DORK || Im Jaebum || [COMPLETA]

C u a r e n t a y c i n c o .

Era gigante, un mono enorme y yo una pequeña pulga.
Y sin embargo, creía que éramos perfectos el uno para el otro.

Y no por como nos veíamos, sino por la manera en la que nos sentíamos estando juntos.

¿Cuanto tiempo nos queda?

Una pregunta difícil de responder, y muy difícil de asimilar.

El tiempo pasaba rápido, y casi no éramos concientes de aquello.
Su trabajo era tan impredecible, que teníamos que estar preparados para despedirnos de un día para otro.

Estar enojados era una pérdida de valioso tiempo. Pero tampoco podíamos fingir que nada nos molestaba.

No deseaba momentos perfectos, pues los momentos eran la suma de muchos factores.
Pero deseaba poder tener la capacidad de hacerlo sentir bien luego de los problemas.

Suspiro y miro la pantalla en negro, dando un pequeño salto de impresión al oír el tono de la notificación.

Jason había respondido. Justo en el momento indicado.

JxonB:

"Nunca creí que este día llegaría"

Fue lo que respondió.
Una sonrisa divertida tiñe mi rostro y me apresuré a contestar:

"Hoy es día de hacer buenas acciones, sintente bendecido".

JxonB:
¿A que se debe ese honor? 👀

Tú:

Sólo... no lo sé, pero quería hablar contigo.

JxonB:

Oh dios...
¿Me estoy muriendo? No es posible, tu no me hablarías solo porque sí.
¿Quien te paga para que lo hagas?

Pa agradecerle.

Una charla amistosa y llena de bromas era el pronóstico para este segundo encuentro a través de redes.

Tenía fe en que las cosas saldrían bien para mí, y pocas veces eran las que podía sentirme completamente segura sobre una decisión que yo misma había tomado.

El primer paso ya estaba, ahora seguía el más dificil, que era convencer a Jaebum de que Jason solo era material de amigo a mis ojos.

Hablaría con el, y soltaria cada argumento bien estructurado con tal de hacerlo entender:

Un amigo no tenía porque ser una prohibición, no tenía que ser motivo de inseguridades.

Yo estaba segura de lo que sentía por Jaebum, y no era fácil de romper.
Mi cariño por el se había forjado en acero, haciéndose indestructible.

Y si el no me creía, haría lo que fuera necesario para que lo haga.

Pero para eso necesitaba el apoyo de Jason, que sin siquiera notarlo, había sido un punto clave en aquella discusión que nos tenía preocupados a ambos.

El me había hecho abrir los ojos de algo que me tenía preocupada, y esperaba que fuera lo mismo para mis problemas en el futuro.

Jason sería mi confidente y mi amigo.