Capítulo dedicado a: AiramCN, himeusagicat, loka362, love_seesaw, yoquintero72, jimingomita y ZafiMendesdePark.
Ahora sería parte de BigHit, su sueño se estaba cumpliendo, continuaría con sus estudios de composición y a su vez trabajaría en aquella empresa. Todo gracias a JiMin.
JiMin...
Luego de haber conversado todos los pormenores con Hitman Bang este lo dejó con JiMin para que le mostrara las instalaciones.
En ese momento YoonGi aprovechó para disculparse con el pelirosa pero no sentía que le prestara atención.
---Perdón por aburrirte con todo esto.
---No, no es eso, solo cumplo con mi trabajo, tengo que ser formal y profesional. ¿No te gustan las instalaciones, hyung? Bang PD dice que en un año cambiaremos de edificio, este ya está muy pequeñito--- el peligris sonrió por las expresiones de JiMin ---A veces cuando hay lanzamientos o comebacks este pasillo suele estar con muchas cajas y chocas con cualquiera que pase por acá. Debes andar así, de costado--- imitaba graciosamente ---Y caminar muy pegado a la pared.
YoonGi comenzó a reír pero se detuvo a sacar las galletas de su mochila. Extendió la pequeña bolsa frente al pelirosa que aún no la tomaba.
---Siempre pides disculpas con comida.
---No me estabas escuchando así que decidí dártelas de una buena vez.
---No te disculpes, yo fuí el tonto, perdón por pelear y también por besarte, perdón por ser una molestia.
---¡No! No eres una molestia, yo soy la molestia--- no podía mirarlo a los ojos ---Debí escucharte.
---Claro que debiste, pero somos humanos Yoonie, tenemos libre albedrío, podemos decidir lo que querramos.
---Entonces... ¿Podrías decidir volver a ser mi amigo?--- su mano se acalambraba al seguir sosteniendo la bolsa con galletitas.
---Creí que lo seguíamos siendo--- respondió el pelirosa tomando la bolsa y dando el primer mordisco.
JiMin veía como el viento se llevaba a las nubes modificando la anterior forma que él les había dado con su imaginación. Ahora el dinosaurio parecía más un hotcake.
Tantas cosas habían pasado, se sentía bien descansar y volver a la normalidad.
Era su último año y este el día de su graduación. Pronto debutaría y llevaría una agitada vida como artista y estudiante universitario, no le aterraba ni un poco porque para eso se había preparado.
Lo que le aterraba era lo que pasaría esa misma noche, la noche de la fiesta. Tenía todo listo, no iba a ser algo ostentoso o que llamara la atención, quería llevarse a YoonGi lejos de la multitud y decirle frente a las estrellas y el pequeño lugar preparado que quería entregarle su corazón.
¿Era arriesgado volver a intentarlo?
No quería recibir un no, sus expectativas eran altas porque en los meses previos desde que aceptó la disculpa del peligris eran tan unidos como cuando eran vecinos.
Los amigos de YoonGi ahora eran sus amigos y viceversa. Llevaba una tranquila relación amistosa con TaeHyung y ahora que Hoshi y Félix eran novios ya no lo molestaba.
---El tonto de EunWoo dará un discurso, apresúrate.
Se levantó del césped sacudiendo su toga de las hojas de pasto que traviesamente se colaron a la prenda y corrió con TaeHyung hacia el auditorio del instituto.
Fueron regañados por un maestro pero enseguida tomaron asiento en sus lugares respectivos.
Los birretes fueron lanzados en cuanto la ceremonia terminó, todos se abrazaban entre lágrimas deseándose éxitos. Algunos comenzarían su vida universitaria, otros preferían tomarse un año libre y los más arriesgados irían al servicio militar.
La gran bola de amigos se separó para irse a tomar fotos en parejas o con la familia. JiMin se tomó una foto con todos y corrió a los brazos de sus padres, por el rabillo del ojo vió como YoonGi después de sacarse selfies graciosas con TaeHyung corría hacia su madre y su padre que tenían lista la cámara.
Quería una foto con él, quería darle un ramo de flores pero el peligris se le adelantó, ambas familias amigas tomaron fotos de los dos amigos y luego una con todos juntos.
Intercambiaron sonrisas bobas y los ramos porque habían tenido la misma idea.
Luego cada quien se fue a su casa a prepararse para la gran noche.
Los estudiantes gritaron y aplaudieron su llegada.
¿Cómo no iban a hacerlo? Era el estudiante más guapo de esa generación.
Vió caras conocidas; SeokJin y NamJoon bailando, MinHo rogando a TaeHyung por un baile y a su otro lado SungJae rogando por lo mismo, JR y Ren yéndose a un lugar apartado, MoonBin avergonzando a EunWoo y Jackson alimentando a su "pollito Tuan" y robándole besitos de vez en cuando.
Entraba al ritmo de la canción buscando con la mirada a lo único que le importaba; YoonGi.
No lo veía por ninguna parte pero él iba a esperar mientras bailaba con sus amigos porque la noche iba a ser larga.
Después de varias canciones fue al baño porque ya no aguantaba tanto ponche pero mientras el pelirosa se iba corriendo al sanitario el peligris hacía su entrada junto con gritos de sus fans, YoonGi creyó que no lo iban a dejar en paz y que cada uno iba a querer bailar una canción con él, más nadie se acercó, respetaron a la persona que se agarraba de su brazo y ambos pudieron llegar hasta el gran grupo de amigos.
YoonGi presentó ante todos a su primo Jungkook recalcando que no tenía permitido beber y que lo cuidaran bien porque si no regresaba con él a casa iban a matarlo.
Todos adoraron al adolescente uraño que gruñía cada vez que le pellizcaban las mejillas.
Todos bailaron al ritmo de las canciones y disfrutaban de su última noche de estudiantes de instituto.
JiMin regresó y se unió al conjunto acercándose sutilmente a YoonGi.
Era el momento de tomarlo de la mano y llevarlo al lugar pero la música fue interrumpida para abrir paso a la boba ceremonia de rey y reina del baile.
Obviamente él fue el ganador así que tuvo que subir al escenario junto a la otra chica que lloraba de felicidad.
---Vamos, acabemos rápido con esto, tengo algo pendiente--- Saludaba con una falsa sonrisa y tomaba la mano de la chica para que ambos bailarán una canción en el centro de la pista.
Luego el resto de estudiantes comenzaron a bailar al mismo ritmo de la canción.
JiMin río al ver bailar a YoonGi con su primo que se reía y hacía pasos femeninos.
Solo un poco más... Un poco más...
Cuando al fin la canción terminó soltó a la chica y en medio de tantas personas trató de abrirse paso hacia YoonGi.
---¡Hyung!
Maldición, la música estaba muy alta.
---¡Hyung! ¡Hyung, charlemos afuera!
Cuando al fin llegó al lugar YoonGi se volteó para sonreírle con esa sonrisa que solo podía verse en él, tan dulce que hacía latir a su corazón locamente.
---¿Hyung, podemos ir por aire fresco?--- su voz no tembló en absoluto, ese era un buen presagio.
---Claro, pero antes permíteme un momento, creo que me están llamando.
---¿Podrías no contestar? Es que tengo algo importante que decirte.
---No puedo, va a congelarse allá afuera.
---¿Invitaste a alguien? ¿Vino Daniel?
---¿Qué dijiste? No puedo escucharte bien--- su celular le notificó un mensaje ---Olvídalo ya logró entrar.
---Dile que se apresure o será devorado por la multitud.
JiMin volteó para buscar al chico alto pero YoonGi se adelantó, se sumergió entre los presentes y lo perdió de vista.
Esperó pacientemente hasta que vió a YoonGi acercarse a lo lejos
Sus ojos se iluminaron, ahora sí iría al lugar con el peligris.
Tres chicas pasaron interrumpiendo la buena vista que tenía en frente.
Pero cuando se fueron le dejaron ver completamente a la persona detrás de YoonGi
Ese no era Kang Daniel.
Era alguien más bajito.
Parecía un príncipe.
La música animada cambió por una lenta y pronto todos tomaron a sus parejas para comenzar a bailar, él también quería bailar con YoonGi.
JiMin seguía estático, quizás debería hacer que Sunoo baile con JungKook y llevarse a YoonGi de una buena vez.
Pero YoonGi no se movió de aquél lugar, en cambio, bailó con Sunoo al ritmo de la canción romántica.
El pelirosa fue retrocediendo hacia la mesa de bocadillos de manera automática, nadie notó la triste escena.
---Solo es un baile, JiMin. Solo bailarán y luego hyung vendrá--- se repitió a sí mismo.
Esta noche la música parece tan alta...
Desearía que toda esta multitud se fuera...
Las manos del rubio peliplateado se acomodaron alrededor del cuello del peligris y las manos de YoonGi apresaban la delgada cintura, parecían abrazados, fundiéndose con cada nota, separándose un instante para verse a los ojos. Sus pupilas dilatadas y brillando por las luces de colores, la adorable sonrisa del chico joven en cuanto YoonGi le mencionó algo al oído. Parecían tan concentrados conversando y de repente Sunoo parecía llorar y tratar de retirar sus lágrimas. JiMin sonrió inconscientemente.
Mientras la música seguía sonando los dos jóvenes no se separaban aún, lentamente sus ojos bajando hacia los labios del contrario, sus bocas uniéndose ante los gritos de la multitud. La sonrisa de JiMin se borró.
Tal vez de esta manera sea mejor...
Nos lastimaríamos el uno al otro con las cosas que quisiéramos decir...
Ambas frentes chocando, sonrisas bobas y mejillas rojas siguiendo aún el ritmo de la canción que no terminaba.
Podríamos haber estado tan bien juntos...
Sunoo escondiendo su rostro en el pecho del peligris por la vergüenza, YoonGi acariciando sus cabellos para calmarlo.
Podríamos haber vivido este baile para siempre...
Sus amigos acercándose a JiMin para consolarlo.
Pero ahora, ¿Quién bailará conmigo?
Por favor... Quédate...
No se despidió de nadie ni dijo palabra alguna, salió corriendo por el lugar que tenía preparado y guardó todo, la siguiente estúpida y romántica canción llegaba a oírse incluso en ese lugar gracias a los estúpidos altavoces.
Nunca bailaré otra vez esta noche, los pies culpables no tienen ritmo...
Aunque es fácil fingir, sé que no eres un tonto, YoonGi.
Lágrimas apagaban gran parte de las velas que débilmente soplaba entre quejidos, todas las cosas fueron colocadas de mala manera en las cajas hasta el auto que se había prestado para esa noche.
Arrancó alejándose del lugar, no quería quedarse ni un segundo más o podría hacer una gran escena.
YoonGi merecía ser feliz, merecía enamorarse de otra persona, merecía vivir su vida tal como él lo había hecho antes.
---Libre albedrío--- repitió sorbiendo su nariz, llegaría a casa demasiado temprano.
Su celular sonaba constantemente y simplemente lo apagó, no quería que nadie le hablara, al menos esta noche.
Se desvió hacia una tienda de convivencia y compró un paquete de latas de cerveza y bocadillos.
Llegó a casa y como las luces estaban apagadas subió en silencio hasta su habitación, se acomodó cerca de su ventana abriendo la primera lata y miró con tristeza a la habitación oscura y vacía que tenía en frente.
Seguía llorando en silencio y consumiendo el amargo líquido.
Cuando terminó la tercera lata dirigió su vista nuevamente a la habitación vacía y comenzó a reír sin ganas.
---Hyung... Tus labios son tan bonitos que me alegra haber sido tu primer beso. No, tu primer beso no fue con el calenturiento de Ren, fue conmigo--- susurraba ebrio abriendo la cuarta lata ---Tú eres en verdad una persona tan genial... Y por ende debes estar con una persona genial... Yo soy genial, pero ese Ddeonu es mucho más genial...
Recogió sus lágrimas con la manga de su traje y continuó con su lata hasta la última gota.
---YoonGi, te amo...--- su llanto se incrementó y su vista también se nubló, comenzó a tambalearse y cayó hacia el suelo.
Arrojó la lata hacia su cesto de basura y se levantó para dejarse caer en la cama.
Su cabeza daba vueltas, su corazón dolía, sus ojos ardían y quería vomitar...
Sus dedos se enterraron entre sus cabellos color rosa que comenzaba a odiar, no podía gritar o sus padres lo castigarían de por vida al enterarse de que había bebido cervezas.
Se dió vuelta para ahogar su lloriqueo incesante y culpable.
Culpable por no haber aceptado aquél día.
Culpable por no haberle dicho mucho antes que lo amaba.
Culpable por ser un cobarde y haber perdido el tiempo separando a su hyung de sus posibles conquistas en vez de encontrar la manera de enamorarlo.
Volvió a levantarse con pasos torpes, estaba perdiendo el equilibrio. Se quitó el todo el traje y lo dejó en la silla de su escritorio, solo quería usar lo que su hyung le había regalado.
Terminó durmiendo profundamente aquella noche fría en la que no pudo decirle que lo amaba.
Si lo hubiera dicho nada hubiera cambiado realmente, el peligris lo hubiera rechazado alegando que gustaba de Sunoo y quizás hubiera sido más patético.
Dejar a YoonGi libre era doloroso hasta morir.
No podía merecer nada menos.
Había perdido.
El epílogo mañana o quizás hoy en la noche.
No lloren, o bueno, si lloren pero con moderación :v
Depositen sus lágrimas aqui para construir un océano → →
Después del epílogo habrán tres extras, uno de ellos es de TaeHyung eligiendo de una buena vez a MinHo o a SungJae y otra del matrimonio Hoseok.
Team MinHo → →
Team SungJae → →
🐧💜🐧
Bye •~•
JIRCKM_