𝑜𝓃𝒸𝑒 𝓂𝒾𝓃𝓊𝓉𝑜𝓈 • ᴋᴀʏɴᴇᴀ

𝟷𝟶 𝑦 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑎𝑛𝑑𝑜

La Luna estaba por comenzar su turno, eran apenas y las 7:33 de la tarde de un jueves, un jueves cálido y tranquilo, pero era jueves de espagueti. A Joaquín no le gustaba el espagueti, pero a Khea le encantaba, estaba entre su top tres, no, entre su top cinco tal vez. Igualmente Joaquín nunca se lo dijo, temía que dejara de prepararlo por su culpa, no se perdonaría dejar a Ivo sin un jueves de espagueti, aunque el lo desatara. Era el sacrificio de amor que hacía.

Seven estaba recostado boca arriba, tenia la respiración bastante agitada y sentía que debía levantarse lo antes posible, tenia la rara necesidad de estar despierto, cosa bastante rara en el. De todas maneras, si cuerpo cedió y lo hizo despertar de un largo sueño de aproximadamente, 10 horas y media, pero bueno, ¿quien las cuenta?.

Cordovero abrió los ojos de golpe y miró su habitación, para después buscar la hora en el reloj frente a el, 7:34 de la tarde. Tomó su celular de la mesita de al lado y miró el día, Jueves 7 de diciembre. Suspiró aliviado.

Había tenido un muy raro sueño donde a Ivo le pasaba un accidente hoy. Bastante aterrador si lo pensaba. Culpaba a el estrés de los jueves de espagueti. Joaquín sonrió aliviado y decidió llamar a su Novio, después de un sueño así tenía que escuchar su voz, por que aunque estuviera seguro de que solo fue un sueño, no podía quedarse tranquilo.

Contesto inmediatamente.

—¿Y ese milagro que estás despierto?— pregunto con aquel tono feliz que le caracterizaba. Joaquín se relajó.

—Te extrañaba, ¿ya vienes?— susurro como niño pequeño, lo que hizo derretirle el corazón a Khea.

—Si, estoy como a 10 minutos, ¿puedes poner a calentar el agua?— pronuncio sin despegar su vista del semáforo.

—Si amor, te veo ahorita. Ten cuidado, te amo. — dijo Joaquín, mientras pensaba en su "raro" sueño, por que ahora que lo veía bien, era algo bastante ilógico. Khea siempre es cuidadoso al manejar.

—Si joaco, yo también te am- y lo volvió a escuchar.