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(2) How can I say - Day6

Katsuki explotó la mandíbula del tipo al que sujetaba con la mano, terminando con la pelea que había comenzado como injusta, siendo él solo contra ocho estúpidos que lo subestimaron.

Tatsumi sabía que Ayamari admiraba demasiado a su compañero de clase. Siempre lo acompañaba a su clase solo para verlo. Una vez incluso golpeó a una de las chicas solamente para poder ver al cenizo jugar volleyball en su clase de gimnasia.

Kagaya era bastante popular, alto, bien parecido y fuerte, lo que todos querían. En lugar de esperar lo 'normal', que sería que él tuviera una novia bajita y débil a quien proteger, él siempre estaba al pendiente de Bakugo Katsuki, un chico de estatura mediana o baja, muy fuerte, inteligente y definitivamente alguien a quien no debía o tal vez no podía proteger.

Siempre que lo veía de lejos parecía una de las chicas que lo perseguían, corría rápido, se sonrojaba facilmente y estaba tan callado que asusta.

Ese chico estaba en frente, su símbolo de admiración, algo ensangrentado pero no en su sangre, agachado sobre los cuerpos inconscientes de al menos ocho sujetos.

"¿Qué quieren, estúpidos? Se acercan más y van a terminar igual."

"¿No nos reconoces? ¡Somos tus compañeros de clases!" Dijo Ryota, usando su quirk para ver si Katsuki así lo podía reconocer.

"¿Dedos?"

"¡Ryota! ¡Akechi Ryota!"

"Dedos, ¿Quiénes son los demás? ¿Bulbasaur? ¿Acosador? ¿Líquidos?"

"No puedo creer que acabaras de hacer una referencia a Pokemon con mi quirk"

"Yo hago lo que quiera"

"¿Yo soy acosador?"

"No creas que no te veo en mis entrenamientos. Todo el tiempo vienes con tu estúpido sequito de mocosas entrometidas y molestas a distraer a mi equipo"

"Perdóneme" Aunque se estaba disculpando, se podía ver la felicidad en su cara por poder hablar con su 'ídolo'.

"¿Y qué hacía aquí, Oh gran Katsuki Bakugo?" Dijo Tatsumi, burlándose de la forma en la que Kagaya le hablaba al cenizo.

"Pues estaba ocupado y estos estúpidos se metieron conmigo de la nada. De seguro es culpa de ustedes por pelear con ellos"

"Esa escuela nos odia, no es nuestra culpa. Siempre se meten con nosotros, hace rato tuvimos que pelear contra doce de ellos, por eso estamos así de golpeados"

"Ja, están así cuando son cuatro contra doce, yo pelee contra nueve, se nota que les falta condición"

"¡No te burles! Acompáñanos y muestranos ese entrenamiento, si eres tan superior a nosotros!" Gritó Akechi, haciéndole un favor a Ayamari y al mismo tiempo buscando obtener entrenamiento bueno, dado a que era el más débil del grupo, gracias a su inútil quirk.

"¿Sabes qué? ¡Lo haré! ¡Para demostrarles que son unos imbéciles sin conocimientos!" 

Tatsumi no pensó que alguien tan inteligente como Katsuki caería con algo como eso, pero no se quejaba. Él ya era muy fuerte, con entrenamiento no habría nadie que le ganara a su grupo.

Ryota los guió a un terreno casi llano al que siempre recurrían cuando querían reunirse, una zona seca y triste, con un pavimento que demostraba los intentos de alguien por utilizar ese espacio, intentos que fueron en vano gracias al estado actual del lugar.

Al fondo de esas montañas de cemento y tierra, estaba la sombra de lo que debió ser un edificio, siendo solo cuatro tristes paredes con agujeros en forma de puertas, ladrillos grises y líneas de graffiti coloreando suelo y techo, mensajes de jovenes que querían expresar algo o nada, vandalismo venerado por el que viera el terreno ya que era lo único que mantenía viva a la calle llena de edificios grises y tristes, normales en cualquier ciudad como aquella.