You Hate Me While I Love You...

Per AryMaslow

507K 42.4K 44.8K

¿Cómo voy a conquistar a la chica que amo? La respuesta es simple: haciendo su vida un infierno. autora: Lynm... Més

Me odias mientras yo te amo.
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capitulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
nota [importante leer, no me ignoren]
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
Capítulo 53
Capítulo 54
Capítulo 55
Capítulo 56
Capítulo 57
Capítulo 58
Capítulo 59
Capítulo 60
Capítulo 61
Capítulo 62
Capítulo 63
Capítulo 64
Capítulo 65
Capítulo 66
Capítulo 67
Capítulo 68
Capítulo final
Epílogo
Agradecimientos

Capítulo 69

4.2K 426 491
Per AryMaslow

Punto de vista de Camila:

Llega un momento en la vida en el que corres y te jodes o te quedas quieto y te jodes de la misma manera y ese momento ha llegado para muchos presentes en la sala de Kris. Cuando digo muchos presentes, me refiero solo a Kristen, pero no quería tirárselo a la cara y parecer una persona horrible.

Porque no era una persona horrible, solo quería reír, pero era por nerviosismo.

—Para empezar, Lauren nunca fue mi novia. —Le explicó Kristen a Lilly después de unos momentos de silencio.

—¡Aleluya! —No pude evitar exclamar lo aliviada que estaba de dejar a ese personaje que era solo ser la amiga de mi novia. Me acerqué a Lauren y la abracé, besando ligeramente sus labios antes de volverme hacia Lilly. —Soy la novia y futura madre de nuestros hijos, pero ella también será madre.

Necesitaba estar consciente de que mi futuro con Lauren era muy prometedor. Esquivé a mi novia por unos momentos para acercarme a Ally y agarrar la bandeja de sándwiches antes de tomar la mano de mi novia y hacer que se sentara en el lugar que Keana había dejado en el sofá. Tan pronto como se sentó, me senté en su regazo y Kristen me miró e hizo una mueca que no entendí antes de volverse hacia la chica de cejas tupidas.

—Continuando...Le pedí a Lauren que fingiera ser mi novia para que no sospecharas que estaba enamorada de ti.

Lauren me abrazó por la cintura y apoyó la barbilla en mi hombro mientras yo le extendía un sándwich a Dinah y le daba un poco del mío a mi hermosa novia antes de meter el resto en mi boca porque era demasiado pequeño.

—¿Estabas enamorada de mí? —Lilly preguntó como si no pudiera creerlo.

—Sí. —Respondió Kristen asintiendo.

—Camz... —Susurró Lauren en mi oído, haciendo que un escalofrío recorriera mi cuerpo.

—¿Qué pasa amor? —Le respondí en un susurro.

—¿Me puedo quitar unas cuatro blusas? Me estoy sofocando. —Asentí con la cabeza y coloqué la bandeja de sándwiches en la mesa de café antes de volverme hacia ella, sosteniendo la primera blusa para que no se arriesgara a presentar un espectáculo gratis a todas en esa habitación.

—¿Por qué no me dijiste que estabas enamorada de mí?

—Porque no quería arriesgarme a perderte por eso.

Afortunadamente, mi vida amorosa estaba muy bien resuelta.

—Deberías habermelo dicho y lo hubiéramos arreglado juntas. —Lilly se acercó a Kristen y sostuvo su rostro entre sus manos. No creo que nadie más que yo se dio cuenta del momento en que Ariana salió de la sala. Me volví hacia mi novia y la besé.

—Quédate aquí y cuéntame todo más tarde, te lo explicaré después. —Me levanté discretamente y fui tras Ariana, entrando a su habitación justo cuando iba a cerrar la puerta. —¡Ven conmigo! —Dije tomándola de la muñeca y sacándola de la habitación, comprobando si mi dinero y mi celular estaban en la sudadera antes de pasar por la sala. —Ari y yo vamos a comprar toallitas húmedas para Maddox porque se acaba de dar cuenta de que se le acabaron. —Anuncié sin mirar a nadie y arrastré a Ariana fuera del apartamento. —¿Quieres hablar de ello o prefieres simplemente caminar?

—Por ahora solo quiero caminar. —Respondió ella ya sabiendo a qué me refería.

Caminamos unos quince minutos en silencio, concentrados en nuestros pensamientos. Aproveché ese tiempo para reflexionar sobre mis últimos meses y todo lo que pasó entre Lauren y yo para que pudiéramos llegar a donde estábamos y le agradecí a Dios por todo lo que salió bien, es decir, sabía que aún nos enfrentaríamos a muchas cosas malas, pero lo que pasamos me hizo consciente de que éramos fuertes para afrontarlo todo juntas.

—Creo que debería mudarme. —Dijo Ari rompiendo el silencio y desde la distancia vi una cafetería.

—Tomemos un chocolate mientras hablamos. —Fuimos a la cafetería y pedí dos chocolates calientes y una treintena de galletas después de que Ariana dijera que no quería nada. —Entonces, ¿crees que mudarte es la mejor opción?

—Ya no sé nada. —Apoyó la cabeza en la mesa.

—¿Qué sientes exactamente por ella? —Entender eso era el primer paso para intentar ayudarla. Ella levantó la cabeza y me miró, apoyando los codos en la mesa.

—Me gusta todo de ella.

"Está jodida."

—Continúa...

—La forma en que siempre está ahí para escucharme, la forma cariñosa en que nos trata a Maddox y a mí, su alma artística, su estilo de chica mala, su sonrisa, que nunca llega a ser una sonrisa...

—¿Has pensado en hablar con ella? —Pregunté con cuidado.

—No hay nada de qué hablar, tú también estabas en la sala y sabes muy bien que ella no siente nada por mí, además, no quiero dañar nuestra amistad. —Dejó de hablar cuando el camarero trajo nuestro pedido.

—¡Gracias! —Miré mi pedido y me di cuenta de que tenía mucha hambre. —¿Podrías traerme treinta galletas más? —Él asintió con la cabeza antes de irse y volví mi atención a Ariana. —Puedes continuar. —Le di su chocolate.

—Vivimos juntas y sería una completa mierda... —Dejó de hablar cuando su celular comenzó a sonar. —Es ella, ¿qué hago?

—¡Contesta!

—No quiero hablar con ella ahora.

—Si no respondes, se dará cuenta de que algo anda mal.

—Hola Kris... —Respondió mirándome a la cara. —Mila tenía hambre y paramos a comer algo, ¿está todo bien? [...] Cuando llegue a casa, hablaremos. ¡Besos! —Colgó la llamada. —Quería saber si pasaba algo. —Gruñó. —Odio que siempre esté preocupada por mí... ¡no colabora!

—Sé de lo que estás hablando... —Dije pensando en Lauren y la forma en que ella siempre se preocupaba por mí, incluso cuando yo no lo merecía.

—Sabes, sé que no tengo ninguna posibilidad con ella, quiero decir, ni siquiera sé lo que es estar en una relación. —Ella muestra la frustración en su voz. —Tengo que concentrarme en mi trabajo y en mi hijo y olvidarme de estos enamoramientos adolescentes...

—No podemos controlar el corazón, Ari...Si tienes que quedarte con Kristen, sucederá. Cuando Lauren se me declaro, yo era la persona más estúpida y ridícula del mundo con ella...Repudié cualquier tipo de sentimiento romántico relacionado con ella y ahora me dan ganas de morir solo de pensar en estar lejos de ella... —Ariana sonrió, revelando los hoyuelos más encantadores del mundo.

—Sabes...Recuerdo la desesperación de Lauser cuando vino a decirnos que pensaba que le gustabas. —Me incliné sobre la mesa, bastante interesada en ese tema.

—¿Cómo fue?

—Has visto alguna crisis de ansiedad de Vero, ¿verdad? —Asentí con la cabeza. —Entonces, con Lauren, fue un poco peor que eso. —Tomó un sorbo de su chocolate y hasta le dejé tomar una de mis pocas galletas. —Habíamos programado una fiesta de pijamas en la casa de Mani y ella llegó tarde, sudando...parecía que se iba a caer con fuerza en cualquier momento. Dijo que había estado pensando en cómo se sentía por ti toda la tarde y concluyó que no podía "gustarle esa idiota", porque siempre estaban peleando y esas cosas. —Sonreí imaginando la escena. —Y luego se puso a llorar, a decir verdad, lloró toda la noche diciendo que se odiaba a sí misma por que le gustabas y porque eras una estúpida. —Mi sonrisa murió.

—Ella es la estúpida.

—Pelearon desde el segundo en que se conocieron. —Lo dijo como si lo justificara, pero no lo justificaba.

—Pero porque ella me maldijo porque inocentemente la vi cuando estaba cagando en la caja de arena del gato.

—Recuerdo cuando Clara nos contó sobre ese episodio...bueno, después de concluir que le gustabas, Lauser se asustó porque no sabía cómo arreglar todos los años de peleas.

—Ella no lo arregló.

—Lo sé, decidió permanecer cerca de ti, a su manera extraña y ninguna de nosotras pudo ayudar porque éramos tan inexpertas como ella.

—Al final todo ha ido bien, quiero decir, todavía no hemos llegado al final, pero ha ido todo bien.

—Sí...me alegro por ustedes dos porque son perfectas juntas. —Sostuve su mano sobre la mesa y la apreté. Mi novia sabía elegir amigas.

—Tu momento también llegará, deja que las cosas sucedan con naturalidad...

—Sí, voy a seguir el curso del río y ver qué pasa...

Hablamos durante mucho tiempo y luego volvimos al apartamento de Kristen. Solo mi novia y Kristen estaban allí porque Taylor había ido a buscar a Lilly y se reconciliaron. Kristen dijo que Lilly reaccionó bien a toda la verdad y decidieron olvidarlo y continuar su amistad. Dinah había recibido una llamada de su madre diciéndole que debía irse a casa urgentemente y aprovechó para llevar a Ally a casa.

Lauren y yo decidimos dejar que Ari y Kris tuvieran su tiempo de tranquilidad y fuimos a la casa de mi novia.

—¿Cuál quieres? —Estaba arrodillada en la cama de Lauren, sosteniendo dos barras de chocolate ante sus ojos. —Tenemos chocolate con leche y avellanas y chocolate blanco.

—El chocolate blanco no es chocolate. —Dijo, sosteniendo la compresa de agua tibia sobre su útero, que le había dado momentos antes.

—Por supuesto que es chocolate, está escrito en el empaque que es chocolate, entonces es chocolate.

—Pero no hay cacao, entonces no es chocolate.

—Si es chocolate, deja de ser terca...No voy a discutir contigo, ¿cuál quieres? —Pregunté de nuevo.

—¡Ninguno, estoy demasiado gorda! —Se quejó cruzando los brazos debajo de sus senos.

—Te ves sexy y te amo como eres. —Dije arrepintiéndome de que ella estaba en sus malditos días porque no podía demostrarle cuánto amaba su cuerpo.

—¡¿Has visto mi barriga, Camila?! —Su voz no podía sonar más indignada.

—Sí, y realmente me gusta.

—Deja de mentir, debo haber engordado cinco kilos. —Dejé caer los chocolates en la cama, me senté encima de sus muslos cubiertos de un pantalón a cuadros y sostuve su rostro entre mis manos, haciéndola mirarme y verificar la verdad en mis palabras.

—Puedes pesar mil kilos y seguiré amando cada pedacito de ti, quiero decir, si pensarás mil libras amaré cada pedacito de ti, pero aún así seguiré amándote. —Besé sus labios brevemente. —El hecho de que subiste de peso demuestra que estás sana de nuevo, amor, puede que no te hayas dado cuenta, pero perdiste mucho peso por la enfermedad...Asi me gustas mucho más. —Me sonrió y estaba segura de que su expresión reflejaba mi rostro porque yo también estaba sonriendo.

—¿Ya te dije que te amo? —Me puse de pie y fingí pensar.

—Han pasado diez minutos desde la última vez. —Dije, acostándome a su lado y entregándole las dos barras de chocolate antes de dejar mi cabeza en su pecho y encender la televisión.

—¡Te amo, Camz! —Me susurró besando mi frente.

—¡Te amo, Lolo!

Punto de vista de Vero:

Casi atropellé a un perro mientras pedaleaba lo más rápido posible hacia mi destino. No pude quitarme de la cabeza ese estúpido beso entre Keana y Piolín, ni toda la gelatina que comí logró distraerme y ni siquiera podía mirar mi videojuego.

Necesitaba hablar con Keana.

Reafirmando eso, aumenté aún más mi velocidad de pedaleo y tuve que frenar bruscamente cuando noté que ya había pasado la casa de la 'chica pijama'. Tiré mi bicicleta sobre unas flores en su patio trasero y me dirigí a su casa, donde clavé el dedo en el timbre.

Momentos después ese maravilloso ser abrió la puerta, con el pelo despeinado, la cara roja y...

Sentí que mi presión aumentaba y mi pecho se aceleraba.

ESTABA USANDO LA PIJAMA DE SATANÁS CON EL ESTAMPADO DEL HOMBRE ARAÑA

—Vero, ¿estás bien? —Me preguntó con cuidado mientras intentaba concentrarme en mi propósito inicial.

Respiré hondo, cerré los ojos, conté hasta diez y los volví a abrir.

—No quiero que juegues videojuegos con Kristen, no quiero que la beses en la boca y mucho menos que uses este pijama delante de ella. —Podría haber jurado que había burla en su expresión.

—¿Y por qué debería obedecerte?

—Porque te lo estoy pidiendo.

—No me lo estás pidiendo, me lo estás imponiendo. —Me acusó.

—¿Y si te lo pido?

—¿Por qué pedirías eso? —Preguntó cerrando la puerta detrás de ella, ofreciendo a todo el vecindario la vista de su pijama. Abrí la puerta y la empujé adentro, cerrando la puerta con fuerza antes de contestar.

—Porque solo yo quiero poder jugar videojuegos contigo, solo yo quiero poder besarte y solo yo quiero poder verte con este pijama o cualquier otro pijama que tengas. —Hablé de inmediato y ella se quedó estática por unos momentos.

—¿Eso significa que te gusto? —Me preguntó lentamente.

—Eso creo, ¿No es así? —Pregunté, pero sentí que me gustaba.

—¿Crees? —Se cruzó de brazos y traté de no mirarle el escote para no morir.

—Me gustas, ¿de acuerdo? No quería pensar en eso, la posibilidad de que me gustaran dos chicas al mismo tiempo, pero asi fue, me gustas, ¡me gustas jodidamente mucho! —Grité sintiendo que mi corazón se aceleraba aún más, pensando en la posibilidad de que tal vez fuera cardíaca.

Keana se echó a reír. Riéndose de mí, de mi persona, de mi ser, de mi figura.

—¿De que te ríes? —Le pregunté mientras ella seguía riendo, perfectamente hermosa, pero aún riéndose de mí.

—Me río porque estoy feliz. —Envolvió un brazo alrededor de mi cuello y usó el otro para quitarme los lentes de mi rostro y colocarlos sobre el de ella, haciéndola lucir aún más perfecta. No pude evitar abrazarla, sintiendo un cosquilleo en todo el cuerpo en el instante en que besó mis labios. —¡Vamos arriba a jugar!

Asentí y besé sus labios una vez más, sintiendo mi cuerpo completamente calmado y la seguí.

Me encantaba jugar. 

-------------------------
Vero y Keana por fin estan juntas! :,)

Muchas gracias por leer, votar y comentar!💗

El siguiente capítulo es el final y después quedaría el epílogo!

Continua llegint

You'll Also Like

3M 123K 76
Lauren y Camila se conocen desde pequeñas, pues vivían una enfrente de la otra. Eran muy amigas, pero algo sucedió que hizo que no se volvieran a hab...
487K 28.3K 31
La vida de Camila Cabello era muy buena, pues su carrera como patinadora en hielo empieza a despegar cuando la seleccionan para ir a los Juegos Olímp...
394K 56.4K 40
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ¿Un embarazo? ¡Imposible!
43.1K 4.2K 31
Ella parecía mucho más allá de su alcance... ¿Podría el amor unirlas? Durante años, la tímida diseñadora Lauren ha estado enamorada de Camila, la her...