Desata la corbata y la lanza a algún lugar de la habitación de hotel. Está impaciente, su cuerpo hierve y está tan ansioso por que su lindo omega atraviese el umbral y se coloque frente a la cámara. Las manos del alfa pican por tocarlo y tocarse, es tan frustrante para él tener a su bebé tan lejos, cuando podría estar ahí, en la habitación junto a él, haciéndose cargo de aquel celo, porque ama con locura todo lo que Taehyung y él hacen cuando entran en su ciclo de calor.
Lo deshace completamente en la cama, lo hace gemir y pedir cada segundo más de él.
Gruñó, y apretó con los puños su pantalón que ya comenzaba a estorbar. Estaba a punto de preguntar si todo iba bien en el cuarto de baño, el por qué demoraba tanto ahí adentro. Pero las palabras del azabache murieron en su boca cuando un sexy rubio apareció frente a la pantalla, y comenzó acercarse lentamente hacia esta, moviendo sus caderas a la par de los holanes de la pequeña minifalda que apenas y cubría aquella lencería de encaje rojo.
El alfa se sintió desfallecer completamente al notar como aquel color carmesí resaltaba tan deliciosamente la piel descubierta de Taehyung. La luz tenue del sol entraba por la gran ventana y chocaba contra la piel perlada del omega, creando un brillo precioso en ella. Y como si eso no fuera suficiente, al acercarse un poco más, a Jungkook no le fue posible ahogar aquel gruñido al ver el crop top del mismo color y el mismo material, cubrir los pezones rosados, y erectos de su chico.
─ Ah, joder, tú me quieres matar bebé...
Taehyung se acerca hacia el escritorio, pone su peso en sus brazos inclinando el torso hacia adelante, dándole una vista de cerca de su pecho, que es adornado por el encaje, mientras con la yema de los dedos acaricia uno de sus brazos, hasta tomar un tirante del corp y comenzar a tirarlo hacia abajo, sin apartar la mirada a su alfa, que ya se encuentra tocando su entrepierna por encima de su pantalón de vestir.
─ Este atuendo fue idea de Jimin. Lo compré para ti, sé lo mucho que te gusta verme con cositas de encaje ─ hablaba mientras tiraba del siguiente tirante, dejando sus hombros al descubierto. ─ ¿Te gusta, papi?
Jungkook se lame los labios, paseando la mirada por esas clavículas marcadas, y mira con lujuria aquella preciosa marca en el cuello que es mostrada por Taehyung con orgullo, diciéndole con ello a todos los malditos alfas que van detrás de él, que solo era suyo, de nadie más que de su alfa pura sangre.
─ Me encanta, te ves tan delicioso así, pero tú sabes lo que deseo que hagas, así que, andando bebé.
Jungkook tira de su camisa de vestir y la lanza al suelo, desabrocha sus pantalones e introduce su gruesa mano dentro de estos. Taehyung con voz dulce asiente, se aleja de la cámara colocándose de espaldas marcando su caminar, meneando las caderas de una manera tortuosa para aquel alfa que saliva al poder observar a través de la pantalla, los muslos acaramelados y suaves de su pequeño.
Al llegar a mitad de la habitación, Taehyung mira por sobre su hombro a Jungkook, que yace sentado en el sofá, el rostro de este luce carmesí, sus pupilas dilatadas, mirada posesiva, lujuriosa, incluso puede observar como gotas de sudor resbalan por sus sienes, rodando hasta recorrer cuello y pecho que yace a su merced junto a aquellas piernas abiertas mostrándole así su enorme bulto.
Aquello invita a Kim a proseguir, por lo que muerde su labio inferior, y con suavidad desabrocha el crop top, dejando que caiga al suelo, retirando luego la falda y lanzándola hacia la webcam soltando una risita traviesa.
Jungkook gruñe al otro lado de la pantalla, su gorda y goteante polla comienza a doler como el infierno, así que con desesperación hala sus pantalones hacia abajo junto a su bóxer.
Esos veintiséis centímetros golpean el fuerte abdomen de Jungkook, un sonido excitante resuena para un Taehyung que al percatarse de la sensual y caliente desnudez de su novio, deja de perder el tiempo, listo para retirarse su lencería y quedar también al descubierto.
─ Mira que tenemos aquí... También estás duro ¿ah, bebé?
Jungkook por el placer que inunda sus sentidos, se acerca a la cámara mostrando su torso. Taehyung jadea al ver nuevamente aquel eight pack, bíceps, y por último, esa línea V que se muestra aún marcada con chupones que él mismo le otorgó un día antes de que su alfa partiera a Japón.
─ Oh, Alfa, te-te necesito...
Jungkook observa cómo la delicada mano de su omega baja lentamente hasta su bulto, inicia dando masajes lentos y suaves. Por lo que el azabache baja un poco más la cámara, mostrando su polla siendo enrollada por su mano, halando ésta de la misma manera, mientras gime el nombre del dueño de su corazón.
─ Ah... Taehyung... ¿Te gusta? ¿La quieres?
─ La quiero, mi amor... Mngh...
Los movimientos de ambos amantes se sincronizan, de pronto ambas habitaciones parecen sofocarlos. Taehyung se recuesta en la cama al necesitar un poco de soporte, abre las piernas y Jeon gruñe al observar la entrada de su omega chorreando su lubricante natural, curvando la espalda con los labios abiertos soltando jadeos suaves llamando a Jeon. Y este sabe que su bebé está a punto de correrse, así que con sonrisa ladina, le ordena algo que hace pucherear al contrario.
─ Detente bebé.
Taehyung refunfuña y obedece la petición de su alfa. Con lentitud se incorpora en la cama, y mira hacia la cámara. Jungkook observa el desastre que es Kim. Aquellos labios rosados ahora lucen en un tono rojizo fuerte, las pupilas dilatadas, sus cabellos rubios alborotados y su mirada lujuriosa pidiendo más.
─ A-Alfa... p-porfavor...
─ Shh, te tocaste sin mi consentimiento bebé...
─ Haré... haré lo que quieras... p-pero , por favor, te lo suplico, alfa...
Jungkook seguía masturbándose frente a la cámara, sintiéndose cada vez más excitado al escuchar a Taehyung suplicar por más placer. Así que no pudo resistirse.
─ De acuerdo, entonces, muéstrale a papi lo que haces cuando estás solito...
Taehyung asiente, se pone de pie, mostrando su cuerpo completo y desnudo.
─ Qué delicioso estás... ─ Jungkook sujeta y aprieta con sus manos aquella erección creciente.
Taehyung mueve las caderas de un lado al otro, acercándose hacia los cajones que se encuentran a su espalda, inclina su cuerpo descaradamente para abrir el último cajón de la cómoda, mostrándole todos sus atributos a un Jungkook que no paraba de tocarse.
─ Bebé, ¿Qué estás haciendo? ─ pregunta con voz rasposa y sin aliento.
Taehyung se inclina más, y Jungkook no puede evitar jadear.
─ ¡Joder! Me vas a volver loco Taehyung. Ven acá ahora.
Taehyung observa a su alfa por sobre su hombro, con una sonrisa perversa, extrae lo que busca y Jungkook traga exageradamente al ver en las manos de su omega, un consolador.
─ Mierda...
─ Me dijiste que te muestre lo que hago cuando estoy solito, Ggukie, y lo haré, con esto.
─ Pero bebé, es muy pequeño. Yo soy más grande. ─ el tono satoori que utiliza Jeon, hace que las piernas de Taehyung tiemblen, y un jadeo se escape de sus labios carnosos.
─ Amor, lo sé... Me deja con ganas de más... ─ hace un puchero, mientras posiciona dos almohadas en la cama y coloca sus rodillas encima de estás, dando la espalda a la webcam ─ ¿Esto hará que me permitas correrme?
La voz fue tan dulce y seductora que Jungkook sintió que podría correrse sólo con ello
─ Primero enséñame. Enséñame lo que haces cuando piensas en mí...
Taehyung sonríe, lleva su mano hacia sus grandes y redondos glúteos, para empezar a acariciarlos con la yema de sus dedos, escuchando de fondo, los gemidos roncos de Jungkook. Su entrada comienza a lubricar, y el líquido a resbalar por sus muslos internos, no puede más y empieza a frotar su propia entrada.
Jeon trata con todas sus fuerzas de no perder la poca cordura que le queda, pero le fue imposible cuando vio tres dedos dentro de Taehyung.
─ ¡Oh joder, precioso! Mírame, mira como me pones mi amor...
Su bebé obedece, con sus dedos masajeando su interior, jadeando y mirando con ojitos lascivos y llenos de placer al alfa que sigue masturbándose frente a la cámara. Sus gemidos son más elevados. Extrae sus dedos de su interior, alinea el juguete y empieza a penetrarlo lentamente en su húmeda entrada.
─ Mngh Ggukie, te necesito a ti... Oh, esto e-es tan p-pequeño. Necesito tú polla en mí...
El mencionado se recarga en el espaldar del sofá, perdiendo de pronto la estabilidad. Se masturba con fuerza mientras observaba a Taehyung subir y bajar frenéticamente en aquella posición tan íntima y sensual.
Clava su mirada en el miembro de su omega, mirándolo duro y sin atención.
─ Mastúrbate para mí cariño. Ahora.
Taehyung complace a su amado inmediatamente, sus pollas siendo masturbadas con vehemencia a la par, chasquidos obscenos, el dulce olor a cereza inundando la habitación del Omega, y el aroma de chocolate amargo, llenando la habitación de hotel del Alfa.
─ Ngh, alfa, mi amor oh~ ya... ya no aguanto...
─ ¡Joder cielo! Solo un poco más, solo un poco cariño.
Jungkook sigue moviendo su muñeca, mientras acaricia el glande con su pulgar. Su polla duele, palpita y gotea líquido preseminal, la imagen de su novio penetrándose aquel juguete es lo más caliente y delicioso que ha visto en su vida.
Taehyung no pudo controlarse más, suelta un gemido para posteriormente correrse en las sábanas blancas de la cama que ambos comparten Jungkook al notar aquello, se masturbó un poco más, llegando al clímax también, soltando toda su esencia, que deseaba tanto que estuviese dentro de su Taehyung. Recarga la cabeza en el respaldo del sofá, recomponiéndose del orgasmo. Observa como Taehyung extrae el juguete de su interior. El chasquido fue tan delicioso, que Jungkook se comenzó a poner duro nuevamente.
─ Eres increíble, tan sexy y dispuesto hacer todo lo que te pida para complacerme...
El chico se incorpora recostándose de lado en las almohadas, apoyando la cabeza suavemente en su mano y procurando que Jungkook pueda contemplar su cuerpo desnudo.
─ Y-Yo siempre hago y haré todo lo que me pidas, todas las fantasías que quieras cumplir, puedes hacerlas conmigo, mi cuerpo es completamente tuyo. Haz con él lo que te plazca.
Jungkook gruñe, escondiendo con ambas manos su erección.
─ Amor, no hace falta que lo escondas, estás tan duro que puedo verlo desde aquí. ─ sonríe coqueto ─. Tengo ganas de devorarlo otra vez. ─ lame con descaro sus labios.
─ Y yo tengo ganas de follarte toda la puta noche sin parar.
─ Ven a casa alfa, te necesito...
─ Estoy pensando seriamente en dejar que Namjoon se encargue de lo demás y volver para hacerme cargo de ti, mi amor.
─ ¿Puedes hacerlo? Si es así, por favor vuelve, es mi primer día de celo, y dios... no quiero imaginarme como serán los próximos días sin ti en casa.
─ Voy a hablar con Nam, bebé. Cualquier cosa te lo haré saber ¿De acuerdo?
Taehyung asiente despacito, se incorpora en la cama y acerca la laptop hacia él sin apartar la mirada de aquellos iris oscuros, que le miran con completa adoración.
─ Te amo, alfa. Muchísimo.
─ Te amo mucho más, cielo. ¿Estás bien? ¿Ese imbécil no te lastimó?
─ No mi amor, solo me asustó mucho. Pensé que en cualquier momento perdería el control de sí.
─ Si eso hubiese pasado, él no viviría para contarlo. ─ respondió enfadado.
─ Amor~, cuando hablas así me asustas muchito. ─ hace un puchero y se aferra a una de las camisetas de Jungkook.
─ Perdóname cielo, pero de solo pensar lo que tuviste que pasar hoy, me hierve la sangre, no me gusta que nadie se te acerque con dobles intenciones, y mucho menos que te toque.
─ Te prometo que estaré lo más alejado posible de Seojoon, incluso cancelaré mis futuras sesiones con él.
─ No hace falta bebé, lo corrí a la mierda de la agencia.
─ Jungkook no... ¿Por qué lo has hecho?
─ ¿Cielo, de verdad lo preguntas? ─ cuestiona con ceja alzada.
─ Amor, fue su lobo el que reaccionó, no él.
─ Sabes que me interesa poco. No me voy a arriesgar, es mejor que esté alejado de ti.
Taehyung asiente cabizbajo. Jungkook puede ver su carita seria y teme que su cabecita comience a crear ideas erróneas.
─ Cielito, mírame a los ojos ¿De acuerdo?
El omega le mira, y sus ojitos lucen vidriosos. Jungkook suspira.
─ Sabes que no soy más ese alfa del pasado, lo sabes mi amor, te lo he demostrado una y mil veces, así que dime ¿Qué quieres que haga entonces con Seojoon? Dímelo y lo haré.
Taehyung se lo pensó un momento y tal vez su alfa tenía razón sobre Seojoon. A él le daba un poco de pena que el chico perdiera su empleo. Pero dejarlo pasar y permitir que él siguiera trabajando ahí a pesar de lo ocurrido, sería una mala idea.
─ Yo sé que ya no eres ese posesivo de antes mi amor, has cambiado muchísimo, y lo que has hecho está bien, te amo, amo que me cuides y tienes razón, tampoco yo quisiera arriesgarme con él, pues...
Guarda silencio un poco y Jungkook lo anima a proseguir.
─ ... Él se me ha insinuado varias veces, Ggukie, perdón por no decirlo antes...
Jungkook sonríe al ver cómo su bebé se hace pequeño en la cama matrimonial, y abraza con fuerza la camisa, mientras hunde la carita ahí, tal vez percibiendo su aroma.
─ Bebé, no te disculpes. Yo lo sabía, múltiples veces noté como ese tipejo te miraba, como se te acercaba, como usaba apodos cariñosos contigo. Pero lo dejé pasar mi amor, porque te lo dije, no soy más ese Jungkook. ─ Taehyung le mira a los ojos y asiente, un poco más tranquilo ─ Pero esto sí que no lo voy a pasar por alto, porque escúchame cielo, yo nunca dejaré que nadie te toque ni un solo cabello, eres mi adoración, lo más precioso que me ha pasado en mi vida, así que como tal reliquia te voy a cuidar. Siempre, bebé.
─ Lo sé, por eso y más te amo, mi lindo alfa.
─ Te amo, mi lindo omega...