All the young dudes - español

By zszyam

163K 17.5K 10.1K

¡ESTA HISTORIA NO ES MÍA, PERTENECE A MsKingBean89 EN AO3, SOLO LA TRADUZCO Y ADAPTO! Historia completa (los... More

Capitulo 1: Primer año: St Edmund's
Capítulo 2: Primer año: El expresso de Hogwarts
Capitulo 3: Primer año: Las elecciónes
Capitulo 4: Primer año: Luna llena
Capitulo 5: Primer año: Pociones
Capitulo 6: Primer año: Venganza
Capitulo 7: Primer año: Merodeadores
Capitulo 8: Primer año: Secretos
Capitulo 9: Primer año: Cicatrices
Capitulo 10: Primer año: Historia
Capítulo 11: Primer año: Cumpleaños, libros y los Beatles
Capitulo 12: Primer año: Navidad 1971
Capitulo 13: Primer año: Lectiuncula Magna
Capitulo 14: Primer año: La broma
Capitulo 15: Primer año: Consecuencias
Capitulo 16: Primer año: Astronomía
Capitulo 17: Primer año: Doce
Capitulo 18: Primer año: Revisión
Capitulo 19: Primer año: Fin de la escuela
Capitulo 20: Verano 1972
Capitulo 21: Segundo año: Regulus Black
Capitulo 22 Segundo año The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders From
Capitulo 23: Segundo año: Hermandad
Capitulo 24: Segundo año: Pociones, de nuevo
Capitulo 25: Segundo año: horas después
Capitulo 26: Segundo año: Quidditch
Capitulo 27: Segundo año: Un compromiso de cumpleaños
Capitulo 28: Segundo año: Suposiciones
Capitulo 29: Segundo año: Luna de Diciembre
Capitulo 30: Segundo año: Navidad con los Potter
Capitulo 31: Segundo año: Sirius regresa
Capitulo 32: Segundo año: Gryffindor vs Slytherin
Capitulo 33: Segundo año: Descubrimientos
Capitulo 34: Segundo año: Trece
Capitulo 35: Segundo año: ¿Que hay en un hombre?
Capitulo 36: Amor y matrimonio
Capitulo 37: Segundo año: Exámenes
Capitulo 38: El largo último día (parte 1)
Capitulo 39: Segundo año: El largo último día (parte 2)
Capitulo 40: Verano 1973
Capitulo 41: Tercer año: De vuelta a casa
Capitulo 42: Tercer año: Animales fantásticos
Capitulo 43: Tercer año: El mercado negro de Hogwarts
Capitulo 44: Tercer año: Hogsmeade
Capitulo 45: Tercer año: Noble y más antigua
Capitulo 46: Tercer año: El Slung club
Capitulo 47: Tercer año: James Potter y la mierda abultada de elefante
Capitulo 48: Tercer año: Sirius cumple catorce
Capitulo 49: Tercer año: Conozcase usted mismo
Capitulo 50: Tercer año: Philomena Pettigrew
Capitulo 51: Tercer año: The man who cried wolf
Capitulo 52: Tercer año: Confianza
Capitulo 53: Tercer año: Davey Gudgeon
Capitulo 54: Tercer año: Marlene
Capitulo 55: Tercer año: Greyback
Capitulo 56: Verano 1974
Capitulo 57: Cuarto año: Una tormenta en camino
Capitulo 58: Cuarto año: Competencia
Capitulo 59: Cuarto año: Septiembre
Capitulo 60: Cuarto año: Octubre
Capitulo 61: Cuarto año: Noviembre (parte 1)
Capitulo 62: Cuarto año: Noviembre (parte 2)
Capitulo 64: Cuarto año: Navidad
Capitulo 65: Cuarto año: Enero
Capitulo 66: Cuarto año: Febrero (parte 1)
Capitulo 67: Febrero (parte 2)
Capitulo 68: Cuarto año: Marzo
Capitulo 69: Cuarto año: Abril
Capitulo 70: Cuarto año: Separaciones
Capitulo 71: Cuarto año: Junio
Capítulo 72: Verano 1975
Capítulo 73: Quinto año: dinero
Capítulo 74: Quinto Año: Dolor
Capítulo 75: Quinto Año: La sorpresa
Capítulo 76: Quinto Año: Moony & amigos
Capítulo 77 : Quinto Año: Hermoso
Capítulo 78 : Quinto Año: Deseando y Esperando
Capítulo 79 : Quinto Año: Luna celosa
Capítulo 80 : Quinto Año: Fue la noche antes de Navidad
Capítulo 81: Quinto año: imperdonable
Capítulo 82: Quinto año: Consecuencias
Capítulo 83: Quinto año: Enero
Capítulo 84: Quinto año: Sentimientos heridos
Capítulo 85: Quinto año: Bombas de estiércol y armario de escobas
Capítulo 86: Quinto año: Dulces dieciséis
Capítulo 87: Quinto año: La mañana siguiente
Capítulo 88: Quinto año: Punto muerto
Capítulo 89: Quinto año: La semana anterior
Capítulo 90: Quinto año: Búhos
Capítulo 91: Quinto año: La semana después
Capítulo 92: Quinto año: Cierre
Capítulo 93: Verano 1976: Londres
Capítulo 94: Verano 1976: Los Potter
Capítulo 95: Verano 1976: Charlas de Paz
Capítulo 96: Sexto año: Septiembre
Capítulo 97: Sexto año: Octubre
Capítulo 98: Sexto año: Halloween
Capítulo 99: Sexto año: Fiestas y pústulas
Capítulo 100: Sexto año: Límites
Capítulo 101: sexto año: Nueva normalidad
Capítulo 102: sexto año: tartas de carne picada
Capítulo 103: sexto año: Doce noches
Capítulo 104: Sexto año: Mala luna ascendente
Capítulo 105: Sexto año: Derramando secretos
Capítulo 106: Sexto año: Una larga noche
Capítulo 107: sexto año: Negociaciones
Capítulo 108: Sexto año: Mary, Mary
Capítulo 109: Sexto año: Heniokhos
Capítulo 110: Sexto año: Diecisiete
Capítulo 111 : Sexto Año: Separación
Capítulo 112 : Sexto Año: Apariciones
Chapter 113: Sexto Año: La caja
Chapter 114: Verano 1977: Parte uno
Chapter 115: Verano 1977: Parte dos
Chapter 116: Verano 1977: Parte tres
Capítulo 117 : Verano 1977: Parte cuatro
Capítulo 118 : Verano 1977: Parte cinco
Capítulo 119: Séptimo Año: De regreso a la escuela.
capítulo 120: séptimo año: truenos
capítulo 121: séptimo año: compra de plumas
capítulo 122: séptimo año: la mente maestra
capítulo 123: séptimo año: el caer de la oscuridad
capítulo 124: Séptimo Año: Navidad (Parte uno)
capítulo 125: séptimo año: navidad (parte dos)
capítulo 126: séptimo año: navidad (parte 3)
Capítulo 127: Séptimo año: responsabilidades
Capítulo 128: Séptimo año: Preparación
Capítulo 129: Séptimo año: Instinto
Chapter 130: Séptimo año: Castor
Capítulo 131: séptimo año: interludio
Capítulo 132: Séptimo año: Víctimas
Capítulo 133: Séptimo año: domingo por la tarde
Capítulo 134: Séptimo año: San Valentín 1978
Capítulo 135: Séptimo año: bromas internas del Merodeador
Capítulo 136: Séptimo año: Juegos mentales
Capítulo 137: Séptimo Año: Remus el mártir
Capítulo 138 : Séptimo Año: Esperanza
Capitulo 139: Séptimo Año: Borrachos
Chapter 140: Séptimo Año: Ideas brillantes
Capítulo 141: Séptimo año: Star star
Capítulo 142 : Séptimo Año: Visitas al hospital
Capítulo 143 : Séptimo Año: Colapso
Capítulo 144 : Séptimo Año: Decisiones
Capítulo 145 : Séptimo Año: Lo que nos falta
Capítulo 146 : Séptimo Año: Superego
Capítulo 147 : Séptimo Año: Noche y día.
Capítulo 148: Séptimo Año: La final
Capítulo 149 : Séptimo Año: Legado, parte uno.
Capítulo 150: Séptimo Año: Legado, parte dos.
Capítulo 151 : La guerra: Julio, 1978.
Capítulo 152 : La guerra: Infiltración
Capítulo 153 : La guerra: Frente interno
Capítulo 154: La guerra: Otoño, 1978
Capítulo 155: La guerra: Invierno, 1978-1979
Capítulo 156: La guerra: El Cuartel General del Auror
Capítulo 157: La guerra: Manada
Capítulo 158: La guerra: Cautivo
Capítulo 159: La guerra: Sumisión
Capítulo 160: La guerra: Infantería
Capítulo 161: La guerra: Luna sangrienta
Capítulo 162: La guerra: La historia de Moony
Capítulo 163: La guerra: Finales de la primavera, 1979
Capítulo 164: La guerra: Verano de 1979
Capítulo 165: La guerra: Dulce et Decorum est
Capítulo 166: La guerra: Otoño, 1979
Capítulo 167: La guerra: Invierno, 1979
Capítulo 168: La guerra: Primavera y verano de 1980
Capítulo 169: La guerra: Otoño e invierno 1980
Capítulo 170: La guerra: Invierno de 1980 y primavera de 1981
Capítulo 171: La guerra: Triaje
Capítulo 172: La guerra: Verano, 1981
Capítulo 173: La guerra: Otoño, 1981
Capítulo 174: Armisticio
Capítulo 175: 1982
Capítulo 176: 1983
Capítulo 177: 1985
Capítulo 178: 1986
Capítulo 179: 1987
Capítulo 180: 1989
Capítulo 181: 1990
Capítulo 182: 1991
Capítulo 183: Verano 1993
Capítulo 184: Verano 1994
Capítulo 185: Principios de 1995
Capítulo 186: Verano 1995: Grant
Capítulo 187: Verano 1995: Sirius
Capítulo 188: Hasta el final

Capitulo 63: Cuarto año: Diciembre

1.1K 117 39
By zszyam

Miércoles 4 de Diciembre de 1974

A todos les dieron tres semanas de detención con McGonagall, lo que significaba escribir líneas y tener tarea adicional, y se les prohibió la entrada a Hogsmeade hasta el año nuevo, para horror de Peter. La pobre señorita Lewis tendría que esperar.

Esto también significaba que Remus no podría comprar ningún regalo de Navidad para sus amigos, pero estaba agradecido por esa excusa. Hasta ahora había sumado una pequeña fortuna (a sus ojos, al menos) de diez galeones y doce sickles. No estaba ni cerca de la herencia de James, por supuesto, ni siquiera del legado de Sirius de su tío, pero era más de lo que Remus había tenido, incluso en dinero muggle.

Ya había comenzado a hacer planes para el momento en que cumpliera los diecisiete. Aprender a aparecer era clave, tenía que asegurarse de hacerlo bien. Luego, compraría suficientes suministros y comenzaría su búsqueda. Y pensó que sabía por dónde empezar.

Este trimestre, desde que había regresado a Hogwarts, Remus había estado leyendo el Diario El Profeta de cabo a rabo. Tomaba prestada la copia de James y copiaba notas en privado, generalmente en la biblioteca, donde los otros merodeadores no lo molestarían. Estaba buscando cualquier cosa; ataques, avistamientos, rumores. Cualquier cosa relacionada con hombres lobo o 'criaturas oscuras no identificadas'. Había algo allí; James sostenía que esto se debía a que el ministerio no quería asustar a nadie.

Pero aún así eran pistas. A veces había historias de Aurores que encontraban "reuniones ilegales" o juntadas, siempre en lugares distantes y remotos; las Hébridas exteriores o Brecon Beacons. Y siempre eran la noche antes de la luna llena. Esta era una evidencia sólida, en lo que a Remus se refería: Greyback estaba reuniendo seguidores, y a nadie más parecía importarle; incluso los Aurores estaban siendo casuales al respecto. Como lo habían sido con Lyall.

A principios de Diciembre, Remus estaba lo suficientemente preocupado como para consultar a Ferox.

El plan de estudios de Cuidado de criaturas mágicas de este año había demostrado ser tan fascinante como el año anterior, y la dedicación de Ferox a la enseñanza no había disminuido. Incluso había insinuado la posibilidad de traer un demiguise real como regalo de Navidad, aunque Remus no tenía idea de dónde iba a conseguir uno.

El profesor los había llevado a todos al lago para una lección, donde Ferox había mantenido una conversación larga y aguda con una de las personas del lago que vivía allí. Nadie tenía la menor idea de lo que estaban hablando, pero de todos modos había sido interesante y Remus había hecho algunos diagramas muy útiles.

Con estos diagramas y el ensayo que los acompaña, Remus se acercó a la oficina de Ferox una lúgubre tarde de Diciembre. Dado que tanto Sirius como James estaban ahora en el equipo de quidditch, era mucho más fácil para Remus escabullirse y llevar a cabo sus propios asuntos personales, últimamente ya sea cazando hombres lobo o como el principal proveedor de tabaco de Hogwart. Lily le había preguntado si quería ir a la biblioteca con ella; pensó que debía sentirse un poco sola este trimestre, ya que a menudo le preguntaba si quería ir aquí o allá con ella. No se había dado cuenta de que ella pasaba menos tiempo con Mary y Marlene, pero ¿Quién iba a saber con las chicas?

De todos modos, habiéndose liberado de todas las demás responsabilidades, Remus llamó a la puerta de la oficina de Ferox.

— Adelante — gritó la familiar voz cantarina de liverpudliano. Remus sonrió y entró.

— Hola, profesor — dijo, agarrando sus papeles.

— ¡Lupin! Siéntate, siéntate — le sonrió Ferox desde detrás de su escritorio. Parecía estar reparando una gran jaula dorada; su escritorio cubierto con herramientas, cables y otras cosas que no parecían pertenecer a la oficina de un maestro.

— Tengo mi ensayo de tritones aquí — lo dejó en el único espacio libre en la superficie.

— ¡Vaya, Remus, si que eres ansioso! — El profesor Ferox sonrió, guardando sus herramientas en una bolsa de cuero. — Eso no se debía entregar hasta el último día del trimestre.

Remus se encogió de hombros, secretamente emocionado.

—Lo tenía terminado, así que pensé que mejor podría entregarlo ahora.

— Muy bien. ¿Te apetece un té?

— Sí, por favor.

Ferox empujó la gran jaula a un lado y agitó su varita, casualmente. La varita de Ferox era más corta que la de Remus, y más gruesa, hecha de algún tipo de madera nudosa, como si estuviera partida directamente de la rama de un árbol. Una tetera apareció de la nada, seguida de cerca por dos tazas y platos que cayeron ruidosamente sobre la mesa. Eran bastante viejos y estaban quebrados en algunas partes.

— Ups — Ferox sonrió, tímidamente, — Nunca fui muy delicado con los encantos. Este es el viejo juego de mi abuela, como puedes ver.

Remus sonrió cortésmente y usó su propia varita para servir el té. Encontró la levitación muy fácil, y Ferox parecía impresionado. —Abue solía beberlo del platillo y todo — murmuró con nostalgia, llevándose la taza a los labios, "
— Pensaba que era elegante, dios mío.

Remus nunca sabía qué decir cuando la gente empezaba a hablar de sus familiares. Le había tomado cuatro años aprender que las personas que tenían familias no querían realmente escuchar las experiencias de las personas sin ellas. Las hacia sentir incómodas. Ferox pareció notar la educada reticencia de Remus y cambió de tacto, — En este punto, mi abuela me ofrecería una galleta y un cigarrillo, pero me temo que me he quedado sin ambos.

Remus levantó una ceja y buscó dentro de su bolsillo.

— Aquí, señor — dijo, ofreciendo una caja de marlboro.

— Ah, entonces los rumores son ciertos, ¿eh? Nuestro contrabandista residente.

Remus se encogió de hombros de nuevo, tratando de enmascarar cuidadosamente su emoción cuando Ferox realmente aceptó un cigarrillo y lo encendió pulcramente con la punta de su varita.

— ¡¿Cómo hizo eso?! — Preguntó, probándolo con su propia varita, sin éxito. Ferox se rió entre dientes.

— Ven aquí — Remus se inclinó sobre el escritorio para permitir que Ferox encendiera su cigarrillo. — Será mejor que no te enseñe — le guiñó el ojo el profesor — Es un hábito terrible.

Remus sonrió a través de la nube de humo, dando una larga calada.

— Entonces — dijo Ferox, reclinándose en su silla, —¿Supongo que esto es más que una visita social, joven Lupin?

— Erm... sí, algo así — asintió Remus, aclarándose la garganta, — Solo tenía algunas preguntas más sobre... bueno, no sabía a quién preguntar, y dijo el año pasado que siempre podía venir a verlo.

— Por supuesto. ¿Se trata de tu padre?

— Oh no — Remus negó con la cabeza con vehemencia, — No él.

Puede que haya sonado un poco más enérgico de lo que pretendía, pero estaba harto de Lyall Lupin y del horrible, vacío y culpable sentimiento que tenía cuando pensaba en el hombre. No quería saber más sobre el pasado, se trataba del futuro.

Remus dio otra bocanada, dejando que calmara sus nervios. — Se trata de Greyback.

— Remus...

— Merezco saberlo. — Dijo, sombrío, perdiendo su sonrisa. — Es mi vida.

Ferox lo miró durante mucho tiempo, antes de suspirar.

— Igual que tu papá. Ok, ¿Qué quieres saber? No es que pueda decirte mucho, claro. Hasta donde todos saben, sigue siendo un fugitivo buscado.

— Los artículos que me dio, uno de ellos decía que el ministerio pensaba que estaba tratando de formar un ejército, por eso le gustan... los niños.

— Eso es solo un rumor. — Ferox dijo, frunciendo el ceño, — No hay evidencia.

— Yo soy la evidencia. — Remus dijo, inconscientemente presionando una mano sobre su costado, donde la peor cicatriz de todas estaba escondida debajo de su uniforme.

— Todavía no significa... bueno, si él hubiera estado tratando de hacer eso en los sesenta, entonces pensarías que ya lo sabríamos, ¿eh?

Esa era una línea falsa de razonamiento, en opinión de Remus, agitó una mano.

— Ha habido ataques, si lees los periódicos correctamente. El Señor Oscuro, es la persona perfecta para animar a Greyback, por lo que he escuchado. Es necesario hacer algo para evitar que las personas se unan a ellos. Para evitar que... personas como yo se unan a él.

— No sé lo que sabes sobre el llamado 'Señor Oscuro', — respondió Ferox, rígido, — Pero solo está interesado en la pureza de la sangre. Consideraría a alguien como Greyback un híbrido. Debajo de él.

Remus pensó en Snape y los otros Slytherin, e inmediatamente descartó esta teoría también.

— Puede que no lo respete, pero siempre y cuando Greyback haga el trabajo y si consigua suficientes seguidores.

— Estás sobreestimando su poder, el de ambos. El Señor Oscuro es solo un advenedizo político, que se alimenta de cierta opresión percibida; nadie lo toma en serio. Nadie que importe. Y Greyback... bueno, es prácticamente un abandonado, un loco delirante. Ninguno de los dos tiene nada sustancial que ofrecer a sus seguidores.

Remus resopló;

— Sí, bueno, el ministerio no tiene mucho que ofrecerme, excepto un collar y una celda con barrotes.

— Remus, eso no es cierto — Ferox sonaba angustiado. A Remus no le importaba.

— ¡Sí lo es! Tengo casi quince años, no soy un niño. Mis perspectivas laborales son solo un poco menos mierda como muggle que como mago. No puedo evitar notar que soy el único en Hogwarts, no puedo evitar notar que se supone que no debo decirle a nadie... oh, espera, hasta que tenga diecisiete, entonces tengo que decírselo a todos, ¿Verdad? Entonces todos los demás saben que deben evitarme en caso de que tenga un poco de hambre. Es posible que Greyback no tenga mucho que ofrecernos a los mestizos, pero cuando no tienes mucho más a tu favor...

— Remus, tienes...

— ¡No! ¡¡He leído las leyes, los estatutos y el puto registro!!

Apagó el cigarrillo en los restos de la taza de té, furioso. Faltaban semanas para la luna llena, pero su temperatura estaba aumentando, su corazón latía con fuerza mientras miraba a Ferox, desafiándolo a responder. El propio Ferox parecía bastante conmocionado, mudo. Esto en sí mismo enfrió el temperamento de Remus - había querido tener una discusión racional, había querido aprender cosas; no gritarle a su maestro favorito. Sacó otro cigarrillo y lo encendió con la caja de cerillas que llevaba, luego empujó la caja sobre el escritorio hacia Ferox.

— Es suyo. — Dijo en voz baja, inhalando: — Lo siento. No quise gritar.

— Está bien gritar, Remus — sonrió Ferox, débilmente, —Especialmente cuando alguien no está escuchando y necesitas ser escuchado.

Remus lo miró con curiosidad. Ferox se relajó un poco, — Creo que ves la ira como una debilidad, pero no lo es. Es bueno estar enojado, y tienes una maldita buena razón para estarlo. Tienes razón. Tenemos toda necesidad de preocuparnos por Voldemort, y Greyback, y el resto de la multitud de sangre pura. Si el ministerio está preparado para tratar a los magos buenos, inteligentes y reflexivos de la forma en que te tratan a ti, entonces las personas como el Señor Oscuro siempre tendrán seguidores.

Remus lo miró atónito.

— Pero. — Ferox dijo: — Siempre habrá gente trabajando en su contra también. Y mientras estemos enojados, ellos no ganarán.

— No ganarán. — Repitió Remus. Por lo general, se sentía avergonzado después de un arrebato como ese, pero ahora se sentía más tranquilo, incluso aliviado.

— Y no pienses ni por un minuto que tienes prospectos de mierda. — Ferox arqueó una ceja, — Si crees que Dumbledore movió cielo y tierra para darte una educación solo para verte terminar no mejor que un squib, entonces no conoces a Dumbledore, muchacho.

...

Viernes 20 de Diciembre de 1974

A medida que avanzaba Diciembre y las noches se alargaban, el castillo se vio envuelto en luces de colores y un pesado manto de nieve. Todo el mundo parecía estar más animado que de costumbre y más emocionado que nunca de celebrar la Navidad. Los búhos recorrían los pasillos a la velocidad del rayo, entregando paquetes y tarjetas envueltas en brillantes colores; la profesora de Herbología había encantado el acebo y la hiedra para que se tejieran alrededor de cada candelabro y barandilla; Se podía ver al profesor Flitwick casi todas las noches enseñando a los retratos a cantar villancicos, y Sirius Black terminó el período vestido de pies a cabeza con oropel.

En realidad, esto no había sido idea de Sirius; James lo había iniciado, usando un hechizo pegadizo eterno para colocar las decoraciones en los cuellos y puños de la túnica de Sirius mientras dormía. Si había pensado que esto podría avergonzar a Sirius, estaba muy equivocado: Black adoraba su nueva apariencia y la usaba con orgullo. De hecho, para el último día del trimestre, al menos otros quince chicos lo habían copiado, así como un grupo de chicas que últimamente habían empezado a seguir a Sirius.

Parecía que todas las chicas de la escuela se habían enterado de la Gran Carrera del Beso y el efecto no fue el que Remus esperaba. Si bien Marlene había actuado con sensatez al rechazar los avances de Black, había muchas chicas en su año, e incluso en el año anterior, que esperaban ayudar a Sirius a ganar la apuesta. Al principio pensó que esto era muy divertido, pero después de casi un mes de ser seguido por una manada de adolescentes riendo tontamente, recibiendo notas de amor fuertemente perfumadas y siendo interrumpido en casi todo momento, había reclutado a Mary como guardaespaldas.

Mary era perfecta para esto: discutidora, lista para decir lo que pensaba y no estaba interesada en Sirius en absoluto.

— Eres un cobarde — suspiró, en la última noche del trimestre, mientras todos se sentaban juntos alrededor de la chimenea. James estaba jugando con una snitch dorada que había robado del cobertizo de juegos, tratando de impresionar a Lily, quien tenía la cabeza gacha y estaba terminando frenéticamente sus tarjetas de Navidad.

Peter no estaba por ningún lado, Marlene estaba jugando una partida de ajedrez con Remus, y Sirius acababa de llamar a Mary para que se sentara más cerca de él, mirando con cautela a un grupo de chicas que lo miraban desde la esquina.

— No soy un cobarde — respondió secamente, aflojándose la corbata — Me gusta mi privacidad.

— Siempre puedes besarte con una de ellas — respondió Mary, estirándose en el sofá y colocando sus piernas sobre el regazo de Sirius. Él la dejó. — ¿No era ese el objetivo de la apuesta?

— Bueno, sí — respondió Sirius, en un tono mesurado, — Pero se suponía que ellas no debían saberlo, se suponía que yo las conquistaría con mi encanto y mi apariencia pícara

— No tienes miedo, ¿verdad? — Mary ronroneó.

— Sería estúpido de mi parte no tenerles miedo. — Sirius se rió, — Están locas.

— Mary, ¿Cuál es el apellido de Darren? — Preguntó Lily, levantando la vista de su pila de cartas.

— Harvey. — Mary dijo: — Dios, no le enviarás una tarjeta, ¿verdad? ¡Solo lo has conocido una vez!

— Es bueno recibir tarjetas en Navidad. — Lily sonrió, volviendo a su escritura.

— Está bien, pero no lo envíes por búho, es un muggle.

— ¿Cómo le has estado escribiendo todo el año? — Preguntó Remus, genuinamente interesado.

"Le envío las cartas a mamá y ella las pone en su buzón. Solo vive al otro lado del pasillo. Y hay una cabina telefónica a las afueras de Hogsmeade, así que hemos charlado una o dos veces.

— ¡No sabía que había una cabina telefónica!

— Sí, es un poco antigua, uno de los Ravenclaw me dijo que era un traslador una vez durante la guerra, pero aún funciona. — Ella se estiró de nuevo, — No puedo esperar a verlo — suspiró. Sirius apartó sus piernas, fingiendo inclinarse y mirar el juego de ajedrez.

— ¿Dónde estarás para Navidad, Remus? — Preguntó Lily, lamiendo su último sobre. — ¿No te quedarás aquí, espero?

— Lupin y Black estarán en mi casa de nuevo — dijo James, ansiosamente. Lily le lanzó una mirada fulminante.

— Oh por supuesto.

Remus estaba ansioso por ver a los Potter este año. Solo se quedaría una semana, ya que la luna llena caía el día veintinueve, pero estaba bien para él, simplemente no podía esperar por los regalos y las decoraciones, y la comida de la Sra. Potter.

— Estoy hambriento. — Sirius bostezó, perezosamente, — ¿Dónde está Pete? ¿Podemos enviarlo a las cocinas por nosotros?

— No tengo idea de dónde está en realidad. — James dijo: — No lo he visto desde la cena.

— ¿Está empacando? — Sugirió Lily.

— Iré y comprobaré — Remus se puso de pie, estirándose. — Yo también tengo hambre, creo que hay unos pasteles de caldero en mi baúl...

— No digas más... — Sirius se levantó también, siguiéndolo. Remus suspiró. Sirius se pasaba la mitad de su tiempo rogando por dulces del resto de ellos. No es que no fuera generoso con los suyos, solo que rara vez parecía tener alguno.

Peter no estaba en el dormitorio, pero sí los pasteles de caldero.

— Me pregunto qué le ha pasadom — Remus se frotó la nuca.

— Mira el mapa — dijo Sirius, esparciendo migas por todas partes, la boca llena de pastel. Remus arqueó una ceja pero no dijo nada, y recuperó el mapa de su mesita de noche.

Lanzó el hechizo de localización y el mapa rápidamente resaltó una pequeña bandera con el nombre 'Peter Pettigrew'. Parecía como si estuviera en un armario de escobas cerca del aula de Encantamientos.

— ¿Qué está haciendo ahí? — Murmuró Sirius, metiéndose otro pastel en la boca. Remus gruñó esta vez, doblando el mapa.

— No sé. ¿No crees que los Slytherin lo atraparon?

— ¿Tal vez? — Sirius tragó saliva. —Si le ponen un hechizo vinculante, podría estar atrapado allí toda la noche. Vamos a buscarlo, entonces.

— ¿Traigo a James?

— Err... — Sirius miró hacia la puerta, y Remus supo de inmediato que temía tener que pasar el guante de chicas esperando allí. — No, tomemos la capa y bajemos sigilosamente, no tomará mucho tiempo, y de todos modos solo dos de nosotros encajamos.

Remus se encogió de hombros a modo de consentimiento. Si no les tomaba mucho tiempo rescatar a Peter, tal vez podrían ir a las cocinas después. Sirius había terminado sus pasteles de caldero. Se acurrucaron juntos bajo la capa y se apresuraron en silencio escaleras abajo, pasando junto a James y las chicas, por el agujero del retrato.

— Típico del maldito Peter — resopló Sirius, en voz baja, — Cuatro años como merodeador y todavía es una mierda en hechizos defensivos.

— Tal vez lo atacaron por la espalda — sugirió Remus, — O tal vez había muchos de ellos.

No sabía por qué, pero le encantaba contradecir a Sirius. James lo llamaba peleas, pero Sirius nunca había dado ninguna señal de que le molestara. Continuaron, a través de los oscuros pasillos de piedra, hacia el corredor de Encantamientos.

— Aquí, ¿es ese? — Sirius susurró, mientras llegaban a una puerta.

— Sí — respondió Remus, — Está ahí. — Podía olerlo.

— Ok, ¿varita lista?... ¡Uno, dos, TRES!

Sirius abrió la puerta rápidamente, para sorpresa de Peter, quien no estaba en peligro, y de Desdemona Lewis, quien gritó:

— ¡¿Quién está ahí?! — Miró a su alrededor, pálida y con los ojos muy abiertos, el cabello revuelto y los labios muy rosados y húmedos. Pete también miró a su alrededor, un poco más suspicaz, pero igual de arrugado.

— Probablemente solo Peeves.

Sirius comenzó a temblar de risa, y Remus rápidamente se tapó la boca con la mano, tratando de alejarlo del armario. Pobre Peter.

— Voy a volver a mi sala común, me meteré en muchos problemas si vuelven a pillarme fuera de los límites —decía Desdemona mientras se alisaba la blusa. Besó delicadamente a Peter en la nariz. —¿Te veo mañana, Petey? ¿En el tren?

— Sí... está bien... — respondió Peter, muy distraído, todavía mirando a su alrededor, buscando a su asaltante invisible. Remus agradeció a cualquier dios que hubiera por su fuerza superior, mientras Sirius luchaba locamente por liberarse y causar aún más lío.

Remus no lo dejó ir hasta que Desdemona desapareció por la esquina. De todos modos, Peter ya conocía la situación.

— ¡Muy bien, muéstrense! — Sacó su varita justo cuando Remus soltó a Sirius y ambos salieron de debajo de la capa de invisibilidad.

— ¡LO SABÍA! — Peter gritó.

— ¡TÚ ESCURRIDIZO! — Gritó Sirius, riendo tan fuerte que se estaba sosteniendo el estómago, — ¡¿Cuánto tiempo ha estado pasando?!

— Una semana — respondió Peter, poniéndose rojo — ¿Cómo me encontraste?

— ¡¿UNA SEMANA?! ¡Merlín, Pettigrew! ¡¿Qué crees que haces mintiéndonos durante toda una semana?!

— ¡Me habrías tomado el pelo!

— Nos burlamos de ti de todos modos.

— ¿Podemos ir a las cocinas ahora? — Remus suspiró.

— ¡Espera a que James se entere de esto! — Sirius dijo, sonando asombrado, — No puedo creerlo. Realmente no puedo. Peter Pettigrew: Un mujeriego.

— Callate. — Peter se enfurruñó, metiendo las manos en los bolsillos. — Voy a la sala común, no tengo hambre.

— Bueno, por la forma en que te comiste la cara de Lewis...

— ¡Cállate! — Peter desapareció por el siguiente pasillo.

Sirius se rió todo el camino hasta las cocinas, y todavía estaba un poco histérico en el camino de regreso, incluso cargado de golosinas y dulces de los elfos domésticos.

— Al menos esto significa que la estúpida carrera de besuqueo ha terminado. — Remus dijo, amablemente, mientras se acercaban al retrato de la dama gorda. Sirius se detuvo en seco, causando que Remus chocara con él, casi tirando su botella de cerveza de mantequilla.

— ¡Uf, no pensé en eso!

— Bueno, no tienes que pensar en eso ahora — espetó Remus, frotándose el codo donde lo había golpeado — Pete ganó.

— Tienes razón, Moony. ¡Ugggh! Eso significa que si no me beso a finales de este año, ¡Voy a ser un perdedor mucho más grande que Pettigrew!

Remus suspiró pesadamente.

Continue Reading

You'll Also Like

482K 49.3K 123
La verdad esta idea es pervertida al comienzo, pero si le ves más a fondo en vastante tierno más que perverso. nop, no hay Lemon, ecchi obviamente, p...
727K 80.7K 188
Historia original: All the young dudes de MsKingBean89 traza el tiempo de los merodeadores en Hogwarts (y más allá) desde el punto de vista de Remus:...
50.8K 855 2
Info sobre Shifting 🍒Terminado🍒
19.7K 828 32
Ella, una cantante latina famosa, al viajar a Corea de Sur, se enamora del hombre menos esperado, un Idol, nada más ni nada menos que Choi Minho. ¿La...