajo una hora antes de que usted llegara y la pequeña Lily está en su habitación- Le comentó al notar que ____ paseaba su vista por la casa.
- _____: Gracias, pero Leo dime ____, y tutéame por favor.
- Leo: Está bien _____- le sonrió nuevamente- ¿Se te ofrece algo de tomar o comer?
- _____: Gracias Leo, pero desayuné antes de venir.
De la nada la linda pequeña que había visto el día anterior, apareció ante las dos mujeres.
- Lily: Abue, ¿me ayudas a ponérselo?- Le tendió una muñeca Barbie y pequeño bolso.
- Leo: Claro que si mi amor.- Recibió la muñeca de la niña.
Lily miró a ____ y de pronto se sintió un poco intimida ante la mirada y sonrisa tiernas de ____ al mirarla.
- Lily: Abue, ¿quién es ella?- Se ocultó tras las faldas de la anciana.
- Leo: Lily, mi pequeña, ella es _____, la niñera que tu papi contrató para que te cuidara.
- Lily: Pero tú eres quien me cuida- dijo con una voz chípil con las lágrimas a punto de salir de sus enormes ojos color miel.
- Leo: Claro que sí pequeña, pero ella también me ayudará, será quien haga contigo las cosas que no me da tiempo de hacer yo.
- Lily: ¿Cómo jugar y llevarme al parque?- secó con su manita la lágrima que se le había escapado, cambiando su expresión por una divertida y llena de ilusión.
- Leo: Si Lily.- la niña aplaudió contenta, para después dirigirse a su nueva niñera.
- Lily: ¿Jugarás conmigo a las muñecas, y luego me llevarás al parque?
- _____: Claro que si nena, haremos todo lo que tú quieras, claro mientras tu papi y tu Abue estén de acuerdo- no quería comprometerse con algo que tal vez no le podría cumplir a la niña.
- Lily: ¡Qué bien!- soltó llena de emoción.- Vayamos a mi cuarto ____, te mostraré todos mis juguetes.
- ____: Jajaja está bien.- La niña la tiró de su mano mientras Leo le susurraba un "Buena suerte", con una mirada un tanto melancólica.
Sabía que le tenía mucho afecto a la pequeña Lily y a Ian, pues no era necesario que nadie hiciera comentario alguno para darse cuenta de que era evidente que los quería como si fueran su hijo y nieta.
La niña abrió la puerta de su recámara, revelando en su interior un linda cama con un cobertor rosado con un estampado de las princesas de Disney, decorada con una buena cantidad de peluches de todos los tamaños, las paredes eran de color rosa pálido y había un par de ventanas de tamaño mediano, decoradas con unas cortinas que hacían juego con el cobertor. Al costado derecho se encontraba un armario de caoba decorado con lo que supuso que serían los dibujos hechos por Lily, y alguna que otra calcomanía grande, igualmente de princesas u otros personajes animados de Disney. Luego al lado opuesto a la mitad de la habitación, había una pequeña mesita y alrededor de ésta 4 sillitas, 3 de éstas ocupadas por dos peluches y una muñeca de trapo relativamente grande. Sobre la mesita había un pequeño juego de té. En la parte superior de 3 de las paredes en repisas descansaban más peluches y juguetes. A los costados de la cama, había dos burós, uno de ellos sostenía una pequeña lámpara de Winni Pooh, y en el otro había un alhajero de color rojo. Sin dudas era una habitación de ensoñación para cualquier niña de su edad, y encima tenía baño propio. Lo notó porque había otra puerta blanca hecha de madera con un picaporte color dorado al fondo de la habitación.
Lily, se arrodilló frente a un baúl que se ubicaba a los pies de la cama. Lo abrió sin dificultad alguna y comenzó a escarbar buscando algo. Sacó de su interior un par de muñecas más y le tendió una a _____ con una sonrisa en su linda carita, ella la recibió gustosa mientras la niña cerraba el cofre.
Ambas comenzaron a jugar, bueno más bien _____ le seguía el juego a Lily, pues la verdad era que ya estaba grandecita como para jugar a las muñecas y se aburría mucho, pero haría lo que fuera para hacer feliz a la niña.
[...]
Después de aproximadamente 2 horas, todas estaba preparando lo necesario para sentarse a comer, la comida ya estaba lista, sólo era cuestión de esperar a Ian.
A pesar de que Leonora insistía en que no era necesario que ______ ayudara en la cocina, ella sentía la necesidad de ayudar en algo más y no sólo dedicarse a cuidar de la niña.
Ya habían terminado de poner la mesa cuando se escuchó desde la sala que abrían la puerta, Lily que se encontraba sentada en el suelo dibujando con crayones en la mesita de centro, de inmediato volteó a la dirección de dónde provenía el ruido como si fuera algún timbre de alarma, salió disparada hacía la puerta recibiendo a su padre con un gritito de emoción, y como el día anterior, extendiendo los brazos hacía arriba para que Ian la recibiera con un beso en su pequeño cachete.
- Lily: ¡Papi, llegaste!
- Ian: Hola mi amor.
- Leo: Hola hijo, ¿cómo te fue?
- Ian: Muy bien Leo.
Ambos se saludaron con un beso en la mejilla, mientras que _____ se encontraba alejada en el comedor mirando tímidamente la escena frente a ella.
- Ian: ¿Cómo se ha portado Lily?
- Leo: Esa pregunta sólo te lo puede contestar _____.
De inmediato la mirada de Ian viajó encontrándose con la de la joven que lo miraba ligeramente sonrojada, había olvidado que contrató a una mujer que cuidaría de su hija mientras él se dedicaba a trabajar.
- Leo: Te estábamos esperando para comenzar a comer. Vamos Lily a lavarte las manos.
- ______: Emmm Leo, yo la llevaré tu mientras sirve los platos.
Ian bajo a la niña sin dejar de mirar a _____, y ésta tomó de su pequeña manita camino hacía el baño, rompiendo el contacto visual.
Mientras que Ian se quitaba su saco para comer un poco más a gusto, cuando ambas salieron del baño, rápidamente Lily se sentó a la mesa para empezar a comer, en cambio Ian se acercó a ______.
- Ian: No había tenido tiempo de saludarte, lo siento.
- _____:- se encendieron sus mejillas- N-no se preocupe.
Ambos tomaron asiento e imitaron a Leonor y Lily.
- Ian: Entonces _____...- ella lo miró de inmediato cuando captó su atención.
- ______: Dígame señor.
- Ian: ¿Cómo se ha comportado la pequeña revoltosa?- dedicó una breve traviesa mirada hacía su hija y Leonor mientras un pequeña sonrisa se dibujaba en su rostro.
- ______: Mmm, pues por el momento se ha portado muy bien.
- Lily: Claro que sí papi, (Ta) ____ es una muy buena niñera.- _____ se sonrojó ante el comentario de la infante.- Prometió que jugaría conmigo todos los días a las muñecas, a tomar el té y que me llevaría al parque todos los días.
- Ian:- enarcó una ceja incrédulo mientras le dedicaba nuevamente una mira a ______ y ésta se la devolvía- Vaya que se llevaron muy bien con tan un solo día. Creí que llorarías o algo por el estilo Lily.
- Leo: En realidad, al principio no comprendía lo que pasaba, pero luego de que le expliqué, ella se puso muy contenta- Intervino.
- Ian: Pues me alegra oír eso, porque de ahora en adelante ______ estará todos los días aquí, bueno, menos los fines de semana que cuando yo descanso- Esto último lo dijo más en dirección a ______ que era algo de lo que había olvidado hablarle.
La niña aplaudió con entusiasmo, pues estaba encantada de que alguien le dedicara todo el tiempo del mundo, pues aunque Leonor estuviera con ella, tenía que hacer alguna otra tarea y no la podía atender como a ella le conviniera más. Además de que la pobre anciana ya no estuviera en condiciones de sacarla a pasear. Y con Ian, las cosas eran aún más complicadas, pues cuando él llegaba a casa, era para descansar después de una larga jornada de trabajo, y los fines de semana no eran suficientes para la pequeña Lily, y aún con su tierna edad de 5 años, era muy inteligente, y más o menos comprendía a su padre y, la que para ella era su abuela, pues sin una mamá que esté contigo, uno debe de madurar un poco más rápido, por lo que Lily a veces se sentía sola, sólo que prefería quedarse callada y no hacer sentir mal a alguno de los dos.
Afortunadamente, alguien entró en sus vidas como una especia de esperanza, una luz en un túnel que parecía no tener fin, y Lily le agradecía de corazón a su padre que haya contratado a ______ para que fuera su niñera. Cosa que ya en la noche, cuando lo chica se había marchado a su hogar y su padre había vuelto de trabajar, se lo hizo saber cuándo éste la arropaba para que durmiera.
- Lily: Gracias papi.
- Ian: ¿Por qué linda?
- Lily: Por contratar a _____ para que fuera mi niñera, así ya no estaré tan sola. Tengo a alguien con quien jugar.
Brevemente, Ian se quedó en estado de shock, no tenía idea de que a su corta edad, ella ya supiera lo que es sentirse a veces sólo acompañado de la soledad, y en definitiva sabía que había tomado la mejor de las decisiones al poner ese anuncio en Internet.
- Ian: Agradécemelo portándote bien con ella y obedécela, o de lo contrario ella se tendrá que ir.
- Lily: Lo prometo papi.
- Ian: Hasta mañana encanto, que tengas dulces sueños.- Le dio un tierno beso en la frente.
- Lily: Tú también papi.- Ian ya iba a levantarse de la cama cuando su hija lo atrajo hacía sí y le dijo:- Te quiero mucho, eres el mejor papi del mundo.- A Ian casi se le salen las lágrimas al oír las palabras de su hija que tocaron en lo más profundo de su corazón.
- Ian: Yo también cariño- La abrazo fuerte y volvió a darle un beso- Descansa.
- Lily: Igualmente.
Se puso de pie, y abrió la puerta para salir y cerrarla tras de sí. Se dirigió a su habitación para tomar un baño caliente para relajarse, pero sin dejar de pensar en las palabras que se le habían quedado grabadas de su hija.
Como se los vengo diciendo en otras novelas, denme sus votos, no les cuesta mucho, son de mucha ayuda para impulsarme a escribir y continuar