El final de esta historia, espero les haya gustado.
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La habitación olía a sexo y al perfume de Hermione, y Minerva estaba tan cómoda con su cabeza apoyada en el cálido hombro de Hermione y su brazo alrededor de su cintura, pero sabía que tenían que levantarse; ella quería ver la reacción del Sr. Weasley a su sexo bastante ruidoso. Con un rápido beso en el cuello de Hermione, se sentó, "Vamos, amor. Deberíamos volver con todos los demás". Hermione gimió, suavemente empujó a Minerva hacia abajo y se dirigió al baño diciendo:
"Si dejo que te duches conmigo, nunca volveremos a salir". Así que se ducharon y quitaron sus mordiscos de amor con glamour, aunque Minerva hizo que Hermione se quedara con el que estaba debajo del lóbulo de la oreja, estaba empezando a notarse y era bastante bonito. Se pusieron la ropa que fue planchada mágicamente y salieron del dormitorio al pasillo.
Bajan las escaleras y entran en la cocina. Minerva esperaba que todos se hubieran ido, pero Harry, Ginny y Tonks estaban sentados a la mesa. Harry y Ginny tenían amplias sonrisas de Cheshire en sus rostros, mientras que Tonks se tapaba la boca, haciendo todo lo posible por no morirse de risa. "¿Qué es tan divertido, chicos?" preguntó Hermione, confundida con sus expresiones, y miró a Minerva para ver si podía ayudar. Minerva solo tenía una sonrisa en su rostro. Entre risas, Ginny comentó: "Bueno, Minerva, ¡no creo que nadie tenga ideas graciosas sobre Hermione en el corto plazo!".
"¡Sí, cualquiera en un radio de cinco millas!" Harry jadeó.
Los engranajes en la mente de Hermione giraron y giraron hasta que jadeó horrorizada, "¡¿Nos escuchaste?!"
Tonks finalmente pareció salir de su estupor inducido por la risa y palmeó el hombro de Hermione, "¡Maldita sea, te escuchamos! ¡Merlín, yo también lo disfruté!" Apenas pudo terminar antes de que comenzara a carcajearse de nuevo.
Hermione miró a Minerva, quien rápidamente respondió: "El Sr. Weasley estaba, ¿qué dicen, ladrando al árbol equivocado? Entonces, solo quería presentar mi reclamo. Definitivamente no intentará cortejarte ahora. "
Hermione golpeó con enojo el brazo de Minerva, "¡Entonces! ¡Eso sigue siendo humillante! ¡Todos me escucharon, y es por eso que todos se fueron! ¡No puedo creerte!"
"Bueno, si te sirve de consuelo, querida, tus gemidos son muy hermosos", Minerva se encogió de hombros.
Ginny vitoreó, "¡Yo secundo eso!"
Y Nymphadora intervino: "¡Yo secundo eso!"
Harry solo negó con la cabeza con buen humor.
Aunque Hermione estaba un poco avergonzada de que casi todos se fueran, Ginny le aseguró que nadie parecía enojado, pero que tuviera cuidado con los gemelos, quienes seguramente nunca la dejarían vivir.
"¿Dónde está Ron, por cierto?" Preguntó después de un momento, su cara estaba profundamente sonrojada. Se dirigió sola hacia la sala de estar sin esperar una respuesta y abrió lentamente la puerta, sin saber realmente qué esperar detrás de ella. "¿Ron? ¿Estás ahí?" Escuchó el volante de la tela e inmediatamente agarró su varita. Ron se reveló, lo más probable es que estuviera de mal humor, y su rostro era de un feo tono violáceo.
"¿Qué diablos quieres? ¿Viniste a restregármelo en la cara que nunca me darás una oportunidad?" Él gritó. Hermione retrocedió ante la ira bastante evidente en su voz. Ella trató de calmarlo diciéndole: "No estabas destinado a escuchar eso, Ronald...", pero eso solo lo enfureció aún más.
"¡Estás mintiendo!" Gritó, cada vez más furioso, y luego continuó con voz amenazante: "Nunca supe que eras tan puta, dejándote usar por los trapos viejos y luego queriendo que la gente te escuchara. ¿Es así como mantuviste tus calificaciones? ¿Follar a profesores de izquierda a derecha como la zorra que eres? ¿Estabas tan desesperada por abrir las piernas que dejaste que esa bruja te golpeara?
Una lágrima salió del ojo de Hermione, sin creer cómo podía decir cosas tan crueles, cuando sabía que ella nunca había hecho tal cosa. Con voz temblorosa, dijo: "Ronald, sabes exactamente cuánto trabajé para obtener mis calificaciones y que nunca me acosté con un profesor.
"¡¿ENTONCES POR QUÉ TODOS TE ESCUCHARON FOLLAR A MCGONAGALL?!" Su voz resonó por toda la casa, Ron no sabía lo fuerte que estaba despotricando o lo irracional que estaba siendo. Tan sorprendida como estaba Hermione, estuvo tentada de poner los ojos en blanco ante su terquedad.
Hubo silencio, Ron esperando una respuesta y Hermione simplemente sin saber cómo responder y calmarlo. No pensó que él escucharía lo que tenía que decir, no cuando podía sentir las olas de celos y posesividad que emanaban de él. Entonces, de repente, una nueva voz se unió a la 'conversación'.
"De verdad, si no fuera por tus celos incontrolables y el hecho de que tienes ¿qué dijo Hermione? el rango emocional de una cucharadita, tus abominables modales en la mesa serían suficientes para alejar a cualquier mujer".
¡Minerva, mi caballero de túnica esmeralda! Hermione pensó mientras hacía contacto visual con Minerva, quien tenía un brillo peligroso en sus ojos.
"¡Oye, métete en tus propios asuntos, bruja! ¡Esto es entre nosotros dos, y no involucra a solteronas que no pueden mantener sus manos alejadas de lo que no les pertenece!" Ron le rugió a Minerva, sin darse cuenta de la magia contenida que se arremolinaba alrededor de la habitación después de que él la insultara a ella y a Hermione. No podía creer (bueno, honestamente podía) la audacia del chico, actuando como si Hermione fuera a darle la hora del día.
"Honestamente, Sr. Weasley, es usted quien debe aprender a mantener sus manos alejadas de lo que no les pertenece", dijo Minerva con calma, aunque Hermione sabía que la calma era solo una fachada, y que estaba ansiosa por maldecir a Ronald. . "Hermione ha sido mía desde hace bastante tiempo, y aunque realmente desearía que nuestra relación no tuviera que terminar de esa manera, sentí que era prudente que supieras a quién llama ella su amante. Así que voy a ¿Tengo que mostrarte lo que le hago a la gente que toca mis cosas? Se acercó a la pelirroja que aún estaba furiosa y agregó en un segundo momento a su última declaración: "Sin embargo, no puedo evitar sentirme descaradamente orgullosa de lo fuerte que hice que Hermione gritara mi nombre en completo y absoluto abandono", enfatizó Minerva. las últimas palabras cuando su rostro estalló en una sonrisa salvaje, "Tú"
Sus ojos brillaban amenazadoramente, desafiándolo a decir cualquier cosa y ver qué tan rápido podía y cortaría, cortaría en cubitos y flamearía su trasero. Ronald notó la varita engañosamente empuñada con holgura en la mano de la bruja, y se dio cuenta de a quién le gritó, y luego ofendió, varias veces. Su cara roja y enojada inmediatamente se convirtió en un blanco pastoso, y sus ojos se abrieron de par en par con miedo total, su ira se disipó por completo, dejando solo un desastre tembloroso. Estúpidamente hinchó el pecho en un último intento de parecer fuerte y tartamudeó tontamente: "N-no, no creo que t-eso-"
Minerva agitó su varita y transformó su cabeza en la de un asno, obligándolo a terminar lo que fuera que iba a decir entre relinchos y rebuznos asustados. Observó a Ronald frenéticamente manosear su cabeza mientras chillidos aterrorizados salían de su boca, y no pudo evitar dejar que sus labios se curvaran en una sonrisa de suficiencia. Salió corriendo de la sala, dejando a las dos brujas solas.
"¿Cuánto durará eso?" preguntó Hermione una vez que escuchó que los chillidos se debilitaban. "Mientras crea que se lo merece". Minerva dijo simplemente.
Luego se produjo un silencio incómodo ya que ninguna de las mujeres sabía exactamente qué decirse. Minerva se mordió el labio y Hermione se miró las manos, las cuales se veían muy interesantes en ese momento. Escuchó un murmullo en voz baja, "Oh, diablos", y sintió que Minerva tomaba sus manos entre las suyas elegantes. Hermione levantó la vista y se encontró perdida en los ojos profundos de la bruja mayor, que brillaban con sinceridad, "Mo ghràdh, por favor, perdóname si te avergoncé. Lamento no haberte preguntado si estabas de acuerdo con todo, pero mi protección simplemente se apoderó de mí, pensando que alguien más estaba tratando de alejarte de mí, y solo podía pensar en reclamarte. Sé que es una excusa estúpida, pero por favor, amor, sé que no fue mi intención lastimarte. de cualquier manera."
Hubo un momento de silencio antes de que Hermione respondiera en voz baja: "Sabes, si alguien más hablara sobre reclamarme, lo maldeciría hasta la próxima semana". Hizo una pausa, respiró hondo y luego sonrió tímidamente. realmente avergonzado, pero para ser honesto, me excitó un poco después de que me enteré (¡pero pregunta la próxima vez!) y supongo que estaba tan acostumbrado a hacerlo en privado que olvidé mencionar el hechizo. Aprovecha eso", Hermione agarró la mano de Minerva un poco más fuerte, "Lo que quiero decir es que estás perdonada, Tabby".
Minerva sonrió y atrajo a Hermione a un dulce beso. Bajó una mano y juguetonamente apretó el trasero de la bruja más joven, "Entonces, Hermione, ¿qué dices de la ronda... en qué ronda
dejamos?" Hermione resopló y Minerva continuó, "Y esta vez, usaremos el silencio". Hermione se rió y golpeó juguetonamente el brazo de Minerva, "¡Tú, anciana insaciable!"
"Otra vez con la vieja, muchacha, ahora solo lo pides". Minerva dijo con una voz ronca y oscura, aunque Hermione podía ver fácilmente la brillante alegría en los ojos esmeralda de su amante. Ella preguntó inocentemente: "¿Para qué, profesor?" Luego arruinó el acto con una sonrisa maliciosa mientras corría hacia las escaleras, haciendo que Minerva la siguiera en lo que seguramente sería una lección emocionante.
Esta vez, sin embargo, recordarían usar silencio .