(Narra la escritora)
Ya habían caminado un poco. En si, la colina no era tan empinada, sin embargo, el menor iba agarrado con fuerza de la camiseta del pelinegro, por qué, según el, si se resbala uno, se resbalan los dos.
El mayor no se quejaba. Claro que no.
- ¿Cuánto más caminaremos? Ya es muy tarde - reviso su reloj de mano - son las 10:00 pm, deberíamos volver. Nos podría asaltar alguien - se aferró más a la camiseta del mayor.
- vengo aquí cada que me siento mal. Nunca me ah pasado nada. Esta lugar no es frecuentado por la gente de aquí. No nos pasará nada, tranquilo - río levemente.
- ¡Ahhh! ¡¿Que es eso?! - se colocó atrás del mayor, mientras lo abrazaba con firmeza.
- Es solo un gato, Taehyung. No te valla a comer -
- y-ya lo sabía - se alejo en un santiamén del pelinegro.
- lo que te digas. Vamos, que ya falta poco - volvió a tomar su mano, y siguió caminando.
*
Caminaron un poco más, hasta que se pudo visualizar más cerca la punta de la "pequeña" colina. La zona de tierra, se había vuelto plana, por lo que, tomando la mano del menor, corrió con un poco de cuidado por la falta de luz. Llegando al lugar.
- Llegamos, ¿No es hermoso? - coloco sus manos en su cintura, mientras miraba de reojo al menor.
Taehyung no dijo nada.
La luz era escasa, sin embargo, gracias a las casas que tenían iluminación, los postes de luz, y alguna que otra vivienda, que aún tenían las decoraciones navideñas del años pasado, se podía mirar la vista con claridad, muchas cosas como la feria, la cual estaba llena de luces, casas que al igual que ellos, celebraban quien sabe que cosa, oh como había dicho Jungkook, hacían una peda, música de banda sonando a lo lejos.
Era algo tercermundista, decía el menor, pero en sus adentros, disfrutaba de la vista.
Una vista, que para el mayor era la más romántica y hermosa. Era la vista que quería compartir con esa persona especial.
No le quedó de otra más que quedarse ahí, ya que, al no saber el camino a casa, no tenía otra opción.
Exactamente, 25 minutos habían pasado, 25 minutos en los que no hicieron nada más que gozar de la vista, sin ninguna palabra de los dos.
También, 25 minutos que habían pasado desde que el menor le había hecho un berrinche por no quererse sentar en la orilla de la colina, no por miedo, si no por que donde se sentirá, no había más que tierra, algo que desagradaba al rubio, y asustaba al imaginar su ropa de marca sucia por eso. Jungkook tuvo que quitarse su suéter, quedando solo en blusa de tirantes blanca. Extendiendole su garra en el piso, para que Tae no ensuciara su ropa de diseñador.
En completo silencio, a excepción de la música que salía del celular del menor, que, ya un poco aburrido, coloco música en su celular, música que en ese momento, sonaba "stand by me", una de sus canciones favoritas.
- cambia esa música de abuelas, pon la cumbia de los angeles azules - tomo un trago de la lata de cerveza - pon la que dice "amo su inocencia, 17 años, amo sus errores, 17 años" -
- mi celular, mi musica - negó a cambiarle.
- bien - fingió no darle más vueltas al asunto, hasta que el menor fijo su vista en el cielo, rápidamente, tomo el celular ajeno - ¡matanga dijo la changa! -
- ¡hey, dámelo! - se levantó molesto, a lo que el mayor copio su acción, apartándose de el.
- no seas aguafiestas. Me ando durmiendo con esa música. Ya no me hará falta contar ovejas - mientras escribía en el teclado alguna canción desconocida para el menor.
- esa música es buena - volvió a sentarse, rendido.
- pero no mejor que está - subió el volumen - si, esto es música. "No rompas mas, mi pobre corazón" - comenzó a moverse al ritmo de la música. Lentamente.
- esa canción también la pone mi madre. Bailas igual que ella - sonrió de lado.
- entonces, si la has visto bailar, ya debes de saber cómo es el baile, ¿no? -
- mas o menos. Ella baila muy bien, aveces quiere que baile con ella, pero no lo hago -
- ven, bailemos - le extendió sus manos.
- no, no, no. No se bailar -
- pa' eso me tienes a mi. Yo te enseñaré -
- no, no quiero -
- como tú quieras - cerró los ojos, mientras se movía de derecha a izquierda de acuerdo a la canción - pa' mi, que te verías bien chingon bailando esta música -
- saberme los pasos es una cosa, bailarla bien es otra. No se moverme perfectamente -
- Aveces, no es necesario hacer las cosas perfectas, lo importante es divertirte -
- si, como sea... -
"Aveces, no es necesario hacerla cosas perfectas, lo importante es divertirse".
- Tae, ya viene la parte del payaso de rodeo. ¡Anda, párate, baila conmigo! -
- te dije que no - negó.
- vamos, levántate - lo tomo de las manos, y lo levanto a la fuerza.
- ¡Que no se bailar! - soltó su agarre.
- solo es tres pasos a la derecha, tres a la izquierda, tres atrás y tres al frente, luego cambias de posición y repites el procedimiento. Vamos, es fácil - volvió a tomar sus manos.
- pero es que.... -
- porfavor, y luego te llevo a casa -
- .....e-está bien - acepto de mala gana.
- ¡Bien! Uno, dos tres.... -
*
- para la izquierda, ¡Mi izquierda! - baila, mientras guiaba al menor.
- ¡tu izquierda es mi izquierda! -
- tienes que alzar un poquito los pies, no como si estuvieras dando pasos normales - tomo el celular, regresando la canción al inicio - vamos otra vez -
Derecha, izquierda, atrás y al frente.
- ¡así!,ahora del otro lado - baila como ejemplo - ¡bien! Lo lograste -
- ¿Lo logré? - pregunto entusiasmado - por fin, ¡me salió! - sonrió de oreja a oreja, literalmente.
- que bueno, ya me dolían los pies - volvió a sentarse en dónde estaban desde el inicio - cuando decías que no sabías bailar, no creía que era tan enserio - sonrió de lado, mientras relajaba su respiración.
- te dije que no sabía bailar - acomodo el suéter de Jungkook, para sentarse en el y evitar ensuciarse.
- esto es México, tienes que aprender a bailar eso, también la banda, eres mitad Mexicano, por lo que eres de estás tierra. Y, literal, es un delito ser mexicano y no saberse el payaso de rodeo o bailar banda - acomodo su cabello hacia atrás.
- tendré que aprender -
- yo te enseñaré -
Río levemente - pásame mi celular - señaló el lugar en el que se encontraba.
- ¡Ah, perro, tienes un iPhone! -
- solo dámelo - se lo arrebato.
- se dice gracias, maldita cerda malagradecida -
- ¿Que dijiste? -
- que, que horas son -
- las 10:43 PM -
- todavía es temprano - tomo la tercera lata de cerveza.
La atención de el menor estaba puesta en la pantalla, hasta que escucho como el pelinegro quitó el seguro de la lata.
- ya tomaste mucho, ¿No cres? -
- solo llevo tres, falta la mitad -
- yo no me emborracho. Tolero el alcohol - siguió tomando de ella.
*
15 minutos habían pasado, en las que el mayor tomaba de su cerveza, miraba el cielo, y discretamente, veía lo que el rubio miraba en su dispositivo.
- bien, ya me aburrí. ¿Solo me trajiste a ver casas y unos cerros al fondo? - pregunto.
- no solo eso, este lugar es aún más especial - suspiro lentamente - aparte de la vista bien chingona, ¿Guachas ese árbol de ahí? - asintió - pues - se levantó, comenzando a caminar hacia el, seguido de un curioso rubio. Por la cantidad de alcohol consumida, su cuerpo perdía el equilibrio - las parejas sueles venir aquí a tallar sus nombres en el árbol, hay una leyendo que dice, que si lo haces, tu relación será eterna, llena de amor y prosperidad -
Al llegar al árbol, busco entre todas los nombres, a unos en especifico.
- yo creía eternamente en esa historia - tocó con las yemas de sus dedos, el corazón que tenía grabado "Jeon Enwoo + Hye" - mis padres tallaron sus nombres aquí, con la esperanza de que su matrimonio sería eterno. Cuando yo nací, papá abandono a mamá -
Tomo un sorbo de cerveza - Nunca conocí a ese viejo, y no quiero hacerlo. Fue tan poco hombre como para dejar a una mujer con un hijo, abandonandola a su suerte - tomo de una, lo que quedaba de la lata, sacando otra - solo hijos de puta hacen eso, lo peor de todo es que tuvo el descaro de mandarle la invitación de su próxima boda con otra mujer a mi mamá - abrió la segunda lata, y sin perder el tiempo, tomo de ella.
- oye, oye, entiendo que te sientas mal, pero deja de tomar - intento quitársela, pero el mayor movió su mano.
- ya te dije, tolero en alcohol -
- Jungkook, estás Borracho, solo mírate. Ni siquiera puedes estar de pie - se aserco más a el.
- Crees....crees que si tallo mi nombre y la de mi futura persona, ¿Estaremos juntos para siempre? - sin quitar la vista del árbol.
El menor se quedó callado. El no era de creer en esas cosas, para el no existía el "juntos por siempre".
- si...creo si - miró el corazón tallado - si es amor de verdad, nada lo impedirá -
- ¿Quieres ser esa persona? - dijo sin verlo. El menor se quedó callado.
- ...¿Que? -
- ¿Que si quieres ser esa persona con la que talle mi nombre? -
- e-estas borracho, Jungkook, mejor, regresemos a casa, ya es tarde -
- no respondiste mi pregunta - se aserco a el, sin quedar tan juntos.
- bueno...yo, es repentin.... -
- oigan - apareció el castaño, Jhope, con la respiración agitada, después de haber subido la colina - la señora... - respiro ondo - la señora Jeon dice que ya regresen, que ya mañana siguen con sus besucotes. Ya es tarde -
¿"Besucotes"? - s-si, pero, ayudame con el. Esta borracho - señaló a Jungkook, el cual peleaba con una mosca, dando golpes al aire.
- el no debe tomar mucho, no tolera el alcohol -
El dijo lo contrario.
*
- Jungkook, ¡Ya cállate, van a ser las 11:30, despertarás a los vecinos! -
- mmm....¡adiós, amor, me voy de ti, y está vez para siempre! - cantaba, mientras "bailaba". Con un brazo sostenía la quinta lata de cerveza, y el otro, era sujetado por el castaño.
- ¡Ahg! Cállate. Taehyung, quítale la cerveza, que ya no tome -
- oh, ¡Hola niño bonito, soy jk! El amor de tu vida - sonrió en grande, casi infantil. Mientras miraba con ternura al menor.
- ya quisieras - arrebato de sus manos la lata.
- hey, ¡Oye! Eso.....eso es mío. Consigue la tuya -
- por, Dios, Jungkook, ¡Cállate! -
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Hola, bellezas. <3
Bonito día/tarde/noche.
ɢʀᴀᴄɪᴀs ᴘᴏʀ ʟᴇᴇ̀ʀ. ❦︎