C-11.

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Capitulo dedicado a:  dariangeltaborda

️♥️♣️

TINI.

Cita.

Es curioso como suceden las cosas. Pero de lo que estoy segura es que no cambiaría ninguna. Por qué todos esos momentos no trajeron hasta este.

Llevamos unos cuatro meses de casados, y esta es nuestra primera cita.

En todo este tiempo hemos comido incontables de veces juntos. Pero la emoción que siento en este momento, sobrepasa todas mis expectativas.

¿Es así como se siente el amor?

Tocan la puerta de mi habitación, me miró por última vez en el espejo y abro la puerta.

La imagen que queda delante de mí me deja sin aliento.  Sebastián tiene en sus manos un ramo de rosas rojas que combinan con mi vestido. Él va vestido de un traje negro, camisa blanca con algunos botones sin cerrar. Muy su estilo. Y siento que esa ropa debe ser ilegal para él, por qué con cada minuto que pasa me enamoró más.

Y creo que de eso se trata el amor ¿No? De enamorarse cada día de la misma persona.

—Luces hermosa.— me dice, me entrega las flores. —¿Lista?

—Eres tan lindo. — le hago saber mientras, tomo sus manos para comenzar a caminar. Dejo las rosas en un florero en la mesa.— ¿Dónde iremos?

—Es una sorpresa.—Hago un puchero.— no hagas eso, me harás decirlo y no quiero arruinar la sorpresa.

Me rió.

—¿Una pista? Dale pequeña.

—Un lugar mágico.

Y es lo único que me dice, en todo el viaje, Sebas, se dedicó a conducir y mientras conversábamos yo me dedicaba a mirar por la ventana de vez en cuando para ver si conozco el lugar. Pero cuando veo el letrero de buen viaje. Al salir de la cuidad me siento más perdida.

Se estaciona en un lugar oscuro.

»—Llegamos— Anuncia. Se baja del auto, mientras tanto mi mente está procesando donde nos encontramos. Abre la puerta y me da su mano. — vamos.

La tomo y con cuidado me bajo del auto, cuando mis pies tocan el suelo, se hunden un poco, por el pasto. Esto es como un jardín.

Saca una mochila del maletero y una manta, se cuelga la mochila y con su mano libre me toma de la mano, me dejó  guiar por el, por qué básicamente estamos a oscuras.

—¿Estamos en una especie de lugar ultra secreto?— pregunto. — ¿veremos a hadas y duendes?— sigo diciendo, haciéndo referencia a la magia que el dijo antes.

Su respuesta es una carcajada.

—No presisamente esa clase de magia.— dice luego de reírse.— llegamos.

Rodeamos una roca, y mí boca se abre un poco.

¡Esto es hermoso!

Lo primero que me llama la atención es la luna que se ve al fondo, el pasto tiene un brillo como si las estrellas lo iluminarán, el cielo se ve tan hermoso. Sebastián se adelanta a mí, coloca la manta, pone unas flores blancas y enciende una lámpara.

Observó cada uno de sus movimientos, maravillada de tan presiosa imagen.

—¡Bienvenida a una noche mágica con Sebastián Yatra! —exclama alzando sus brazos.

Apostando un amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora