Cuando los muertos se levantaron... era pequeño y estaba solo.
Hasta que un hombre llamado Lee me encontró.
Lee también protegia a otra gente, pero no pudo salvar a todos. Nunca se puede salvar a todos.
Los vivos eran tan peligrosos como los muertos. Una mujer del grupo llamada Lily perdió a su padre, no pudo soportarlo más.
Le puso fin a la vida que Lee salvó, mamá de una joven llamada T/n, quien se convirtió en mi mejor amiga.
Lee dejó a Lily a un lado de la carretera y también se convirtió en el protector de T/n.
Lee nos enseñó a T/n y a mi a sobrevivir, nos protegió todo lo que pudo. Pero lo mordieron... por culpa mía. Y aun a punto de morir seguía enseñando.
Mantén el cabello corto, no vale la pena correr el riesgo.
Lee no iba a sobrevivir, sabía que era el final. Me hizo un último pedido. Nos pidió a uno de nosotros que le disparara... y lo hice.
Después de eso T/n y yo encontramos otro grupo, gente atormentada que escapaba del pasado. Había una mujer que tuvo un hijo llamado Alvin Jr. AJ. Él sobrevivió, pero la madre no.
Y entonces T/n y yo comenzamos a cuidarlo.
Pero Jane abandonó a AJ en la nieve. Creímos que lo habíamos perdido. Fue la gota que colmó el vaso para Kenny y sin Lee para decidir... me tocó a mi
No pude. Y Kenny mató a Jane.
¡Al final, AJ estaba vivo! Jane lo había escondido para demostrar algo. A pesar de lo que habían hecho, decidí que era mejor quedarnos juntos. Por el bien de AJ.
Pero como todo, no duró mucho.
AJ, T/n y yo viajamos a una Nueva Frontera. Creí que esta vez si funcionaría. Pero me equivoqué de nuevo.
Nos quitaron a AJ, dijeron que T/n y yo eramos demasiado jóvenes para cuidarlo. Pensamos que tal vez tenían razón. Nos despedimos.
Después lo lamentamos.
Buscamos mucho tiempo, y cuando casi no teníamos más esperanza... lo encontramos. Ahora buscamos juntos. Queremos encontrar un nuevo hogar.
S/n y yo somos todo lo que tiene AJ.
T/n y AJ son todo lo que tengo.
Y los protegeré con mi vida.
Como hizo Lee conmigo.
Un automóvil rojo, con rayas blancas, ruge por la carretera, pasando a un caminante que se arrastraba. Clement, que conducía, mira la carretera vacía. Él te mira para ver tu cabeza apoyada contra la ventana, tus ojos cerrados. Sonríe justo cuando escucha un sonido en el asiento trasero.
Ajusta el espejo retrovisor para ver a AJ sentado en la parte de atrás, luciendo aburrido, mientras mueve el cilindro de la pistola, continuamente. Tu cara se contrae levemente al escuchar el ruido que AJ estaba haciendo.
—¿Qué haces, tontín? —Clem le preguntó al chico.
—Finjo que tenemos balas —AJ respondió.
—Bueno, basta. Me pone nervioso. Y despertarás a T/n —dijo Clem.
—Demasiado tarde —te quejas cuando te despiertas, estiras los brazos y te sientas.
AJ deja de girar el cilindro y dice. —No me gusta eso de tontín. Soy demasiado grande para eso.
Clem y tú se miran antes de decir. —Awww, siempre te hemos llamado tontín.
—Es hora de que se detengan. Es Alvin
Junior —dijo AJ, con firmeza.
—¿AJ todavía funciona? —le preguntó Clem.
—AJ todavía funciona —AJ respondió y tu sonríes. Entonces AJ coloca su mano sobre su estómago. Te vuelves a mirarlo y le preguntas—. ¿Qué pasa?
AJ te mira y dice. —Tengo hambre.
Tú y Clem se miran el uno al otro, luego vas a la bolsa que está a sus pies y buscas algo. Encontraste un juguete Disco Broccoli y tuviste una idea. Lo sostienes frente a él y dices, con una voz diferente.
—Hola, Alvin Junior. Soy yo, Disco
Brócoli. Escuche por ahí que quieres comerme. ¿Es cierto? ¿Me quieres comer?
AJ sonríe y se ríe de esto. —Vamos, T/n. No puedo comer un juguete —él dijo.
—Oh, hombre. Me heriste el corazón—dijiste, todavía usando la voz graciosa.
—Me duele la pansa —dijo AJ, molesto.
—Qué insolente —hiciste que dijera el juguete, luego lo guardaste y volviste a cavar en la bolsa para encontrar una revista—. Toma esto, practica tu lectura —dijiste mientras le pasabas la revista a AJ.
—Pero no quiero —se quejó mientras tomaba el libro.
—Así no pensarás en el dolor de pansa —dijo Clem y AJ mira el libro.
—Pre-ca-len-tar... el horno. A-gre-gar la crema, los grano... granos de vaini-lla en una cacerola y ha-cer que hier-va —él lee y tú y Clem se miran asustados y preocupados.
—Pensándolo bien, mejor no. Eso te dará más hambre —dijo Clem mientras AJ dejaba la revista a un lado.
Miras a través de la bolsa y encuentras un paquete de papas fritas y se las entregas a AJ.
—Toma, aquí tienes. Es todo lo que tenemos —dices. AJ mira la bolsa y luego a ti.
—¿Y tú y Clem? —preguntó preocupado. Miras hacia Clem, que se encoge de hombros y suspira.
—No pasa nada —dijo y miras a AJ y dijiste—. Pronto encontraremos más.
AJ te mira y luego dijo. —Les creo.
Luego, Clem detiene el carro en una estación de tren abandonada, con los vagones de tren rodeandolo. Clem y tú miran el edificio, que se veía bastante silencioso, como preguntó AJ.
—¿Lo haremos?
—Eso creo —Clem respondió mientras mira el edificio.
—Se ve despejado —dijiste y Clem asiente.
—Lo haremos —dijo y levanta un cuchillo, por la hoja, hacia AJ, quien se inclina y agarra el cuchillo por el mango.
Entonces los tres salen del auto y tú y
Clem se dirigen al maletero mientras AJ va a una valla que estaba cerca. Clem abre el baúl y abre su mochila mientras agarras tu espada. Sacas la espada para comprobar la hoja, luego la envainas y la amarras a tu espalda. Clem te sonríe mientras agarra la palanca y un par de cantimploras y las mete en la mochila.
Caminas hacia AJ mientras Clem cierra el maletero y se pone la mochila en la espalda.
—Está bien. Vamos a buscar comida —le dijiste a los chicos cuando Clem ve un letrero.
—¿Eres amigo? Toca la campane —él Lee.
—¿Qué quiere decir? —le preguntó AJ.
—Significa que la gente de aquí dispara primero —Clem respondió mientras se volvía hacia AJ. Asiente mientras Clem agarra la cuerda de la campana y la toca.
—¿Qué haces? —AJ preguntó y luego tú te llevas el dedo índice a los labios.
Y los tres miran hacia el edificio justo cuando un caminante comienza a levantarse y caminar. Desenvainas tu espada mientras Clem saca su cuchillo y los tres caminan hacia el edificio para ver a un par de caminantes cerca de la estación de tren.
—AJ, no te muevas —adviertes mientras Clem se acerca a un caminante, lo patea en la rodilla y apuñala la parte superior de la cabeza. Mientras te diriges al otro caminante, le das una patada en la rodilla y corta la parte superior de su cabeza. Tú y Clem se dan la vuelta y caminan hacia AJ, que se escondía detrás de un barril.
—Todo listo. ¿Sigues con nosotros? —le preguntó Clem.
—Sigo aquí. Sin mordidas —AJ respondió, con una sonrisa, mientras se acercaba a ustedes. Clem y tú le sonríen mientras te giras y señalas la estación.
—Luego entramos ahí —dijiste y los tres se dirigen hacia la puerta principal de la estación.
Intentas a abrir la puerta, pero está cerrada. Suspiras ante esto mientras Clem saca la palanca.
—Me permites —dijo y te haces a un lado él inserta la barra entre la puerta y el panel y abre la puerta.
—Mi héroe —bromeas mientras Clem pone los ojos en blanco y se sonroja, luego se vuelve hacia AJ y se arrodilla.
—¿Qué se hace dentro de un lugar nuevo? —Clem preguntó, probando a AJ para ver si los escuchó a los dos.
—Escuchamos si hay monstruos —AJ respondió.
—¿Y luego? —preguntó Clem. AJ frunce el ceño cuando comienza a pensar.
—Vamos. Ya lo sabes —dices.
—Buscamos...
—Buscamos un lugar para esconderte —los tres dijeron al unísono.
—Así es—dijo Clem mientras se levantaba y se dirigía a la puerta.
La abre, lentamente, mientras mira hacia adentro para no ver nada fuera de lo común. Abre más la puerta y los tres comienzan a entrar hasta que una vista les hizo a ti y a Clem detenerse en seco. A su izquierda y cerca de una ventana, había dos caminantes pegados a unas sillas. Y los vieron y, débilmente, intentaron acercarse a ustedes.
—Monstruos —comentó AJ—. Están atados. ¿No pueden alcanzarnos?
Caminas hacia los caminantes y simplemente los miras antes de decir. —No, no pueden.
—Ammm. No te escondas con ellos alrededor —AJ dijo mientras mira a su alrededor y encuentra una puerta—. Aquí está cerrado —dijo después de intentar abrirla.
—Una puerta de seguridad —dijo Clem mientras se paraba junto a AJ.
—Esas no se pueden forzar —dijiste mientras te pones al lado de los chicos. AJ mira hacia abajo con enojo.
—Sé que tienes hambre. T/n y yo también. Encontraremos algo. Lo prometo —Clem le dijo a AJ, quien asintió y luego miró a su alrededor. Miras a tu alrededor y encuentras algunos frascos en la mesa. Coges un frasco y lo inspeccionas.
—¡Frijoles! —AJ exclama, feliz.
Te reíste y dijiste. —Hechos en casa —
Clem se acerca a ti y te abre su bolso mientras pones el frasco dentro—. Debe haber más de donde salió esto —dijiste mientras Clem cierra la cremallera de la bolsa y se la vuelve a poner en la espalda.
Luego se acerca a la pareja de caminantes y encuentra una botella cerca de ellos. La agarra y lee la etiqueta.
—Veneno —murmura.
—¿Se rindieron? —AJ le preguntó a Clem.
—Querían... irse juntos de este mundo. De la mano en su hogar —Clem respondió mientras mira a la pareja de caminantes.
—¿Encontraremos un hogar? —preguntó AJ.
—Ya veremos —Clem respondió mientras dejaba la botella y vio una nota. Lo coge y lo lee—. Por favor, déjennos en paz. Esto es lo que queríamos —Clem y tú fruncen el ceño ante esto mientras deja la nota y ve una llave en uno de los caminantes—. Seguro que es la de la puerta de seguridad... —dijo mientras se acercaba a ella, pero se detuvo una vez que el caminante trata de agarrarlo—. Es imposible —refunfuña.
—¿Tenemos la llave? —preguntó AJ.
—Es arriesgado. Podría haber otra forma de atravesar esa puerta. Demos un vistazo —dijo Clem.
—Seamos inteligentes —dijo AJ.
—Así es —dijiste mientras le dabas una palmada a AJ en la espalda y los tres se separaron para mirar a su alrededor. Caminas hasta la ventanilla de la taquilla para ver una pequeña abertura—. Es muy pequeño para pasar —dijiste.
—Bueno, para ti y para mí —dijo Clem mientras miraba la apertura también.
—La llave o la ventana. Esas son las opciones —dijiste mientras AJ se acercaba a ustedes. Se pone de puntillas para mirar por la ventana y dice—. Está oscuro ahí — luego mira a los caminantes.
—Deberíamos matar a los monstruos.
No son personas —dijo.
—Antes eran personas. Y como personas, pidieron que los dejaran en paz —le dijo Clem.
—¿Y cuál es mejor? —preguntó AJ, mirando entre tú y Clem.
Tú y Clem se miran, Clem hace un gesto hacia la pareja y tú niegas levemente con la cabeza. Luego él asiente con la cabeza hacia la ventana y tú la miras, luego te vuelves hacia él y asientes. Él asiente con la cabeza y se vuelve hacia AJ.
—AJ. Necesitamos tu ayuda con esto —dijo mientras apuntaba a la ventana.
—¿Ahí adentro? —preguntó AJ, asustado, mirando a la ventana.
—Tenemos que saber si hay comida adentro —le dijiste—. Y necesitamos que seas valiente —AJ mira hacia el suelo por un momento y luego vuelve a mirar a Clem y a ti.
—Está bien. Puedo ser valiente —dijo y le sonríes mientras se acerca a la ventana—. Levántame —dijo y Clem agarra a AJ por debajo de sus brazos y lo ayuda a subir a la cabina y AJ comienza a gatear.
—Cuando estés adentro, abre esta puerta —Clem instruye.
—Entiendo —dijo AJ mientras llegaba al otro lado.
Tú y Clem van hacia la puerta y esperen a que la abra. El único ruido que ustedes podían escuchar eran los gruñidos y gruñidos de la pareja. Les das una mirada preocupada y Clem dice. —¿AJ? —y la puerta finalmente se abre.
—¡Tienen que ver esto! —AJ dijo y tu y
Clem entra para ver habitación bastante buena, una cama grande y estantes de comida enlatada.
—Les iba bastante bien aquí —dices.
—¿Podemos quedarnos aquí? —preguntó AJ, emocionado.
—Ya veremos —respondió Clem, haciendo que AJ frunciera el ceño.
—No hay nadie aquí. Nunca hay nadie en ningún luegar. Siempre hay solo monstruos —AJ dijo, con tristeza.
—Estamos aquí, chico —dijo Clem, señalando entre tú y él.
—Ya sé —dijo AJ, todavía frunciendo el ceño.
—¿Y no somos alguien? –le preguntas.
—No quise decir eso —él respondió, entonces algo le llama la atención y corre hacia el otro lado de la habitación. Se acerca a un escritorio y encuentra algunas balas. Los agarra y los carga en su arma—. Sólo unos pocos —comenta.
—Recuerda lo que dijimos... —dijiste y AJ te mira.
—Ya lo sabes —dijo Clem.
—Guardar la última bala para mí —AJ respondió.
—Eso es —tú dices.
—Vamos, sigamos buscando —Clem dijo.
Tiene que haber algo para comer —y los tres comienzan a mirar a su alrededor. AJ ve una cuna y dijo—. No vimos a un niño.
Clem ve la cuna y dijo. —No. No, no lo vimos. Quizá se rindieron por eso —Clem encuentra una lata y la mira, pero había moho saliendo del agujero de la lata—. No sirve más. Lo siento amigo. Se vencieron hace mucho —le dijo a AJ.
AJ cruzó los brazos sobre el pecho y dijo, enojado. —Mierda.
—Hey, no más insultos —dices mientras Clem tira la lata a un lado.
—No quise decir eso —AJ dijo, luego miró hacia la cama y notó algo debajo de ella—. Mira —dijo y tú y Clem miran y ven lo que parece el borde de una puerta. Tú y Clem van a la cama y la empujan hacia un lado, dejando al descubierto una puerta—. ¿Puera trampa? —preguntó AJ.
—Sí —dijiste mientras tú y Clem se arrodillaban en el suelo.
—Quizá querían esconder algo —Clem murmura mientras abre la puerta. Los tres miran hacia abajo y sus ojos se agrandan al ver toneladas de comida enlatada.
—¡Hay muchísimo! —AJ dijo en estado de shock.
—Sí, así es —dijo Clem.
—Comeríamos durante semanas con esto—dijiste pero escuchaste algo. Miras hacia el suelo y ves una granada de mano rodando justo en el medio—. ¡Es una trampa! —gritaste y Clem inmediatamente cierra la puerta y te agarra a ti y a AJ y los empuja fuera de la habitación justo cuando estalla la granada.
Tú y los chicos tosen y tienen arcadas cuando el humo comienza a aclararse. AJ comienza a ponerse de pie mientras tú te pones de rodillas.
—Oh, Dios... ¡AJ! ¡T/n! —exclama Clem mientras los abraza.
Se abrazaron por un momento hasta que escucharon algo. Clem y tú corren hacia la ventana para ver un montón de caminantes que se acercan a ustedes. AJ corre hacia los dos y mira por la ventana y tiene una mirada horrorizada en su rostro.
—¡Monstruos! —él susurra y Clem corre hacia la puerta y la abre de una patada. Los tres salieron corriendo y vieron que estaban a punto de ser rodeados—. ¡Oh, maldición! —AJ exclama.
—Está bien, tenemos que volver al auto — dijo Clem y los tres corrieron hacia el carro, solo para ver a algunos caminantes acercándose.
—Sabes qué hacer. Quédate a los costados y vigila mientras T/n y yo despejamos el camino —Clem le dijo a AJ mientras tú desenvainas tu espada.
AJ asiente y corre hacia un lado mientras Clem saca su cuchillo y ambos matan a un par de caminantes mientras AJ empuja contra una gran pieza de metal, que derriba un caminante y lo atrapa.
—¡Por aquí! —dijo y Clem corre hacia el caminante y lo apuñala en la cabeza.
—¡Vamos hacía el auto! —dijiste mientras envainabas tu espada y tú y los chicos corren.
Corres hacia el asiento del pasajero y te subes mientras Clem abre la puerta para AJ, quien sube y luego se sienta en el asiento del conductor. Te arroja su mochila y tú la atrapas.
Clem se vuelve justo a tiempo para ver a un caminante colgado sobre la puerta y apuñala al caminante, en el ojo, con su llave. Luego patea la puerta para tirar el caminante y la cierra justo antes de que puedan venir más. Clem y tú se miran horrorizados mientras ambos recuperan el aliento hasta que Clem alcanza el volante, quita el freno y pone el coche en marcha.
El auto comienza a andar cuando un caminante se acuesta sobre el capó del auto mientras otro caminante entra por la ventana trasera e intenta agarrar a AJ. Pero fue rápido cuando trepa hacia ti mientras le das a Clem su cuchillo y sacas tu propio cuchillo.
Y luego un caminante entra por tu ventana, pero rápidamente lo apuñalas en la cabeza antes de que pueda hacer algo.Mientras tanto, un caminante se arrastró a través de la ventana trasera hacia el asiento trasero e intenta agarrar a Clem. Afortunadamente, AJ fue rápido cuando tomó su cuchillo y apuñaló al caminante en la cabeza.
El automóvil continúa rodando hasta que clava al caminante, que tenía las llaves del automóvil en el ojo, contra un árbol.
—¡Clem, mira! ¡Las llaves! —AJ señaló y Clem levanta la pierna derecha y patea la ventana hasta que se rompe. Luego se arrastra y agarra la llave, vuelve a subir al asiento, pone la llave y enciende el motor.
—¡Chicos, abróchense el cinturón! —grita Clem y ustedes se abrochan el cinturón, pero sujetas a AJ mientras Clem pone el auto en reversa hasta que golpea algo, luego pone el auto en marcha y comienza a avanzar cuando un caminante aparece en la ventana e intenta avanzar.
Agarra a Clem, quien mantiene a raya al caminante. AJ saca su arma y apunta, pero se detiene cuando tú y él miran por la ventana para ver que se dirigían hacia una gran roca. Tú y AJ gritaron cuando el auto golpea el roca y sostienes a AJ mientras el auto comienza a dar vueltas varias veces.
Clem abre los ojos, dándose cuenta de que ustedes estaban boca abajo, algunos caminantes venían hacia el auto, pero se detuvieron cuando alguien les estaba disparando flechas a la cabeza. Luego se gira a su derecha para ver a AJ y a ti siendo arrastrados fuera del auto, ambos estaban inconscientes.
Se acerca a ti y a AJ y dice, débilmente.—¡Ayuda! Por favor —luego se desmayó de nuevo.
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𝑯𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂 𝒐𝒓𝒊𝒈𝒊𝒏𝒂𝒍 𝒅𝒆 LayceJ25.
𝑷𝒖𝒆𝒅𝒆𝒔 𝒆𝒔𝒄𝒐𝒈𝒆𝒓 𝒆𝒍 𝒗𝒆𝒔𝒕𝒖𝒂𝒓𝒊𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒎á𝒔 𝒕𝒆 𝒈𝒖𝒔𝒕𝒆 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒆𝒏 𝒆𝒏 𝒎𝒖𝒍𝒕𝒊𝒎𝒆𝒅𝒊𝒂. 𝑺𝒊 𝒏𝒐 𝒕𝒆 𝒈𝒖𝒔𝒕𝒂 𝒏𝒊𝒏𝒈𝒖𝒏𝒐 𝒑𝒖𝒆𝒅𝒆𝒔 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒕ú 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒂𝒔.