ENCERRADO

NO MAS

- estas desde hace un rato en ese esquina de la celda mirando una grieta en la pared, ¿ que te sucede? - pregunto bills viendo al supremo kaiosama en esa posición - ¿ te sientes mal?, y por cierto ¿ a donde fuiste?, desde allí estas así, muy raro...

-...no es nada...solo meditaba un poco..-respondió

- nunca vi a alguien meditar así - dijo irónicamente - es mas, parece la pose de alguien que sufrió decepción..

- "¿decepción?" - se pregunto mentalmente shin, acaso esto era decepción, ¿porque?, porque el gran sacerdote se fue sin decirle algo, o porque quizá  se sintió mal por el hecho de que quizá solo lo este molestando, utilizando, confundiendo, no entendía -...supongo que si...-. dijo bajo.

*quiero saber que es, para así no ilusionarme con una utopía que nada de buena traerá*

-  mm, y ¿ porqué estas decepcionado? - pregunto bills, había oído claramente lo que murmuro shin.

-...bu-bueno, no sabría como decirlo...mm...aich, no, definitivamente no pudo decirlo - agacho la cabeza, y ahora trazaba lineas invisibles con su dedo indice en la pared -...es vergonzoso..-

-estas enamorado - 

Eso casi hace atorar al supremo kaiosama con su saliva -ehhh¡¡¡...- se sonrojo al máximo y ahora abrazaba sus piernas y escondía su rostro entre ellas -..no...- dijo alargando la o.

- es obvio - dijo bills, algo molesto eh inquieto - ...sea cual sea, a mi nada me engaña, y mas cuando tus expresiones son muy notables, no sabes ocultar lo que sientes, ya sea tu rostro te delate o tus propias palabras - dijo desviando la mirada -...eso es bueno, como también malo..-

-.......- el kaioshin no dijo nada y solo se limito a ver la pared frunciendo el ceño y aun con su marcado sonrojo -*...para mi es malo..., porque la persona que amo es indescifrable, nunca se que piensa, ni tampoco que siente, es como si....solamente fuera yo quien esta invadido de pensamientos y sentimientos *- pensó algo triste.

- ¿ y quien es? - pregunto bills sonriendo .

-...usted alude que es cierto su palabra, esta equivocado..esto...no es un tema de amor, sino de comprensión...yo..- se levanto -¡¡¡no lo comprendo!! - grito y empezó a rodar en el suelo con los brazos estirados hacia arriba -¡¡¡NO lo entiendo!! - ahora golpeaba el suelo con los puños -...creo que..soy una semilla..- dijo ahora mordiendo su labio inferior, estaba arrodillado y con los puños aun en el suelo, acompañado de su antebrazo también.

- ¿una semilla? - se pregunto bills algo dudoso - ¿que diablos tiene que ver una semilla con esto?

-..que el viento me llevara, y no se si estaré en el mismo lugar, y posiblemente cambie de idea como de la forma de la flor, todo es improbable....tal ni crezco por no estar listo....- 

- definitivamente se te soltó un perno de la cabeza - comento bills viendo al supremo kaiosama - mejor duerme así la semilla de cerebro que tienes se tranquilizara -

-...eso fue cruel señor bills, pero tiene razón, mejor descanso un poco...- se dirigió a su cama y se echo encima, sin taparse, tan solo quería reposar su cuerpo y librar su mente.

-*valla...escuincle mas raro* - pensó bills, y se recostó también, faltaban tan solo unas semanas para terminar su castigo, el tiempo había pasado rápido.

Caminaba de ida y vuelta, totalmente confundido por su acción anterior, estaba intranquilo y definitivamente desesperado - *que hice* - se preguntaba infinidad de veces, pero aun así todas sus respuestas eran - * fue un impulso involuntario* - 

-...debo para esto, oh podría ser muy tarde..., no ya es tarde - 

-* y por lo que pueda suceder después* - ¿enserio dijo tal cosa?, en que diablos estaba pensando para decir tales palabras, cada noche reflexionaba y aun así cometía los mismos errores - ya no mas, esto se termino, eres un ángel, no - se corrigió - eres el gran sacerdote, estos temas son...estos sentimientos son...innecesarios - apretó su puño y miro al techo el cual parecía una via láctea color celeste adjuntado a sus estrellas - no necesito de alguien, eso solo te estanca en el fracaso...., yo no lo necesito - se dejo en claro - debo terminar esto ya -

-gran sacerdote - oyó pronunciar su nombre de uno de los zen oh sama, de inmediato recurrió a su presencia - que sucede zen oh sama del presente -

-..tengo hambre, muuucha - dijo insistente

- no se altere, de inmediato iré por algo que deguste - desapareció de su vista.

Luego de complacer a su amo decidió ver unos papeles, luego ordenar algunas cosas y finalmente no sabia que mas hacer - *quiero verlo* - un pensamiento profundo, o un deseo profundo que estaba por sobre su racionalidad, hasta parecía alguien mas intentando mandarlo a caer, no era otro que su subconsciente - no haré eso -

* ¿que estará haciendo?* * que pensara sobre lo ultimo*

Aquella duda lo carcomía a él también, se mordió el labio inferior en rabia y en unos segundos estaba frente la celda del kaioshin, vio, el dios de la destrucción estaba dormido, y por quien vino también, ingreso a su celda y lo vio dormir pacíficamente, una sonrisa se impregno en su rostro y se acerco para ver detalladamente el rostro del supremo -*¿tenia estas pecas?*- al verlo detenidamente logro ver unos pares de pecas, del mismo color de su piel aunque un poco mas oscuras, a simple vista no se ve, eras lindas.

Acaricio su pómulo con una mano, levemente casi nulo, para no despertarlo, no pudo mas, y lo beso , tan solo unió sus labios en un corto pero extasiante beso - ...odio ser quien soy ...- murmuro bajo, se puso firme y antes de irse le dio una ultima mirada y después desapareció.

Aquel supremo kaiosama quien estaba dormido sonrió, no por el beso sino porque sintió la calidez de un sentimiento que se incluyo en su pacifico dueño.

mientras...

- ¿que mierda acabo de ver? - se pregunto el dios de la destrucción quien no estaba dormido, tan solo unía los parpados para descansar, no creyó ver eso, es mas, lo consideraba de que de verdad se había quedado dormido, mas no era real, definitivamente vio al gran sacerdote besar al supremo kaiosama -...esto debe ser una mentira...una puta broma...-

continuara