Un beso mezclado con lágrimas supo salado.
Lo empujé y finalmente solté mis fuerzas y dejé que mis manos colgaran. No hubo consideración por el beso que acababa de empezar a lastimarme.
En el momento en que finalmente separó los labios, no pude sostenerme y me puse de pie.
Jadeee para respirar y miré hacia arriba, su mirada fría cayó sobre mí.
En esa mirada sin una sola palabra de calidez, sentí como si mi corazón estuviera siendo destrozado. Después de todo, ¿volví a desear algo inútil?
─Dígame qué se siente al besar a un chico que ni siquiera le gusta, señorita Everett.
─...
Las crueles palabras de Theodore perforaron mis oídos mientras me levantaba impotente. Estaba resentida porque me entendió mal, pero pronto perdí el rumbo.
Porque no merecía ser culpado.
─¿No vas a hacer nada? Entonces, ¿es más posible?¿Podrías compartir la misma cama conmigo todas las noches sin ningún problema?
Theodore, quien agarró mi antebrazo, preguntó con sarcasmo.
Mientras buscaba palabras para aclarar el malentendido, me quedé entumecida como si me hubieran golpeado con fuerza en la cabeza.
Como...
De todos modos, ¿cómo pudiste decir algo así? ¿Deberías insultarme de esta manera?
─Usted está… sin saber nada...
Palabras impensadas salieron de mi boca. Todo mi cuerpo tembló con la sensación de insulto. Theodore volvió a agarrar mi barbilla.
¡Maldición!
En ese momento, le di una palmada violenta en la mano y lo abofeteé involuntariamente.
Una de sus mejillas se puso roja en un instante. Le dieron una bofetada en la mejilla y se quedó quieto. Fue de mi lado el que se tambaleó hacia atrás. La palma que se había estado moviendo con fuerza estaba hormigueando.
La habitación quedó envuelta en un frío silencio. Entonces una sonrisa se filtró de entre sus labios. Los dos ojos que me miraron se pusieron tensos de inmediato. Parecía haber una sensación de frío en esos ojos que estaban claramente marcados por el odio.
Inconscientemente agarré la parte superior de mi cuerpo con ambos brazos. Viéndome así, habló sarcástico.
─Todavía tienes orgullo.
─...
─Oye, no hay forma de que la joven del duque celestial Everett realmente quiera enfrentarme. Pido disculpas por ser presuntuoso.
Me miró, luego rápidamente dio la espalda y se alejó.
─...
Me quedé mirando fijamente el lugar que dejó, luego me tropecé con la cama y me senté.
Qué pasó... Fue como tener una pesadilla.
Mientras me agachaba en el frío que se filtraba por mi piel, un sollozo salió de mi boca.
El sonido de un llanto que no me pertenecía llenó la habitación.
Mi cuerpo temblaba insoportablemente.
Fue doloroso, triste, aterrador y solitario, pero nadie pudo consolar este corazón. Era algo que ni siquiera podía decirle a Charlotte.
Finalmente enfrenté mis sentimientos por Theodore, pero era tan débil y patética...
─Uhg.
Todos estos sentimientos tuve que aceptarlos yo misma.
Fue como tragarse una espina. Incluso si trato de dar la vuelta y tirarlo, ¿es posible? sería así de fácil. Ahora tal vez debería.
Más bien, desearía haber sido un monstruo como mi padre.
Si tan solo hubiera sido un monstruo que no pudiera amar..
─Entonces no habría sido tan doloroso.
Las ilusiones son superficiales, las esperanzas son débiles, la verdad es clara y la desesperación es grande. Parece que lo he estado deseando en secreto. Cuando me enamoré de alguien, esperé que él pudiera salvarme.
Así que lo entendí mal.
Pensé que Theodore Valentin podría entenderme, que si me conocía, podría salvarme...
Ni siquiera sabía que me odiaba.
Fue tan divertido para mí, que me apoyé en él.
─No soy la hija del duque Everett… De hecho, incluso si fueran diferentes, ¿Theodore me creería?
Enterré mi rostro en ambas palmas.
Las lágrimas se llenaron como un lago y me hicieron sentir que iba a estar sumergida en él para siempre. Estaba triste y quería morir.
¿Por qué estoy? ¿por qué debería?
Quería sacar mi corazón que latía dolorosamente y aplastarlo. Por favor detente, quería dejar de sentir este dolor y luché, pero mi corazón seguía ahí.
¿Por qué tenía que amar a Theodore Valentin?
¿Por qué tenía que ser él, la persona que vivió toda su vida como un árbol muerto y sintió emociones tan vívidas? De todos modos, podría haber sido otra persona.
─...
Sentí la luz filtrarse a través de mis dedos y de repente levanté la cabeza. Amanecía, pero no había sensación de calor.
Después de llorar un rato, miré por la ventana sin comprender.
Parecía mentira volver a empezar el día.
─Toc, toc.
Se escuchó un golpe afuera de la puerta, pero no respondí y entré dentro de la manta y caí en la profunda oscuridad.
El sol no salía en mi día.
Quizás, sea así para siempre.
* * *
Desde entonces, la actitud de Theodore hacia mí se ha vuelto mucho más fría y aguda que antes.
Incluso con solo pasar su mirada, me arroja veneno, y cada vez no hice nada más que encogerme.
Le tenía cada vez más miedo.
De hecho, ni siquiera sabía que tenía miedo de mis sentimientos por él. Ese sentimiento me debilitó. Frente a él, estaba infinitamente débil, y una sola pieza de su mirada me lastimaba fácilmente.
Me odio tanto a mí misma que quiero aplastarme, romperme y destruirme.
Pero, como siempre, ni siquiera tengo el valor de quitarme la vida. Ni siquiera puedo huir de aquí.
Cuando la fuerza de la familia Valentin aún es débil, si trato de escapar, no sé qué harán mi padre y Owen con Valentin usando eso como excusa.
Entonces estaba en un dilema. Había cuchillos por todas partes y no podía ir a ninguna parte. Lo mejor era acurrucarme en mi asiento.
Aún así, un día, luché por reunir mi coraje y dije─: Duque, tengo algo que decirte...
─Estoy ocupado.
─Es solo un momento.
─¿Qué? No pierdas mi tiempo, sé breve.
Sus ojos molestos me encogieron de hombros, pero logré poner en mi boca las palabras que había estado practicando en mi corazón.
─Soy diferente a mi padre y mis hermanos. Yo soy… No quería este matrimonio. Quiero decir, no me casé para dañar a la familia Valentin, fue la coacción de mi padre, yo quería ayudar a la familia Valentin y a ti...
Pero las palabras que salieron fueron un galimatías. Pensé en cómo organizar esta historia, que es difícil de captar el contexto, pero, por supuesto, no había tiempo para eso.
Theodore, quien me miró fijamente, soltó una breve carcajada.
─Estaba a punto de decir algo… Si quiere gastar bromas, hágalas más plausibles, señorita Everett. La expresión de su rostro es bastante agradable a la vista.
Sonrió fríamente y me dio la espalda. Mientras miraba fijamente su espalda distante, fue como si escuchara el sonido de algo rompiéndose.
Theodore solía ir al frente para cerrar las grietas que a menudo ocurrían en la finca. Fue tan corto como tres días y tan largo como uno o dos meses.
Estaba muy ocupado y cada vez me resultaba más difícil hablar con él. Las dos cartas de renuncia ocuparon lentamente su lugar en mi mente.
Durante mi estancia en el castillo Valentin, la única persona con la que podía hablar abiertamente era Charlotte, y fui excluida de todos los eventos familiares e incluso marginada.
El sutil acoso de los trabajadores fue desestimado por la Sra. Seymour.
Un día, había pájaros muertos junto a la ventana de mi habitación, pero todos fingieron no saberlo, así que Charlotte se enojó y lo tiró.
Eso sucedió con bastante frecuencia. Finalmente me acostumbré a los cadáveres de animales. Aves, ratones, serpientes, ranas y, a veces, insectos.
Ya no me asombraba ver a los muertos.
Entonces la gente del castillo de Valentin murmuró entre ellos, diciendo que yo era espeluznante.
Pero eso no me lastimó. Había algo más que me dolía.
Siempre era Theodore Valentin quien podía hacer eso.
─Este baile se celebra en la capital...
─¿Realmente necesitas mi escolta?Por favor, asiste sola.
─Quiero cuidar bien el invernadero de hierbas que quedó en el jardín y distribuir hierbas que también se usan como medicinas entre los residentes del ducado.
─Eso no cambia mi opinión sobre ti. No hagas nada inútil. Eres Lilian Everett, no la duquesa de Valentin. Algún día tendrás que divorciarte de mí y dejar este castillo.
─No fui realmente yo quien mató a ese cachorro que tienes...
─Entonces, ¿por qué encontraron su cuerpo en tu armario?
─No lo oculté, alguien más...
─Lo hiciste. No quiero molestarme más por esto.
─...
─Theo, ah, no, Duque, por favor ayúdame. Solo necesito que te quedes a mi lado hasta que este banquete termine, por favor...
─¿Qué clase de truco es este de nuevo? Suelta esta mano. Creo que tu hermano está llamando, así que ve y echa un vistazo.
Yo me marchitaba.
Lo que más me sorprendió fue el hecho de que Theodore Valentin no me protegería bajo ninguna circunstancia.
Esa comprensión rompió mis expectativas y fantasías que inconscientemente había tenido por él.
Owen susurró, sosteniendo mi mano en el banquete de ese día. 'Lilian, ¿has olvidado quién eres?'
Asentí inexpresivamente como un autómata, y Owen añadió con una sonrisa de satisfacción.
'Lilian Everett, te hice a ti. Me perteneces hasta que muera.'
Lilian Everett.
Lilian Everett.
Lilian Everett.
Era como una marca. No lo sabía, pero sorprendentemente, había muchos hombres que querían comprarme. Todo el mundo parecía estar esperando a que me divorciara del duque Valentin.
Cuando dijeron que querían que yo fuera su esposa o concubina, Owen trató de medir la riqueza y el poder de la otra persona.
Entre ellos estaba Lennon Chester. Era el candidato más probable. Fue porque quería darme la bienvenida como empleada del gobierno en mi primer matrimonio.
Incluso dijo que realmente me amaba. Besó el dorso de mi mano y susurró las palabras de confesión.
─Te amo, Lily. Quiero hacerte mía lo antes posible.
Veo. No sabía que habría tanta gente diciendo que está bien tener mi caparazón. No, tal vez sólo querían un caparazón.
Esto se debe a que las muñecas deben estar vacías por dentro para que sean ligeras, silenciosas y bonitas.
Hace dos años, mi padre estaba esperando una oportunidad para devorar a la familia Valentin.
Y lo consiguió. Para proteger a su familia y su patrimonio, Theodore Valentin tuvo que casarse conmigo.
Debe haber sido un matrimonio que ninguno de nosotros quería. Pero mi desgracia no se detuvo ahí.
Mi corazón se sintió atraído por un hombre que me odiaba a mí y a mi familia, y tenía esperanzas desesperadas para él. Esa fue mi verdadera desgracia.
* * *
Un año y seis meses, tanto cortos como largos.
Tenía tanto, o incluso más, vacío. He estado casado con Lilian durante 1 año y 6 meses, pero parece que la primera vez que nos conocimos fue hace mucho tiempo.
Hace unos dos años, tenía vagos recuerdos de visitar la mansión Everett.
Pero esos recuerdos eran tan escasos como el queso que comía un ratón. Estoy seguro de que conocí a alguien, pero no recuerdo esa vez.
Theodore estaba seguro de que sería un recuerdo de Lilian.
¿Por qué desaparecieron todos los recuerdos sobre ella?
─Lo siento, Maestro... La señora quiere ver al maestro.
─Di que no...
Theodore levantó la cabeza al oír la voz preocupada de la doncella.
La herida en su cabeza estaba completamente curada, pero el médico le dijo que descansara un rato, por si acaso, por lo que se abstuvo de realizar actividades y se fue recuperando.
Theodore dobló el libro en su mano y recordó la conversación que había tenido con el gerente general.
─Fue por Valentin que el maestro se casó con su esposa. Fue una especie de trato con los Everett.
Toda la información que le dio el gerente general fue sólo fragmentaria.
Theodore fue el primero en escuchar al gerente general porque sabía cómo comunicarse de manera objetiva e imparcial.
Más tarde, escuché la historia de otros y todos odiaban a Lilian, la anfitriona de la mansión Valentin.
─...
Theodore se puso de pie sin decir una palabra. No sabía si se reuniría conmigo si iba y se lo preguntaba en persona. Sin embargo, no será fácil.
─Dijiste que tu nombre es Charlotte.
─¿Sí? ¡Sí!
─Ni siquiera puedo recordar tu nombre. Tal vez sea porque estás cerca de ella.
─Ah...
─De todos modos, llévame a la habitación de la duquesa.
Los ojos de Charlotte se agrandaron. Abrió la boca como si quisiera decir algo, pero luego negó con la cabeza con un signo de resignación.
─Sí, te guiaré.