De pronto el pasado pareció atormentar mi presente, el sin fin de dudas costantemente luchaban en mi mente, no lograba entender lo que realmente quería.
Esperé a que me den la autorización de subir al departamento de mi ex novia, de esta conversación dependían muchas cosas.
- Me parece raro que estés aquí. ¿Quién te dió mi número?
- Eso no es relevante, quiero hablar seriamente contigo - dije sin rodeos.
- Pasa.
Me adentré sin prestar atención al interior del lugar, solo quería acabar con todo esto.
- Quiero que me dejes tranquilo, ya me regresaste todo, vete.
- Ni siquiera voy a preguntar el por qué, es evidente que es por tu nueva pareja.
- No sé cual es tu afán de insistir, hubiera preferido no verte nunca más.
Se sentó en lo que su mirada estaba ida, quería ser lo menos grosero posible, mi idea era acabar con esto de buena forma.
- Sabía que esto iba a pasar, aún así tomé el riesgo. No creas que me gusta que me trates así - comentó.
- ¡Entonces vete! Deja de humillarte.
- No has cerrado el ciclo Christopher, cualquiera lo notaría. Te pones nervioso cuando me ves, mírate.
- Eso no es cierto.
- Es evidente que esa persona no ha logrado sacarme de tus pensamientos, admito que fui una idiota pero no voy a renunciar tan fácil a ti, no una segunda vez - negó.
- Y a mi qué me asegura que no harás lo mismo de nuevo. ¿Eh?
- Si no me dejas que te lo demuestre creo que nunca te vas a sentir seguro.
- ¿Seguro? Desde tu maldito engaño soy un inseguro de mierda - reclamé tomando su brazo.
- Y por eso es justo que sea yo quien repare ese daño. ¿Crees que le haces un bien a esa persona fingiendo que me olvidaste? Se hombre de una maldita vez - empujó.
Retrocedí negando aquello, yo quería a Erick, sin embargo, aún habían recuerdos muy vivos de mi pasado.
- Solo vete. ¿Quieres dinero? Te lo doy - propuse.
- Prefiero no tener nada, solo te quiero a ti, Christopher solo una oportunidad más - pidió tomando mis manos.
- Me vas a fallar, lo sé.
- Te quiero, no sabes lo difícil que han sido estos años esperando esta oportunidad, no te mientas, vas a dañar a esa persona.
Solté sus manos caminando hacia la salida, no iba a cometer nuevamente un error en estos momentos.
Christopher 20:21 pm.
Erick, necesito hablar
contigo. ¿Puedo ir a tu
departamento? 😔
Erick 20:29 pm.
Si es urgente claro que
puedes venir.
Puse en marcha el auto intentando mantener la calma, si bien hace poco había estado con él, no quería dejar pasar más tiempo.
- Christopher. ¿Qué necesitas?
- ¿Estás trabajando?
- Sí, pero si viniste es por algo - dijo cerrando la puerta.
- Vengo de hablar con Magdalena, hice lo que me pediste.
- ¿De verdad? - preguntó dejando ver una sonrisa.
- Sí.
- ¿Pero qué pasó? ¿Chris, qué te pasa?
- No puedo engañarte, no estoy seguro de nada en estos momentos - negué con pena.
- Sé claro, dime que le pediste que se aleje. ¡Habla de una vez! - exigió.
- ¡Lo hice! Pero tengo muchas dudas, no quiero cometer un error nuevamente, esto es complicado para mi.
- ¿Y piensas que para mi no?
- Claro que sí, por ese motivo no quiero atarte a mi. Erick, no he podido cerrar ese ciclo, no he podido. Creo que es mejor terminar.
Me miró con tal decepción que sentí como todo dentro de mi se quebraba, era una persona demasiado buena como para causarle daño.
- Bien, si es tu decisión - aceptó.
- Quiero que tengas en claro que sí te quiero, solo necesito tiempo para pensar y no dañar a nadie - pedí.
- Agradezco tu sinceridad, solo espero...que cuando te decidas no sea tarde - dijo abriendo la puerta.
- Lo lamento.
- Necesito trabajar, quiero que te vayas.