Inefable [Hermione Granger] C...

By HP2207

32K 2.3K 88

Descúbrelo, es un tanto confusa pero con el paso de la lectura comprenderás a fondo. More

«01»
«02»
«03»
«04»
«05»
«06»
«08»
«09»
«10»
«11»
«12»
«13»
«14»
«15»
«16»
«17»
«18»
«19»
«20»
«21»
«22»
«23»
«24»
«25»
«26»
«27»
«28»
«29»
«30»
«31»
«32»
«33»
«34»
«35»
«36»
«37»
«38»
«39»
«40»
«41»
«42»
«43»
«44»
«45»
«46»
«47»
«48»
«49»
«50»
«51»
«52»
«53»
«54»
«55»
«56»
«57»

«07»

776 77 1
By HP2207

— ¿Alyssa?– escuché que me llamaba Cedric que se encontraba delante mío

— Mhmm– respondí mientras seguía escribiendo, le había estado mandando cartas a Remus durante estás vacaciones y había olvidado contarle unos cuantos detalles.

Mire a mi lechuza, era idéntica a la de Harry, solo que los ojos de la mía era uno verde y uno azul.

— No nada..

— Bien, ¿Y Cho?– pregunté, mientras le daba órdenes a mi lechuza, cuando está se fue le mire a Cedric.

— Decidió estar con sus amigas de Ravenclaw y... Ya sabes.

— Ohh, si quieres puedo buscar otro compartimento y tal vez hablemos cuando estemos en el castillo.

— No, no, es decir si ella no está aquí por eso pero no es de todo. Además no se exactamente en donde esté.

— Bien....

— ¡Golosinas, desean comprar golosinas! – saque unos cuantos galeones de mi pantalón y me levanté para comprar algo. — Hola jóvenes ¿desean alguna golosina?

Cedric compro lo suyo mientras yo me acerque más al carrito para mirar que comprar fue así hasta que llegó un grupo de chicos.

Mire a cada uno hasta que encontré a un chico delgado, alto, cabello moreno, ojos azules y piel pálida. Le sonreí, a lo que el me respondió de la misma manera.

— Unas ranas de chocolate. – pidió el mientras me miraba con una linda sonrisa.

— ¿ Y tú quieres algo? – mire como se iba, rayos me sentía como acosadora.

— No tengo hambre gracias. – entre al compartimento y Cedric me miraba.

— ¿No compraste nada? Te vi con muchas ganas de hacerlo.  – dijo sonriendo pero le mire a los ojos y asenti — Diablos, ¿Cómo lo haces?

— Eres muy expresivo con tu mirada, pero no te preocupes, debo ir a ver a Harry. – dije mientras rascaba levemente mi cicatriz.

— Claro, te veo en el castillo. – le dijo el chico con el entrecejo fruncido, claro que no había pasado por desapercibido que está se estaba rascando su cicatriz.

Tome mi baúl y le sonreí, no quería que preguntara sobre mi cicatriz, cuando estaba por salir me encontré a Cho que me sonrió, se la devolví con un ligero asentimiento de saludo.

Camine mirando mi cicatriz que había tomado un tono rojizo.

— ¡Ey! – escuché pero seguí caminando, tal vez no era para mí y solo hacia el ridículo al voltear. — Oye ¡Tu! ¡La de chaleco café, pantalón como grisesco con  rayas y camisa blanca! – mire mi vestimenta y técnicamente había descrito como venía, asi que me detuve y me gire, encontrando al chico.

Le mire en espera de respuesta pues no decía nada, solo me miraba.

— Me parece que esto es tuyo. – dijo mostrando mi insignia de prefecta.

Me acerque para tomarla cuando el la movió de lugar con una sonrisa divertida.

— Escucha chico, no estoy para juegos, y ya lo has notado, soy prefecta y muy seguramente podré hacer algo para castigarte o bajarte puntos.

— Ya lo veo, ¿ La prefecta perfecta? – sonrió burlón a lo que rode los ojos, cuando vi estaba muy cerca mío haciendo que abriera mucho los ojos y retrocediera un poco — Anda, no muerdo.

Este se acercó y me puso la insignia y acomodaba mi chaleco al igual que el cuello de mi camisa.

— Ehh alto ahí. ¿No querrás acomodar toda mi ropa o si? – dije divertida al notar pero estaba bien, en realidad me había vestido con rapidez pues me había despertado muy tarde.

— Bueno pues me parece que vienes como típica persona borracha, seguro debes estarlo, se te calló tu insignia y mal vestida, mal ahí. – solté una ligera risa y negué.

— Claro, ¿Y parece que lo estoy? – ladeó la cabeza a lo que alcé ambas cejas. — Bien, hasta luego.

— ¿No me castigará señorita perfecta?– me gire a mirarle mal para escuchar cómo reí — ¿Cómo te llamas? – grito como si estuviéramos muy lejos

— Alyssa Potter – le dije sin la necesidad de gritar y riendo por su rostro.

La chica siguió sonriendo como tonta cuando se dio cuenta ya se encontraba en el compartimento dónde estaba su hermano y sus amigos.

— Pero mira nada más, Harry seguro que tendremos cuñado. – la chica sonrió con dulzura ante el fin que acababa de utilizar Ron.

— Tendrás, yo ahora mismo no lo quiero. –dijo un Harry serio.

— Claro ¿Y tú qué tal con Cho Chang? – dije alzando y bajando las cejas, para ver cómo se ponía rojo y yo reír.

Mire a Hermione que estaba sería mirando por la ventana, seguro que se sentía mal, así que me encogi de hombros.

— ¿Ya le has mandado una carta a Sirius? – le pregunté a Harry, cerré los ojos inclinando la cabeza al sentir un gran dolor en la muñeca, pero no quería que me vieran rascando la o algo así.

—————————

Compuse mi túnica y tome mi baúl, salí repasando el tema de la legeremancia y oclumancia.

Estaba leyendo cada detalle hasta que la profesora McGonagall me vio sonriendo.

— Profesora McGonagall. – sonreí en saludo, estaba por seguir caminando cuando me llamo y me gire para ver qué sucedía.

— Vaya al gran comedor, me parece que le interesa más aprender que llegar a rápido para saber que sucede.

— Si claro…¿Y que se supone que es lo que sucede? – pregunté claramente confundida.

— Señorita Potter, debería salir de su mundo.

Le seguí hasta que entre al gran comedor donde todos ya estaban sentados, me senté junto de los gemelos que revolvieron mi cabello distraídos mientras escuchaban las instrucciones de Dumbledore.

Vi a una chicas vestidas de azul que entraban,eran lindas, unas veelas por supuesto, y los chicos no dudaron en aprovechar ese gran obsequio según para ellos, la directora era seguramente como Hagrid.

Luego entraron unos chicos haciendo acrobacias desafortunadamente las chicas no tuvimos obsequio pues no vi alguno que me llamara la atención.

Sin embargo estaba Viktor Krum que seguro alboroto las hormonas de las chicas tal como las de Beauxbatons habían hecho con los chicos.

Comí al notar que apareció la comida, sentí una fuerte mirada, busque de dónde provenía, encontré al chico que había visto en el tren, este me sonrió al notar que por fin le mire, lo cual hice de nuevo, era un Slytherin.

Ambos chicos dejaron de comer pues se estaban sonriendo sin prestar atención a su alrededor, por otro lado estaban sus amigos Gryffindor que al notar que estaba distraída miraron a dónde ella lo hacía, lo cual era una gran burla que duraría todo el año.

Fue así hasta que el techo comenzó con una gran lluvia que asustó a todos. El cual fue reparado por un hombre.

Estaba un hombre que detuvo todo, provocando los murmuros en todo el gran comedor, comenzó a dolerme la cicatriz haciendo que me retorciera un poco.

Barty Crouch comenzó a hablar pero yo solo note que de mi cicatriz salían pequeñas gotas de sangre, esto era raro pues eso nunca sucedía durante todo mis años.

Seguieron hablando y quería prestar atención pero cuando regrese mi mirada a mi muñeca, está estaba sangrando demasiado, con rapidez tome un pañuelo para detenerla, agradecía que todos estaban distraídos pues sería raro que de repente tuviera sangre en una mano.

Desafortunadamente la chica estaba en lo incorrecto pues por segunda vez alguien se percató de que tenía sangre en la mano, pero si había algo a su favor de la Potter era que no sabía la razón de la sangre.

Cuando me di cuenta, ya habían terminado de explicar todo, un poco adolorida me levanté y llame a los de primer año.

— Por aquí, siganme, no se separen – les dije junto con el otro prefecto, después de un tiempo les mostré y di unos cuantos datos de Hogwarts, llegamos a la sala común.

Me caí rendida en mi cuarto, me desvesti y puse una bata para dormir.

————————

— ¡Oye Potter! – me gire ante que me habían nombrado encontrando a Katie. — ¿Estás bien?

— ¿Debería estarlo? – dije sacando mi cuadernillo al ver qué el profesor de DCA había llegando al aula.

Durante la clase hablo acerca de las maldiciones imperdonables, inclusive nos la mostré, cuando paso a la más grave, se acercó a mi, diciendo que solo dos personas han sobrevivido a ella.

Agregando que una de ellas se encontraba en el aula, lo cual fue incómodo, pero no pase por desapercibido que cuando llegó mi cicatriz se puso roja y cuando se acercó a mi, está comenzó a sangrar.

Trate de cubrir mi mano con la túnica para que está no se notará, afortunadamente era ambidiestra y no tendría problema cuando nos puso a escribir.

Sin embargo algunos estudiantes de mi año, terminaron traumados al salir de la clase puesto que había sido la última todos hablaron del profesor mientras se dirigían al gran comedor.

Por otro lado yo debía preguntarle a Harry si alguna vez le a sangrado la cicatriz.

Cubrí toda mi mano con la manga de la túnica, intenté limpiar la sangre con la misma sangre cuando vi que se pudo entre al gran comedor sentándome junto de Harry el cual se asusto ante haber sentando con tanta rapidez.

— ¿Alguna vez te a sangrado la cicatriz? – pregunté casi susurrandole para que solo me escuchará el, el me miró confundido pero negó.

— ¿Por qué lo preguntas? – de inmediato el chico miró la mano de su hermana pero ni encontró rastro de sangre masque la manga mojada, pero seguramente era agua.

— No, es solo que he visto que este mes te ha estado molestando y no quiero que pase a peores.

— Ahh si claro, no, jamás me a sucedido, a veces pienso que tienes suerte al que a ti no te duela tab seguido. – dijo el hermano con una mueca pues en su vida había visto a su hermana mayor rascándose en la marca o quejándose de que le doliera.

— Ya sabes, una tiene privilegios, seguro que si estuvieran nuestros padres yo sería la consentida de ambos. – dijo solo para molestar, aunque en verdad sabía que siempre prefieren a los menores y ellos son la prioridad.

— Pues yo estoy seguro de que papá insistiría en qué juegues Quidditch ya que eres buena en ello pero te rehusas a hacerlo.

— Vale pues cuando seas capitán del equipo de Gryffindor entraré.

— ¿Segura? – dijo retante el hermano y está asintió.

— Lo serás para tu sexto año, no puedes serlo antes, así que aún falta. – dijo despreocupada.

La chica comenzó a comer mientras hablaba con su hermano de lo más normal, fingiendo que estos días no le a estado doliendo la cicatriz y mucho menos le sangraba.

— ¿Por qué comes con la mano izquierda? – pregunto Hermione que no se perdía de nada, pues pudo notar ese pequeño detalle y que en las líneas de la palma derecha había un pequeño rastro rojo.

— Alyssa es ambidiestra, eso lo sabes desde primero, Hermione. – le respondió Fred Weasley, haciendo que los nervios de la Potter disminuyeran.

Granger por supuesto que lo sabía pero no ignoraría el hecho de que esa raya roja era muy probable sangre.

— ¿Qué tal su clase de Defensa Contra las Artes Oscuras? – pregunté al notar que Hermione no quitaba la mirada de mis manos.

— Magníficas/ horrorosas – respondieron todos a la vez.

— Vale se que los gemelos son unos psicópatas, y que ustedes muy aburridos. Pero no le veo lo horroroso, fue…divertido.

— Eso es aly.– respondieron ambos gemelos, mientras la chocaban con la castaña que sonrió ante ver la emoción de ambos.

Granger estaba buscando alguna nueva de dolor pero no encontró ninguna, creyó que tal vez cuando los gemelos golpearan la palma de su mano demostraría disgusto por dolor u algo.

— Yo no lo creo, debiste ver cómo lastimaba a un insecto y Neville se asustaba.

— Vale pues…seguro que debió pasarse pero me parece que nos a enseñado mucho más que Lockhart, Quirrell y Rakepick.

— Seguro que si, pero ¿Por qué no nos enseña como el profesor Lupin?

— Tal vez porque trabaja en el ministerio y debe tener un carácter duro, claro que eso no explica que se comporté así con pequeños pero no está acostumbrado.

— ¿Osea que lo defiendes?

— Solo estoy diciendo que sus clases no son terribles, por el hecho de que explica bien y nos está enseñando algo que nos serviría en esta época.

— ¿Crees que las cosas se arreglaran matando gente? Técnicamente estarías haciendo lo mismo que ellos, no tiene sentido que los mates si harías lo mismo que ellos. – hablo una Hermione completamente molesta.

— Hermione…– le hablo Harry al sentir que la mesa se movía y su hermana tenía la mandíbula apretada, había visto a su hermana cuando le hacían enojar y en verdad le asustaba.

Era algo que ni el mismo siendo su hermano, podía controlar, busco con la mirada a Diggory, si el la animaba cuando estaba triste seguramente podría calmarla cuando estaba molesta.

— No Harry, ¿Por qué no nos dices que te sucede en la mano derecha? Has estado comportandote de manera extraña y ahora quieres matar, defiendes a un profesor que nos enseña torturas y como matar, porque crees que es lo correcto por los tiempos.

— Cierra la boca, Granger. – hablo la Potter sintiendo su sangre hervir, su hermano se levantó con rapidez corriendo a Diggory.

— ¿Fingiras que tú mano no tiembla y que tú cicatriz no sangra? – cuando Granger noto algo extraño en los ojos de la Potter, y la Potter estaba por responder alguien le hablo.

— Alyssa – su cuerpo se relajo sintiendo una mano en su hombro. — ¿Qué te parece si me acompañas a la biblioteca ? – este le sonrió estirando su mano.

Al notar la cara de Granger, le recordó el rostro de su hermano, negó y tomó la mano de Diggory saliendo lo más rápido posible del gran comedor.

Continue Reading

You'll Also Like

1.7K 217 6
𝗧𝗛𝗘 𝗕𝗟𝗢𝗡𝗗𝗘 𝗢𝗙 𝗧𝗛𝗘 𝗦𝗧𝗔𝗥𝗦! ★ ━━━━━━━━━ 𝗘𝗡 𝗗𝗢𝗡𝗗𝗘 Juliette Jones, va a Hogwarts y empieza a sentir "mariposas" o "hojitas" como...
2.1K 126 15
T/N es un chico de 23 años que vive en Monterrey, México. Tiene un gran amor por la música y su sueño es llegar a ser parte de una banda ya sea como...
29.3K 3.1K 13
『 Jungkook nunca pensó que aquella tierna sonrisa cambiaría su forma de ver el mundo 』 ➮ Jimin Bottom ➮ Jungkook Top ➮ Mini Fic
4K 250 7
historias cortas de mi banda favorita :)