Resiliencia [RING #1]

By naiimartin

428 89 169

Madison lleva años entrenando para ser la mejor boxeadora de Manchester, ha ganado decenas de peleas tanto il... More

ANTES DE LEER
PERSONAJES
DEDICATORIA
INTRODUCCIÓN
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4

Capítulo 1

60 14 110
By naiimartin

"He visto buenas, he visto malas, y ahora que vuelan
ya no tienen tiempo de mirar hacia atrás.
Si todo empieza. Si todo acaba. Se tuerce o duele... forma parte de un ciclo que vuelve a girar

Entonces vive, decide o muere.
Decide o muere.
Yo he vuelto a nacer después de mi funeral"

~16 Skonethebigfish~

Madison

¡Bak! ¡Bak!

Mi vista se nubla un poco, pero consigo encajar el último golpe a mi contrincante haciendo que caiga al suelo. La cuenta atrás se mezcla con los gritos de la gente creando una atmósfera atrapante, los segundos se terminan y siento como una mano se envuelve en mi muñeca para levantar mí brazo, gané.

Recibo el premio al igual que los aplausos, los flashes de algunas cámaras me impiden ver bien, no les sonrío, solo me limito a agarrar el pequeño trofeo y despedirme.

El barullo de personas a la salida no me preocupa ya que me pongo la capucha de mi sudadera y evito mirar hacia ellos, muchos no se dan cuenta de mi presencia, otros ni siquiera me reconocen a pesar de haber gritado mi nombre ahí dentro, y es justo en ese momento donde comprendo que realmente no le importo a nadie. Chillaron mi apellido por la adrenalina, no porque de verdad me aprecien, si hubiese sido yo quien estuviera en el suelo, gritarían el nombre de mi adversario, ya que no soy yo quien les importa, sino el espectáculo.

Camino por un callejón solitario donde solo se escucha el ruido de mis pies al caminar. Golpeo alguna que otra piedra con la punta de mis zapatos, el frío me cala los huesos y varias gotas de lluvia mojan mi ropa. Sigo caminando entre las sombras hasta llegar al bar de mala muerte que está situado al fondo del callejón, al abrir la puerta suena una campana a modo de bienvenida y el hombre que está en la barra me dedica una sonrisa.

-¡Bak! Que gusto tenerte de vuelta. Vi que ganaste, felicidades.

-John te he dicho mil veces que me puedes llamar Madison, Bak es solo cuando compito.

-Lo sé, lo sé, aún no me acostumbro, te veo tanto en periódicos que se me olvida tu verdadero nombre, linda, lo siento. ¿Qué quieres tomar?

-En realidad venía a invitarte a algo, el bar está bastante vacío, puedes beberte alguna copa conmigo.

-Madison.

-Por favor, tómate una copa conmigo. -Resopla negando con la cabeza y se gira para alcanzar una botella de ron.

-Solo lo hago porque eres mi clienta favorita.

-Soy la única, no te engañes.

-Bueno, pero eso no quita que seas mi favorita.

-Tú también eres mi camarero viejo favorito.

-No soy viejo, tan solo tengo setenta años.

-Estás en plena juventud, di que sí, que nadie te lleve la contraria.

-Señorita, aquí no está permitido usar el sarcasmo.

-¿Dónde está el cartel? Porque yo no lo veo. -replico mirando hacia ambos lados.

-No lo hay, pero son normas básicas.

-No las conozco, lo siento.

-Beba y calle señorita. -Le hago caso y tomo un sorbo de mi bebida mientras recorro con la mirada los cuadros del bar. Suelo venir aquí habitualmente, aún recuerdo la primera vez que encontré este sitio, fue tras una pelea ilegal a tres calles más lejos. John me contó que su nieta también era boxeadora y que su hija tuvo cierto gusto por el deporte.

-¿Cómo le va a su nieta?

-Genial, estoy muy orgulloso de ella, está estudiando fisioterapia y trabajando como entrenadora.

-¿No era boxeadora? - Pregunto mientras como los frutos secos que John puso en un cuenco.

-Tuvo que dejarlo por falta de tiempo, o algo así me explicó. Ahora que lo pienso te podría entrenar ella.

-John, ya sabes que yo hago todo sola, me parece más tranquilo hacer las cosas a mi manera.

-Bueno, pero mi nieta es muy buena, a veces tienes que hacer cosas en equipo jovencita.

-Lo haré cuando usted no me llame Bak. Respecto a lo de su nieta, si es como su abuelo seguro que es un encanto, lo que sí espero es que al menos no me prohíba usar el sarcasmo.

-Señorita cállese ya o voy por el bastón y la echo de mi bar, no le aviso más.-No puedo evitar reír, la verdad es que John me recuerda mucho a mi abuelo, a pesar de que hace demasiados años que no lo veo, como a toda mi familia.

Sigo hablando con él durante horas, es una persona muy agradable con todos y la verdad que me pone triste que siempre tenga el bar tan solo. A veces me da pena irme, por eso la mayoría de días vengo a visitarlo hasta el cierre, para que así sienta un poco de compañía.

Salimos de la cantina y ambos nos despedimos, mi casa no queda muy lejos y no es demasiado tarde así que voy andando, muchos ya me conocen por estos barrios y saben que si intentan darme algún golpe puedo devolverlo cinco veces más doloroso.

No hay mucha gente por las calles, pero la mayoría están acompañados por sus parejas, amigos o familiares. Los ignoro sintiendo un sabor agridulce y acelero un poco el paso.

Al llegar a casa los ladridos de Rocky me hacen tener que taparme los oídos, este perro ladra demasiado fuerte. Me acuclillo y le acaricio la cabeza.

-¿Quién es el perro al que yo más quiero eh? ¿Eres tú? ¿Sí?- Rocky agita la cola mientras me lame la cara, es un perro precioso que adopté hace un año, viene de una familia rica a la cual nunca les importó, me dio tanta impotencia cuando me enteré por primera vez sabiendo lo bueno que es y el corazón tan grande que tiene que no pude evitar adoptarlo.

Me levanto, tiro las llaves a la mesa y busco en el congelador un poco de hielo para ponérmelo en el pómulo derecho, los golpes de las peleas me suelen doler horas después, quizá es la adrenalina del momento la que me impide sentir el dolor. El frío del hielo me hace soltar un quejido. El cansancio es tan fuerte que termino quedándome dormida en el sofá.

TW: violencia y abuso.

5 AÑOS ATRÁS

Camino de vuelta por las calles de Manchester, lleva lloviendo más o menos una semana y cada día se intensifica más. Me estoy escondiendo de algunos niños de mi clase, hoy me insultaron y se metieron conmigo por ser coreana, se burlaron de que mis ojos fueran más rasgados que los suyos, me dijeron que era inferior a ellos solo por el hecho de tener otra nacionalidad y que me iban a pegar.

Algunas pisadas se oyen detrás de mí y cuando me giro, me encuentro con un grupo de chicos, son de mi clase, los que se metieron hoy conmigo.

Corro intentando no resbalar, mi chaqueta se cae por mis hombros por culpa del aire, sigo avanzando mirando hacia adelante ajustando mi abrigo, pero un charco me hace resbalar y caer de culo contra el suelo. Los tres chicos que me venían persiguiendo se paran frente a mí, riéndose, uno de ellos se agacha para verme mejor e intento escapar pero me tienen acorralada.

-¿Qué pasa Madison? ¿No puedes escapar o es que como eres mujer eres tan torpe que no sabes correr sin caerte?

-Déjame en paz imbécil.-escupo con odio y miedo a la vez, intentando ocultar lo segundo.

-De tanto verte correr con la camiseta de tirantas me ha entrado calor, especialmente cuando se te estaba cayendo la chaqueta por los hombros y cuando te la ajustas se te ha visto el sujetador.

-Eres un asqueroso, tú y todos tus amigos, dais asco. -Los tres se echan a reír y George, el chico que me había dicho todo lo anterior, le dirigió una mirada a ambos.

-Sujetadla, que hoy nos vamos a divertir un poco más.-El pánico me invade y no puedo respirar, Henry y Frank me levantan y agarran las manos mientras que George empieza a manosear mi cuerpo.

-Suéltame- grito desesperada por que lo haga, pero un bofetón impacta en mi cara, dejando seguramente una rojez en ella.

-Cállate zorra, llevas días buscándote esto ¿acaso crees que no noto como me miras? ¿o que los pantalones y faldas que traes no son para provocarme?-dice y presiona su mano en uno de mis pechos, consigo mover la pierna para darle una patada en el estómago, pero eso solo hace que me dé otro golpe.

-Madison, cuanto más te niegues más lo voy a disfrutar. -Se ríen todos mientras yo pataleo, George me besa el cuello y yo solo tengo ganas de vomitar, la lluvia cae sobre mi y se mezcla con mis lágrimas.

-Ehh, vosotros, ¿qué mierda estáis haciendo?- Una voz que desconozco se escucha a mi derecha, una cabellera rubia aparece frente a mi, aparenta tener dos años más que yo, tiene los ojos color avellana y trae unos vendajes en sus manos.

-Nada que te importe rubia, ¿o quieres que también lo hagamos contigo? A decir verdad estás más buena que esta, y eres más mayor.-George no puede seguir hablando porque la chica le da un puñetazo en la boca.

-Vosotros, soltadla u os doy otro igual de fuerte.-Ambos salen corriendo tras soltar mis muñecas, caigo al suelo otra vez, mientras que George todavía no se ha levantado de este. -¿Te han hecho algo?

-S-sí, me han g-golpeado y manoseado. -La voz me sale entrecortada, no puedo dejar de llorar y siento que estoy temblando.

-Espera aquí, dame un momento.-Asiento y veo como la chica se vuelve, George que ha conseguido levantarse intenta echar a correr, pero la rubia le agarra de la capucha de su sudadera deteniéndolo, haciendo que caiga contra el piso de nuevo. Lo golpea otra vez y lo empuja.- Vete de aquí, no quiero volver a verte por esta zona o te golpearé de nuevo.

George sale corriendo y yo sollozo tan fuerte que empiezo a ahogarme con mi propia saliva, provocándome una tos incontrolable.

-Oye, ¿estás bien? -La chica me ofrece una mano y su paraguas, acepto ambas cosas y consigo levantarme, hace mucho frío y estar empapada no ayuda. Ella me agarra del brazo suavemente para poder ayudarme mejor y me zafo inconscientemente de su agarre.

-Lo siento. -me disculpo rápido, pero ella se limita a sonreír.

-Ey tranquila, no quieres que te toquen, lo entiendo.

-Gracias.

-¿Cómo te llamas?

-Madison.

-Encantada Madi.

-¿Y tú?

-Victoria.

-Encantada Vitoria.

Despierto de la pesadilla, o mejor dicho, del recuerdo de hace años atrás. Rocky que estaba tumbado encima mía se levanta de golpe por mi culpa. Ese fue el día donde recibí una de mis primeras palizas , ese fue el día que conocí el bar de John, ese fue el día que una chica con la que ha día de hoy no me he vuelto a encontrar, me salvo y brindó su ayuda.

Ese fue el comienzo de mi resiliencia.

Notita:

Holaaa. ¿Cómo están?

¿Qué les pareció Madison? ¿Y John?

Bueno aquí les traigo el primer capítulo de Resiliencia, me hace mucha ilusión publicarlo. Como han podido ver al principio del capítulo hay dos estrofas de una canción, iré poniendo una estrofa o dos en todos los capítulos antes de empezar, así también quizá descubren canciones nuevas<3

Quiero avisarles de que no sé con cuanta frecuencia voy a ir publicando capítulos, me gustaría que fuese uno por semana, pero a penas tengo tiempo, así que espero poder escribir un poco más en navidad.

¡No se olviden de votar y comentar si les gustó!

Continue Reading

You'll Also Like

8.7K 789 25
Los secreto siempre están en la superficie. Ocultos en la oscuridad. Manteniéndose invisibles, para después usarse como arma de doble filo. Destruyen...
24.7K 2.1K 14
Izuku midoriya un chico que nació diferente a las demás de su generación no por el hecho de no tener un don El tenía algo más El era un prodigio Tod...
24.6K 4.5K 22
Alex era una persona común con el sueño de algún día transmigrar a un mundo mágico. Pero lo que no esperaba es que sería transmigrado a un mundo much...