Ambos llegaron a la cámara de Atena, Shiryu dudo en entrar, podía engañar a los caballeros dorados pero no a Atena, ella sentiría su cosmo, Hypnos al ver la duda en el joven sujeto su mano.
- no te preocupes ella no lo notara, la mascara que llevas lo evitara, si no estas seguro, Hypnos tomo su mano, en la muñeca del joven dragón apareció un brazalete. - esto evitara que incluso Atena note algo extraño en ti. dcho eso ambos ingresaron a la sala.
- Hypnos, la joven hablo mirando a la persona junto al dios del sueño.
- Atena no debes preocuparte, es solo mi sirviente.
- bien, entiendo que Hades salió del santuario.
- regreso al inframundo, no es del agrado de mi señor permanecer aquí.
- lo comprendo, no te preocupes cuando regrese podemos reanudar las reuniones.
- bien, eso es todo, me retiro.
- espero que estos días puedas disfrutar de tu estadía en el santuario.
- lo hare, Hypnos se despido saliendo de la sala seguido de Shiryu.
- señorita Atena.
- ¿Shion sabes si Seiya regresara?.
- aun no señorita, al parecer Seiya esta bien en los cinco picos.
- bien, es mejor si aun sigue allí. Atena suspiro mas tranquila.
- Atena se noto extraña hoy.
- ¿a que te refieres?.
- que no haya mostrado molestia ante el echo que hades regresar al inframundo sin informárselo es extraño.
- no veo nada de extraño en eso Hypnos, después de Todo Saori es atenta y amable con todos.
- realmente no ves lo que sucede, Hypnos río pero no dijo mas llevo a Shiryu con el para dar un paseo alrededor del santuario como venia haciendo hacia unos dias.
- ¿que paso en verdad, caballero Shiryu?.
- ¿de que hablas?.
- ¿ir a Azgar no fue acaso una mentira para Tu maestro?, estuviste rondando el santuario estos días.
- tu...
- te dije que debo buscar una forma de no aburrirme en este lugar
Ante lo mencionado por el dios gemelo, Shiryu solo pudo suspirar.
- quería saber que pasa realmente con Seiya, desde que la maldición fue quitada, el no es el mismo.
- tu también lo has notado. La voz de Hypnos cambio a una mas seria.
- lo hice, estoy seguro que ese cambio tiene que ver con Hades.
- ¿como estas tan seguro de eso?.
- yo...
- Hypnos sonrió al ver el nervosismo en el joven caballero.
- lo dices por que estuviste vigilando a Seiya durante ese tiempo en el que todos creían que fuiste a azgard, ¿no es así?.
- lo hice.
- entonces eres consiente de que en este momento Seiya y Hyoga no se encuentran en la montaña de cinco picos.
- fui a verificarlo y ellos no están allí, cuando Seiya y Hyoga salieron del santuario sus cosmos se desvanecieron unos segundo después, pude sentirlo.
- ellos ahora mismo se encuentran en el inframundo.
Al oírlo la mirada de Shiryu cambio mostrando desconfianza ante el hombre junto a el.
- crees que le tendimos una trampa a Seiya, Hipnos solo pudo reír.
- si no es así por que ellos...
- decidieron ir voluntariamente, tu mismo lo dijiste Seiya no es el mismo. Shiryu suspiro derrotado, realmente no podía comprender lo que sucedía.
- puedo sentir que las cosas en el santuario a empezado a cambiar y esos cambiaos terminaran por afectar todo.
Hipnos detallo al joven, su mirada brillo con cierta sorpresa.
- ven conmigo, Hipnos tomo la mano de Shiryu halándolo hacia el
- ¿a donde piensas..., un portal se abrió por donde ambos desaparecieron.
- las cosas están comenzando a dirigirse como lo dijo la señora Hécate.
- ¿te sorprende eso Minos?.
- no, solo que todo volverá a ser como debio ser antes que ella se entrometiera.
- al final es su propia decisión lo que la llevara a perderlos, ¿no lo crees?.
- así es, Hypnos debió de...
- creí que como espectro no seria de su agrado ir a recorrer el santuario, ¿o es que sus planes son otros?.
- lo que hagamos no es asunto tuyo.
- lo es, como guardián de la casa de piscis es mi deber vigilar a quienes recibo como huéspedes.
- Afrodita de Picis. Minos habló con cierta molestia.
- es mejor no causar problemas, Radamanthys susurro mirando a Minos quien solo asintió, pasando junto a Afrodita.
- no causes problemas Afrodita.
- no lo hago, solo les advierto, después de todo están en el santuario de Atena.
- Hades regreso al inframundo así que estos días las cosas estarán mas calmadas.
- crees eso Milo, con Hypnos y esos dos jueces rondando por el santuario no podemos estar tranquilos.
Milo observo a lo lejos a ambos Jueces alejarse, sabia que Afrodita tenia razón debían estar atentos a los movimientos de Hades.
- aun así es mejor no molestarlos.
- ¿vas a salir del Santuario?.
- iré con Camus a Asgard.
- ¿Asgard, por que?
- Atena desea saber si todo esta bien, Poseidón acaba de despertar y debemos saber si causara problemas nuevamente.
- Tengo entendido que Shiryu fue a Azgar si hubiese problemas el nos informaría.
- lo haría, pero Atena desea que nosotros nos encarguemos, después de todo siempre le hemos dado esa responsabilidad a los jóvenes.
- bien, que les baya bien en su viaje a ambos, Afrodita sonrió Ingresando a su templo.
- Milo.
- es mejor marcharnos ya.
- el ambiente en el Santuario a empezado a cambiar.
- tu también lo has notado Camus.
El caballero de Acuario asintió.
-Vamos, Camus no dijo mas nada y abandonaron el lugar.
- Minos, tranquilízate.
- por que lo dices, estoy tranquiló.
- no es verdad, Radamamthys sujeto el brazo de Minos asiéndole detener.
- que quieres Radamanthys.
- puedes olvidar.
- ¿Olvidar que?, ¿no se de que hablas?.
- Albafica de piscis. Ante la mención del nombre Minos solo apretó sus manos librándose del agarre de Radamamthys.
- por que debería.
- solo te estas lastimando.
- tu no entiendes.
- por supuesto que lo hago en la ultima guerra fue la decisión de Albafica enfrentarte, tu no podías hacer nada, era tu deber acabar con los caballeros de Atena.
- aun así yo no debí...
- tus recuerdos no estaban completos en ese entonces, deja de culparte Minos.
- que mas puedo hacer, me pides olvidar pero es imposible. Minos apretó sus manos con fuerza sin importarle que con ello se lastimara.
- debido al egoísmo de otros, nuestras vidas tuvieron que cambiar y enfrentarnos a las personas que deseábamos proteger. Radamamthys hablo con pesar viendo a su amigo.
- deseo estar solo por un momento Radamanthys y no te preocupes soy consiente que no debo causar problemas.
Radamamthys asintió marchándose dejando solo a Minos, al verse solo, el semblante del espectro cambio dejando ver una inmensa tristeza y pesar en sus ojos, sus manos aun apretadas al recordar a aquella persona.