"Definitivamente no va a ser difícil" NiKi rio y con el celular en la mano volvió al cuarto. Dejó el aparato en el bolsillo de su pantalón y fue a donde estaba SuNoo y, sin oposición, lo alzó en sus brazos como un pequeño koala. El mayor se abrazó a él con brazos y piernas, con miedo a caerse.
NiKi le empezó a repartir besos en la cara, empezando por la coronilla, luego la frente, la nariz y por último los labios.
《— Eres tan lindo, Noonie.》
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.