Capitulo 25
Flores
Mihawk sintió sus mejillas calentarse mientras sentía una suave brisa acariciar su rostro. Goldie se encontraba sentada en la hierva rodeada de hermosas flores de agradable aroma mientras que en su mano se encontraba una rosa roja.
Goldie tenía sus ojos cerrados con una expresión feliz mientras olisqueaba la flor roja en su mano, el sol acariciaba suavemente sus hebras rubias haciéndolas brillar como el oro mientras que los rayos de luz bañaban suavemente su cuero, brindándole un aspecto etéreo, como si fuese un ángel caído del cielo.
Su ropa brillaba levemente por el contacto del sol, dejando que su camisa blanca pareciera tan suave como nubes en el cielo, su falda tableada rosada pálida como un algodón de azúcar, los botones dorados de su traje brillaran como pequeños soles, la cinta negra en su vestido creaba un fuerte contraste dándole un toque de pureza mientras que en su cuello se encontraba un collar canino con un corazón.
Mihawk miró como la chica movió su nariz a su dirección y abrió sus ojos brillantes y levemente aguados como medialunas, mirándolo expectante y rebosante de felicidad, sintió su corazón dar un latido.
—¡Amor! ¡Ven amor! —rio la chica y el azabache se acercó a pasos lentos— ¡Mira! ¡Huele esta flor! ¡Huele bien! —exclamó felizmente y se levantó mientras estiraba la flor hacia él aún con las mejillas levemente sonrojadas.
—Es cierto —concordó el hombre y se dejó arrastrar por la chica que miraba animada todo el parque en el que se encontraban.
Ellos habían salido de su hogar para explorar nuevamente y en su viaje terminaron en una isla de primavera, la cual tenía un hermoso parque cuidadosamente mantenido en donde había un montón de gente paseando a sus mascotas, con amigos, familiares o incluso parejas.
Goldie miró fijamente como dos personas estaban sentadas tranquilamente apoyadas en un árbol mientras miraban las nubes y se relajaban, ¡Quería hacerlo con su amor! ¡Ello lo iba a hacer! ¡El hombre humano se veía muy cómodo y la mujer humana se veía muy feliz jugando con el cabello del hombre!
Imperativamente la rubia arrastró al azabache hacia una colina algo alejada del resto y fue directo al viejo y frondoso árbol de hojas claras, entonces se sentó en el césped apoyando su espalda contra el duro tronco de madera y le hizo señas al hombre para que se sentada a su lado. Mihawk miró a la chica la cual parecía estar tramando algo y arqueó su ceja para luego finalmente acceder a la petición de la rubia, ¿Qué la podía hacer de todas formas? ¿Acostarse encima de él? ¿Botarlo en el suelo? ¿Robarle el sombrero y colocarle una flor en el cabello? Realmente Goldie no era una amenaza en absoluto, ¿Quizás besarle el rostro en público? Bien, eso sería algo abochornante, pero estaban lejos de todos así que no había muchas consecuencias.
Mihawk parpadeó sorprendido mientras sentía sus mejillas chocar contra una superficie suave, esponjosa y firme, entonces confundido miró hacia arriba encontrándose con el rostro de Goldie completamente feliz mientras le quitaba el sombrero y empezaba a jugar con su cabello de manera relajante.
El hombre colocó su sombrero cubriendo su rostro avergonzado por la situación mientras su espada descansaba a su lado, Goldie aprovechó una vez que se sentó en el pasto para llevar su cabeza a sus muslos para que los utilizara como almohadas y jugar con su cabello.
Goldie dejó escapar un leve aullido de felicidad mientras miraba a su humano avergonzado con felicidad, ¡Realmente se sentía muy bien! Esperaba que su humano también estuviese contento con la situación, a Goldie de agradó la situación de la cabeza del hombre en sus muslos porque sentía que se acercaba más a su humano, aparte de que él siempre la dejaba apoyarse en su pecho y a ella le agradaba eso, ¿Entonces a él le gustaría apoyarse en sus muslos?
¿Pero qué pasa si a él no le gusta? Sus muslos eran más grandes que las otras mujeres humanas que miró a su alrededor y estaban más rellenitos, ¿Quizás a los humanos no les gustaba tanta carne? ¿Les gustaban más los huesoso? Bueno, no podía negarlo, los huesos eran sabrosos.
Mihawk apartó el sombrero de sus ojos y miró a la chica dudar, ella era como un libro abierto en cuanto a sus expresiones así que podía leerla perfectamente. Él cerró sus ojos mientras sus mejillas seguían rojas y acomodó su cabeza en los suaves muslos de la chica mientras relajaba su cuerpo, ¡Entonces Goldie sonrió brillantemente al ver que su humano estaba cómodo! Como para reforzar ese hecho, su humano apretó suavemente sus muslos con sus grandes manos antes de volver a ponerse su sombrero cubriendo su rostro.
¡Goldie estaba muy feliz! Notó que su humano estaba completamente relajado y cómodo, ¡Entonces podrían seguir haciendo esto! Si su humano era feliz con solo apoyar su cabeza en sus muslos ella se sentiría extasiada, ¡Entonces podría ser su almohada!
El hombre sonrió levemente mientras sentía la brisa contra su cuerpo, las suaves caricias en sus cabellos, los leves aullidos y gruñidos de felicidad de la chica junto con la suave fragancia de las flores que yacían esparcidas por el césped, Mihawk era realmente feliz con estas pequeñas cosas, la tranquilidad ininterrumpida con su preciosa Goldie.
Solo un poco más... no te alejes de mi jamás.
Ese fue el pensamiento de Mihawk mientras se acurrucaba levemente contra los muslos de la mujer y se quedaba dormido.
Goldie parpadeo al sentir como su humano se durmió y sonrió antes de sacar el sombrero del hombre y besar los labios del azabache justo como hizo una humana a su humano.
No lo entendía, su mano viajo a su pecho mientras sentía sus mejillas acaloradas y su corazón latía como si hubiese corrido por toda la isla, era una sensación escalofriante, desconcertante, embriagante y mareante, pero era placentera.
Los labios de su humano se sentían bien contra los suyos, no entendía porque sucedía eso, pero se sentía feliz y animada, como si ya nunca más se pudiera alejar de su amor con ojos como el sol.
Dios, la foto de Goldie es preciosa, ¿Existe alguien más tierna y hermosa que ella? ¡Miren su carita! ¡Emocionada solo por una flor! Aawww