Un capítulo después de mucho tiempo jeje
Aquí está uno de los más largos que he escrito así que... acomódense, traigan algo de comer y beber y disfruten
Psdt: es quizá el último cap con una canción así que ya saben...
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Camino al hospital lloré sin darme cuenta, solo dejaba caer las gruesas lágrimas, sentía como si quemaran, pero de algún modo creía que no era comparado con el dolor de mi pecho. Sasori, Sasori, Sasori ¿Dónde estará en este momento? ¿Cómo se encuentra? He de suponer que está en alguna celda esperando a que su abogado lo saque de este enrollo, pero en el fondo sabe que está hundido. Sasuke-kun, Sasuke-kun, Sasuke-kun ¿Estarás pensando en ella o en mí? ¿En serio lo olvidaste? Era nuestro sexto aniversario pero veo que no le interesó.
Tenía un día productivo, pensaba en hablar con Tsunade para que me dejaran salir antes y poder ordenar la última cena con mi "amado esposo", había estado planeando que cocinar, y aún no lo sabía, mi mente solo pensaba en si Sasori había hecho todas las cosas que decían en noticias, le señalaban de ser el encargado de pasarle información práctica a Orochimaru por medio de Kabuto, sumado a que se le está condenando por haber sobornado a múltiples personas importantes, manejando las a su antojo cuan marioneta. De tan solo imaginarlo de ese modo me daba escalofríos, pero de algún modo la mirada sádica que tenía cuando vio las fotos que estaban en la sala debió darme una señal de que el Sasori que me enamoró a punta de flores y cumplidos ya no estaba.
Por otro lado ese día imprimiría los papeles para tenerlos en físico y en virtual; si las cosas salían según lo planeado, Sasuke llegaría aproximadamente a las 8:30, serviría la comida y decoraría toda la sala y el comedor con globos azules oscuro y rojos, también pondría un enorme letrero, en caso de que seguirá sin recordar la fecha. Cenaremos con tranquilidad y amor, si olvidó que día es, actuaré comprensiva, seré dulce y amable diciendo que cualquiera comete un error; luego de comer me encargaría de darle el majestuoso regalo de la manera más elegante posible. Sin importar cómo reaccione me iré a mi verdadera casa, sola...
Cuando llegué Ino me esperaba con un café enorme en mi oficina.
-Así que si era un criminal eh- dije entrando desanimada.
-Sakura- Uno corrió hacia mí dándome un fuerte abrazo- lo siento en verdad lo siento eso fue...
-Inoportuno- continúe.
-En verdad lo siento muchísimo no puedo imaginar lo que estás sintiendo.
-Dejemos en que estoy un poco jodida y deprimida- me miró con una ceja alzada y sin soltar mis hombros- un poco bastante, si- traté de sonar burlesca, pero solo conseguí fracturar mi fachada- ¿Qué es lo que estoy haciendo con mi vida?- solté un sollozo- N... no sé qué hago Ino- sin poder reprimirme lloré- ¿Qué hice mal? ¡¿Por qué me pasa esto?!
-Shh- volvió a abrazarme mientras yo me aferraba a ella con fuerza- no has hecho nada... solo... -suspiró acariciando mi cabello- te enamoraste de la persona equivocada Sakura- abrí los ojos como platos- y no es tu culpa- tenia razón, había puesto la mirada y confianza en alguien que nunca estuvo dispuesto a hacer lo mismo por mí; yo era capaz de caminar todo un continente por él, sabiendo que no andaría ni media carretera por mí- y ahora te digo que estás haciendo lo correcto, eres todo lo que tienes que ser frente a esto- la vida puede ser una verdadera hija de puta cuando se lo propone.
-Ino... -susurré apenas nos separamos- esto no le hará el mínimo daño a Sasuke. Nunca entenderá el dolor que siento justo ahora- puse una mano en forma de puño sobre mi pecho- mientras yo derrumbó la vida que he tenido hasta ahora, él solo... al final del día solo se habrá quitado una molestia de encima- lo último lo dije con demasiada amargura.
-Eso no es cierto. Sabes, hay una magnífica ideología que siempre me repito cuando pienso que los que hacen mal las cosas no tienen su merecido- sonrió con superioridad- el jodido karma nos llega a todos, y el karma es una perra- reí por lo estúpido pero realista que sonó- piénsalo, ya sea instantáneo o en 2 años, siempre llega y hace sufrir de las maneras más inesperadas.
-Eso espero- no quería sonar vengativa pero... a quien engaño, quería que entendiera que me lastimó como nunca lo habían hecho, como dijo Shikamaru, me torturó a más no poder y siempre llevaré esa cicatriz; todo eso quería restregarlo en su perfecto rostro, pero sin mostrarme débil.
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Siendo sincera pasé todo el día perfeccionando detalles para esa noche, prepararía onigiris rellenos, tal y como a él le gustan, es más, aún recuerdo la primera vez que los hice para él, los amó, solo que lo expresó con un "Hmp están bien". En el fondo sabía que extrañaría esa actitud cortante, después de todo me hizo más fuerte en la relación. Antes de que pudiéramos salir a almorzar con Ino a la 1pm, Tsunade-sama nos detuvo y se unió a nosotras dejándonos en shock.
-Entonces... -Habló finalmente Ino- ¿Usted quería... decirnos algo...?- habíamos empezado a comer en la cafetería en completo silencio.
-De hecho sí, quiero hablar con Sakura- nuestra jefa dio un gran bocado a sus vegetales- ¿Quieres decirme qué carajos te pasa?-su tono rudo hizo que me hundiera en mi asiento.
-¿Por... por qué pr...?
-Sabes de qué hablo- su paciencia se había agotado con tan solo eso.
-Hoy le pediré el divorcio al amor de mi vida y mi mundo dará un cambio radical- dije luego de unos segundos de preparación- además de que luego de salir de aquí llevaré mis maletas a mi nueva casa para ser otra vez... Haruno Sakura- ambas rubias quedaron en completo silencio- ¡Ah y no olvidemos la cereza del pastel!- mi falsa emoción era cómica, Ino trato de retener una sonrisa burlona- mi ex novio y primer amor... está preso por ayudar a Orochimaru, sobornar y según escuche en la radio... asesinar- sonreí ampliamente- Sí, y aún no se ha hecho el mantenimiento de los equipos de laboratorio -cambie radicalmente de tema- las centrifugadoras están desestabilizadas y se dañaron los objetivos de 100x de la mayoría de los microscopios- tomé aire- el nuevo personal del doctor Kimimaro parece que nunca aprendió cómo equilibrar una centrifugadora o para qué es el papel de arroz- Tsunade soltó una leve sonrisa que tapó con sus manos.
-Eso explica mucho- asentí comiendo- así que el divorcio será hoy- hizo una pausa para pensar- ¿A qué se debe la elección del día?- encendió la pantalla de su teléfono que reposaba sobre la mesa- 15... ¿Por qué hoy?
-Es su aniversario- respondió Ino, ya que por lo parte estaba tratando de recuperarme de lo anteriormente dicho, tenía un nudo en la garganta.
-Oh- exclamó sin mucho ánimo- en ese caso... vete- tanto Ino como yo le miramos confundidas- no regresaras a trabajar más.
-E... espere... no- quedé en completa sorpresa, trate de formar una frase lógica, pero me fue imposible, lo último que necesitaba era perder mi trabajo.
-Tsunade-sama Sakura cometió el error pero...
-Cálmense- dijo con el ceño fruncido- hablo solo de hoy dramáticas- ambas soltamos una bocanada de aire con alivio tranquilizándonos de nuevo- Kimimaro tiene ojos y oídos en tus áreas, está buscando el momento en el que tropieces para poder sacarte de aquí.
-¿Por qué tanto odio hacia mí?- pregunta válida.
-Porque un familiar suyo quería tu puesto en urgencias- Oh- por eso quiere sacarte de allí lo más pronto posible- mi amiga y yo asentimos comprendiendo- además detesta la idea de que una mujer tan joven como tú consiga abrir una institución mientras que él está criticando como actúan todos ustedes- sonreí ante esas palabras.
"... Orgulloso"
Sasuke estaba orgulloso de esa imagen de doctora emprendedora, pero para mala suerte de ambos lo dijo muy tarde.
-Gracias Tsunade-sama- me limpie los labios con la servilleta de papel- creo que tengo que hacer un par de compras... espere, el doctor Kimimaro aprovechará el hecho de que me voy temprano hoy... sin excusa- mi voz fue bajando poco a poco, desanimada.
-Diré que me pediste permiso desde el fin de semana para llevar a tu perro al veterinario.
-¿Perro?- pregunto Ino casi atorada con su comida, me vio directamente a los ojos esperando una respuesta que yo tampoco tenía.
-Tsunade-sama yo no tengo perro- negué rápidamente para tranquilizar a Ino.
-Pero Kimimaro no sabe eso y es una buena excusa, un alto porcentaje de parejas prefieren un perro o gato en vez de un hijo- en eso coincidía, pero a Sasuke no le gustaban mucho las mascotas luego de que un perro de su adolescencia muriera, se cerró a la idea de encariñarse con un animal teniendo en cuenta que viven menos, existía la probabilidad de perderlo muy rápido, alguna vez dijo que no sería apropiado tener un perro debido a que no estaríamos ni un 70% del tiempo con él y lo más seguro es que fuera distante por la falta de contacto humano. Tenía razón pero a la vez era algo dramático, sabía que no quería sufrir la pérdida de una mascota luego de lo que lloró por su perro- Así que llevarás a tu perro al veterinario.
-Entendido- después de todo... ¿Qué tan mala idea era un perro o un gato? A este punto aceptaba tener una araña como compañía.
-Entonces... ¿Qué harás primero? Son las 2 pm- dijo Ino estirando sus brazos sobre su cabeza.
-Creo que... quiero saber qué pasa con Sasori- suspiré desanimada, no podía sacarme ese tema de la cabeza.
-¿Por qué?- pregunto Tsunade.
-Es estúpido pero... él era la probabilidad de estar mentalmente estable después de todo, quizá me ayudaría a olvidar el hecho de que corte todo lazo con quien amo.
-Sí, es estúpido- su franqueza me desanimó aún más, Ino trato de disimular una tos tapándose la boca con una servilleta, tampoco esperaba una respuesta tan... directa- Sakura preguntaré dos cosas, una de ellas tiene que ver con el tema pero es mera curiosidad mía; la segunda es sobre este tema.
-Bien- respondí con algo de recelo.
-¿Qué relación tienes con Uchiha Madara?
-¡Disculpe!- casi grité atrayendo la atención de un par de personas, rápidamente me reincorpore- no entiendo a qué se refiere- trate de sonar calmada después de casi haber tirado mi comida a metros de la mesa.
-Pregunto porque el día que vino aquí, antes de ir a hablar con mi papá, me preguntó todo sobre ti- sentí como el calor se acumulaba en mis mejillas, de seguro estaba igual de roja que una jodida cereza.
-¿A si?- dijo Ino con cierta gracia en su voz, apoyo si cabeza en una mano para poder verme con facilidad.
-Pregunto todo sobre ti, desde tu personalidad como profesional...- hizo una pausa para acomodar sus codos sobre la mesa- hasta saber cómo eras como persona... en un sentido privado- ahora sí, estaba casi sin aire, deje de respirar por la sorpresa y lo que parecía ser... ¿Emoción?
-Ya veo... ¿Usted que dijo?- pregunté un poco preocupada, su sinceridad a veces podía ser cruel.
-Jm- hizo una pequeña sonrisa al ver mi entusiasmo- solo dije que eras mi mejor estudiante, en algún punto podrías superarme- sonreí con ternura- aclare que eres alguien profesional y seria; también dije que como persona eres noble e inocente, en ocasiones puedes parecer dulce y delicada, pero luego te transformas en una mujer fuerte y brusca- nada que sea mentira.
-Que emotivas palabras- Ino intervino- ¿Ves? Eres básicamente la mujer soñada y uno de los hombres más ricos, poderosos y simpáticos que he visto pregunta por ti... ¿Qué diablos te tomas en las mañanas eh?- ambas reímos.
-Sin embargo...- cortó- Sakura no es una buena idea que te involucres sentimentalmente con el tío de Sasuke- Demonios, eso sí era verdad- dudo que se vea bien, además- revolvió su bebida- él es mayor que tú y dicen que Sasuke es su vivo reflejo, no es muy útil alejarte de un Uchiha para acercarte a otro que puede ser peor- las palabras de Tsunade hicieron que una clase de chip se activara en mi cabeza, era evidente, no quería perder mi amistad con los Uchiha e involucrarme con Madara no era muy conveniente ahora mismo.
-Agh ¿Qué haré entonces?- dije casi llorando mientras me recostaba en la mesa.
-No seas exagerada ¿Para qué quieres un hombre que te puede hacer llorar cuando tienes a muchos que dan la vida por ti?- levante la mirada con intriga, no había entendido- Tus amigos Sakura- me explico con un suspiro- tienes amigos que están dispuestos a apoyarte, son muchos y son leales, no necesitas un hombre a tu lado para sentirte fuerte y poderosa- hizo una pausa para mirarme a los ojos con toda la confianza- ya lo eres- sonreí agradecida, eso era lo que necesitaba oír.
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Estaba camino a la casa de Naruto, salí del hospital agradeciéndole a Tsunade por darme el tiempo de "llevar a mi querido perro al veterinario". Lastimosamente Naruto estaba trabajando aún, pero Hinata me recibió con una tierna sonrisa.
-¿A qué debo tu visita Sakura-chan?- preguntó mientras traía tazas de té a la sala de estar.
-Hinata... ¿Recuerdas que hace unos años te pedí que guardaras un sobre?- se sentó frente a mí mientras meditaba mi pregunta.
-Sí- respondió dejando la bebida sobre una pequeña mesa- aguarda, creo que está aquí- se dirigió a un estante lleno de libros y pergaminos, la casa de ellos dos estaba decorada de una manera peculiar, era muy moderna, pero tenía detalles antiguos haciendo que se vea de algún modo clásica- es este- Sacó un sobre de papel amarillo de un cajón- Sakura-chan- me llamo tímidamente mientras se sentaba esta vez junto a mí- nunca dijiste que contenía ese sobre...- desvió la mirada apenada con un leve sonrojo.
-Tiene unas fotos- respondí sabiendo que esa era su duda- Hace unos años, 4 exactamente, Ino me mostró unas fotos en donde Sasuke salía de un hotel abrazando a una chica bastante hermosa(N/A: está en el capítulo 'una cruda realidad') claramente ignoré toda señal de infidelidad en ese entonces, pero no quería desechar estas pruebas- le pedí a Hinata que guardara el sobre sin ver el contenido, pensaba que en unos años ya no sería necesario y podría eliminar esa tortura; ahora puedo usarlas a mi favor, por más doloroso que sea- Sasuke me era infiel desde hace años- suspiré con pesadez mientras abría el sobre- creo que uno mismo es quien aprieta la venda de los ojos y decide permanecer ciego a sufrir esta clase de cosas- Hinata le veía con atención y compresión, de algún modo su personalidad y energía conseguían calmarme- estás fotos las tomo Lee, trate de ignorarlas así que las aparte de mi vida- deje que tomara las fotos entre sus manos y las detallara, su rostro lo decía todo, estaba desilusionada.
-Es horrible- me miró y rápidamente me abrazó- no puedo entender por lo que estás pasando, pero te aseguro que no volverás a sufrir esta clase de cosas- su tono de voz siempre cálido y leve hace que las personas se sientan cómodas, queridas y seguras- lo prometo- dijo apenas separándose de mí para guardar nuevamente las fotos- ¿Qué harás exactamente con ellas?
-Se las daré como pruebas- guarde el sobre en mi bolso- Hinata-chan... gracias- le brinde una sonrisa cálida- en verdad eres un ángel- me devolvió la sonrisa.
-Todo mejorará para ti...- eso espero...
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Una parte de mí no quería ir hacia dónde pensaba, pero otra me gritaba desde el fondo. Sabía que no era buena idea, pero tenía que hacerlo si quería guardar algo de compostura y lucidez mental.
-¿Sakura?- ya no había vuelta atrás.
-Shikamaru... sé que es repentino que venga...
-Lo es- me interrumpió dejando una carpeta en la recepción de la comisaría- ¿A qué se debe tu visita?- empezó a caminar hacia un pasillo lleno de personas, por inercia empecé a seguirlo; finalmente llegamos a una puerta gris metálica- pasa- dijo luego de entrar y acomodarse en una cómoda silla negra. Ese lugar era su oficina, era cálida, quizá algo pequeña pero bien decorada y muy ordenada; el simplemente se recostó apoyando sus pies sobre el escritorio usando sus manos como almohada- ¿Hablarás?- me incitó con gracia.
-Si te digo que quería saludarte me creerías- pregunté inocentemente sentándome en la silla frente a él escritorio.
-No- respondió con simpleza.
-¿Entonces no quisieras adivinar por qué estoy aquí? Eres bueno en eso.
-Jm no, que problemático- suspiro con cansancio cerrando los ojos- me quieres pedir un favor ¿No?
-Acertaste- me incline un poco me apoyé sobre mis rodillas- necesito de tu ayuda- susurré.
-Demonios podrías hablar de una buena vez- abrió solo un ojo para poder verme.
-Bien... seré directa- tomé aire- quiero ver a Sasori- Ouch... sonaba menos descabellado en mi cerebro.
-¿Qué?- levantó la cabeza y abrió los ojos con un poco de sorpresa, al fin consigo hacer que reaccione y deje su cara de pereza habitual.
-Lo que oíste... quiero... necesito- me corregí- ver a Sasori.
-Sakura lo que me pides es ilegal- respondió en un tono de lógica- no necesito explicarte las consecuencias ni las razones de porque es peligroso- se acomodó profesionalmente en su asiento.
-Lo sé- sonaba tan patética- pero necesito hablar con él...Solo unos minutos lo prometo- Cruce mis dedos frente a mi cabeza a modo de súplica.
-El ni siquiera ha aceptado los cargos- se cruzó de brazos- tampoco tiene permitido recibir visitas.
-Quizá... pueda convencerlo- Shikamaru me miró aún con más preocupación, sonaba desesperada y lamentable, pero necesitaba acabar con ese dolor de cabeza ahora mismo- sé que te favorecería mucho el hecho de que acepte los crímenes... por favor.
Quedó en completo silencio mirándome fijamente a los ojos, luego su mirada se desvió hacia mi ropa, ya que llevaba aún el uniforme del hospital; algo pareció iluminarse en su mente.
-Ven- se levantó de la silla y salió de la habitación. Caminamos por varios pabellones en completo silencio, finalmente nos detuvimos en una puerta la cual abrió con algo de pereza- agradece que te aprecio demasiado Sakura- al entrar a la habitación vi una camilla azul oscuro junto con una mesa algo desordenada, un computador de escritorio blanco el cual quedaba al frente de una pequeña ventana que iluminaba el lugar- entra- ordenó mirando alrededor del pasillo- quédate aquí hasta que regrese, sigue la corriente o juro que nos meteremos en problemas- no entendía nada, pero prefería no cuestionar, pocas veces Shikamaru hace trabajos extra ya que le parece agotador y fastidioso, tenía que aprovechar.
-Bien- salió con tranquilidad del lugar cerrando la puerta a su espalda. Quedé inmóvil unos segundos en la mitad de la pequeña habitación, pronto caminé hacia la silla frente al escritorio café y me senté luego de reaccionar y dispersar mis pensamientos. Trate de entender cuál era su plan, me había traído a una clase de enfermería, minutos antes miró como estaba vestida... oh, definitivamente Shikamaru es el mejor estratega del mundo.
-Ya te dije maldita sea- escuché una voz desde afuera- no estoy enfermo- reconocí al instante esa voz- ¿Shikamaru no te cansas de joderme la vida? Creí que esto ya era mucho trabajo para ti vago- me levanté del asiento dejando mi bolso en el piso entre la mesa y la silla.
-Ya cállate fastidioso- el tono pesado de mi amigo me indicaba que estaba realmente harto- luego me agradecerás.
-¿¡Agradecer?! Ya quisieras bakayaro- La puerta se abrió dejando ver a Sasori con un uniforme negro de nubes rojas, esta era la vestimenta de los detenidos. Estaba molesto, llevaba sus manos atadas a unas esposas de metal frente a su abdomen, veía a Shikamaru con desprecio y odio- Me las pagarás algún día Nara.
-Oye te importaría ver hacia el frente- mi amigo suspiro cansado.
En cuanto Sasori dirigió su mirada hacia mí quedó completamente helado, sacudió la cabeza como si estuviera viendo una ilusión.
-Tu...
-Escuchen, tienen 5 minutos contados por reloj, si alguien pregunta te intoxicaste y pediste un médico con urgencia- Shikamaru cerró la puerta detrás de él y se quedó de pie en una esquina.
-Shikamaru-kun... te importaría...- señalé la puerta para indicarle que saliera- por favor- negó con fuerza.
-Es peligroso.
-Jodete- le gritó Sasori- no le haré daño, así que lárgate.
-Que problemático- me miró fijamente con seriedad- grita si pasa algo- asentí dándole tranquilidad. Se acercó a Sasori y le quitó las esposas, lo cual agradecí, se sentía raro ver a esa persona tan importante para mí como un criminal.
-Bien... ahora que estamos solos- suspiré viendo como la puerta se cerraba dejándonos con un aire un poco incómodo.
-¿Me dirás a qué debo tu visita?- dijo sentándose en la camilla junto a mí, posteriormente me recosté en el escritorio.
-Quería oír de tu boca la verdad- me hundí de hombros- Dime todo Sasori, desde por qué ayudaste a ese maldito criminal... hasta porque volviste y te uniste a la empresa Uchiha, sé que no fue mera coincidencia - quedó en completo silencio viéndome a los ojos. Tenía miedo de su respuesta, pero quería escucharlo.
-Todo lo que dicen de mí...- hizo una pausa para tomar aire- es verdad- un escalofrío pasó por mi columna, sentí como si el equilibrio me abandonara y mis piernas se debilitaban- ayude a Orochimaru, éramos viejos conocidos, me alié a la empresa Uchiha para enviarle información desde allí, la empresa de tu querido esposo siempre fue el blanco perfecto para Orochimaru- su forma de hablar se volvió fría y tosca, la dulce mirada caramelo que siempre amaba ver en él, se había ido por completo- el hecho de que fuera poderosa y que tuviera conexiones con bancos, policía y política la hacía ideal, tanto Orochimaru como Kabuto, su mano derecha, querían ver la empresa hundida, ver a Fugaku y Mikoto, la "pareja de esposos ideal"... Simples fachadas- mi cara se puso seria- de seguro no lo sabías pero hace años hubo un escándalo por infidelidad- abrí los ojos con sorpresa y quedé en completo shock ¿Infidelidad?- pero creo que ni siquiera te lo mencionaron.
-No... -dije en un susurro más para mí que para él.
-Tu perfecto suegro estuvo en un problema por haber sido infiel, pero no se escandalizó demasiado, además como todo Uchiha siempre es perdonado y se le recompensa por el error- ¿Recompensar?- porque la esposa víctima prefirió hacerse la de la vista gorda- ¿¡DE QUE DIABLOS HABLABA!?- También están Itachi e Izumi, oh una pareja adorable- su sarcasmo era evidente- pero Itachi no es ningún príncipe azul... de hecho es más como una estatua sin corazón- cada palabra que decía estaba cargada de veneno- simples mentiras, no siempre fue un ejemplo a seguir, cometió errores que fueron maquillados, hizo tantas cosas malas que solo se arreglaron para que quedara como el hijo, hermano y esposo ideal.
-Para...
-Ah pero si falta la mejor pareja, Sasuke y su flamante esposa- me vio directamente a los ojos con algo de oscuridad- un hombre cruel y directo, muy parecido a su tío Madara, un animal político- río con desprecio- la unión con una esposa talentosa y sobresaliente en su trabajo, eso era lo que sabía de ti... una pareja que solo sirve como fachada- no dije nada, solo me quedé mirándole a los ojos aún con más miedo- queríamos verlos rogando por piedad, son una familia que lo ha tendido todo en bandeja de plata, tienen que empezar a sufrir un poco- miré a Sasori con preocupación, lo desconocía por completo; baje la cabeza tratando de entender en qué momento se volvió ese ser perverso- No te asustes Sakura- dijo en un tono extraño- nunca pensé que te casarías con uno de los herederos de esta empresa, de hecho...- soltó una carcajada que hizo que regresara la atención a su rostro- tenía entendido que era todo un casanova incluso casado, es cómico, vi tantas fotos en donde se veía él con mujeres plásticas a su lado- sentí como palidecía ante sus palabras- pero nunca les ponía un solo dedo encima, hasta parecía respetuoso- hizo un sonido de asco y desprecio- y creo que la cereza del pastel fue presenciar la forma en que su secretaria lo veía con deseo- volví a bajar la mirada, poco a poco la respiración se me hizo escasa, no quería oír más de esto, estaba siendo cruel; era evidente que buscaba atacarme, estaba siendo directo nada más para ver en qué momento caía y mi fachada despreocupada se venía abajo- aunque... eso ya lo sabías ¿No?- tomé aire sintiendo mi respiración entrecortada, un nudo se formó en mi garganta dejándome sin habla- claro que lo has notado, la forma en que esa guapa pelirroja se pasea por la oficina de Sasuke llamando la atención; no eres estúpida, se que ya lo notaste. Lo que no entiendo aún es... ¿ya se han acostado?- cerré los ojos dejando caer una lágrima, pese a que estaba con la cabeza agachada sabía que noto la hora caer al suelo- ya se la respuesta... pero quiero oírlo de tu boca- usó las mismas palabras que dije al inicio de la conversación.
-¿Terminaste?- dije enojada levantando la mirada- ¿O tienes algo más con lo que atacarme?- negó con una sonrisa cínica en sus labios- sí, lo sabía desde hace unos días. Creo que cualquier idiota notaría la forma en que se coquetean... y si, ambos sabemos la respuesta a si están involucrados sexualmente- asintió- pero no vine aquí para hablarte de mis problemas maritales- me levanté y me acerque a él- ¿Por qué me odias tanto? La forma en que me hablas... ¿Qué pasó con el Sasori que conocí antes?- sin poder evitarlo lloré un poco más.
-Shh- limpio las lágrimas que caían por mis mejillas en un toque delicado, completamente opuesto a su personalidad actual- las personas cambian cerezo, ambos cambiamos, pese a que tu belleza sigue intacta, tu forma de ser y tu corazón ahora pertenecen a ese bastardo- tomo mi rostro entre sus manos y se levantó de la camilla, dejándonos a escasos centímetros- no te odio- quitó un mechón de mi frente- de hecho nunca te olvidé, siempre soñé con regresar para que juntos hiciéramos una vida- por alguna razón sus palabras solo causaban miedo en mi- odio en lo que él te convirtió- aclaró- odio que te hayas olvidado de mí- acercó su rostro a mis labios a lo que me quedé inmóvil, no tenía ni fuerzas ni ánimos para moverme- odio... que lo ames a él más de lo que me amaste a mí- se quedó quieto a milímetros de mi boca, podía sentir su respiración sobre la mía, nuestras miradas estaban fijas en la del otro- Sakura, mereces algo mejor que él y algo mucho mejor que yo- apreté nuevamente los ojos llorando con fuerza y soltando un leve sollozo- ambos estamos hundidos en un mundo de mentiras del que por más que queramos, no saldremos- negué con la cabeza y los ojos cerrados.
-No...- susurré
-Sí-me cortó- por más que queramos cambiar... no podemos dejar de engañar- paseó su dedo pulgar sobre mi labio inferior- aléjate de ese bastardo o terminará haciéndote más daño del que te ha hecho en este momento- tenía razón, pero solo me quedé en silencio llorando y lamentando el momento en que el noble Sasori cambio a este cruel y sin vida.
Un golpe me hizo reaccionar, era el sonido de una madera.
-Sakura, ya es tiempo- era Shikamaru llamando desde la puerta.
-Bien... hasta aquí llegó nuestra conversación mi cerezo- levante la mirada hasta sus ojos y le miré suplicante.
-Acaba con todo esto, deja de jugar al inocente y entrégate por completo- me acerqué a él para abrazarlo a modo de despedida- solo... deja de lado ese ser perverso Sasori-kun.
-Ya es tarde Sakura- continuó el abrazo- pero haré lo que pueda- sentí algo de esperanza por el gracias a lo que dijo- debes prometer que no dejarás que él te siga viendo la cara- asentí contra su pecho- bien...
Shikamaru abrió la puerta y se acercó a nosotros con pasos lentos.
-¿Y bien doctora Uchiha, algo para medicarle a este paciente?- dijo mientras esposaba de nuevo a Sasori.
-¿Qué?-pregunte confundida
-Médica algo, es raro que solo hayan hablado de su intoxicación.
-Oh si, luego te daré unas vitaminas- ambos me vieron confundidos- es eso o un laxante así que acéptalo- respondí girándome hacia mi bolso y limpiando cualquier rastro de lágrimas.
-Te llevaré de regreso a la celda- se dirigió a Sasori- y tú espera aquí- asentí agradecida. Shikamaru se había comportado realmente bien, estaba siendo un verdadero amigo, ahí comprendí lo que decía Tsunade, tengo amigos que harían lo que sea por mí.
-Adiós cerezo- se despidió antes de salir- nos vemos en la otra vida... o quizá en unos años.
-En unos años, te lo aseguro- susurré sollozando- adiós...
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Shikamaru tardó, se había ido hace ya media hora, durante ese tiempo solo me quedé viendo las fotos sentada en el escritorio, detallando cada parte, hice una lista en un papel sobre las cosas que debía comprar para la cena y la decoración, también hice una "fórmula" de vitaminas y fibra para la digestión, las cuales no necesitaban precisamente una prescripción médica. El mundo era injusto, me quito tantas cosas de un solo golpe dejándome débil y aun así tenía que seguir actuando como si fuera un día normal medicando cosas y haciendo una lista de quehaceres para la noche.
Reaccioné cuando mi teléfono empezó a sonar desde el interior de mi bolso.
Kimi wa ima namida nagashita
Manija kuru kodomo no youni
Tatoe asu ga mienaku Matte lo Mamoru yo...
Con rapidez empecé a buscarlo mientras recuperaba la compostura; no miré quién llamaba, solo atine a contestar mientras tomaba una botella de agua con una aspirina que tenía en mi bolso, tenía un increíble dolor de cabeza; recuerdo que alguna vez Sasuke dijo que mi maletín parecía una bolsa eterna, podía guardar tantas cosas allí.
-Buenas tardes, soy la doctora Uchiha- dije pasando el trago de agua con la pastilla.
-Sakura- oh demonios, era él.
-Ah Sasuke-kun lo siento- estaba demasiado perdida en los problemas que olvide que a él le tenía un tono diferente al de los demás.
-¿Ocupada?
-Algo así... Estaba distraída- espero unos segundos hasta que terminé de reaccionar- espera ¿Pasó algo?
-No.
-¿Entonces por qué llamas?- al instante noté lo cortante y fría que hablé- digo... no es que me llames muy a menudo- trate de sonar menos dispersa.
-Hmp solo... Estoy a punto de entrar a la reunión y...
-Algo te preocupa- completé, sabía por su tono que algo no andaba bien- ¿Es eso?
-Sí- respondió brevemente, escuche cómo tomaba algo, de seguro era un té, siempre tomaba algo para relajarlo antes de una junta.
-¿Qué tiene de preocupante esta reunión?
-No es la reunión- quedó en silencio nuevamente, es pésimo para esto de comunicar lo que piensa.
-Entonces...- le incite a seguir.
-Tengo un mal presentimiento- hice un gesto de confusión.
-Tú no eres alguien supersticioso.
-No se... es... -dio otro trago- no me siento tranquilo, siento que algo malo pasará- esto era grave, él NUNCA me llamaría solo para esto, y por su tono de voz aún no recordaba el aniversario.
-Escucha... debe ser la presión por la reunión- o el hecho de que olvidaste nuestra fecha especial, solo digo- no debe ser algo tan grave, así que... respira, ordena tus ideas, terminaré ese té que estás bebiendo y luego podrás estar más tranquilo.
-¿Cómo supiste que estaba...?
-Llámalo instinto- pude escuchar como soltó una risita- eso y además escucho como pasas el trago; hoy es martes así que no creo que quieras tomar el whisky.
-Hmp perfecto- me felicité internamente por la deducción correcta- gracias...
-¿Por qué?- pregunté confusa con una sonrisa en mi rostro.
-Por escucharme- sonreí aún más.
-Para eso estoy... -sí, para eso estaba. Solo hasta hoy...
-Debo colgar- escuche un par de voces de fondo, de seguro ya tenían que estar presentes los miembros de las empresas de la junta.
-Sí, suerte... te amo- eso salió sin querer, solo me nació decir esas palabras, y como sabía que no diría nada más continúe mi despedida- nos vemos en la noche cariño, deja de tener malos presentimientos- espere a que soltara un gruñido de aprobación junto con otro "Hmp bien" y corte la llamada.
Fue justo ahí donde entendí cuál era su mal presentimiento... ¿Era posible que presintiera lo del divorcio?
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Luego de agradecerle infinitamente a Shikamaru me dispuse a salir de la comisaría, tenía que ir al supermercado para al fin completar mi atareado día. Antes de salir me pareció ver a alguien conocido pero lo ignoré, solo hasta que llamó mi atención cuando se acercó a mí y me nombró.
-Que sorpresa... parece que nos estamos encontrando en todas partes.
-Ah Madara-san- joder era bastante guapo, físicamente tenía rasgos que lo diferenciaban de Sasuke. Cada uno tenía su peculiaridad, cada uno tenía algo llamativo en su forma de hablar y de atraer la atención de las personas.
-Por favor, evitemos el 'San'- iba vestido de traje, como de costumbre- es como si nunca nos hubiéramos visto.
-Prefiero seguir usando el 'san' es más apropiado- aunque mi voz interna pida a gritos que le pregunte si sigue soltero- es... costumbre.
-Hmp tendrás que cambiar esa costumbre- se cruzó de brazos recostándose en una pared, estábamos en un pasillo cerca a la puerta de salida, por alguna razón estaba extrañamente vacío- así que... Sakura-chan- temblé y sentí como me sonrojaba completamente, el 'chan' solo lo usaban mis amigos cercanos- ¿No deberías estar en el hospital?
-Eh sí... bueno no... no debo regresar... ¡Más bien si!... Pero hoy no- estaba sonando como una completa estúpida- digo...- en su cara apareció una cautivadora sonrisa burlona. Prestaba atención a mis palabras y esperaba el momento en que soltara una frase lógica- verá... yo... si debería estar pero...- carraspee la garganta; esta clase de reacciones no me pasaban desde mi noviazgo con Sasuke- me dejaron salir temprano- dije finalmente con una sonrisa nerviosa.
-Sí... ya lo note- su tono sarcástico hizo que soltara una carcajada.
-Ya lo siento, salí temprano para resolver un par de cosas personales- se acercó un poco más a mí, haciendo que mis piernas hormigueaban y mis manos empezaran a sudar- ¿Y usted que hace aquí?- trate de disimular mi nerviosismo apretando el bolso contra las costillas.
-¿Qué es eso?- me ignoró y señaló la bolsa de papel que sobresalía de la maleta.
-N... nada- magnífico, era más evidente que Naruto disimulando- es...un... trabajo- dije finalmente luego de apretar más el bolso.
-Claro...- río paralizándome, definitivamente tenía unos gestos tan cautivadores que harían que cualquier mujer cayera a sus pies- ¿Y ese "trabajo" tiene que ver con que hayas venido a una comisaría?- oh mierda... olvide ese detalle, el simple hecho el que estemos en una estación de policía...
-¡No!- joder, si aún quedan neuronas en mi cerebro... podrían reaccionar- vine a ver a un amigo- sí, realista... menos por el hecho de que estaba sudando como un camarón asado y mi rostro de seguro estaba entre pálido y amarillo.
-Ya veo... -se acercó tanto a mí que de seguro podía detallar cada parte de mí; mientras tanto yo me quedé como una estatua pasando de estar blanca como un papel, a roja como un tomate- ¿Y la verdad cuál es?- demonios estaba demasiado cerca, podía sentir su perfume... oh era tan parecido al de Sasuke, no parecían tío y sobrino, más bien hermanos.
-Es esa... -respondí en un susurro mientras él se acercaba un poco más a mi rostro. En ese momento olvide el espacio- tiempo, solo me concentré en sus ojos negros y su perfecto rostro a centímetros de mí.
-Hmp- sonrió victorioso haciéndome regresar de mi divagación. Se separó abruptamente de mí, sorprendiéndome; cuando finalmente reaccione, vi como tenía entre sus manos el sobre de papel- eres pésima mintiendo ¿Lo sabías?- dijo como si fuera lo más lógico del mundo.
-No espera... -di un salto tratando de alcanzar el sobre- dámelo, espera...
-Lo siento...- soltó con falso arrepentimiento mientras retrocedía retomando su sonrisa burlona- veamos... ¿Cuál es ese importante trabajo de la doctora?- empecé a tratar de alcanzarlo y quitarle el papel.
-No es nada- reí nerviosa dejando mi bolso sobre una silla y lanzándome de nuevo; finalmente logré tomar la punta del sobre cayendo sobre su pecho, él seguía con una sonrisa en su rostro, pero esta vez dejó de ser burlona... más bien volvió a ser victoriosa. Fue allí donde noté que estaba recostada en su pecho con mi mano derecha junto a su brazo izquierdo sosteniendo el sobre, mi quijada quedaba justo en su clavícula y su mano derecha se posó encima de mi cadera. Reí nuevamente nerviosa, retrocediendo y bajando el brazo, recobrando un poco la postura "respetuosa" de antes- perdón.
-No tienes por qué disculparte- ¡¿Era enserio?! Su voz era... ¿Coqueta? Nuevamente me avergoncé y retrocedí aún más sintiendo calor sobre mis mejillas.
En un rápido movimiento saco las fotos deslizando las por la punta del sobre, solo tuve tiempo de abrir la boca para decir algo que pudiera detenerlo, pero fue demasiado tarde, ya tenía 3 de las fotos en sus manos.
-Oh- silbó detallando la foto en que Sasuke abrazaba a la chica por la cintura dándole un muy, muy profundo beso- es muy interesante tu trabajo...- regresó su mirada hacia mí, yo tenía la mirada fija en las baldosas del suelo, estaba asustada de como reaccionaria- Sakura- me llamo devolviendo las fotos al sobre.
-Por favor... no diga nada- susurré.
-Claro que no- se acercó a mí dejando el sobre encima de una silla, junto a mi bolso- ¿De cuando son?
-4 años- respondí avergonzada, espere 4 años para reaccionar.
-¿No es la primera vez?- negué sin levantar la mirada-¿Aún sigue haciendo eso?-moví la cabeza en confirmación- ¿Qué harás?- me tense y apreté mis manos en forma de puños a cada lado de mi cuerpo, al punto en que mis nudillos quedaron blancos- Responde con confianza Sakura- puso ambas manos sobre mis hombros tratando de relajarme, pero en cambio solo sentí que palidecí aún más- no le diré a nadie ¿Qué harás?- repitió con más fuerza y autoridad en su voz.
-Divor... ciarme- respondí levantando un poco la cabeza.
-Está bien- abrí los ojos con sorpresa y levante por completo la mirada- No me mires así- dijo con una sonrisa- Sasuke es mi sobrino, mi sangre- sentí temor- pero lo que hizo no tiene justificación- me relaje de nuevo- ¿Él lo sabe?
-No... pero... se lo diré hoy...
-Debes tener los papeles listos, no lo tomes tan a la ligera- sonreí internamente.
-Ya lo hice... está todo listo, solo tiene que firmar- levante un poco los hombros.
-Ya veo... - una de sus manos se posó en mi mejilla- eso es bueno- susurró.
-Perdón pero... ¿Qué tiene de bueno?- dije con una risa débil.
-Porque ya no eres una Uchiha...-¡Oh sí, me consta!-ya no sería indebido que...- su dedo pulgar delineó mis labios y se acercó un poco más a mí ¿Que estaba pensando? Lo que sea que fuera a hacer me dejó como un muñeco inmóvil esperando a que su dueño lo mueva- Jumm pero ahora no es el momento- dejo de delinear mi labio dejándome aún más débil por sus coqueteos- aunque... dudo que Sasuke te deje ir tan fácil- pude respirar tranquila cuando se alejó nuevamente, no es que no quisiera que me besara, después de todo ese pensamiento estaba pasando por mi mente desde la reunión del sábado en el hospital, es solo que... no era el lugar ni el momento, como él dijo.
-Lo hará- le asegure con algo de fastidio y odio.
-No te confíes- regresó su mano a mi hombro- Sasuke es alguien que sorprende, es avaro y muy parecido a mí- no del todo... solo un poco... bien, si, se parecen demasiado- y sé que no dejara que alguien como tu... se aleje tan fácil- un corrientazo pasó por mi columna vertebral, sus palabras hicieron que me sonrojara, de nuevo.
-No soy tan importante en su vida...
-Aunque no lo parezca- dijo señalando con la cabeza el sobre a sus espaldas- Sasuke no dejará que te vayas tan fácil, lo sé por qué vi cómo se puso cuando nos conocimos- aquel día que nos interrumpió...- te "protegió" de algún modo- Sí, claro- no sé por qué mierda te es infiel, pero sé que no te dejará por una simple amante- sus palabras sonaban seguras, no trataba de consolarme, más bien buscaba concientizar- solo te diré... que estés prevenida- asentí sintiéndome incapaz de formar una frase en ese momento- y ahora mismo me tengo que ir, pero te pido que me mantengas informado de todo- asentí nuevamente mordiendo mi labio inferior, recordando el segundo en el que pasó su dedo encima de esa parte- hasta luego... Sakura-chan- se alejó de mí, dejando caer sus manos junto a su cuerpo- Ah y por cierto... -hablo nuevamente caminando hacia el lado contrario de la salida, me dio la espalda pero seguía hablando con fuerza y confianza- ¿Cómo está el señor Akasuna?- me tense de golpe ¿¡Sabía que vine a ver a Sasori?!- ¿Sigue mejor de su... Intoxicación?- recalcó con sarcasmo.
-Sí- respondí insegura, mi voz tembló un poco por el temor y la sorpresa.
-Me alegra... cerezo- ¡MIERDA! ¡Me llamo igual que Sasori!- Sakura, hablaban demasiado fuerte, cualquiera que pasara a su lado podía oír su charla- se detuvo y me miró sobre su hombro- y de paso... saluda a Shikamaru de mi parte, es una gran persona y estupendo amigo- sonrió de lado y retomó su camino dejándome helada en el pasillo, totalmente inmóvil.
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Compre todo en el supermercado, pero mi cabeza seguía con 3 imágenes; por un lado Sasori, mi primer amor, mi compañero y confidente durante los primeros años de mi vida, ahora es alguien sombrío y que hablaba con tanto odio y seguridad que daba escalofríos; la segunda persona era Madara, un Uchiha más que logra cautivarme con palabras sarcásticas, sonrisas de medio lado y contestaciones con 'Hmp' al inicio, era un político ambicioso y peligroso en el sentido de ataque, es poderoso e inteligente, sabe cómo actuar ante cada situación con precisión y fuerza; por último estaba él, el único que tenía mi corazón, si, era cursi y masoquista mi pensamiento, pero sencillamente no se puede dejar de amar a alguien de la noche a la mañana, sencillamente porque él es el único al que veo en estos momentos, como dijeron Ino y Temari, tardaré AÑOS en superar este fracaso.
Llegué a la casa descargando las bolsas de compras, eran las 7, en media hora saldrían de la estresante reunión, y en 1 hora... Kiba se encargaría de seguir a Sasuke. Entre dejando las decoraciones en la sala y la comida la lleve a la cocina, todo estaba esperando a ser ordenado, así que me puse manos a la obra y dejé las cosas totalmente ordenadas, los Onigiris perfectos y rellenos, la decoración estaba lista, un letrero largo que decía 'FELIZ ANIVERSARIO' en dorado, de los lados caían dos decoraciones en cinta de color azul oscuro.
Era de algún modo ideal, hasta parecía un día normal; me encargue de dejar pasabaocas sobre la mesa del comedor y en una bolsa de regalo en una esquina de la habitación, se encontraban los papeles del divorcio. Todo estaba saliendo de acuerdo al plan, solo tenía que esperar a que el saliera de la reunión y llegará; me encargue de arreglarme con un vestido sencillo, casi del mismo color que la yukata, oh ese kimono, era sencillamente ÚNICO, nunca nada va a llegar a hacer tan feliz como este regalo, era especial y lo atesoraré por siempre.
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Cuando faltaban 5 minutos para las 8, sentí como un frío se apoderaba de mi cuerpo, ahora si llegaron mis miedos y temores, ahora sí acabaría mi vida. Todo lo que conocía empezaría a desmoronarse, el despertar junto a la persona que amo, el desayunar junto a él debatiendo sobre quién compraría las cosas para la cocina, el reírse por algo que dijo el otro mientras nos terminábamos de arreglar para el trabajo, las llamadas inesperadas para comunicar que llegaríamos tarde o porque sentimos que no podemos más y necesitamos apoyo, las cenas llenas de anécdotas del pésimo día y finalmente los besos y las caricias que solo él puede darme, el placer que solo él sabe ejercer sobre mi, el amor que no podré sentir por nadie más...
Aliste mis maletas con únicamente ropa e implementos de aseo, completé 3 maletas y 1 morral mediano. Toda la joyería que él me había dado la dejé en su lugar, los vestidos de gala y los abrigos elegantes no se movieron de puesto; la yukata, ese hermoso vestido que nunca pude usar en una fecha importante, la deje sobre la cama, lo dejé junto a la caja en la que me la regaló; todo estaba listo, solo faltaba algo...
Me senté en la sala temblando y sudando frío, tenía mi teléfono entre las manos.
"Si te envío un mensaje, es porque él llegó solo y directo a tu casa, pero si llamo, es porque se dirigió a otra parte en compañía de alguien más"
Las palabras de Kiba rondaban en mi cabeza, el miedo de ver su nombre en la pantalla con la opción de contestar y colgar hacia que se me helara la sangre. Espere varios minutos hasta que finalmente... llegó la señal de mi amigo...
"LLAMADA ENTRANTE DE KIBA"
Sentí un golpe en el pecho, el aire comenzó a faltarme y mis manos temblaron con más insistencia, mis ojos se llenaron de lágrimas y la boca se secó por completo. Acepte la llamada y acerque con temor el teléfono a mi mejilla.
-¿Sakura?- escuche la voz fuerte de Kiba al otro lado de la línea.
-Sí- logré responder conteniendo un sollozo.
-Escucha... lo siento... Sasuke está entrando a unos apartamentos con una chica- ese fuerte golpe en el pecho que sientes cuando te enteras que tu mascota murió, cuando ves un accidente frente a tus ojos y no puedes hacer más que soltar un grito ahogado, cuando dicen que debes mudarte dejando todo atrás incluido aquello que valoras, cuando llegan malas noticias acompañadas de una voz llena de luto y lástima; el mundo se detuvo para mí, un rayo atravesó mi pecho desde mi espalda hasta mi corazón, mi vista se nublo por la cantidad de lágrimas acumuladas- es una pelirroja, salió con él desde la oficina, he de suponer que esta es su casa- lleve una mano a mis labios y la apreté con fuerza, cerré los ojos y dejé que miles de gotas cayeran por mis mejillas quemando a su paso.
-Gracias- respondí entrecortada.
-¿Oye estás bien?- preguntó con preocupación-Sakura ¿Estas bien?- quedé en silencio conteniendo la respiración- Mierda, llamaré a Hinata y Naruto- antes de que hiciera algo volví a tomar aire con fuerza.
-Está bien Kiba- claro que no lo estaba, mis ojos derramaban lágrimas por montón, mi nariz estaba quemada por la concentración de líquidos salados, mis labios estaban resecos y mi pecho tenía un horrible dolor- Gracias- repetí- no te preocupes por mí- volví a tomar una pausa para respirar sin importar que se escucharán varios sollozos.
-Pero... iré para allá...
-No es necesario- negué mientras me levantaba con cuidado, sentí un fuerte mareo y mis pies perdieron toda la fuerza, volví a caer sobre el asiento-¿Aún están a tu vista?- cambié de tema.
-¿Eh?-procesó unos segundos- Si, ella parece...Querer convencerlo, llevan un tiempo hablando fuera del auto.
-¿P... podrías tomar un par de fotos y enviármelas?
-¿¡Qué?! Sakura...
-¡Por Favor!- soltó un gruñido.
-Bien... ya las tomo.
-Algo más... ¿Cu...Cuanto debo pagarte por esto?
-¿¡Estás loca!?- exclamó enojado- demonios Sakura somos amigos, esto es un favor, así que si quieres pagarme de algún modo.
-Sí...
-Llámame mañana en la mañana diciéndome que estás completamente bien de salud, tanto física como mentalmente, prométeme que no harás ninguna locura y que buscarás a Ino, Temari o Hinata- solté otro sollozo.
-Es... está bien- me sentía destruida.
-¡Júralo! ¡Promete que no harás nada malo por favor!
-Tranquilo Kiba, estaré bien, gracias por todo, pero ahora...- la boca se secó por completo y por alguna razón mi garganta empezó a cerrarse con cada palabra, sentí como mi úvula (*) se unía a mi laringe, como reflejo tosí con fuerza, la suficiente para lagrimear más mis ojos y casi vomitar.
-Demonios Sakura no estás bien.
-Lo estoy- me levanté de nuevo caminando hacia la cocina- gracias Kiba, ya hiciste lo suficiente por mí, ahora debo colgar- tomé un vaso y lo llené con agua agradeciendo que no tenía tanto mareo como antes.
-Esto es mala idea- dijo desesperado.
-Está bien Kiba, debo colgar- escuche un pequeño ruido de fondo a lo que reí un poco- dale un premio a Akamaru de mi parte- supe que aquel ruido era de su perro.
-Está bien- respondió rendido, de seguro tenía una sonrisa en su rostro por lo que dije- cuídate.
-Adiós- colgué antes de que pudiera decir algo, al cabo de unos segundos recibí 5 fotos de Kiba.
Sasuke estaba recostado en la puerta del conductor de su auto, tenía las manos metidas en los bolsillos, mientras tanto Karin estaba con su mano derecha sobre su hombro y el rostro bastante cerca al de él.
En las demás ella trataba de hablarlo hacia el edificio pero Sasuke no hacía ningún movimiento; en la última él ya estaba caminando hacia el edificio haciendo un rostro despreocupado mientras ella lo atraía tomándolo del brazo izquierdo con una sonrisa triunfal. Con poco ánimo entre a la oficina de él, con lágrimas en los ojos imprimí aquellas fotos, con dolor las acomode sobre la mesa del comedor al igual que las fotos del sobre amarillo que me dio Hinata, con tristeza serví su porción de comida y la acomode junto a las fotos.
Me dirigí a la sala como un objeto sin vida, solo caminé rendida y con la vista perdida en el suelo, mis ojos ardían bastante pero lo ignoré, llegué a la alfombra que se encontraba en la mitad de la mesa central de la habitación y la televisión, caí de rodillas al piso, sin sentir ningún dolor, solo me sentí vacía, algo me faltaba, el simple hecho de haber dejado aquellas fotos me quito la vitalidad y la poca alegría que tenía; es como si mi mundo se hubiese desplomado en un segundo; veía todo con menos nitidez, me sentía pesada y desorientada.
Vi todas las grabaciones que reposaban en un estante bajo el plasma, eran CD, a Sasuke y a mí nos encantaba tener las cosas importantes en ese formato, de algún modo conservamos las cosas de una forma "diferente".
Por inercia tomé entre mis manos la grabación más importante para mí... el vídeo de nuestra boda.
Con las manos temblando coloque el material en el reproductor junto a los CD. Quería ver eso por última vez; quizá le estaba torturando, pero actuaba por reflejo, básicamente quería grabarme de una buena vez la realidad de las cosas.
(N/A: esta parte léanla mientras escuchan la canción, no pondré la letra ya que será difícil seguirla, sigan la pista de 1:30 minutos: Kara no Kokoro- Anly)
Sasuke y yo entrábamos a una capilla blanca decorada con ramas de árbol de cerezo y algunas camelias en los pilares metálicos del lugar, cortesía de Ino; las mesas estaban en los bordes del gran kiosco blanco que junto con las luces doradas contrastaban perfectamente. El vestido era una hermosa yukata blanca con pedrería y detalles rojos, en cuanto a él... estaba ideal, era todo lo que podía soñar, un kimono negro y azul oscuro, con su rostro perfectamente decorado por una sonrisa de medio lado; por petición y consejos de Mikoto y Fugaku la boda fue principalmente tradicional.
Lloré con más fuerza, me acomode para quedar más cómoda, pasé mis piernas hacia el frente y las cruce, regresando la atención al vídeo. Mi rostro lo decía todo, estaba feliz, me sentía única y hermosa, estaba enamorada... todos nos recibieron con aplausos y algunas fotos; reí con dolor tras detallar las expresiones de Sasuke, parecía genuinamente feliz, siempre ha sido inexpresivo, pero la forma en que me veía... parecía real y... enamorada, muy similar a la mía hacia él, era una mirada llena de alegría, deseo, cariño, respeto y sobre todo afecto.
Por los gritos y peticiones de los invitados nos acercamos hasta que las mangas de los vestidos lo permitieron, Sasuke me dedico una hermosa mirada, la cámara no podía mostrarlo, pero siempre recordaré ese brillo en sus ojos, enteramente tendré presente su sonrisa y la sensación de sus manos entrelazadas con las mías... dolía demasiado, pero a la vez sentía alegría de poder ver de nuevo esta escena.
Nos acercamos poco a poco, sellando el momento con un beso; todo el lugar se llenó de aplausos nuevamente, el tiempo siempre se me detiene en esa imagen, sin importar cuántas veces la vea, causa una sensación de alegría y emoción por todo mi cuerpo. Luego de unos segundos del beso, nos alejamos con lentitud, sabía que él no estaba del todo cómodo, nunca le gustó ser el centro de atención, pero... en ese momento parecía que no hubiera nadie más alrededor...
(Thinking Out Loud- Ed Sheeran)
When your legs don't work like they used to before
And i can't sweep you off of your feet
Reí y dirigí la mirada hacia Shisui, quien era el encargado de la música en esos momentos, TenTen y Rock Lee estaban parados junto a él y al reproductor, de seguro fue idea de ellos. Nunca habíamos acordado esta canción como baile principal, pero toda duda fue desechada al verlo sonreír frente a mí.
...Loving you 'till we're 70
And baby my heart could still fall as hard at 23
And I'm thinking 'bout how people fall in love in mysterious ways
Empezó un balanceo suave de lado a lado, mi mano derecha estaba sobre su hombro y la izquierda entrelazada con la suya a un lado de nosotros, su otra mano descansaba en mi cintura.
And i just Wanna Tell you i am
So Honey now
Take me into your Loving arms
Miles de emociones me rodeaban, sentía como si el mundo a nuestro alrededor no fueran más que voces, palabras que decían lo bien que nos veíamos. Sasuke me inclino levemente hacia un lado dejando que ambas manos rodearan mi cintura acercándonos.
...Thinking out Loud
Maybe we found love right where we are
Cada paso que dábamos hacia que un peculiar brillo iluminara mis ojos. Sasuke no despegaba la mirada de mi rostro, detallaba cada parte de mi con esa sonrisa encantadora. Me dediqué a disfrutar su rostro con una sonrisa mientras mordía mi labio inferior agradecida por ser la mujer que hizo que Uchiha Sasuke, un completo cubo de hielo, se casara.
I know you will still love me the same
Completamente fascinada por el momento me deje llevar por los giros que dábamos coordinados, seguidos de una vuelta que hizo que los pliegues del Kimono se extendieran dando un toque delicado al baile. Convenientemente se empezaron a soltar burbujas gracias a unas máquinas en las esquinas del salón.
... forever in my mind and memory
I'm thinking 'bout how people fall in love mysterious ways
Maybe it's all part of a plan
Una imagen eterna, nuestros cuerpos juntos, nuestros rostros felices, el momento y la escena perfecta para mí. Más giros acompañaron el baile haciendo que varias personas comenzarán a tararear la canción.
But baby now
Take me into your loving arms
Todos cantaban a nuestro alrededor.
Kiss me under The light of a thousand stars
Please your head no my beating heart
Varios aplausos y cantos adornaron el momento.
... thinking out loud
That maybe we found love right where we are, oh
Empezamos a bailar por toda la pista, principalmente yo le indicaba por donde seguir, él simplemente se dejaba llevar como una pluma por la brisa. Giros y pasos hicieron que llegaríamos al frente de todo el lugar, varias parejas se pararon para acompañarnos bailando un poco menos llamativos. Me acerque y abracé a Sasuke por el cuello dándole una sonrisa enorme seguida de un 'gracias' y un pequeño beso en la comisura de sus perfectos labios.
So baby now
Take me into your loving arms
Kiss me under the light of a thousand stars
-Oh darling- cantamos al mismo tiempo, con total naturalidad y coordinación.
... thinking out loud
That maybe we found love right where we are
Oh baby, we found love right where we are...
-And we found love right where we are- finalizamos todos los presentes con aplausos.
Sasuke y yo hicimos una reverencia entre nosotros.
La grabación se detuvo dejando ver un menú de opciones. Quedé inmóvil de nuevo, plasmada en el suelo sintiendo como ese vídeo terminaba de confundirme.
¿Por qué llegamos a este punto? En esa grabación se apreciaba algo único, sin duda fue el día en que más le vi reír, me daba años de vida verlo así, se veía tan emocionado por nuestra unión que parecía otra persona, no el esposo... que prefirió dejar esas promesas de 'hasta que la muerte nos separe' en la basura...
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¡Finalmente!
Fue un capítulo realmente largo, siendo sincera me demoré demasiado pensando cada detalle. Nuevamente gracias por los comentarios, me alegra ver que les gusta :3
ACLARACIONES
Úvula (*) todo aquel que vio Monster House sabe que es la "campana" añen el inicio de la garganta, básicamente lo que te hace vomitar si se toca.
Gracias por leer... espero les haya gustado y lo hayan disfrutado.