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Lo que escuchó esta tarde lo dejó pensando. Ahora tenía curiosidad por saber quién era el responsable de las notas.

Si bien, lo que escuchó hoy no fue mucho, pero le dejó una duda creciendo en su interior y un montón de preguntas surgieron.

¿A caso Hendery era el responsable?
¿Con quién hablaba?
¿O tal vez sea la persona que estaba al otro lado de la línea?

- ¡AHG!, esto es tan estresante- dijo frustrado y revolviendo su cabello

- ¿Qué pasa pequeño? - le preguntó su madre que estaba justo en frente de él

-Nada mamá, nada- se apresuró a decir

-Anda, cuéntame, ten confianza- trató de animarle su mamá

-Sí hijo, cuéntanos que sucede- está vez habló su padre

-Se van a espantar- respondió bajito el Yangyang

-Todo lo que pase en estos tiempos ya no sorprende cariño- respondió su madre

- ¿Seguros? – preguntó dudoso

-Sólo habla ya querido- apresuró su madre

-Bien, bien, es que, en la escuela hay alguien que me deja pequeñas notas en mi locker y justo ayer escuché a un chico hablando por teléfono y decía, que yo había respondido, luego dijo un sí y por último dijo que tenía flojera y que los chicos que ahora sólo deberían decir sus sentimientos en persona- dijo dudoso un pequeño Yanyang

- ¿Y eso te aterra? - preguntó su papá

-No, sólo que me da curiosidad por saber quién es el dueño de esas notas- respondió

- ¿Y qué tal si es una chica? - preguntó su madre

-Ay mamá, por lo que dijo el chico de ayer, estoy cien por ciento seguro, de que es un hombre- respondió- ¿hay algo de malo en que esa sea la realidad? - preguntó dudoso

-Cariño, creo que ya estás lo suficientemente grande, como para saber qué es lo que quieres- respondió amable su mamá

-Pues yo qué te puedo decir, es tu felicidad no la nuestra- dijo esta vez su padre

¿Ahora qué debía hacer con sus pensamientos?, su orientación sexual ya no era problema, ahora el verdadero problema era, saber quién es el dueño de las cartas.














































El timbre de aquella casa se escuchó por todos lado, pasos apresurados se escucharon en la escalera y seguido de eso la puerta fue abierta.

-Hola Romeo, ya llegó tu Julieta- la voz de Hendery sonó tan melosa, que hizo rodar los ojos de su amigo

-Vamos pasa, ¿traes tus cosas? - la pregunta de su amigo le sorprendió

- ¿Cómo que mis cosas?, a mí sólo me dijiste, "trae la nota a mi casa"- respondió en son de burla

- ¿Cómo piensas que te voy a dar las papitas que prometí? - preguntó su amigo

-Esa es una cosa muy diferente, para eso traje mi mochila, así que, dame lo que me prometiste y te doy lo que tanto quieres- respondió Hendery

- ¡AH PERO COMO CHINGAS!- respondió su amigo de cabellos negros

- ¿Acaso no has escuchado aquel dicho que dice: "Cuentas claras, amistades largas”?

-No- con voz desganada respondió

-Ah bueno, pues yo sí, así que dame mi pago, mis trabajos no son regalados- respondió Hendery sacando la lengua

Lo último que vio fue la espalda de su amigo perderse en los adentros de su casa, después de unos minutos, su amigo regresó con las manos llenas de frituras y cosas dulces.

Hendery por instinto abrió su mochila y espero a que guardara todo, una vez hecho eso, entregó su parte del "trato".

-Bien, aquí tienes, es un placer hacer tratos contigo, no vemos mañana- se despidió de su amigo y comenzó a caminar de regreso a su casa.

Mientras a su espalda dejó a un chico sonriendo todo enamorado, ante la respuesta de su amor platónico.
























































¿Es normal emocionarte por tú propia historia?

Pequitas_of_Moon

Acertijos de Amor [XiaoYang] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora