— Ronald me pidió que te dijera, que Seamus le dijo que Dean le dijo a Parvaty que Hagrid te busca.
— ¿A si?– comenzó a decir retador— Pues... ¿Qué?
— Dean le dijo a Parvaty que…....no me hagas repetirlo, Hagrid te está buscando.
— Pues dile a Ronald que…
— ¡No soy una lechuza! – le gritó a mi hermano a lo que solté una carcajada llamando la atención de todos.
— Por supuesto, no eres la lechuza de Harry pero si la de Ron ¿No? Vaya que conveniente. – Ron me miró ofendido y le di una mirada como diciendo que no era nada en contra de él y asintió.
Ella me miró confundida, negué y me senté recargada en el árbol mirando a Neville.
— ¿Qué querrá Hagrid? – pregunto Harry y me encogi de hombros.
— Solo ve a verlo, debo irme, un gusto conocerte Neville. – dije caminando al castillo fue así cuando Hermione se acercaba a mi, molesta. — Granger, ¿Vendrás de lechuza? – dije burlona metiendo mis manos en el pantalón mientras caminaba al castillo.
— ¡¿Qué tienes contra mi?! – pregunto exaltada recuperando el aire, reí negando mientras seguía caminando. — Desde que mi tercer año empezó, no has hecho más que ser completamente grosera conmigo.
— Bueno tal vez tomé gusto. – hablo divertida mirándola a los ojos.
— Pues parece que eres tan arrogante conmigo pero con los demás eres solo tú…
— ¿Cómo sabes que no soy “solo yo” contigo? – pregunté intentando confundirla.
— No, estoy muy segura de que no eres arrogante, cuando estás con el Hufflepuff te dejas llevar siendo tu misma y jamás te he visto ser arrogante con él.
— Oh Hermione, ¿Por qué mejor no te vas a leer cuentos búlgaros? – le susurró cerca del oído.
— ¿Qué dices?
— Que el Hufflepuff del que hablas, tiene nombre.
La de cabello ondulado le miró fijamente, seguro que estaba bromeando.
— ¿Qué rayos te sucede? – exclamó molesta, la Potter se acercó a ella acomodandole la bufanda de Gryffindor y le miró con una sonrisa.
— Nada Hermione, ¿Quieres decirme a qué le a llamado Hagrid a mi hermano?
— No. – entonces a la Potter se le borro la sonrisa.
— ¿Por?
— Lo haré hasta que dejes de ser tan arrogante conmigo y dejes de comportarte como lo hacen los Slytherin's, no me extrañaría que un día de estos me llamaras Sangre sucia.
— Eyy no, Hermione yo nunca haría eso. –le respondió de inmediato la Potter.
— Lo que creo es que te hizo daño pase demasiado tiempo con tu novio Slytherin.
— Theo no tiene nada que ver aquí, y deberías de dejar de ser algo prejuiciosa, por si no lo sabías Harry y yo habríamos sido Slytherin de no ser que nosotros le dijeramos que no.
— Bien pero ustedes son…– alcé ambas cejas y negué, realmente me había comportado como una idiota con ella.
— No lo arruines más, solo quiero que me digas a qué le a llamado Hagrid.
— No lo sé, bueno lo que se es que le ayudará con la primera prueba del torneo. – asenti y al recordar hice una mueca.
—Vale gracias y lamento haberte hecho pensar que soy capaz de decirte esa gran ofensa. – estaba por irme cuando Hermione me tomó de la muñeca y le sonreí. — ¿En qué puedo ayudarle señorita Granger?
— ¿ Qué te parece si me acompañas a la biblioteca?
— ¿Y hacer mal tercio? – reí negando — No gracias.
— ¿Mal tercio? No entiendo.
— Todos sabemos que tienes algo con ese búlgaro, el otro día te vi en la biblioteca, hablando muy animadamente. – dijo divertida alargando el (muy).
Esta rió negando pero se pudo notar que se sonrojo, lo que provocó una mueca en los labios de la Potter.
Suspiró y avanzo a la lechucería para no tardar en por qué Hermione corría hacia ella.
— Por favor, no sabes lo incómodo que a sido estos días, Harry y Ron no se dirigen la palabra para nada, ambos son mis amigos y se siente tan mal, tener que oír las quejas de cada uno.
— Bien, pero no creo que te adaptes a mi día, la mayor parte estoy en la biblioteca.
— Vale casi idéntico al mío. – dijo con una sonrisa lo que hizo una risa de parte de Alyssa. — ¿Y la lechucería?
— Solo vengo por cartas de Remus. – respondí con simpleza subiendo las escaleras.— Las recogeré y seguro podrás acompañarme a la biblioteca si así lo deseas claro.
Busco a la lechuza café y tomó al menos dos cartas las guardo en su mochila, así que también saco otras dos de ella. Le dio unas cuantas órdenes a la lechuza la cuál se fue volando en cuanto tuvo las cartas en el pico; sonrió a Hermione quien la miraba detalladamente.
— Me desgastaras de tanto mirar. – le pego levemente el hombro y bajo las escaleras.
— ¿Theodore Nott, es tu novio?– soltó de la nada a lo que Potter alzó ambas cejas pero rió un poco negando.
—No, ya no. – la castaña frunció el entrecejo mientras se ponía a la altura de ella puesto que iba muy atrás.
— ¿Ya no? ¿Osea que si fueron algo? A mí me pareció realmente apresurado, se conocieron en el gran comedor el primer día, y al mes ya estaban besándose delante de medio colegio.
— Vale lo que sucede Hermione, es que no es así la historia, por supuesto que lo conocí en el gran comedor, pero fue en Enero, exactamente el día del cumpleaños de mi madre. Y nuestra relación empezó en Junio, y termino hace poco. En conclusión si fuimos algo y no fue tan apresurado, pero ahora tu cuéntame de tu relación con Krum.
— No es nada, solo es mi amigo – la mayor soltó una risa amargada — Tal vez, solo tal vez le he estado ayudando a huir de sus seguidoras hostigosas
— Wow, suena como si le tuvieras repugnancia a sus seguidoras, pero en realidad no es nada pero nada apuesto. Claro que sí tal vez tuviera barba y cabello sería terriblemente apuesto que cualquiera andaría detrás de él.
— ¿Así que solo te gusta la gente por su físico?
— Mhmm para que te digo que no, sin embargo si es guapo y todo un estúpido, ahí si que no, pero relamente me gusta más la gente inteligente y completamente apuesta, ¿Y a ti?
— Mhmm no lo sé...– ambas se encogieron de hombros al mismo tiempo y entraron a la biblioteca, la Potter durante toda su lectura anotaba lo más importante y lo resumía para obtener cada tema que seguramente vendría en los T.I.M.O.S
Y Granger se percató de que la chica solía siempre amarrarse el cabello cada que venía a la biblioteca, solía ser un chongo completamente mal hecho.
Potter no dejo s un lado el echo de que Krum miraba sin parpadear a Hermione Granger.
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— ¡Alyssa! – oí que me llamaba Cedric, rode los ojos y seguí caminando — ¡Potter! – le ignore más, así que apresure el paso — ¡Giorgia!– me detendría, pero estaba realmente enfadada con él.
Fue así hasta que me tomó de la mano mirándome confundido.
— ¿Por qué me ignoras? – reí amargamente mientras negaba.
— Ohhh si claro, olvidemos que te reiste de esos malditos botones, además traes uno, vete a la mierda Cedric. – le empuje para no tardar en escuchar un “uhh” de parte de los Hufflepuff.
Vi como tiraba el botón y corría hacia mi, negué caminando más rápido.
— ¡Aly, escuchame, yo les dije que no los hicieran!
— Si claro, tanto que odiaste ponértelo mientras te reías de mi hermano, ¿sabes? ya lárgate. – este negó y siguió insistiendo hasta que un Slytherin le empujo.
—¿No oíste Diggory? Te dijo que te marcharas. – y aunque el chico fuera menor que Diggory era al menos diez centímetros más alto que él.
— Aly…– le rogó el Diggory pero cuando miró al Slytherin, apretó la mandíbula — Tu no te metas Nott.
— ¿Eres su mejor amigo, no? Entonces supongo que al menos si te cae mal su hermano, deberías tenerle respeto a su apellido, ese estúpido botón que llevabas decía Potter, claro por si no te diste cuenta por estar en tus nubes, al fin y al cabo, ¿Te crees por ser uno de los campeones y ser un Hufflepuff reconocido, no? – el Slytherin le miró con una sonrisa arrogante.
Sonreí incrédula, camine a dónde se encontraba el botón “Potter apestas” regrese a dónde se veía a Cedric con los puños apretados y un Theo arrogante.
Me acerque a Cedric y le puse su maldito botón.
— déjalo Theo, que se pudra con su maldito botón, mi hermano te acaba de ayudar para la primera prueba y tú estás ahí riendote de como hacen menos, ni siquiera te avergüenza caer tan bajo, intentando humillar a el otro campeón. – le empuje y sentí que me tomaba de la muñeca.
Peor no tardó en oírse un fuerte golpe, mire viendo a Cedric con la mejilla roja.
— Si Alyssa te dijo que te marcharas deberías hacerlo. – entonces negué esto estaba llendo a mayores, pero cuando vi a Malfoy a punto de atacar a mi hermano por la espalda saque la varita con rapidez, estos dos los separe y lamse un expulso a Malfoy.
Era lo menos grave que podía hacer, no tarde en ver un hurón estando por pegarse en el árbol cuando esté comenzó a flotar.
— Alyssa – me habló nuevamente Cedric intentando hacerme reír ante lo que había hecho.
— Me importas una mierda Cedric, arreglaremos luego las cosas, si es que me da la gana, ahora iré a ver a mi hermano del que tanto disfrutas burlarte.
Camine hacia Harry qué reía ante ver a Malfoy convertido en un hurón, sonreí y le mire.
— ¿Estás bien?
— Si, pero parece que Cedric no, el labio le sangra y la mejilla de encuentra roja, deberías ir a verlo.
Mire a Cedric que al igual que muchos que veían a Malfoy convertido en hurón reían, negué y regrese a ver a Harry.
— No, lo merece por esos botones.
— Yo no tengo ningún problema con ellos, si es que están peleados porque intentaron hacerme menos, entonces no vale la pena.
— No todos se trata de ti Harry, por supuesto que me molesto que le hayas dado información y el traiga un botón pero, no permitiré que le falten am respeto a mi apellido.
Le di un golpecito en el hombro y camine por los pasillos, siendo seguida por Cedric.
— Alyssa, no fue mi intención insultar a tu hermano o ha ti o ha tu apellido, solo se me hizo divertido para reír con mis amigos y tal vez si lo hice por mi reputación pero jamás pensé en ti ni en nada. Lo lamento.
— Entra. – dije una vez que estábamos en la sala común, le mire con seriedad y subí a mi habitación, cuando escuché como resbalaba sonreí. — Espera ahí.
Tome unas cuantas cosas y baje encontrandole sentando.
— ¿Me perdonas? Alyssa, por favor, eres como mi hermana menor, una que nunca he tenido y no tendré.
— Bueno si fuera tu hermana menor me tendrías siempre en mente, pensando si tus acciones me dañaran de alguna manera, solo se bien porque siempre lo hago con Harry.
Esta se acercó demasiado a su rostro, el Diggory pensó que haría otra cosa, sin embargo limpio su labio.
Le ofreció una poción que de inmediato le quitó lo rojo de la mejilla y su corte en el labio cicatrizó.
— Tu novio si que te ama, y golpea extremadamente fuerte. – dijo masajeando su mejilla y reí.
— Theo no es mi novio. – respondí mientras guardaba unas cosas.
— ¿Qué? ¿Cuando terminaron? ¿Por qué no me lo contaste?.
— Tal vez lo sabrías si no te preocuparas por tener que complacer a las personas con ser el chico que ellos quieren.
— Perdón, sabes siento la presión de que les decepcionaría más el como soy y…no quiero eso, me agrada que piensen que…olvídalo....
— ¿Importante? Cedric siempre has sido importante para la mayoría del colegio, jamás has tenido enemigos y ahora tienes a Theo y seguro que unos cuantos Slytherin. Por si no lo recuerdas, bastantes te admiraban por ser el gran chico amable y simpático que juega Quidditch, ahora me pareces igual de insoportable que Malfoy insultando a los hijos de muggles.
— ¿Entonces me perdonas? – asentí para no tardar en recibir un abrazo de su parte, sentía que me dejaría sin aire, hasta que vi entrar a Hermione en la sala común, le sonreí para ella no tardar en hacer lo mismo.