________________Mi salvación eterna__________________
Capitulo anterior
—Está bien Neville, aquí puedes actuar a tu manera, no habrá juicios ni castigos solo comprensión y cariño, puedes chupar tu chupete y luego hablemos de algunas cosas.
El chico se tomó un minuto para evaluar al hombre frente a él y cuando ni siquiera vio la sombra de su temido profesor de pociones se dejó relajar mientras chupaba su chupete. Era la primera vez que usaba uno así sin represalias, le gustó la sensación y se dio cuenta de que lo tranquilizaba mucho. Por el rabillo del ojo vio que Amelia sonreía por lo lindo que se veía el chico con el chupete en la boca.
CAPITULO
Decir que el muy respetado director de Hogwarts estaba loco sería un apodo e incluso una forma sutil de representar el hecho. Dumbledore esta vez había destruido todo el salón principal, había banderas de las casas rotas, mesas destruidas, un agujero en el techo y el lugar donde estaba sentado había volado, tanto que estaba tratando de recuperar el aliento que era entre cortado.
Todo iba mal y no podía encontrar la manera de arreglarlo, tuvo que hacer un juramento mágico de que ya no intentaría alejar a Harry de Snape o intentar que arrestaran al hombre. Todavía estaba furioso con las actitudes de la gente, con la del ministro y Amelia, no estaba mostrando el respeto que realmente se merecía. Albus estaba más tranquilo sabiendo que los protectores de sangre se habían mudado a la casa de Snape, pero eso no sirve de nada.
Dumbledore se dio cuenta de que su espía ya no seguiría sus órdenes, por lo que no le dejaba con muchas opciones. Tenía que aceptar que Harry ahora estaba viviendo con Severus y que la plaga defectuosa aún no podría luchar contra el Señor Oscuro y nunca podría permitir que eso sucediera. Su arma debe estar lista para sacrificarse en el momento adecuado y acabar con todo, llevándose al viejo Voldemort con ella.
Otra cosa que irritó al director fue que Neville ahora estaba bajo el poder y la influencia de Severus y que los hombres tenían la mayor cantidad de votos en Wizengamot. Si no comenzaba a actuar pronto, perdería su puesto y esa no era una opción. El profeta diario era otro que día tras día encontraba algo nuevo que hacer sobre sí mismo y su imagen se iba por el desagüe cada vez más. Dumbledore no entendía dónde se había equivocado para que todo saliera tan mal.
Deteniéndose para respirar el director miró la destrucción que había causado su magia pero estaba más tranquilo y tenía un plan de contingencia, ahora solo espera para ponerlo en práctica y si lograba hacerlo bien volvería a tener el control de Harry y no lo haría estar en peligro de perder su magia. Sabía exactamente qué hacer y con ese pensamiento se dirigió a su oficina para hacer algunas tarjetas.
***
Neville fue presentado a toda la casa mientras Amelia vigilaba a Draco y Harry que aún dormían. Estaba encantado con el invernadero que tenía una hamaca en el medio y tenía muchas ganas de agarrar un libro y correr allí. La piscina fue otra que encantó al niño y Snape le prometió que aún lo llevaría allí junto con Harry, que también quería aprender a nadar pero que aún no había tenido tiempo.
Neville estaba disfrutando de cómo el hombre se comportaba consigo mismo, no era ese hombre ignorante enojado que conocía de Hogwarts. Ver a Neville, Severus, hablarlo suavemente tratándolo así fue mucho mejor y si él fuera como todos los demás en su salón de clases, tendría mucha más gente interesada en pociones en lugar de simplemente odiar la clase por el maestro.
Neville conoció a los elfos domésticos y le gustó mucho Dobby, que era divertido y muy enérgico, y le encantaba saber que todos eran tratados bien a diferencia de su casa, donde su abuela le echó aceite hirviendo a uno de ellos una vez, pero ella sufriría por eso. del velo, entonces al chico no le importó. Ahora estaban en la oficina de Snape y el hombre le había pedido que esperara y buscara algo.
A Neville le encantaba poder caminar por toda la casa o quedarse quieto con un chupete súper lindo en la boca. Mientras el chico esperaba, Snape estaba ordenando a los elfos que fueran a la mansión Longbottom y recogieran todas las pertenencias del chico y las instalaran en la habitación. Obviamente, el maestro de pociones llevaría al chico de compras si necesitaba algo, pero era tarde en la noche y las tiendas en el callejón diagonal estarían cerrando a esa hora.
"Neville quiere que conozcas a uno más de los elfos domésticos. Snape entró a su oficina acompañado por un elfo que vestía un babero con la letra P bordada y lucía bastante alegre. "Este es Liano, será tu elfo doméstico y dondequiera que vayas te seguirá. Él, al igual que Dobby, sabe qué hacer cuando entras en regresión.
"Hola, Liano.
—Hola Maestro Neville, ¿necesita que Liano haga algo?
"No, gracias por ahora.
En un instante, el elfo desapareció y solo quedaron ellos dos en la habitación. Neville vio al hombre tomar la silla a su lado y se preguntó por qué no se sentaba detrás del escritorio, generalmente donde su abuela se sentaba a quejarse de su existencia. Esperó en voz baja cualquier cosa que el hombre tuviera que decir mientras chupaba el chupete.
-Sé que será un gran cambio para ti Neville y que hasta que te acostumbres será muy complicado, pero vayamos despacio. - el maestro de pociones estaba tratando de no asustar al chico. Tienes el mismo cuadro clínico que Harry, así que te voy a preguntar lo mismo que le pregunté a él. Quiero que actúes a tu manera, si quieres usar un chupete, úsalo, si quieres beber algo del biberón, úsalo también, si quieres que te recojan, pregunta. Ahora eres parte de esta familia y quiero que te sientas como en casa.
"¿Hay una razón?"
"Sí, cuando siempre actúas de tu manera linda, cuando estás retrocediendo recordarás cómo actuaste porque te sientes cómodo con todo.
"¿Harry actúa así?"
-Todo el tiempo, verás mucho de él pidiéndome que le dé la vuelta o tomando un biberón antes de acostarse y cuando se despierte. Y tú también, aquí puedes hacer cualquier cosa, sé que era bastante ignorante contigo en el aula, pero ahora entiendo por qué no podías hacer las pociones, y ya estoy preparando pociones que te ayudarán con los efectos de la maldición cruciatus. - mientras Snape hablaba con el chico, estaba comiendo un pastel que Liano le había traído con un vaso de jugo.
-Gracias.
—Mira Neville, sé que fui horrible contigo, soy así con todos, siempre actúo así con todos porque las pociones son muy volátiles y no quiero eso porque se que tienes miedo, alguna poción explotará y te lastimará, pero me lo tomé más difícil contigo y Harry precisamente porque no parecías tener cuidado con el brebaje, pero ahora que sé por qué me disculpo.
-Está bien, hasta te comprendo y por mucho que siempre fuiste estricto conmigo, nunca fuiste peor que mi abuela.
-Poco a poco nos adaptamos y te ayudaré a estudiar así como ayudo a Harry a aprender lo que no entiende y verás que tu vida no debería haber sido tan dura Neville. Ahora tengo que mostrarte tu lugar en la casa y el espacio que he reservado para ti.
--¿Para mí? Neville parecía incrédulo mientras terminaba su jugo.
"Por supuesto, para ti. Vamos allá.
Severus devolvió el chupete a la boca del chico, que se sonrojó por completo antes de llevarlo al ala de la mansión que todos usaban. La mansión estaba dividida en cuatro alas, dos de ellas estaban discapacitadas y la otra estaba limpia, pero no se usaba ya que Severus no quería estar lejos de los chicos en caso de que alguno de ellos lo necesitara durante la noche. Snape había colocado carteles en las puertas con los nombres para que el chico no se perdiera.
La nueva habitación de Neville estaba entre Draco y la habitación de Snape, así que si necesitaba al hombre por la noche podía ir a su habitación o Snape podía ir allí. El maestro de pociones había hablado con su ahijado y no le había importado, sabía que la condición de Neville era más accesible. Habían pasado casi cuatro días de los elfos trabajando para agregar las dos nuevas habitaciones a esa ala, y después de incontables horas todo estaba hecho.
La primera puerta que se abrió fue la sala de estudio personal de Neville que estaba súper emocionada, usualmente usaba la oficina de su abuela que se parecía más a un sarcófago. Neville sonrió feliz al mirar todo, tenía una sala espaciosa con una mesa en la parte de atrás y una ventana que dejaba entrar mucho sol, al costado de la habitación había una estantería llena de libros, había una especie de Rueda acolchada para acostarse, una cama enorme que estaba debajo de un muro de escalada y un espacio elevado donde podía acostarse y ver todo lo que estaba afuera a través de la ventana.
Sin importarle nada, el niño abrazó fuerte al temido maestro de pociones, podía vivir en una mansión pero las cosas para él eran muy limitadas, su abuela no quería que viviera en lujos, así que solo tenía lo esencial. Snape abrazó al chico a cambio para mostrarle que todo estaba bien, el que sonrió feliz y siguió mirando a su alrededor, viendo lo cómodo y espacioso que era todo.
La puerta de al lado era su habitación que tenía su nombre escrito en un pequeño cartel con varias plantas alrededor, Neville encontró todo extremadamente lindo. Harry le había advertido a su padre que además de las plantas, su amigo estaba fascinado por las estrellas, por lo que Severus usó esta información para crear un espacio perfecto. El dormitorio era grande pero el principal era la cama grande en el centro con apoyo a los lados, había un cofre enorme al final de la cama.
Las ventanas eran enormes y daban una hermosa vista al exterior, y había pequeños lugares con plantas por todas partes. Neville se sorprendió un poco cuando la luz se apagó y luego suspiró en éxtasis. En el techo de la habitación había varias luces que representaban las estrellas y esto hacía que la habitación fuera muy luminosa y acogedora, como siempre soñó el niño. Era tan diferente de su dormitorio en la mansión Longbottom, donde solo había una cama, un armario y un baño pequeño.
Salieron de la habitación de los chicos y se dirigieron hacia el patio de recreo de Harry, él miraba todo con gran fascinación, era enorme y había muchos juguetes por todas partes. Después de revisar todo, Neville fue llevado a una habitación al costado donde hay un pequeño letrero, "Espacio Bebe Nev", sonrió y miró al hombre que le devolvió la sonrisa. El pequeño Gryffindor estaba tan feliz que estaba más allá de las palabras.
"Neville, hablé con Harry y no le importa compartir su patio de recreo contigo, pero me gustaría que tuvieras un pequeño lugar que fuera solo tuyo. Amelia me informó que cuando retrocedes te gusta columpiarte y beber leche, así que hice un espacio al costado del patio de recreo.
Snape abrió la puerta y de inmediato Neville quiso llorar, era completamente perfecto. Era un pequeño invernadero, con las plantas favoritas del niño por todas partes y había una hermosa y cómoda hamaca justo en el medio, este era el lugar perfecto para él. podía cuidar sus plántulas ya que tenía un armario en la esquina con todas las cosas necesarias y aún podía acostarse y relajarse. Neville se volvió y abrazó al hombre que lloraba.
Snape tomó al niño en sus brazos y lo colocó sobre su hombro para que pudiera sentirse mejor y más tranquilo. Después de unos diez minutos, el chico realmente se calmó y el Slytherin lo llevó a su habitación y le pidió que se preparara para ir a la cama. Mientras Neville se duchaba, Snape bajó las escaleras y se despidió de Amelia agradeciéndole por quedarse con los chicos, tan pronto como se fue, Severus despertó a cada uno de ellos y les dijo que se ducharan. Convencer a Harry de que hablara con su amigo solo a la mañana siguiente fue difícil.
El primero que Snape acostó fue Draco que necesitaba una poción para dormir sin sueños antes de dormir, cubrió a su ahijado y lo besó en la frente y salió de la habitación yendo a la de Harry, quien ya estaba en la cama esperando a su padre, Snape se peinó. el cabello y lo secó y metió a su hijo en su regazo mientras se dormía con el biberón. Diez minutos después, Snape había acostado a su hijo, lo había dejado con su chupete y encendió la luz de la noche, antes de dirigirse al dormitorio del nuevo miembro de la familia.
Entró a la habitación y notó que Neville estaba en la cama, rígido sin su chupete y frente a un osito de peluche que estaba cerca de su baúl de Hogwarts. El Slytherin se acercó al oso y lo tomó de inmediato, junto con el chupete que estaba en la mesita de noche y se lo entregó al niño que sonrió sonrojado, pero aceptó. Llevaba un pijama de osito de peluche azul súper lindo, se dejó caer el chupete en la boca y abrazó al oso con fuerza, mirando con ojos brillantes al hombre frente a él.
Snape hizo lo que siempre hace con Harry, lo levantó a pesar de que al principio se puso rígido y luego lo dejó beber leche pura, tal como a él le gustaba y caliente, cada vez con más sueño. Snape sostuvo al niño hasta que estuvo seguro de que estaba dormido, antes de acostarlo en la cama y darle un beso en la frente y en los otros dos. Se fue a su habitación, se dio una ducha y apenas había apoyado la cabeza en la almohada cuando se desmayó.
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Andieva_Die.
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