Regina: ¿cómo te portaste?
Miranda: bien, ya hice mi tarea, me la revisas?
Regina: claro mi vida.
Miranda: y Daniel por que no vino contigo?
Regina: tenía unos pendientes.
Miranda: que tenia que hacer?
Regina: muchas cosas, pero iba también a recoger a su mamá, hoy vas a conocerla.
Miranda: que padre, entonces será como mi abuelita?
Regina: si.
Miranda: la puedo invitar a la feria de la escuela?
Regina: claro que sí, pero vamos adentro mira, parece que va a llover.
Después de verlas entrar Arturo decidió irse del lugar.
Arturo: Regina está más hermosa que nunca, ahora me doy cuenta de que jamás he dejado de amarla a pesar de su engaño, es tan diferente a Lucia, pero ¿que estoy diciendo? Debería odiarla por lo que me hizo.
Daniel recogió a su mamá en la central de autobuses.
Daniel: perdóname mamá habría preferido ir por ti pero no me dio tiempo he tenido tanto que hacer.
Alicia: no te preocupes, estas atareado con tu boda, el trabajo, tu hija.
Daniel: mi hija, si mamá, de hecho, vengo de la notaria, Miranda ya es legitimante mi hija.
Alicia: ¿y ya lo sabe Regina?
Daniel: no, debo hablar seriamente con ella, solo espero que entienda el porqué de mi silencio.
Alicia: ella te ama, además estas haciendo lo correcto, reconocer a tu hija, no sabes las ganas que tengo de conocerla.
Daniel: que te parece si vamos, dejamos tus cosas en el departamento y vamos a verlas.
Alicia: me parece perfecto, ya quiero abrazar a mi nieta.
Regina merendó con sus padres y su hija.
Lorenza: ¿entonces ya tienes tu vestido de novia?
Regina: si, me probé muchísimos, pero elegí el mejor.
Lorenza: ¿y que pendiente tienes de la boda?
Regina: todo está perfectamente, bueno solo falta el vestido de Miranda.
Lorenza: en ese caso yo lo compró.
Regina: gracias mamá, pero, Daniel quiere hacerse cargo, no te molesta verdad?
Lorenza sonrió.
Lorenza: no hija, pero lo que necesites nada más me dices.
Regina: Gracias ma', en realidad, Daniel y yo estamos adelantando mucho trabajo para poder irnos tranquilos a la luna de miel.
Miranda: ¿qué es Luna de miel?
Ariel: es el viaje que hacen los novios después de la boda.
Miranda: ¿y se van con los invitados?
Regina: no mi vida, solo el novio y la novia, en nuestro caso Daniel y yo.
Miranda: ¿puedo ir con ustedes?
Lorenza: es que el viaje es solo para ellos dos.
Miranda: ¿por qué? Si vamos a ser una familia podríamos ir juntos.
Ariel: yo me encargo... cuando una pareja se casa, se van de viaje solos.
Miranda: ¿pero por qué?
Ariel: por que como se quieren tanto solo quieren compartir tiempo a solas.
Miranda: ¿para darse de a besos?
Ariel: sí.
Miranda: yo estoy acostumbrada a ver a mi mamá y a Daniel dándose besos todo el tiempo, siempre se dicen lo mucho que se quieren.
Regina y Lorenza intentaban contener la risa con las ocurrencias de Miranda.
Regina: mejor ve por tus cosas mi amor, ya nos vamos.
Miranda corrió a su antigua habitación por su mochila.
Ariel: es tremenda.
Lorenza: igual a su madre.
Regina: ¿tu crees?
Lorenza: si, siempre salías con unas cosas que nosotros no sabíamos ya que decirte, eras bien preguntona.
Regina sonrío.
Regina: saben, Daniel están realizando los tramites para darle a Miranda su apellido.
Ariel: pensé que lo haría después de la boda.
Regina: no papá, el quiere que todo quede en orden antes de irnos de viaje, creo que posiblemente en un par de días el documento esté listo.
Lorenza: ¿y cuando se lo piensan decir a Miranda?
Regina: no lo sé, esto tengo que acordarlo con Daniel.
Ariel: pues me parece una excelente idea, estoy seguro que Daniel será el mejor padre para tu hija, no como el patán de Arturo que....
Regina: ¡papá! Prefiero no hablar de eso.
Ariel: Perdón hija.
El teléfono de Regina sonó.
Daniel iba camino a su departamento en compañía de su madre.
"Daniel: ¿cómo estás mi amor?
Regina: ¿feliz de escucharte, ya estas con tu mamá?
Daniel: sí, aquí está conmigo, quería invitarlas a comer para celebrar.
Regina: lo siento mi vida, pero ya cenamos en casa de mis papás.
Daniel: ¿sigues allá?
Regina: ya vamos de salida para el departamento.
Daniel: nosotros también vamos en camino.
Regina: entonces nos vemos.
Daniel: ¿claro, Regina?
Regina: si dime.
Daniel: no olvides que te amo, pase lo que pase.
Regina: yo también te amo."
Después de colgar apareció Miranda.
Miranda: ya estoy lista mami.
Regina: bien, despídete de tus abuelos.
La pequeña se acercó y con un beso y abrazo les dijo adiós, luego subieron a la camioneta rumbo a su departamento.
Arturo regresó a su casa.
Lucia: ¿dónde andabas? Llevo un rato esperándote para que me ayudes a desempacar algunas cosas.
Arturo: solo quise andar un poco por la colonia.
Lucia: bien, toma esta caja y guarda las cosas donde corresponden.
Arturo: ¿no sabes hacer algo más que darme ordenes?
Lucia: no empieces.
Arturo: me pregunto por que sigo contigo, si está visto que no somos una pareja feliz.
Lucia: no dices lo mismo cuando estamos en la cama.
Arturo: será porque es lo único bueno que queda de nuestro matrimonio.
Lucia: conmigo tienes lo que jamás tendrás con otra mujer.
Arturo: con Regina tenía más que eso.
Al escuchar ese nombre Lucia ardió en colera y le lanzo una bofetada.
Lucia: me enfurece que la menciones.
Arturo: ¿por qué? Era tu mejor amiga, la que traicionaste, pero siempre la envidiaste no podías aceptar que era mejor que tú.
Lucia: cállate
Arturo: ¿tanto te duele que te diga la verdad?
Lucia: Regina, jamás será mejor que yo.
Arturo: siempre quisiste estar por encima de ella, no sé pero se me hace muy sospechoso que tu la hayas echado de cabeza, a veces pienso que tu tuviste que ver en que ella me engañara.
Sus miradas se cruzaron, ambas llenas de mucha rabia.