James 7 años
Albus 5 años
Scorpius 5 años
Lily 2 año
-ô-
Lucius se encontraba descansando en los jardines de Malfoy Manor, disfrutando de su soledad con un whisky de fuego en mano. Estaba furioso, pues su querida Narcisa se encontraba cuidando a uno de los mugrientos mestizos de su hijo.
Draco había resultado ser una vergüenza para la familia. ¿En qué había fallado?
Él había criado a Draco, para ser un excelente heredero.
Se aseguró, conforme iba creciendo su hijo, de educarlo como todo niño sangre pura debe ser; refinado, educado y sobre todo responsable con sus obligaciones. Por lo que le enseñó, a su único hijo, todo lo que debía de saber para convertirse en el heredero ideal. Como actuar, como hablar, cómo comportarse ante la sociedad etc. Draco había seguido cada regla al pie de la letra.
Lucius había creído que Draco, al crecer, se convertiría en el orgullo de la familia; se conseguiría una esposa de una buena familia, tendría un heredero digno de apellidarse Malfoy y tomaría el lugar que le correspondía como todo buen Malfoy. Sin embargo, todos sus planes se vinieron abajo cuando su hijo se relaciono con Harry Potter. El insignificante de Potter.
El maldito mestizo que, corrompió a su hijo, manchó su pureza y convenció a Draco para que faltara a su responsabilidades y obligaciones que tenía con su familia.
Lucius no era un ingrato, estaba agradecido con Potter por haber salvado a su familia de Azkaban, pero eso no le daba ningún derecho al "niño dorado" para robarse a su hijo.
Al principio, había aceptado la relación de Draco con Potter, pues pensó que no durarían, que tarde o temprano Draco retomaría el lugar que le correspondía como la cabeza de la familia Malfoy, no obstante después del nacimiento del nieto número uno, Lucius comprendió que Draco había elegido su camino y que no había nada que él pudiera hacer para impedirlo. Era demasiado tarde. Había asistido a la boda de su hijo por pura cortesía, sólo se había presentado a la ceremonia, y se retiró con el orgullo intacto y cortó cualquier comunicación con su hijo y su familia.
El nieto número era una perfecta combinación de los genes Malfoy envenenados con los genes Potter. No solo le bastó a Draco darle un nieto que tenía sangre Potter corriendo por sus venas, no claro que no, tuvo al niño fuera del matrimonio. Su nieto era un maldito bastardo.
Su hijo solo había traído decepciones a su familia. Ni siquiera pudo cerrarle las piernas al niño dorado, antes de comprometerse con él, toda la sociedad mágica estuvo hablando de ese hecho por semanas. Draco era la burla de los mago sangre pura de la alta sociedad. Algo que decepciono a Lucius, pues había criado a su hijo para mantener en alto el apellido Malfoy, no para pisotearlo.
Esa fue una de las razones por las que Lucius se negó a conocer al engendro que hacía llamar nieto, y los bastarditos que llegaron después.
Su esposa por otro lado, desde el nacimiento del primer bastardo, dejó toda educación sangre pura que la caracterizaba, para convertirse en la abuela ejemplar.Ella a diferencia de él, visitaba a sus nietos con frecuencias, los cuidaba en la mansión y estaba presente en sus vidas. Nunca hizo menos a sus nietos por si estatus de sangre y todo prejuicio que alguna vez tuvo hacía los mestizos quedó en el olvido conforme pasó el tiempo.
Era la influencia de Andromeda, creía Lucius.
Lucius siempre negó la existencia de aquellos niños, para él su apellido no había sido manchado por unos sucios mestizos, pero como su esposa era una traidora, Narcisa se encargaba de recordarle la existencia de aquellos bastarditos, pues había ofrecido su hogar para cuando los padres de los mestizos no pudieran cuidarlos o cuando los engendros quisieran venir.
No eran elfos domésticos. Por Merlin, tenían mejores cosas que hacer, que cuidar criaturas repugnantes. Por eso, cada vez que los hijos de Potter venían a su hogar, Lucius se encerraba en su estudio para evitar ver aquellos niños que mancharon el apellido Malfoy.
Sin embargo, ese día era la excepción. Lucius estaba de regreso de alimentar a sus pavos reales, cuando escuchó la voz de su hijo y el insoportable de Potter pidiéndole a su esposa que cuidara a uno de sus hijos.
Irresponsables pensaba Lucius.
Pero, en cuanto su esposa aceptó, la ira de Lucius creció, pues Narcisa tomó la decisión sin su consideración, no era como que alguna vez la tomara, pero hubiese sido agradable ser advertido de la presencia de los niños para poder encerrarse en su estudio a gusto.
"Patético"- pensó Lucius.
Lucius, se rehusó a salir del jardín hasta que el pequeño o la pequeña se retirara de sus aposentos. Por lo que sentado en una silla con un whisky de fuego, contemplando a sus pavos reales caminar por los alrededores de Malfoy Manor, espero hasta que él engendro de Potter se fuera o desapareciera, lo que ocurriera primero. Sin embargo, su paz fue interrumpida por un pequeño balbuceo.
Una pequeña niña rubia, con un adorable overol color verde, el cabello rubio opaco recogido, acompañado de un moño del color de su ropa venía gateando hacia el jardín.
-Tu debes ser mi nieta número cuatro – dijo Lucius, observando a la niña con determinación – Al menos sacaste la belleza de los Malfoy.
La niña, se sentó para observar a la figura que estaba frente a ella, se parecía a su padre, solo que más viejo y menos amable, sin prestar más atención Lily siguió su camino para adentrarse al jardín.
Lucius al notar hacia donde se dirigía la niña, hizo lo que jamás pensó que haría con uno de los hijos de Potter, la sostuvo en sus brazos.
Dicha acción, provocó que Lucius pudiera contemplar mejor a su nieta. Era una versión femenina de Draco, tenía los mismos ojos grises que su hijo, el cabello rubio opaco, con el pequeño defecto que era igual de rebelde que el su otro padre, tenía esa nariz refinada que caracterizaba a los Malfoy y al sonreír se le formaban pequeños hoyuelos. Definitivamente era una Malfoy de pies a cabeza. Sin embargo, en su expresión no estaba el semblante frío que obligó a Draco a tener desde que era un bebe. Su mirada era cálida, hogareña, e inocente. Y por una extraña razón, eso no desagradó del todo a Lucius.
-Eres demasiado bonita para ser hija de Potter – alabo Lucius, sin rastro de maldad en su voz – Si no supiera lo fiel que pueden llegar a ser mi hijo, estaría seguro que no eres hija de Potter.
Como si la niña entendiera todo lo que su abuelo estaba diciendo, Lily soltó una inocente risita que iluminó el rostro del patriarca. Solo por una acción tan insignificante como la risa de una niña, algo dentro del corazón del gran Lucius Malfoy se derritió.
-Señor – interrumpió Tally, el elfo doméstico de la familia – Tally se disculpa con el amo Malfoy. Tally tenía que cuidar de a la amita Lily en lo que la ama Narcisa regresaba del baño. Perdón por el inconveniente amo Lucius, Tally se llevará a la niña de inmediato.
-¿Lily?- escupió Lucius- Así que te nombraron como la madre sangre sucia de Potter.
La niña sin comprender lo que pasaba alrededor, tomó el relicario que traía Lucius en el cuello y se lo llevó a la boca. Provocando que la mirada de Lucius, antes llena de odio, se relajara.
-Ok niña, suelta.- regaño Lucius, quitándole el relicario a la niña- Por tu descuido insignificante criatura, yo me encargare de la niña.Trae todos los juguetes, estaremos en el jardín.
-Pero amo, Lucius, la ama Narcisa dijo...
-Te di una orden Tally y espero que la obedezcas. Y dile a mi esposa que no requerimos de su presencia por un buen rato.
-Sí, señor- dijo el elfo, y con un "PLOP" desapareció del jardín en busca de los juguetes de la niña.
-Pequeña Lily te mostrará cómo ser la mejor Malfoy de la familia.
Convivir con uno de los hijos de Potter no había sido tan desagradable como Lucius imaginó. Incluso disfruto del tiempo de calidad que tuvo con su nieta, jugaron hasta la hora del almuerzo y Lucius se dio cuenta que Lily se parecía más a su hijo de lo que estaba dispuesto admitir.
Muy a regañadientes tuvo que admitir que Draco estaba haciendo un buen trabajo.
Y si los demás hijos de Draco y Potter eran la mitad de tranquilos que Lily. Tal vez era momento de conocer a sus otros nietos.
-ô-
Y así fue cómo Lily se convirtió en la favorita del abuelo. <3