C O H I B I D A

Od FabiolaGp

663K 125K 9.7K

"Demostrar que éramos más inteligentes fue el principio del fin. Ahora solamente podíamos aspirar a ser merca... Více

|S I N O P S I S|
- 1 -
- 2 -
- 3 -
- 4 -
- 5 -
- 6 -
- 7 -
- 8 -
- 9 -
- 10 -
-11-
-12-
-13-
-14-
-15-
-16-
-17-
- 18 -
- 19 -
-20-
-21-
-23-
-24-
-25-
-26-
-27-
-28-
-29-
30
31
32
33
34
35
36
37
38
39
40
41
42
43
44
45
46
47
48
49
50
51
52
53
54
55
56

-22-

11.2K 2.2K 192
Od FabiolaGp


Buenas flores hermosas! Que disfrutéis del capítulo!!!!

Que Margaret estuviera en casa me daba cierto espacio para revisar cada recóndito lugar de aquel apartamento. Tenía que encontrar un mapa, era cierto que se habían quedado obsoletos, pero era lo único que me podría llevar sin ser localizada. Mi intento de búsqueda no daba resultado, así que termine encendiendo el ordenador del despacho de Declan, no había tocado uno en mi vida, pero dudaba que fuera complicado, aunque al final tuve que pedirle a Margaret que me ayudara, tal vez tendría que pensar en qué decirle para evitar que divulgara esa información si preguntaban.

¿Cómo iba a justificar que quería hacer una búsqueda en el ordenador personal de Declan sin permiso?

Eso no suponía ahora un problema, sino más bien averiguar a cuanta distancia estaba del bosque que me daría la libertad.

Sabía localizar el camino de regreso en un plano, precisamente por eso era consciente de que se habían marchado del refugio ya que me habían instruido para interpretarlos, así que cuando Margaret pulsó las teclas adecuadas y apareció un mapa sobre mi, no fue muy difícil saber a cuanta distancia estaba.

No estaba lejos, solo serían un par de horas andando si no lograba un vehículo en el que huir. Dibujé un esbozo de lo que necesitaba para orientarme, aunque memoricé la ruta según la orientación y de noche sería bastante fácil seguir las estrellas.

«Estrella dorada» recordé la frase que repetían los conocidos como Antagónicos.

No conocía ninguna estrella dorada. Era casi seguro que en el refugio no encontraría pistas del paradero hacia donde se habían dirigido el grupo en el que se encontraba mi hermana. Con suerte, una de las rastreadoras merodearía el lugar días después para ver si Java o yo habríamos vuelto de una pieza, pero habían pasado tantos días de aquello que sería improbable que a estas alturas lo hicieran, sería mejor no correr riesgos.

¿A que se referirían con estrella dorada?

Tecleé una a una las letras que componían la palabra estrella dorada y le di a buscar. Solo aparecían imágenes de estrellas en forma de dibujos, piezas o símbolos de decoración. Aparecían albergues, restaurantes... ¿Podría tratarse de un lugar? Lo dudaba, tenía que ser mucho más complejo que aquello o ya les habrían descubierto.

—Sigue la estrella dorada... —susurré y me incorporé mirando el mapa que había dibujado con la orientación norte y sur dibujados según estaba.

Ninguna estrella en el cielo era dorada, ninguna brillaba más que los propios planetas, ninguna era...

No podía ser, ¿De verdad podrían referirse al sol como estrella dorada?

Era una estrella desde luego, y era dorado, pero el sol nacía por el este y se ponía hacia el oeste, ¿Eso quería decir que tendría que ir hacia el oeste si quería encontrarles? Tenía el mapa abierto y divisé que había hacia el oeste, todo se desvanecía hasta la nada, parecía un completo desierto de tierra árida sin cultivar.

¿Podrían estar allí ocultos en alguna parte?, ¿Sería descabellado pensar que estuvieran en aquel lugar?

Si mi teoría era desacertada, podría morir de sed o hambre en aquel desierto gigantesco, pero tenía una corazonada, precisamente nadie se adentraría en aquel si no estuviera desesperado.

¿Qué debía hacer? Ir hacia el sureste donde se encontraba el refugio sin la esperanza de encontrar a Amara en él?, ¿O tal vez debería ir al Oeste con la esperanza de encontrar a los antagónicos y unirme a ellos, pero tal vez morir en el intento?

Solo con ellos tal vez pudiera lograr encontrar a mi hermana, solo con ellos el mundo tendría algo más de esperanza.

Aunque me pesara en mi conciencia, sabía lo que debía hacer. Rompí el mapa en pedazos pequeños y lo tiré a la papelera, ya no me serviría de nada, huiría hacia el oeste y aunque exudara la última gota de aliento, tenía que encontrarles. Ellos me llevarían a Amara, con ellos mi hermana estaría a salvo para siempre.

En aquella cocina no había muchos cuchillos, intuí que principalmente sería por la pequeña Lisa, tal vez pudiera hacerse daño, así que rebusqué por los cajones del escritorio de Declan y encontré algo afilado que serviría perfectamente para mi cometido, era un antiguo abrecartas, bastaba con afilarlo un poco más y sería un arma fácil de esconder y manipular.

Escondí en una bolsa varios objetos que me serían de utilidad. Una botella de agua, el abrecartas, una cuerda que encontré en una bolsa con varios objetos deportivos, ropa de abrigo para la noche y comida envasada.

El resto del día hasta que llegó Declan estuve con Lisa y Margaret, a pesar de su indiferencia, ella parecía feliz de estar junto a la pequeña, como si realmente disfrutara de su compañía. Recordé que ella había mencionado algo sobre se la madre de los hijos de su dueño, el amigo de Declan, que para ella sería un honor y pensé si en el fondo realmente los desearía viendo como parecía estar bien junto a la niña.

¿Podría alguien sometido al azambar tener muy en el fondo ligeros sentimientos?, ¿Quedarían realmente anulados por la droga? No podía saberlo, ni tampoco intuirlo, ella exteriormente no mostraba ninguna apariencia, tal vez el hecho de que se sintiera bien junto a Lisa solo eran imaginaciones mías.

—Margaret, ¿Podrías venir mañana a cuidar de Lisa? —pregunté sabiendo que sería incapaz de dejar a la pequeña sola si lograba terminar mi plan de huida.

Aún quedaba el tema del vehículo, pero tal vez nunca consiguiera robar uno y el tiempo jugaba en mi contra.

—Puedo preguntarlo a mi señor y al señor Declan si le parece bien —respondió muy servicial.

—No —negué—. No puedes preguntárselo, yo te ordeno que vengas mañana y no lo menciones a tu señor ni al señor Declan, será un secreto entre nosotras, ¿Vale? A Lisa le gusta estar contigo —aseguré odiando tener que dar ordenes a una de las mías, pero tratando de suavizarlo finalmente.

¡Maldita fuera esa porquería que Declan seguía fabricando!, ¿Es que no tenía moral? Margaret era como una muñeca de trapo y solo era un ejemplo del resto de mujeres que existían allí fuera mientras le practicaban atrocidades y abusaban de ellas sin poder defenderse.

Me asqueaba la sola idea de no poder hacer nada para evitarlo. Era espeluznante y horripilante al mismo tiempo.

Margaret asintió y alcé la vista para ver a Lisa entretenida mientras dibujaba, no parecía prestar atención a nuestra conversación y lo agradecí infinitamente, lo que menos me apetecía en esos momentos era preocuparme de que pudiera ir con la información a Declan y tener que dar explicaciones al respecto.

Tal como había prometido, llegó temprano y bastante sonriente. No sabía si se debía por su regreso a casa o porque le había ido bien en el trabajo. Junto a él estaba su amigo, el dueño de Margaret que la abrazó y la besó como si la hubiera echado ínfimamente de menos. ¿Realmente la querría?, ¿Estaría enamorado de ella?, ¿No le importaría que tal vez ella no lo quisiera?, ¿Podría una mujer sometida al azambar amar realmente?

Había tantas cosas que desconocía respecto a la droga que no sabía por donde comenzar, ¿Encontrarían algún día la cura como habían dicho los antagónicos? Si era así, tendría que estar junto a ellos para ayudar en todo lo que pudiera al respecto.

¿Podrían existir mas mujeres como yo fingiendo estar bajo los efectos del azambar sin sentirlos?

Ver de nuevo su mirada hacía que sintiera mariposas en el estómago, un revoltijo de sensaciones contradictorias y entonces supe que con toda probabilidad aquella sería mi última noche en aquella casa, que sería la última vez que le viera para el resto de mi vida.

—¿Te encuentras bien? —preguntó después de saludar a Lisa.

—Si —afirmé tratando de no hacer ningún gesto o expresión en mi rostro, simplemente guardando seriedad absoluta relajando los músculos de la cara.

—¿Finalmente vas a quedártela? —preguntó el amigo de Declan dirigiendo la vista hacia mi y me recordó a la última conversación que habían tenido similar respecto a mi persona.

—Aún no lo sé, en realidad he encontrado una buena familia que estaría dispuesta a tenerla, sé que estaría bien y quizá esa sea la mejor opción para todos —mencionó Declan y traté por todos los medios no hacer ninguna expresión de asombro.

¿Pensaba deshacerse de mi?, ¿Enviarme con otras personas?, ¿Cuándo pensaba decírmelo?

—Yo no puedo decirte lo que debes hacer, sabes que puedes contar con Margaret para lo que necesites, pero pronto tendremos familia y su tiempo estará limitado. Deberías replantearte seriamente quedártela, la pequeña parece haberse adaptado bien a ella y no me puedes negar que ella te agrada —acto seguido el amigo de Declan me inspeccionó recorriendo la silueta de mi cuerpo provocando que me sintiera realmente observada—, valdría una fortuna en el mercado negro.

—Mi empresa pagó una fortuna por ella —agregó sin mucho entusiasmo—. El dinero no es lo que me importa, sabes que para mi eso es lo de menos.

—Si, si, ya se tus razones, pero no son apropiadas en esta situación. Date un respiro Declan, diviértete con ella, disfrútala e intenta ser feliz después de seis años, la vida continua por más que te aferres al pasado. —Las palabras de aquel hombre me hicieron pensar si se estaba refiriendo a la madre de Lisa.

¿Tendría Declan miedo de que volviera a suceder lo mismo conmigo?, ¿Tal vez podría temer que pudiera estar en peligro?, ¿Y de qué quería protegerme si él precisamente era el causante de que ninguna mujer pudiera defenderse?

—Aún tengo unos días para pensarlo y decidir una respuesta, ya te informaré sobre ello —zanjó el asunto como si no quisiera hablar más del tema.

Me parecía perfecto, que decidiera lo que le diera la gana, quedarse conmigo o regalarme, yo estaría muy lejos de allí cuando aquello sucediese.

«No puedo permitirme enamorarme de ti» sus palabras vinieron repentinamente a mi mente.

¿Podría ser esa la razón de que no quisiera tenerme cerca?, ¿Podría tal vez alguien que se dedicase a lo que él hacía amar sinceramente a la persona que le causaba tanto daño?

Sus ojos grises me observaron y me estremecí de nuevo. Ni siquiera sabiendo todo lo que sabía de él era capaz de resistir aquella mirada.

«Definitivamente estaba perdida por aquel fuego que ardía en mi pecho»

__________________________________________
Hagan sus apuestas.... ¿Quien cree que Andra realmente se fugará?, ¿Creéis que sucederá algo y se quedará?, ¿Que Declan la pillará?, ¿Que de algún modo la encontrará? Se admite toda teoría conspiranoica al respecto!

Pokračovat ve čtení

Mohlo by se ti líbit

6.7K 661 17
[Segunda parte del libro "Príncipe Oscuro"] [Y sí, es necesario haberte leído el primero.] Tras un desenlace tortuoso y eventos desafortunados hay co...
316K 7.5K 8
«A la edad de ocho años, una adivina predijo que la vida de Christina Whittermore sería complicada.» Dueña de un encanto irresistible y una candidez...
215K 5K 8
Hay diferentes maneras de perder la inocencia, pero a Georgina no han podido arrebatársela a pesar de los duros golpes que ha sufrido. Intenta cerra...
Inocente Od SukiiHerondale

Mystery / Thriller

2.5K 112 22
Nina, una periodista intrépida, se adentra en el misterioso caso de Marco Renaldi, el principal sospechoso en el asesinato de Samantha Hidalgo. Lo qu...